Revista Temas Número 6 abril-junio 1996
El Caribe nuestro
Nancy Morejón. Lengua, cultura y transculturación en el Caribe: unidad y diversidad.
No. 6 abril-junio 1996


Emilio Hernández Valdés. El Caribe en la cultura cubana: un balance de la literatura
francoantillana. No. 6 abril-junio 1996


Margarita Mateo Palmer. La literatura caribeña al cierre del siglo. No. 6 abril-junio
1996

Yolanda Word. Plástica del Caribe actual: encuentros y desencuentros. No. 6 abril-junio
1996


Mayra Pastrana y Rufo Caballero. Cine caribeño, una utopía tan paradójica como
inspirada. No. 6 abril-junio 1996


Tania García Lorenzo. La integración en la cuenca del Caribe. Institucionalidad y
realidad. No. 6 abril-junio 1996


Mariana Serra y Cristóbal Díaz Morejón. Universidades en el Caribe. No. 6 abril-junio
1996


Isabel Jaramillo Edwards. El Caribe y los Estados Unidos: la frontera marítima. No. 6
abril-junio 1996


Alberto Faya, Radamés Giro, Jorge Gómez, Jesús Gómez Cairo, Harold Gramatges,
Humberto Manduley, Víctor Torres, Guille Vilar
. La música y el mercado. No. 6 abril-
junio 1996


Jorge Luis Acanda González. Sociedad civil y hegemonía. No. 6 abril-junio 1996


Oscar Loyola Vega. Reflexiones sobre la escritura de la historia en la Cuba actual. No.
6 abril-junio 1996


Gilberto Valdés Gutiérrez. La alternativa socialista: reforma y estrategia de orden. No.

6 abril-junio 1996


Abel E. Prieto. Lo cubano en la poesía: relectura en los 90. No. 6 abril-junio 1996


Víctor Fowler. Miradas a la identidad en la literatura de la diáspora. No. 6 abril-junio
1996


Nancy Morejón
no. 6: 4-7, abril-junio, 1996.
Lengua, cultura
y transculturación
en el Caribe:
unidad y diversidad
Nancy Morejón
Escritora. Teatro Nacional de Cuba.
¿Qué es nuestra región sino una Babel de contrastes, de en llamar balcanización. El pretexto ideal para la ideología
complicados procesos de transculturación que albergan
de las clases dominantes en el poder fue precisamente crear
en su seno antiguas y nuevas civilizaciones? No es posible
la conciencia de que la existencia misma de las llamadas
hablar del Caribe —bien sea de sus islas o de las costas de
lenguas metropolitanas, en esta parte del hemisferio
los países de América Central y Sudamérica ancladas en
occidental era un hecho a su favor, pues aportaba la arcilla
Tierra Firme— sin hablar de sus lenguas, porque ellas
privilegiada para construir barreras lingüísticas. El hecho
expresan mejor que todo nuestra cultura, nuestro mundo
lingüístico era entonces considerado como un hecho
cambiante y, lo que es más importante, nuestra experiencia
autónomo, interesadamente despojado de su contexto
histórica común.
histórico y, más aún, de su extracción eminentemente
¿Somos una unidad? Por supuesto que sí, pero esa
sociocultural.
unidad se afinca en una diversidad que se expresa en varias
Traduciendo estas realidades a un lenguaje sencillo, al
culturas. Esas culturas se expresan a su vez en complejos
alcance de todos, habría que decir que esta trampa
lingüísticos de infinita originalidad. Esta es una de las
ideológica del colonizador intentaba entronizar un
características más interesantes de estas tierras.
lenguaje de mudos, cuyos patrones tenían que establecerse
Siempre que se habla del Caribe —que es una acepción,
desde el centro mismo de la lengua y de la cultura
sobre todo, válida desde mediados del presente siglo—, se
metropolitanas eurocentristas, vinieran de la latitud que
piensa en un universo heterogéneo. A pesar de la
vinieran. Un ciudadano de María Galante, en cualquier
certidumbre que esa heterogeneidad encierra, lo
tiempo de la era contemporánea, debía conocer primero
fundamental es que siendo tangible, verdadera, no nos
la producción literaria francesa. París era su referencia
obliga a creer que no haya engendrado un sustrato sui
cultural. Todo producto que naciera, contrariamente, en
generis más o menos homogéneo. No me asustan ni la
ultramar, tenía que estar en dependencia de su homólogo
palabra heterogeneidad ni su concepto. Me han inquietado
francés.
mucho más la incomunicación, los puentes volados, en
En pleno siglo XX, una buena parte de la creación
fin, eso que, a lo largo de estos años y sobre todo en los
artística y literaria de nuestra América padeció un feroz
albores de los estudios caribeños entre nosotros, se dio
mimetismo que no hizo sino convertirla en una fofa
4

Lengua, cultura y transculturación en el Caribe: unidad y diversidad
caricatura de valores coloniales. Junto a ese espíritu
¿Cómo es la cultura del Caribe o, mejor, cómo son
imitativo fue coexistiendo, para apuntalarlo, una
sus culturas? No podríamos entrar en materia sin,
verdadera y apoteósica desvinculación
quizás, volver a introducir las narices en ese ajiaco que
intercontinental. ¿Quién iba a imaginar, desde La
tanto amó Fernando Ortiz. Al Caribe llegaron las
Habana, un poeta en Barbados? ¿O un dramaturgo en
culturas madres que no son más que aquellas que
Aruba? ¿Un ensayista en Guadalupe? Era
entraron a estas tierras, por la vía de la conquista y la
prácticamente imposible. Y si sumamos a esto la
colonización, provenientes de España, Francia,
imposibilidad de poder expresar el alma nacional de
Portugal, Gran Bretaña y Holanda. Junto a ellas, casi
cada una de estas islas mediante la lengua criolla, es
parejamente —aunque por razones opuestas por
decir, los créoles, eran pocos los bienaventurados
completo— aparecieron diversas culturas africanas. Y,
capaces de imaginar un futuro de libertad e
aun en holocausto delirante, los despojos de las
independencia cultural. Para nosotros, habitantes del
culturas precolombinas arrasadas por la conquista y
Caribe, estaban vedados esos sueños de encontrar
la colonización europeas en uno de los más patéticos
nuestra propia imagen, nuestro ser, sin desvirtuación
etnocidios registrados por la historia de la humanidad.
y sin maltrato. La diversidad y heterogeneidad, en
El Caribe es, pues, mestizo. Ningún rasgo nuestro
nuestro caso, se volvían nada al tener, como fijo
puede ya aislarse de la aglutinación de etnias, razas y
recuerdo común, la pesadilla de la trata, la esclavitud
culturas. Nuestra cultura y nuestra biología han vivido,
y la entrega total de nuestra mano de obra y nuestra
y casi viven, bajo el signo de la inmigración desde sus
riqueza natural a los monopolios internacionales.
más remotos orígenes. Pensemos en los movimientos
Damos por sentado que Europa —el espíritu de la
migratorios que trajeron aquí a numerosas olas de
Europa del ideal de un Paul Valéry— y su cultura,
asiáticos cuya presencia es, hoy por hoy, más que
existen de manera tan rotunda que no necesitan
firme. De modo similar, las distintas etnias de la India
siquiera que se reflexione al respecto. Ya los europeos
asentadas en todo el Caribe, particularmente en la zona
apenas hablan de su ser, sublimado hasta la más pura
oriental de las Antillas menores, conforman asimismo
de las ficciones. Difícil es encontrar eventos donde se
el perfil definitivo de nuestra área. La historia del
exponga lo europeo; o donde se entre a distinguir la
Caribe es una historia de migraciones.
Babel de lenguas que allí se hablan. ¿Podríamos hablar
Aquí me gustaría aplicar la teoría que, para toda
allí también de creoles? ¿Lo son el celta, el gallego, el
catalán? Me parece que solo la imaginación cándida
América, esbozó el antropólogo Darcy Ribeiro y que
de algún extraterrestre podría aceptar esa posibilidad.
tiene, según creo, plena vigencia para el área del Caribe,
George Lamming ha contribuido a esclarecer estos
en esa dimensión heterogénea a la que me referí
criterios cuando afirmaba que «Europa y sus sucesores,
anteriormente.
los Estados Unidos, han sido atrapados en el engañoso
La América nuestra es sin duda una unidad, pero una
hábito de verse a sí mismos no como una parte de la
unidad dramática y amenazada; y una unidad, también,
humanidad, sino como los custodios del destino de
integrada por partes que se articulan dialécticamente.
toda la humanidad».1 Parecerá esta una afirmación de
Cualquier observador atento distingue en ella tres zonas
Pero Grullo, pero ocurre que, a veces, al emplear el
mayores, que esquemáticamente pueden ser llamadas
más común de los sentidos alcanzamos las más
Indoamérica, Afroamérica y Euroamérica: zonas que se
corresponden, en nuestra América, con las que el
concretas y precisas nociones de la verdad que hemos
antropólogo brasileño Darcy Ribeiro ha llamado
querido defender.
Pueblos Testimonios, Pueblos Nuevos, y Pueblos
Con esto quiero dejar sentado que vivo
Trasplantados. Todos tienen en común ser pueblos
absolutamente convencida de que nuestro mundo
colonizados primero y neocolonizados después, uncidos,
caribe —insular, costeño, marítimo y telúrico— posee
como tierras de explotación, al mercado capitalista
mundial. Todos tienen en común, también, numerosos
una esencia que lo caracteriza y lo define: su historia
rasgos de muy distinta naturaleza. Por eso constituyen
invariablemente común, su heterogeneidad, su diversa
una unidad. Pero esa unidad no es uniformidad ni
homogeneidad y hasta su propia inaprehensión, tanto
monotonía: ni excusa de señalar las características específicas
por nosotros mismos como por el resto de las culturas
de cada zona.2
europeas, africanas y orientales que hubiesen
participado en la gestación de nuestra imagen factual.
El Caribe es una combustión de esas tres Américas de
Entre ninguno de los apasionados de esa imagen se
las que habla Ribeiro. Por ello su heterogeneidad culmina
desconoce el hecho de que un perenne proceso de
en una complejidad homogénea. En una conferencia
transculturación ha calado en nuestras más vivas
pronunciada en La Habana en vísperas de Carifesta’79,
entrañas. El resultado de ese proceso, en mayor o
Alejo Carpentier, refiriéndose a las culturas de los pueblos
menor medida, no ha tocado a su fin; los factores que
que habitan la cuenca, señalaba que luego del
componen la conquista en América aún perviven; por
Descubrimiento, solo en tierras del Caribe se produce la
tanto, no hay un resultado definitivo, estático. Aún
primera cita, la primera conjunción de las tres razas que
somos un crisol que se empaña, se lustra, vuelve sobre
hasta el momento poblaban Occidente: la india, la blanca
sí mismo, se achica y se acrecienta, a pesar de cuanta
y la africana.3
teoría a ultranza quiera crear un esquema artificioso o
Cualquier ojeada a un mapa de la zona, nos indicaría
una nomenclatura rígida.
ahora mismo que este mar Caribe toca también las costas
4
5

Nancy Morejón
Nuestro mundo caribe posee una esencia que lo caracteriza y lo
define: su historia invariablemente común, su heterogeneidad,
su diversa homogeneidad y hasta su propia inaprehensión, tanto
por nosotros mismos como por el resto de las culturas europeas,
africanas y orientales que hubiesen participado en la gestación
de nuestra imagen factual.
de países de América Central, e incluso de los Estados
alguna manera en el marco de su signo lingüístico—
Unidos, cuyas culturas se asientan, fundamentalmente,
expresa también una zona de esos mitos. El hungán del
en las llamadas autóctonas o indígenas y que, a mi juicio,
vodú haitiano dice los parlamentos de sus ritos en créole,
deben llamarse indias. De Chichén Itzá a Bluefields en la
y la sabiduría que sus mitos irradian se expresa en esa
costa atlántica, que pertenecen a México y Nicaragua
misma lengua, amoldada por el pueblo entre vocablos e
respectivamente, se extiende de igual modo una infinidad
interjecciones africanos y franceses. Porque no hay que
de elementos integrantes del mundo caribe. Buena parte
olvidar que la tradición oral —explícita como vehículo
de esa cultura nuestra, se asienta en esa latitud frondosa
esencial de comunicación entre enormes masas de
donde podemos cobijarnos, según el genio poético de
analfabetos—, tan cara a la cultura de los pueblos del Tercer
Carlos Pellicer (1897-1977), bajo el amparo de verdes hojas
mundo, de hecho propone y dispone de toda una riqueza
«de un metro de diámetro».4
de signos, leyendas, fábulas y folklore que ayudan no solo
El trópico es una de las constantes de nuestra expresión
a concretar una imagen legítima de nosotros mismos, sino
cultural y es, por ende, uno de los principales mitos de la
que tienden a ser un puente de salvación ante el empuje
región. De un constante choque de culturas, en ese trópico
asimilador y enajenante de las culturas metropolitanas,
nació la cultura caribeña, hija de gallegos, mayas, catalanes,
desde la llegada del almirante Cristóbal Colón.
taínos, andaluces, bretones, celtas, germanos, galos, íberos,
El acervo cultural del Caribe puede registrarse, de
yorubas, congos, ararás y yolofes y, hasta con envidiable
manera dinámica, a través de estas manifestaciones,
discreción, chinos e indios orientales. Lo cierto es que a
escamoteadas incluso por la Academia y por los altos
una expresión caribeña debe corresponder un altísimo
centros docentes, cuyos conceptos de la cultura, en la
grado de mestizaje, sin desmitificar la referencia de las
práctica, excluyen todo lo que cae en el campo de la
culturas madres. No obstante esa tridimensional torre de
llamada cultura popular. Todo objeto de arte nacido de
Babel, nos caracterizamos por tener pieles oscuras, en
los recursos populares se llama folklore, subcultura, camp
todas las tonalidades. La presencia de Africa es «múltiple
o kitsch, según convenga. La tradición oral, que es
y una», como pedía el gran poeta martiniqueño Aimée
principalmente anónima, se depositó en las capas más
Césaire. La vocación antillana de Nicolás Guillén —el
humildes de nuestra población; fue trasmitida de padres
poeta nacional de Cuba— precursora y zahorí, se entronca
a hijos, de generación en generación, hasta crear un
justamente con ese pasado de servidumbre africana,
inexpugnable sustrato de propiedad colectiva.
porque aquí somos más Africa que Europa, como previó
Afortunadamente, oímos cada vez menos el término
en su momento histórico Simón Bolívar y como lo ha
dialecto para denominar las lenguas populares caribeñas.
asentado en nuestros días Fidel Castro. En su «Carta de
Alguien en un simposio me hizo recordar una agudísima
Jamaica» (1815), Bolívar llega a cuestionar «a qué familia
frase de uno de los fundadores de la lingüística, que hoy
humana pertenecemos».5 Africa transculturada nos
apreciamos en su justo valor. El decía: «Piensen siempre,
identifica en el Caribe.
cuando escuchen a un colonizador hablar de lengua y de
Los valores prelógicos que caracterizan el trasplante
dialecto, que un dialecto no es otra cosa que una lengua
de las culturas africanas, nutren y enriquecen la mitología
con un ejército a sus espaldas.»
caribeña de hoy. La cuestión lingüística viene a adquirir
La vigencia de los créoles en el panorama —no solo
aquí una gran importancia. Si atendemos al precepto de
lingüístico, sino también literario— de la región es una
Edward Sapir de que «toda lengua es en sí misma un arte
realidad latente y hermosa que nos proporciona una de
colectivo de la expresión»,6 tenemos que convenir en que
las más conmovedoras lecciones de sociología
el Caribe es un surtidor de esta problemática y un
contemporánea. Como creemos en el pozo infranqueable
verdadero crisol de sus potencialidades. Un ejemplo de
que destinó Charles Bally para distinguir la lengua escrita
ello son los mitos, que se conservaron con la pujanza con
de la lengua hablada, debemos elogiar esta experiencia
que llegaron a las islas desde los inicios del siglo XVI, o
de Martinica, Guadalupe, Haití y Guyana, en donde la
bien que —al transculturarse— partieron de sus morfemas
explosión del habla popular se ha convertido en una
originales (lengua), juntándolos, mezclándolos con la
categoría estética, marcada por la insurrección en el plano
sintaxis de las lenguas indoeuropeas aportadas por los
del arte y en el de la ideología. No obstante respetar y
conquistadores y colonizadores. El créole, tanto en el
admirar el fenómeno que se produce allí alrededor de la
Caribe anglófono como francófono —por llamarlos de
revista Antilla, es innegable la validez y la eficacia del
6

Lengua, cultura y transculturación en el Caribe: unidad y diversidad
discurso antillano que protagoniza Edouard Glissant
Yoruba soy,
quien, heredero de la experiencia literaria de nuestros
cantando voy,
clásicos, aún cree válido expresar los valores de nuestra
llorando estoy,
y cuando no soy yoruba,
identidad a través del francés.7 De forma maravillosa,
soy congo, mandinga, carabalí.
como hubiera soñado Jacques Stephen Alexis, Glissant
..................................................
se acerca a los postulados que para la lengua española
Estamos juntos desde muy lejos,
formuló Nicolás Guillén y, por qué no, el infortunado
jóvenes, viejos,
poeta jamaicano Claude McKay, así como los poetas dub
negros y blancos, todo mezclado.11
del Caribe anglófono o figuras tales como Edouard K.
Brathwaite, Lorna Goodison o Mutabaruka. Glissant,
La lengua transculturada de Guillén, por voluntad de
como ellos, ha sabido virar sus valores; tomar por las
estilo y justa visión de lo que sería nuestra identidad, se
bridas su lengua y tornarla en algo nuevo, original,
muestra aquí en uno de sus momentos más radiantes. Esta
contestatario y fundador.
voz mayor de nuestras letras, al igual que sus epígonos de
Recuerdo, en este sentido, que don Ezequiel Martínez
la región, deben continuar inspirando la indagación y la
Estrada había calificado a Guillén como un mambí de
reflexión —eso espero— de los que, cada vez más, centran
las letras.8 Martínez Estrada propone: «La presencia de
su atención en el estudio de las lenguas y las culturas del
Guillén en las letras castellanas es la de un americano
Caribe.
insurrecto que desprecia las armas de fuego y vuelve a
usar el arco y la lanza del siboney».9 Escribir en español
Notas
no es abogar por una esencia colonial. Ya lo había hecho
José Martí con su magnánima obra; en el español más
1. George Lamming, «Discurso en la inauguración del IV Carifesta», Casa
rico y potente de su época creó uno de los monumentos
de las Américas, La Habana, 22(130), enero-febrero, 1982: 47.
literarios que cuestionaran con mayor rigor los sustratos
del régimen colonial español. Y Martí supo salvar
2. «El arte y la literatura cubanas como integrantes de la cultura de la
distancias.
América Latina y del Caribe» [ponencia], La Habana: II Congreso de la
Si hay un aspecto preponderante en el fenómeno
Unión de Escritores y Artistas de Cuba (UNEAC), 1977: 4.
colonial, cualquiera que fuera su base, es la cuestión
3. Alejo Carpentier, «La cultura de los pueblos que habitan en las tierras
lingüística. Este es uno (o el mayor) de los factores que
del mar Caribe», Anales del Caribe, La Habana, (1), 1981: 197-206.
hacen sui generis la situación cultural de Puerto Rico en
el plano de la lengua; como lo es para las Antillas
4. Carlos Pellicer, «Esquema para una oda tropical», en Hora de junio,
México, D.F.: Fondo de Cultura Económica, 1979: 14.
holandesas o para el Caribe anglófono. El drama de
Calibán es nuestro, y como afirma en su brillante ensayo
5. Simón Bolívar. Citado por Roberto Fernández Retamar en Calibán y
el poeta Roberto Fernández Retamar:
otros ensayos, La Habana: Arte y Literatura, 1979: 12.
Nuestro símbolo no es pues Ariel, como pensó Rodó, sino
6. Edward Sapir, El lenguaje, La Habana: Editorial de Ciencias Sociales,
Calibán. Esto es algo que vemos con particular nitidez los
1974: 254.
mestizos que habitamos estas mismas islas donde vivió
Calibán: Próspero invadió las islas, mató a nuestros
7. Véase el excelente estudio de Silvia García Sierra «La problemática
antepasados, esclavizó a Calibán y le enseñó su idioma para
lingüística en la literatura del Caribe», en Temas [primera época], La
poder entenderse con él: ¿qué otra cosa puede hacer Calibán
Habana, (20), 1990: 129-56.
sino utilizar ese mismo idioma —hoy no tiene otro— para
maldecirlo, para desear que caiga sobre él la «roja plaga».10
8. Ezequiel Martínez Estrada. Citado por Nancy Morejón en Nación y
mestizaje en Nicolás Guillén, La Habana: Ediciones UNION, 1982: 268.
Ese drama nos concierne también como moradores
9. Ezequiel Martínez Estrada, «La poesía afrocubana de Nicolás Guillén»,
del mar Caribe que somos. La lengua del español —desde
en Nancy Morejón, comp., Recopilación de textos sobre Nicolás Guillén,
el Diario de navegación de Cristóbal Colón hasta El diario
La Habana: Casa de las Américas, 1974: 79.
que a diario (1972) de Nicolás Guillén, pasando por los
10. Roberto Fernández Retamar, ob. cit.: 32.
Diarios de José Martí—, bien puede calificarse como un
dechado reverdecido de lo que nunca imaginó Próspero
11. Nicolás Guillén, «Son número 6», Obra poética (1920-1972), La Habana:
que fuera.
Ediciones UNION, 1974; t.1: 271-2.
Yoruba soy, lloro en yoruba
l u c u m í .
Como soy un yoruba de Cuba,
quiero que hasta Cuba suba mi llanto yoruba,
que suba el alegre llanto yoruba
que sale de mí.
©
, 1996.
6
7

Emilio Hernández Valdés
no. 6: 8-22, abril-junio, 1996.
El Caribe
en la cultura cubana:
un balance de la literatura
francoantillana
Emilio Hernández Valdés
Editor. Revista Temas.
Recuerdo haberle escuchado en más de una ocasión a a lo largo del tiempo, aunque en repetidas ocasiones se
José Luciano Franco —el más acucioso y constante
vieron interrumpidos transitoriamente por los
entre los iniciadores de los estudios del Caribe en Cuba—
enfrentamientos frecuentes de las potencias coloniales
que la incomunicación entre las islas antillanas podía
asentadas en la región. Además, el comercio intérlope
considerarse un fenómeno de nuestro siglo, acentuado
fue una práctica común entre territorios dominados por
después de la II Guerra Mundial. Según Franco, durante
distintas potencias.
los siglos XVIII y XIX, el comercio de cabotaje era muy
Con el decursar del actual siglo el flujo de inmigrantes
activo en la región y la marinería antillana trasladaba de
y el intercambio comercial entre los territorios del
un puerto a otro las noticias sobre los acontecimientos
Caribe se redujeron paulatinamente. Pero los vínculos
y novedades, por lo que estas se difundían con relativa
históricos que durante largo tiempo se anudaron,
rapidez para la época, e incluso se conocían en los más
principalmente entre los pueblos de las Antillas Mayores
distantes puntos de la geografía caribeña, antes que en
y los del Caribe continental, no desaparecieron; aunque,
las propias metrópolis. Y ponía de ejemplo cómo las
al disminuir los contactos e intercambios, se debilitó el
noticias sobre las rebeliones de esclavos, los
conocimiento mutuo.
acontecimientos de la Revolución en Francia, las
Este distanciamiento fue la consecuencia de una
informaciones acerca del movimiento independentista
política de aislamiento calculada por las metrópolis
en el Caribe continental o sobre las medidas
europeas —y estimulada por los Estados Unidos— para
abolicionistas, eran en breve tiempo del dominio de las
dividir a los pueblos de estas naciones, algunas de ellas
autoridades coloniales, de la población de las islas en
aún en formación. Su interés en desvincularlas tenía
general, e incluso hasta de los esclavos.
como objetivo mantenerlas bajo su tutela y conservarlas
Una de las razones para que ello ocurriera era el hecho
como preciados remanentes de sus otrora poderosos
de que las migraciones internas habían sido una constante
imperios coloniales, ahora más por intereses políticos
en la historia del Caribe, originadas por motivos
que económicos.1
políticos o económicos. Esos contactos crearon estrechos
Mucho se ha hablado y escrito acerca de la llamada
nexos entre los habitantes de las poblaciones caribeñas
«balcanización» de los países caribeños y uno de los
8

El Caribe en la cultura cubana: un balance de la literatura francoantillana
argumentos más socorridos para explicarla ha sido el de
la de Jamaica y varios años después con las de Trinidad
la incomunicación lingüística originada por las diferentes
y Tobago, Barbados, Guyana, Granada y otros
metrópolis que se disputaron el dominio de la subregión.
territorios—, a pesar de su inestabilidad política y los
También se han tomado muy en cuenta la insularidad y
serios problemas sociales que debían afrontar,
los disímiles avatares por los que debieron transitar los
contribuyó aún más a movilizar al Caribe en pro de su
países del área para acceder a la independencia, hecho
unidad.
—al igual que la pluralidad lingüística— muy
Enmarcar brevemente el contexto político-social
estrechamente vinculado con la filiación colonial de cada
caribeño en el que triunfa la Revolución cubana resulta
una de estas naciones. Ejemplos muy particulares en este
imprescindible para poder valorar la trascendencia que
sentido lo constituyen los llamados Departamentos
aquella tuvo para la región en aquel momento, cuando
Franceses de Ultramar, cuya «historia ha estado marcada
los dictadores emplazados y sostenidos por los Estados
por una realidad social, política, económica y cultural
Unidos y el control metropolitano de los territorios
sin equivalentes en sus vecinas anglófonas e
dependientes garantizaban las maniobras y el dominio
hispanoparlantes»,2 y la controversial situación de Estado
imperialista en la zona.
Libre Asociado de Puerto Rico, territorios aún
La repercusión inmediata de la victoria
sometidos a una condición colonial que por astucias y
revolucionaria cubana avivó el espíritu de lucha en los
rejuegos político-semánticos, han visto birladas sus
países del Caribe sometidos por regímenes dictatoriales;
independencias hasta hoy.
también contribuyó a reforzar la lucha independentista
Puede añadirse otra razón. El incremento de la
puertorriqueña. Poco después, las aparentemente
dependencia y el creciente empobrecimiento de la región
apacibles y dóciles poblaciones de las colonias francesas
han estimulado el interés de sus pobladores por emigrar
se vieron envueltas en disturbios allí nunca antes vistos,
a países desarrollados, en especial a las antiguas
que incluso antecedieron al fin de la guerra de Argelia y
metrópolis y muy particularmente a los Estados Unidos.
a la descolonización masiva de los países africanos.
Esta tendencia, que ya había comenzado a manifestarse
En cuanto a Cuba y su revolución, la historia que
en la pasada centuria, cobra auge principalmente en los
siguió es de todos conocida: agresiones económicas,
últimos cincuenta años y adquiere tintes de tragedia en
bloqueo, intentos de desestabilización, agresión de
este fin de siglo, principalmente en el caso de los
Girón, Crisis de Octubre, expulsión de la OEA,
emigrantes haitianos.
aislamiento diplomático y ruptura masiva de relaciones
En un trabajo reciente, Paul Estrade derrumba el
carácter absoluto que habitualmente se le ha otorgado a
con la Isla. Durante dos décadas, con la excepción de
la argumentación de la barrera idiomática.3 El reconocido
México y Canadá, los vínculos con las naciones del
hispanista e historiador francés demuestra que incluso
continente se limitaron —por todas las dificultades y
entre las que él propone designar como Antillas
los impedimentos que una situación tan anómala
Hispánicas (Cuba, República Dominicana y Puerto
comportaba—, a las relaciones que se establecieron con
Rico), pese a los numerosos factores y potenciales
los movimientos revolucionarios y los contactos con
intereses económicos y comerciales similares y de
los sectores y personalidades más progresistas de la
comunidad histórica, en la actualidad —por razones
intelectualidad latinoamericana que visitaban la Isla,
principalmente políticas— los vínculos no son tan
incluidas las de los Estados Unidos. La cultura se
estrechos como correspondería, por lo que parece «como
convirtió en puente para el entendimiento entre Cuba
si las Antillas ex españolas hubieran estallado y fueran
y la América Latina y el Caribe.
divergentes para siempre».4
La conciencia del carácter aberrante de la
desvinculación de las naciones caribeñas y de la necesidad
La cultura revolucionaria cubana y el Caribe
de establecer vínculos estrechos entre sí, ha retomado
fuerza progresivamente a partir de la década del 60. Pero
Entre los objetivos de la política cultural de la
debe recordarse que no es un fenómeno nuevo. Tuvo su
Revolución cubana estuvo, desde bien temprano,
antecedente en los reclamos visionarios que a fines del
fortalecer las relaciones con Latinoamérica y muy
pasado siglo sustentaron al respecto Martí, Hostos,
especialmente con el espacio caribeño. Algunas
Betances y el haitiano Antenor Firmin. Los cuatro, casi
instituciones desempeñarían un papel sustancial en ese
al unísono, coincidieron en la necesidad vital de que
propósito.
nuestros pueblos forjaran una unidad que les permitiera
enfrentarse a los peligros que para ellos constituían la
desunión y la desmembración.
La Casa de las Américas
No fue hasta el triunfo de la Revolución cubana en
1959 que se recolocó al Caribe en el mapa político
Cupo a la Casa de las Américas, creada en 1959,5
internacional, cuando emergió de nuevo y con vigor
canalizar el intercambio de la Revolución y de los
creciente; aunque paulatinamente, la conciencia de la
intelectuales cubanos con sus colegas, principalmente
imprescindible unidad caribeña. La independencia de los
los latinoamericanos, asumir, desde los tiempos de su
territorios británicos del Caribe —iniciada en 1961 con
más temprana existencia, el papel de difusora de las
8
9

Emilio Hernández Valdés
La conciencia del carácter aberrante de la desvinculación de las
naciones caribeñas y de la necesidad de establecer vínculos
estrechos entre sí, ha retomado fuerza progresivamente a partir
de la década del 60. Pero debe recordarse que no es un fenómeno
nuevo. Tuvo su antecedente en los reclamos visionarios que a
fines del pasado siglo sustentaron al respecto Martí, Hostos,
Betances y el haitiano Antenor Firmin.
conquistas de la Revolución y quebrantar el cerco
Otro tanto han logrado sus publicaciones,
tendido a la Isla.
particularmente la revista Casa de las Américas.6 Desde
Su labor por más de 35 años en favor del desarrollo
sus primeros números, el tema del Caribe insular y
del arte y la cultura continentales es ampliamente
algunos ejemplos de su producción literaria
conocida. Asimismo, la tarea fundadora de Haydée
—principalmente la de Puerto Rico— tuvieron cabida
Santamaría, su sensibilidad y capacidad para rodearse
en sus páginas. Pero hasta 1966 las referencias al Caribe
de eficaces colaboradores que han sabido continuarla y
francófono se limitaron a Haití. A partir de esa fecha,
expandirla, ha sido resaltada a lo largo y ancho del
coincidiendo con el interés que desde entonces despertó
continente.
en Cuba la literatura de las islas del Caribe, esta
Me limitaré a puntualizar aquellas actividades de la
publicación la reflejó con relativa regularidad.
Casa de las Américas que han sido decisivas para el
Una somera revisión de los más de 200 números ya
acercamiento de nuestro país a las naciones del Caribe
publicados —cifra pocas veces alcanzada por
francófono y la difusión de su producción literaria, a
publicaciones literarias de América Latina y significativa
mostrar los valores artísticos y sociales de sus obras, en
en cualquier latitud— permite comprobar de manera
y desde Cuba, y —quizás la mayor aportación cubana
fehaciente que la revista Casa de las Américas es una
en el terreno cultural a esas pequeñas naciones
obligada fuente de consulta para todos los investigadores
hermanas— a reinsertarlas y reafirmar su pertenencia,
de las letras y las ciencias sociales latinoamericanas; una
con sus especificidades y circunstancias muy propias,
verdadera antología de nuestras letras en constante
en el contexto continental latinoamericano y
actualización; una imprescindible base de datos que
específicamente caribeño.
permite recorrer el desarrollo de la actividad cultural y
La convocatoria, desde 1960, de su Premio Literario
política del continente americano en las últimas cuatro
y la fundación de la revista Casa de las Américas
décadas y obtener una visión contemporánea del legado
constituyeron dos importantes contribuciones de la
latinoamericano, de su inserción en el panorama
institución al desarrollo de la cultura cubana en beneficio
universal de la creación artístico-literaria, así como de
propio y de todos los países del continente.
la sociedad y la política de este convulso, complejo y
De la significación y reconocimiento internacional
cambiante fin de siglo, signado por la globalización y el
alcanzado por el Premio Casa de las Américas, a lo largo
poderío unipolar capitalista.
de sus treinta y seis años ininterrumpidos, hablan por sí
Por su parte, la labor editorial de la institución
solas las obras que han sido galardonadas. Baste apuntar
comenzó en 1961 con la publicación de los libros que
que el Premio, desde su primera edición, ha tenido
recibieron el primer Premio Casa de las Américas en
características sui generis. A diferencia de otros
1960 y ha continuado hasta hoy.
certámenes literarios, este cónclave anual no se limita a
En 1963 inició el más relevante de sus proyectos
premiar las mejores obras concursantes en los géneros
editoriales: la Colección Literatura Latinoamericana.7
que se convocan, sino que de hecho ha devenido un
En sus treinta y tres años de existencia, han sido
evento «multipropósito». No está dotado de una bolsa
publicados unos ciento cincuenta títulos de autores
tentadora para los ganadores; pero el conseguirlo ha
clásicos y contemporáneos de todos los países
catapultado a más de un escritor a posiciones destacadas
latinoamericanos, incluidas las islas del Caribe anglófono
en las letras del continente. Para los miembros de los
y francófono, así como textos fundamentales de la
jurados, además de constituir un reconocimiento a sus
literatura precolombina.
méritos como creadores, críticos e investigadores, ha
Progresivamente, a la revista Casa de las Américas y a
significado la oportunidad de entrar en contacto con
las colecciones Premio y Literatura Latinoamericana se
figuras establecidas o de reciente incursión en la creación
sumaron otros empeños editoriales de la institución,
literaria latinoamericana. Estos intercambios, sin dudas,
como la serie Nuestros Países, en la que los temas
han contribuido al desarrollo y la difusión de la literatura
caribeños han tenido un espacio. En este aspecto
de la región en otras latitudes, especialmente en el caso
sobresale Anales del Caribe, especializada en la subregión,
de los escritores anglo y francocaribeños.
que se publica desde 1981.
10

El Caribe en la cultura cubana: un balance de la literatura francoantillana
Entre otros proyectos diseñados y ejecutados por la
más reciente, en la preuniversitaria, como parte de los
Casa de las Américas que han contribuido a la
programas de literatura latinoamericana y del Caribe.9
divulgación de la literatura y el arte caribeños, deben
En el Instituto de Literatura y Lingüística, los
mencionarse, en primer lugar, el Centro de
investigadores Isabel Martínez Gordo y Sergio Valdés
Investigaciones Literarias (1967) y el Centro de Estudios
Bernal han realizado indagaciones sobre aspectos
del Caribe (c1980), así como la celebración de diferentes
lingüísticos del área caribeña. La primera, se ha dedicado
reuniones de intelectuales, por ejemplo los Encuentros
principalmente al estudio del creole haitiano y su
de Escritores de América Latina y el Caribe, de
influencia en Cuba,10 y Valdés Bernal, con una
Intelectuales por la Soberanía de los Pueblos de Nuestra
proyección más amplia, aborda tanto los problemas
América y el Simposio sobre la Identidad Cultural
lingüísticos de la zona en su conjunto o en el contexto
Caribeña.
continental, como el aporte lingüístico subsahariano y
del español en Cuba, ya en aspectos puntuales, ya como
parte de la comunidad lingüística hispánica del Caribe.11
Contribución de otras instituciones y
También la Casa del Caribe, de Santiago de Cuba,
publicaciones
realiza investigaciones sobre el creole haitiano y su
presencia en Cuba, los sistemas mágico-religiosos del
De la difusión de la cultura y la realidad del Caribe
área, además de indagaciones literarias, históricas,
—aunque, hasta el presente, algunas solo lo han hecho
arqueológicas, etcétera. Su órgano, la revista Del Caribe,
en una escala modesta—, se ocupan también otras
ha publicado desde 1984 artículos de sus investigadores
instituciones y publicaciones cubanas.
y contribuciones de otros especialistas e investigadores
El primer centro universitario cubano que introdujo
—cubanos y extranjeros— acerca de los temas caribeños.
el tema del Caribe en sus planes de estudio fue la Escuela
Esta institución también auspicia anualmente el Festival
de Letras y Artes de la Universidad de La Habana, por
de la Cultura Caribeña, que ya ha conocido su 16ª
iniciativa de la doctora Graziella Pogolotti. En 1968, el
edición. Este encuentro de intelectuales y artistas mucho
profesor norteamericano Samuel Goldberg comenzó a
ha contribuido a estrechar los vínculos entre los pueblos
impartir la asignatura Literatura Africana y Antillana
de la zona y a profundizar en su conocimiento mutuo.
En tal sentido, la participación de delegaciones de
(en lengua inglesa y francesa, según la especialidad).8 Poco
artistas cubanos en los Festivales de las Artes Creativas
después, las literaturas de Africa y del Caribe se
del Caribe (CARIFESTA), con el apoyo del Ministerio
estudiaron en asignaturas independientes.
de Cultura, ha sido un marco muy propicio para el
En cuanto a los estudios sobre la historia del Caribe,
intercambio.
estos se iniciaron en el Instituto Superior Pedagógico
Por otra parte, el tema caribeño ha estado presente,
«Enrique J. Varona» en cursos de posgrado impartidos
en los últimos treinta años, con relativa regularidad, en
por José Luciano Franco, desde el inicio de los años 70.
otras publicaciones cubanas. La Gaceta de Cuba y la
Aquellos esfuerzos iniciales permitieron que en la
revista Unión, ambas de la Unión de Escritores y Artistas
actualidad los estudios caribeñistas ocupen un lugar
de Cuba, Santiago, editada por la Universidad de Oriente
destacado en los planes de estudio en las facultades de
y Revolución y Cultura han publicado trabajos sobre la
Lenguas Extranjeras, Artes y Letras y Filosofía e
literatura, las artes y la cultura caribeñas. La revista
Historia, de la U.H., tanto en el nivel de pregrado como
Cuadernos de Nuestra América, del Centro de Estudios
en el de posgrado. En los tres últimos lustros varios
sobre América (CEA), publica desde 1981 artículos sobre
profesores de dichas facultades han realizado tesis
política, integración regional, defensa y otros temas,
doctorales sobre diferentes aspectos de la cultura del
abordados desde el punto de vista de la politología y las
Caribe: literario (Margarita Mateo Palmer e Ileana Sanz),
ciencias sociales. Las editoriales Arte y Literatura, José
histórico (Digna Castañeda y Josefina Castro) y de las
Martí, Ciencias Sociales y Pueblo y Educación también
artes plásticas (Yolanda Wood). El tema caribeño es una
han difundido textos literarios y estudios críticos e
tarea en las líneas de investigación de esos centros, que
históricos sobre el Caribe.
mantienen un importante intercambio de profesores con
Pudieran añadirse otras instituciones culturales y
universidades del área, quienes participan con
académicas —como el capítulo cubano de la Asociación
regularidad en actividades académicas caribeñistas, tanto
de Historiadores del Caribe— pero su inclusión haría
en Cuba como en otros países.
aún más extensa esta relación.
Otro centro docente universitario que dedica gran
atención a los estudios caribeños es la Universidad de
Oriente. En su sede de Santiago de Cuba, se imparten
Las naciones francocaribeñas y su literatura.
cursos sobre el Caribe y se mantiene un activo
Una ojeada desde Cuba
intercambio con profesores e investigadores de los países
de la subregión.
Por razones obvias, la nación francocaribeña con la
Ya en la década del 70, el Ministerio de Educación
cual Cuba tradicionalmente tuvo más contactos hasta
introdujo en sus planes de estudios el tema caribeño,
1959 fue Haití. Ya desde principios del pasado siglo la
primero en la enseñanza secundaria básica y en fecha
emigración de colonos franceses —muchos de ellos
10
11

Emilio Hernández Valdés
acompañados por sus esclavos— que se asentaron
económicas— los colonizadores franceses contribuyeron
fundamentalmente en la región oriental de Cuba, al
a que comenzaran a sentarse las bases de nuevas
producirse la Revolución y posterior independencia
sociedades que lentamente, a lo largo de los años, en
haitiana, sentó las bases del intercambio cultural entre
razón de las diversidades contextuales en las que se
ambas naciones.
manifestaría su tortuosa y castrada evolución, se
Ese movimiento libertario, cuya trascendencia
diferenciarían esencialmente de Francia.
traspasó los límites del vecino país y sus consecuencias
A lo largo de los siglos XVI y XVII, las condiciones de
repercutieron no solo en el Caribe, sino también en los
vida de las nuevas colonias y las características de sus
planos continental y universal, influyó de manera
pobladores impiden el surgimiento en ellas de una rica
especial en el destino de Cuba. Baste recordar que fue
actividad cultural y, por consiguiente, de la escritura
decisivo para que la sacarocracia cubana se alzara al
literaria. Las crónicas de los misioneros y los diarios de
primer plano en la producción y comercialización del
los colonos se ocupan ante todo de establecer el «registro»
azúcar. Otros productos cubanos, como el café, gracias
de la vida en las colonias, y el factor humano, subjetivo,
a la desestabilización de la producción agrícola haitiana,
esencial a la creación literaria —salvo contadísimos
lograron ocupar posiciones privilegiadas en el mercado
ejemplos llegados hasta nuestros días—, queda excluido
internacional. Tampoco puede soslayarse que también
de esos primeros documentos.12 Paralelamente, en el
favoreció el incremento de la introducción de mano de
inevitable intercambio que hubo de producirse entre los
obra esclava, y que durante décadas se esgrimiera el
grupos poblacionales que integraron la sociedad colonial,
ejemplo de lo que allí había ocurrido como pretexto
surgió la contradictoria dicotomía lingüística que ha
para postergar la abolición, dos factores que influyeron,
caracterizado la vida de estos territorios: la convivencia
tanto interna como externamente, en que se retrasara la
discrepante entre el francés y el creole, que desde
independencia de la Isla. Además, la turbulencia de la
entonces y hasta hoy ha constituido un problema central
historia haitiana y la continua amenaza y
de la creación literaria francoantillana, y que en las
desestabilización de la colonia española de Santo
últimas décadas ha cobrado palpitante actualidad.
Domingo por parte de los ejércitos haitianos propició
Empleado por los descendientes de los colonos franceses
también una emigración masiva de familias dominicanas
para expresarse literariamente y por los esclavos para la
y francesas hacia Cuba que contribuyó notablemente al
creación artística oral, en las noches de la plantación, ya
desarrollo experimentado por la Isla en el siglo XIX,
desde entonces comenzó el creole a labrar su senda como
principalmente en el campo de la cultura.
instrumento para la creación literaria.13
Ya a fines de ese siglo, en la medida de sus magros
recursos, Haití cooperó con los revolucionarios cubanos
Se acostumbra situar el origen de la literatura haitiana
que preparaban la Guerra del 95, y en su territorio tuvo
en el período posterior a la independencia nacional,
Martí una cálida acogida, incluyendo el apoyo del
conquistada en 1804 —la primera de un país
presidente Florvil Hypolitte.
latinoamericano. Pero cabe suponer, como afirma Pradel
Tampoco es posible olvidar que durante las primeras
Pompilus,14 que al menos entre el sector de los libertos
décadas de la actual centuria, miles de braceros haitianos,
—constituido por ricos propietarios mulatos del sur del
—así como de Jamaica y en menor proporción de otras
Santo Domingo francés, algunos de los cuales habían
islas del Caribe— fueron traídos para cortar caña en
estudiado en el extranjero— existiera ya una intención
nuestro país. Este movimiento migratorio, generalmente
de describir la vida en esa colonia, su naturaleza, su
eventual, si bien disminuyó posteriormente, se mantuvo
historia, además de redactar documentos en los que
hasta los años 50. Muchos de aquellos peones se
justificaran sus demandas de reivindicaciones como
instalaron definitivamente en Cuba, donde
grupo preterido por la supremacía de los colonos
constituyeron un núcleo poblacional importante, cuyos
blancos, de quienes sí se conservan algunos textos. Sus
descendientes forman hoy parte integrante de nuestra
primeras manifestaciones15 —poemas, generalmente de
nación.
corte patriótico; piezas teatrales sobre la vida y las
En cuanto al contacto con los otros territorios
costumbres del país y ensayos en los que se defiende a la
caribeños colonizados por Francia, fue mínimo en los
joven República de los ataques provenientes del exterior
casos de Martinica y Guadalupe, y casi nulo en lo que se
o que abordan los agudos enfrentamientos entre los
refiere a la Guayana, hasta fecha reciente. Solo después
diferentes caudillos del país después de la
del triunfo revolucionario se produjo un acercamiento,
independencia— carecen de valores literarios. Son, por
pero aún hoy resulta muy limitado.
ejemplo, versos balbucientes, altisonantes, una imitación
de los modelos neoclásicos franceses, escritos las más de
las veces en un francés arcaico, en ocasiones incorrecto.
La creación literaria francocaribeña
Pese a ello, es en Haití donde a partir de 1860 se produce
la obra más significativa —principalmente en la poesía y
Desde su instalación en los territorios del Caribe,
el ensayo histórico— en el terreno de la literatura y el
pese a su rechazo al medio y sus nostalgias de la vida
pensamiento —con un marcado interés por demostrar
metropolitana, —la que muchos se vieron obligados a
la capacidad creadora del hombre negro instruido— en
abandonar por diversas razones, en primer lugar las
el Caribe francófono del siglo XIX.
12

El Caribe en la cultura cubana: un balance de la literatura francoantillana
Cupo a la Casa de las Américas, creada en 1959, canalizar el
intercambio de la Revolución y de los intelectuales cubanos con
sus colegas, principalmente los latinoamericanos, asumir, desde
los tiempos de su más temprana existencia, el papel de difusora
de las conquistas de la Revolución y quebrantar el cerco tendido
a la Isla.
En esa época, en Martinica y Guadalupe
conocer el drama del pueblo haitiano y la explotación a
—particularmente en la segunda— la producción literaria
la que este estaba sujeto por parte de la burguesía
es muy escasa, y en la Guayana, prácticamente
nacional, reducidos sus representantes al papel de
inexistente.
testaferros del imperialismo norteamericano.
El fenómeno de la confrontación lingüística hace que
El regreso de Roumain a Haití no solo contribuyó a
en todo el Caribe francófono surjan escritores que ya en
la renovación literaria del país. Este aprovechó el clima
el siglo XIX tratan de escribir simultáneamente en francés
favorable creado por la ocupación, y la prédica en favor
y en creole, aunque casi siempre sin grandes méritos.
de los valores autóctonos desarrollada a lo ancho y largo
Este hecho indica la aparición de un sentimiento de
del país unos años antes por Jean Price-Mars, para
diferenciación, germen primero de la expresión de la
radicalizar a los jóvenes intelectuales del momento e
evolución hacia una conciencia nacional que en
incorporarlos a las luchas populares y al enfrentamiento
Martinica y Guadalupe, y mucho más tarde en la
directo a la ocupación extranjera; movimiento que
Guayana,16 va a desarrollarse con extrema lentitud.
alcanzó su punto más alto cuando fundó el Partido
No es hasta el presente siglo que comienza a
Comunista Haitiano al concluir la ocupación
modificarse esa actitud mimética en la literatura
norteamericana en 1934.
francocaribeña. Primero, tímidamente, en Haití, y a
En cuanto al resto de las Antillas francesas, estas se
finales de la década de los años 20 en los territorios
mantenían en el mayor estancamiento político y social,
coloniales de Francia, aunque con marcadas
con la diferencia, respecto a Haití, de que el régimen
peculiaridades en cada caso.
colonial permitió, después de abolido el Código negro,
En Haití, el rechazo a la humillación sufrida por la
en alguna medida, el acceso a la instrucción pública;
ocupación norteamericana reavivó los sentimientos
aunque el número de analfabetos, principalmente en las
nacionalistas. Ya desde principios de siglo, los escritores,
regiones rurales, era muy elevado. Una rígida estructura
principalmente los narradores, habían comenzado a
clasista, basada también en el color de la piel, sostenía
mirar hacia adentro; a resaltar los valores y defectos de
casi inalterable el orden social establecido luego de
una nación que en un solo siglo, y en medio de continuos
haberse abolido la esclavitud en esos territorios (1848).
y sangrientos conflictos internos, debió transitar —en
Propietarios blancos y funcionarios coloniales se
un casi total aislamiento la mayor parte de ese tiempo—
esforzaban por mantener sus privilegios frente a una
de la esclavitud a la consolidación de la nacionalidad.
mayoría de negros y mestizos que poco podían hacer
La presencia norteamericana exacerbó los agudos
para mejorar su situación. Este estado de cosas se refleja
problemas de aquella sociedad. La elite haitiana se dividió
en la creación intelectual de los antillanos asimilados,
entre los que cooperaron con el ocupante y los que
más ocupados en mantenerse al tanto de la política y la
rechazaron su presencia. Pero fueron las clases más
vida cultural metropolitana que de los problemas
humildes las que se rebelaron y enfrentaron al invasor.
locales.17 Avanzado el período de entreguerras,
El movimiento de los cacos, guerrilleros campesinos
comienzan a manifestarse signos de una naciente
comandados por Charlemagne Peralte, aunque fracasó,
reacción, en cuanto a poner de relieve los valores propios
firmó una página heroica en la historia haitiana. Un vivo
de esa sociedad, principalmente en Martinica, isla que
sentimiento nacionalista predominó en todo el país. Pero
tradicionalmente marca el paso a estos territorios hasta
su reflejo en las letras y en las luchas sociales debió
el presente. Se atribuye este cambio al surgimiento de
esperar al surgimiento de la llamada Escuela indigenista,
una nueva generación de intelectuales que, formados en
fundada hacia 1926 y comandada por Jacques Roumain,
Francia, se habían puesto en contacto con el pensamiento
a partir de su regreso de Europa un año más tarde. Este
progresista de la época —algunos con las ideas marxistas—
grupo de jóvenes escritores buscó salir del
y habían recibido la influencia del surrealismo, en el
pintoresquismo y la imitación de los modelos franceses
que apreciaron su interés por la revalorización de las
en lo formal, y de la evasión temática de la realidad que
artes y las sociedades negras.
aún persistía en la mayor parte de los creadores,
La presencia de esta nueva proyección del
principalmente en la poesía. Para lograrlo profundizaron
pensamiento social en el panorama político-cultural
en el estudio de las raíces propias, adoptaron una nueva
antillano, se pronunciará con un tono más radical entre
forma de decir y abordar sus circunstancias. Dieron a
los jóvenes estudiantes martiniqueños radicados en París,
12
13

Emilio Hernández Valdés
En Haití, el rechazo a la humillación sufrida por la ocupación
norteamericana reavivó los sentimientos nacionalistas. Ya desde
principios de siglo, los escritores, principalmente los
narradores, habían comenzado a mirar hacia adentro; a resaltar
los valores y defectos de una nación que en un solo siglo debió
transitar de la esclavitud a la consolidación de la nacionalidad.
agrupados en torno a la efímera revista Légitime Défense
departamentalización, cuya ley fue propuesta e
(1932). En su único número, estos reclamaban, mediante
impulsada por Césaire. Con su promulgación, Francia
un manifiesto de denuncia que allí publicaron, los
logró, no sin esfuerzo, recuperar su hegemonía en estos
derechos que les negaba el régimen colonial a sus pueblos
territorios, que durante la ocupación alemana de la
y expresaban la impostergable necesidad del rescate de
metrópoli habían permanecido fuera del control del
sus valores.
gobierno de Vichy.
Dos años más tarde se publicó, también en París, la
Convertido en líder político, Césaire desempeñó un
revista L’Etudiant Noir, en la que se daban a conocer
papel de suma importancia, pero muchas veces
tres jóvenes poetas: Aimé Césaire (Martinica), Léon
contradictorio. Militante del Partido Comunista
Damas (Guayana), y Léopold S. Senghor (Senegal),
Martiniqueño, alcalde de Fort-de-France, diputado a la
quienes constituirán el núcleo central del más tarde
Asamblea Nacional, luego de renunciar a su militancia
llamado Movimiento de la Negritud, que marcará un
comunista en 1956, fundó su propia organización, el
punto de giro en el desarrollo de la cultura antillana y
Partido Progresista Martiniqueño y adoptó posiciones
africana, principalmente en las naciones colonizadas por
más bien conservadoras en el plano político práctico, al
Francia.
tiempo que continuaba desarrollando una obra literaria
Los años finales de la década del 40 se caracterizan,
que le propició una merecida fama internacional.
en Haití, por una intensa lucha política, que se recrudece
Pero su proyección ideológica muchas veces se
con la caída del presidente Elie Lescot en 1946,
contrapuso a su ejecutoria política. Aunque no rompe
propiciada por una huelga iniciada por jóvenes escritores
con Senghor, se distancia de las posiciones abiertamente
y estudiantes, que fue apoyada por los intelectuales más
reaccionarias y neocolonialistas de este, que sí son
progresistas y secundada por la población, pero que
coherentes con su pasado, tanto en el plano estético como
abortó por la falta de un movimiento organizado y de
en el político-ideológico. Su antiguo compañero de lides
una dirección que le diera coherencia.18 La amenaza de
en los días fundacionales del movimiento de la negritud,
una nueva intervención norteamericana y la cooperación
el gran poeta Léopold Sédar Senghor, es también ahora
brindada por el ejército al Departamento de Estado
dirigente político —primer Presidente de Senegal al
Norteamericano, con el beneplácito de la burguesía
recibir su país la independencia en 1960—, y pretendiente
comerciante haitiana, frustró el movimiento. Muchos
a convertirse en el hombre fuerte de Africa y en Papa de
de los jóvenes intelectuales que participaron en él o que
la literatura y las artes negroafricanas y, por extensión,
lo apoyaron se vieron obligados a abandonar el país,
de todo el mundo negro.
entre ellos Jacques Stephen Alexis y René Depestre.
Varios acontecimientos, tanto políticos, como
A partir de entonces se sucedieron una tras otra las
sociales y culturales, ocurridos a finales de los años 50,
crisis políticas en Haití. Los gobiernos represivos que
prepararon el panorama que habría de observarse en el
detentaron el poder durante una década crearon las
contexto internacional. El acelerado descalabro del
condiciones para la instauración de la dinastía de los
antiguo imperio colonial francés, con la derrota
Duvalier. Puede decirse que desde 1946, y sobre todo
experimentada por sus tropas en Indochina y el
hasta el derrocamiento del sucesor de Papa Doc, la mejor
comienzo de la impopular Guerra de Argelia, también
literatura haitiana se hizo en el exilio: en Montreal, París,
abocada al fracaso, y que pondría en crisis toda la
México, Nueva York o La Habana. Los escritores que
estructura de la dominación colonial a escala global; la
permanecieron en el país, si no cooperaron
estructuración de un amplio movimiento anticolonialista
espontáneamente o cedieron a las presiones recibidas
de los pueblos de Asia y Africa, que cobra fuerzas a
para que colaboraran con el dictador, debieron cuidarse
partir de la victoria de la Revolución china, los
de no irritar al más grotesco y delirante ejemplar de la
acontecimientos en Egipto e Indonesia, y la Conferencia
nutrida galería de dictadores que ha conocido América
de Bandung, en 1955; las revelaciones hechas durante el
Latina. Quienes no tuvieron esa cautela debieron
XX Congreso del Partido Comunista de la Unión
exiliarse o perecieron en sus mazmorras.
Soviética sobre los excesos cometidos durante el período
En las colonias francesas el lento proceso de
estalinista, que motivaron la salida del Partido
evolución de su condición colonial se modificó con la
Comunista Francés de Césaire y otros escritores franceses
instauración de la llamada política de
y antillanos; la asunción de la presidencia de Haití —en
14

El Caribe en la cultura cubana: un balance de la literatura francoantillana
el caso específico de esa nación— por François Duvalier
de Edmond Héraux (Haití, 1858-1920). En apretada
en 1957, y el triunfo de la Revolución cubana en 1959,
síntesis caracteriza los valores de la producción
repercutieron con mayor o menor intensidad en la región
intelectual haitiana, criterio muy coincidente con el
del Caribe.
juicio de valor que la posteridad se encargó de establecer:
En el plano de la cultura tuvieron lugar dos eventos,
en los que intervinieron numerosos creadores
Haití tiene más de un poeta, y muchos buenos en verdad,
francoantillanos: en 1956, en París, el primer Congreso
así como sendos libros de singular pericia en política y
hacienda [...]. De los poetas, por abundoso, y a veces
de Escritores y Artistas Negros, en el que tuvieron una
gigantesco, por pujante y nómada, tiene fama europea y
participación destacada Jean Price-Mars, Jacques Stephen
americana Oswald Durand, que escribió a Cuba una
Alexis, Aimé Césaire, Frantz Fanon y otros intelectuales
verdadera oda [...].22
francocaribeños, y su segunda edición, efectuada en
Roma en 1959.19
Este texto constituye una muestra más de la
A partir de 1960, la literatura francocaribeña
sensibilidad y la información de Martí como crítico
experimentará un desarrollo sostenido, cuya resonancia
literario, pues de la abundante producción poética
no se ha apagado, y alcanza hoy un gran reconocimiento
haitiana del pasado siglo, en su mayor parte dispersa en
por sus altos valores formales y sus experimentaciones
revistas y periódicos de esa nación, y de la que —como
en el plano lingüístico, al incorporar el creole —en tanto
ocurre con la generalidad de la producción de sus
lengua para la creación literaria— como parte de la
creadores, tanto en prosa como en verso— solo tenemos
incesante búsqueda de la identidad que durante las
un conocimiento fragmentario, los poemas de Durand
últimas décadas ha obsesionado y ocupado a los
son los que, como conjunto, en alguna medida aún hoy
escritores y artistas de las naciones francocaribeñas y de
pueden leerse con agrado.23
toda la región.
Aunque no abordó directamente aspectos de la
Escrita, la mayoría de las veces, en el exilio —forzoso
literatura francocaribeña, la segunda personalidad de
o voluntario—, denotadora de un esfuerzo sobrehumano
nuestra cultura que se interesó por los estudios antillanos
de la nostalgia y del afán a ultranza por no olvidar lo
fue, por supuesto, Fernando Ortiz. Ya desde principios
propio, y de un ejercicio de profundización en la
de la década del 30 comienza a dar a conocer sus primeros
búsqueda y defensa de los valores de esas culturas
estudios antillanos.24 Al regresar a Cuba —en 1934—
nacionales preteridas y subestimadas; obligada a
publica reseñas de obras sobre las religiones, la música
imponerse desde las diásporas y a vencer la resistencia
y el folklore antillano, así como sobre la llamada poesía
de los medios intelectuales no progresistas y de los
mulata —de la que ya se había ocupado en 1930 con
círculos editoriales a reconocer sus valores; casi
motivo de la publicación de los Motivos de son de
desconocida en su propio espacio por razones objetivas
Guillén—, específicamente de la obra del puertorriqueño
—la mayoría de las veces, como ocurre principalmente
Luis Palés Matos, además de un trabajo titulado «La
en Haití, por su elevado número de analfabetos— o
religión en la poesía mulata», de 1937. De esa época datan
subjetivas, por los prejuicios y la subestimación de lo
sus relaciones con Jean Price-Mars, el eminente
autóctono por parte de las clases privilegiadas
sociólogo, etnólogo y folklorista haitiano quien
detentadoras del poder y con un alto grado de
desarrolló en su país una obra paralela y muy similar a
asimilación a los patrones neocoloniales, la literatura
la llevada a cabo por Ortiz en Cuba. La labor iniciada
francocaribeña ha logrado imponer sus méritos en estas
por Don Fernando, reconocida desde muy temprano
dos décadas finiseculares, como lo demuestra la existencia
en el plano internacional, permitió profundizar en el
de una nutrida nueva generación de escritores y un
carácter mestizo y transculturado de Cuba y los pueblos
número considerable de obras con un alto nivel de
del Caribe, y abrió el camino de las investigaciones
realización que permiten afirmar que ya existe una
afrocaribeñas tanto a sus coetáneos —algunos de ellos
novelística francocaribeña. Casi puede hablarse de boom,
convertidos en sus discípulos, en primer lugar José
provocado por el reconocimiento alcanzado en recientes
Luciano Franco—, como a otros intelectuales más
ediciones de certámenes literarios, que hasta entonces
jóvenes, pero ya en plena madurez creadora; tales son
habían sido renuentes a galardonar a los autores
los casos de Lydia Cabrera o Alejo Carpentier.
caribeños.20
Fueron este último y Nicolás Guillén quienes, junto
con el pintor Wifredo Lam, estuvieron en más estrecho
contacto con la cultura y la literatura haitianas en aquel
Visión cubana de la literatura francocaribeña
momento, tanto por sus visitas a Haití en los primeros
años de la década del 40, como por la íntima amistad
La primera referencia a la literatura francocaribeña,
que se estableció entre Guillén y Jacques Roumain desde
desde una visión cubana, que he podido rastrear
1937, cuando se conocieron en París. Su relación se
corresponde a José Martí.21 Se trata de un breve
reforzó durante el tiempo que Roumain vivió como
comentario —publicado el 19 de enero de 1895,
exiliado en La Habana en 1939, y perduró hasta la muerte
exactamente cuatro meses antes de su caída en combate—
de este. Para Carpentier y Guillén el contacto con Haití
dedicada al poemario Fleurs des mornes (Flores de los cerros)
tuvo una gran significación y trascendió a sus obras.
14
15

Emilio Hernández Valdés
La primera referencia a la literatura francocaribeña, desde una
visión cubana,corresponde a José Martí. En apretada síntesis
caracteriza los valores de la producción intelectual haitiana,
criterio muy coincidente con el juicio de valor que la posteridad
se encargó de establecer.
En cuanto a Carpentier, recuérdese que su estancia
En 1947 aparece en nuestras librerías un poemario
en Haití en 1945 significó la revelación de lo que él llamó
de un importante poeta haitiano, Black soul (Alma negra),
«lo real maravilloso americano» y dio origen a su primera
de Jean Fernand Brierre (1909), libro influido por la
gran novela, El reino de este mundo, que constituyó su
poesía de Césaire —con la que los poetas haitianos se
lanzamiento como gran novelista de las letras del
pusieron en contacto directo cuando este visitó ese país
continente.25 Puede afirmarse que superar esta novela
en 1945— y la literatura negra norteamericana.34
constituye aún un desafío para quienes —incluyendo a
los novelistas haitianos— intenten calar profundo en las
esencias de ese pueblo caribeño.26
La literatura francocaribeña desde Cuba en
El viaje de Guillén a Port-au-Prince en 1942, invitado
Revolución
por Roumain, y a donde acudió en misión oficial,
contribuyó a estrechar los vínculos entre las dos
Al producirse en 1959 el triunfo revolucionario
naciones, principalmente en el campo de la cultura, y a
«exiliados provenientes de todos los rincones de América
la creación del Movimiento de Cooperación Intelectual
se dirigieron a Cuba, nuevo hogar de la libertad, con el
Haitiano-Cubano, encabezado por el notable poeta
fin de recabar el concurso moral y material que les
Roussan Camille (1915), muy vinculado, por su vida y
permitiría librar a su patria del yugo de la opresión».35
obra, a Roumain. La significación otorgada a la presencia
Entre esos exiliados llegó a Cuba un escritor
de Guillén en Haití fue plasmada en el artículo «Una
revolucionario haitiano que contribuiría decisivamente
embajada histórica», publicado entonces por Roumain
con su obra y esfuerzo a divulgar entre nosotros no solo
y reproducido de inmediato en Cuba, en el periódico
la literatura de su país, sino la de todo el Caribe
Hoy.27
francófono: René Depestre. Su residencia de casi tres
En marzo de 1944, en el primer número de la Gaceta
décadas en Cuba, en cuya vida intelectual participó
del Caribe, revista de la cual Guillén fue uno de los
activamente, como un cubano más, la compartió entre
editores, se publicó el artículo de Roumain «La poesía
su labor política —desarrollada principalmente a través
como arma», en el que sintetiza su credo poético.28 Otro
de sus mensajes en creole trasmitidos por Radio Habana
escritor haitiano que publicó en la Gaceta del Caribe fue
Cuba, destinados a combatir al régimen haitiano e
el poeta y novelista Anthony Lespès.29 La muerte de
informar a la opinión pública de su país sobre el
Roumain, reseñada por esa publicación solo unos meses
desarrollo de la Revolución cubana y los
más tarde, «fue un duro golpe [para Guillén], que habría
acontecimientos internacionales— y la continuación de
de resonar más adelante, alto y perdurable, en su
su obra creadora como escritor y periodista. Fue un
poesía».30
asiduo colaborador en las actividades de la Casa de las
También en ese primer lustro de la década del 40, se
Américas y de su revista, de cuyo Comité de
produjo el primer contacto de los lectores cubanos con
Colaboración fue miembro durante varios años, y en la
uno —hasta hoy el mayor—, de los grandes poetas de la
que publicó con regularidad sus poemas y varios de sus
literatura francocaribeña, entonces prácticamente
ensayos más importantes.
desconocido: el martiniqueño Aimé Césaire. Traducido
Fue precisamente un libro de René Depestre uno de
por Lydia Cabrera —con prefacio del poeta surrealista
los primeros de la literatura francocaribeña que se
francés Benjamin Péret (1899-1959), e ilustrado por
publicó en Cuba en el período revolucionario: Mineral
Wifredo Lam—, se publica en La Habana, muy
negro (Minerai noir) (1962). Traducido por Virgilio
probablemente en su primera versión a otra lengua, el
Piñera, incluye algunos de los poemas reunidos en el
libro capital de la negritud: Cahier d’un retour au pays
libro de igual título, publicado en París en 1956.36 La
natal,31 obra que tan solo unos años después, concluida
mayor parte de los poemas incluidos en la edición cubana
la II Guerra Mundial, situaría a su autor en la cúspide de
fueron escritos con posterioridad a la edición francesa
la creación poética francesa, para satisfacción de André
y, según parece, muchos los concibió aquí. Esta muestra
Breton, su «descubridor», y con el reconocimiento
de su poesía, de la que ya había dado antecedentes en
expreso de Jean P. Sartre.32 En el verano de 1945, Césaire
periódicos y revistas desde los primeros días de su
vuelve a ser publicado en Cuba, ahora en Orígenes,
estancia en Cuba, presenta los grandes temas de la poesía
traducido por Helena de Lam, una alemana entonces
de Depestre: Haití, su pueblo, su cultura, su identidad,
esposa del pintor cubano.33
sus luchas revolucionarias; la explotación de los
16

El Caribe en la cultura cubana: un balance de la literatura francoantillana
desposeídos, en particular del negro, a escala universal,
Fanon (Martinica, 1925-1961) fue recibido con júbilo por
que constituyen en realidad dos vertientes de su poesía
lo oportuna que fue su aparición. Suscitó numerosos
político-social, y el amor por la mujer, aspecto de su
debates y abrió una senda muy productiva en el
obra poética que lo emparienta con la tradición de la
desarrollo y análisis de la teoría y la práctica
poesía de amor francesa de nuestro siglo (Aragón, Eluard)
revolucionaria en nuestro medio. La publicación casi
y que lo convierte en un caso singular en el panorama
inmediata de sus dos obras anteriores, Por la revolución
de la poesía francocaribeña.37 Depestre publicó en Cuba
africana, y Piel negra, máscaras blancas, en 1966 y 1968,
otros dos textos poéticos. En 1967, Un arcoiris para el
respectivamente, permitieron al lector cubano conocer
occidente cristiano (Un arc-en-ciel pour l’occident chrétien),
mejor a Fanon.46
primera mención del Premio Casa de las Américas de
El reencuentro del lector cubano con la obra de
ese año, considerado su mejor libro, el más orgánico;38
Césaire, ya consagrada internacionalmente, se produjo
y un año más tarde Cantata de Octubre a la vida y la
en 1966. Esta vez en la revista Casa de las Américas, en
muerte del Comandante Ernesto Che Guevara, un extenso
un memorable número monográfico dedicado al tema
poema dramático, probablemente el primero de su tipo
Africa en América. Allí se incluyeron, aunque solo
inspirado por la muerte del Che.39 Ya desde su juventud
fragmentariamente, dos textos relevantes del
había ejercido el periodismo, pero todo parece indicar
martiniqueño: Discurso sobre el colonialismo —texto
que su obra ensayística la inició en Cuba. En Por la
publicado en 1950 y revisado en 1958—, y su segunda
revolución, por la poesía (1969) y en Buenos días y adiós a
gran pieza teatral, Lumumba o una temporada en el Congo,
la negritud (1980) reunió ensayos escritos en distintas
publicada en Francia tan solo unos meses antes.47 La
circunstancias (prólogos, artículos, conferencias40),
tragedia del Rey Cristóbal, su obra teatral anterior, se
dedicados a diversos temas: la lucha anticolonialista, la
estrenó el 1º de diciembre de ese mismo año, en el marco
literatura francocaribeña, la negritud, el negro
del VI Festival de Teatro Latinoamericano, cuya
norteamericano, la poesía francesa, la identidad
polémica versión constituyó uno de los grandes
latinoamericana y caribeña, y otros que al releerlos hoy
espectáculos del rico movimiento teatral cubano de la
mantienen su vigencia.41 Su novela, El palo ensebado (Le
época. Un año después sería publicada en la revista
mât de cocagne) 42 muestra la delirante atmósfera del
Conjunto.48 También en 1967, apareció en nuestras
duvalierismo y se inscribe en uno de los temas
librerías otra obra de Césaire: Toussaint Louverture. La
recurrentes en la novelística latinoamericana, el del
Revolución francesa y el problema colonial,49 obra de
dictador. Lamentablemente nuestra crítica nunca la ha
interpretación histórica que, según su presentador, «no
tenido en cuenta.
pretende renovar la biografía del Precursor. Da por
En 1961 se publicó para el lector cubano la novela
sabidos los hechos. Lo que retiene su atención “son las
haitiana hasta ese entonces internacionalmente más
relaciones que los unen, la ley que los rige, la dialéctica
conocida: Gobernadores del rocío, de Jacques Roumain.
que los suscita”». Por último, para culminar el jubileo
Obra póstuma —la había concluido en México el 7 de
cubano por Césaire desarrollado en los años 60, se
julio y murió en Port-au-Prince el 18 de agosto de
publica el volumen Poesías,50 en 1969, que incluye una
1944—, consagró a Roumain como novelista y difundió
representativa selección de su obra poética —desde el
por todo el mundo el drama del pueblo haitiano,
Cuaderno de un retorno al país natal, ahora supuestamente
especialmente el del campesino, a la vez que señalaba la
completo,51 ejemplos de sus libros posteriores, así como
necesidad de la lucha y el optimismo en la victoria del
su poema dramático Y los perros callan (Et les chiens se
pueblo. La bella historia de amor de Manuel y Anaís,
taisaient, 1956), texto que inicia su tránsito de la poesía
pese al trágico final de la obra, el lenguaje empleado y
al teatro, y un fragmento de Discurso sobre el colonialismo.
otros valores formales, la convirtieron en la primera gran
La publicación de estos libros, los fundamentales del
novela de Haití.43 La producción poética conocida de
autor más importante del Caribe francófono, demostró
Roumain es reducida, pero de indudable calidad. Una
el alto nivel estético alcanzado por esta literatura, lo que
muestra de ella, los poemas de Madera de ébano (Bois
contribuyó a despejar en nuestro medio las dudas y
d’ébène) (1945), reunidos y publicados póstumamente
prejuicios en cuento a sus valores.
por su esposa, fueron reeditados por la editorial Casa de
No se puede cerrar el balance de la divulgación en
las Américas en 1974.44
nuestro país de la literatura francocaribeña en la década
En 1965, Cuba se preparaba para celebrar en La
del 60, sin tomar en cuenta la publicación, en 1968, de
Habana, al romper 1966 —proclamado Año de la
Así habló el tío, del haitiano Jean Price-Mars (1876). En
Solidaridad—, la Primera Conferencia de Solidaridad de
primer lugar, fue la primera obra francocaribeña incluida
los Pueblos de Asia, Africa y América Latina, más
en la Colección Literatura Latinoamericana de la Casa
conocida después como Conferencia Tricontinental, el
de las Américas. Prologada por René Depestre, la
primero de los grandes eventos antimperialistas que se
publicación de esta obra, superada en buena medida por
celebraron por aquel entonces en nuestro país. Fue
el desarrollo experimentado por los estudios sociológicos
cuando se dio a conocer entre nosotros un autor cuyas
en las cuatro décadas transcurridas entre su aparición
ideas nos aclararían muchos conceptos sobre la cuestión
(1928) y su publicación en Cuba, permite conocer un
colonial y la cultura nacional. Publicado en Cuba por
libro que abrió caminos a los estudios sobre el vodú y el
sugerencia del Che,45 Los condenados de la tierra, de Frantz
folklore haitianos, y contribuyó a despejar el rechazo
16
17

Emilio Hernández Valdés
que existía, en los sectores más cultos de Haití, hacia
haitianos, y seguir una conducta basada en el desarrollo
esas manifestaciones de la cultura y a elevar el orgullo
de los valores propios, en el logro de la autoestimación
nacional. Price-Mars fue una figura de la intelectualidad
como ciudadanos y como pueblo.
de esa isla que prácticamente cubrió un siglo de su vida
En esta década se prestó más atención a la literatura
cultural y política, tan contradictoria y a veces tortuosa
anglocaribeña, la primera del área incluida en el Premio
como lo fue la trayectoria de la vida de este autor.
Casa de las Américas (1976), pues no fue hasta 1980
Entre 1968 y 1969, el Centro de Documentación de
cuando se convocó a los autores francocaribeños. Sin
la Casa de las Américas publicó en dos volúmenes un
embargo, un año antes, el poeta haitiano Paul Laraque
estudio del académico polaco Tadeuz Lepkowski,
(1920) había obtenido el Premio de Poesía de esa
considerado el decano de los latinoamericanistas polacos
institución con un volumen en el que reunía dos libros:
en aquel momento. Esta obra, titulada Haití que ya había
Les armes quotidiennes y Poésies quotidiennes.54
sido publicada en su país en 1964, interesa, además de
Puede considerarse que en la década del 80 la difusión
por su enfoque no tradicional y su información valiosa,
de la literatura francocaribeña en Cuba recobró el nivel
por la concepción metodológica que empleó en la
que había alcanzado en los años 60. El Premio Casa de
investigación del tema.
las Américas contribuyó a ese propósito. La intención
Los primeros años de la década de los 70 también
que ha predominado es la de dar a conocer
estamparon sus grisuras en la publicación de la literatura
preferentemente a los nuevos autores, aunque buena
francocaribeña en Cuba. Salvo tres novelas haitianas que
parte de los premiados hasta el momento son autores ya
permiten tener una visión panorámica del desarrollo de
conocidos y algunos con una obra valiosa.
la literatura de ficción en esa isla, el libro de la ensayista
Entre 1980 y 1993 fueron premiados el haitiano
e historiadora Suzy Castor La ocupación norteamericana
Gérard Pierre-Charles, ensayo, en 1980, por El Caribe a
de Haití y sus consecuencias (1915-1934), (1978) —mención
la hora de Cuba, y también el poeta y novelista Anthony
de ensayo en un Premio Casa de varios años atrás—, y la
Phelps (Haití, 1928), por La balière caraïbe (poesía). Tres
inclusión de una pieza del martiniqueño Daniel
calibanes, de Roger Touson, de Martinica, recibió el
Boukman en la revista Conjunto, no se le prestó la misma
premio de ensayo en 1982. También de Martinica, el
atención editorial que antes a esta literatura.
poeta y ensayista Vincent Placoly fue premiado en 1983
La primera de aquellas novelas, El compadre general
por Dessalines ou la passion de l’indépendance. Dos años
sol (Compère général soleil, 1955), fue escrita por el hasta
más tarde el premio recayó nuevamente en Phelps por
hoy más importante novelista haitiano, Jacques Stephen
su poemario Orchidée nègre. El poeta, ensayista y crítico
Alexis (1922-1961). Continuador de la tempranamente
martiniqueño Alfred Melon (1932-1990), investigador de
interrumpida novelística de Roumain, en solo poco más
la poesía cubana y un estudioso de la obra de Nicolás
de un lustro da a conocer cuatro obras que lo colocan al
Guillén, fue premiado en 1987 por De la identidad
frente de la narrativa francocaribeña.
nacional como ideología: investigaciones sobre la producción
Creador de la teoría del «realismo maravilloso», en
poética y la crítica cubanas de la era republicana (1902-1959).
Otro ensayo premiado, en 1989, fue Savalou É, de Rachel
sus obras penetró hondo en la realidad haitiana y la
Beauvoir y Didier Dominique, de Haití. El poeta y
expresó con un lenguaje y colorido que no han podido
novelista Ernest Pépin, con su libro de versos Boucan de
igualar sus continuadores. Médico de profesión, líder
mots libres (Remolino de palabras libres), insertó a
político que sobrepasó las fronteras de su país, murió
Guadalupe en la lista de los premiados en 1991. La novela
asesinado por la dictadura duvalierista, en circunstancias
Ravines du devant jour (Barrancas del alba), del también
aún no esclarecidas, cuando se proponía iniciar un
ensayista martiniqueño Raphaël Confiant, fue premiada
movimiento de liberación en tierras haitianas. Aunque
en 1993. Por último, en 1996 la poetisa Nicole Cage
por su belleza poética algunos críticos consideran que
Florentiny, resultó premiada con su poemario Arc-en-
Les arbres musiciens (Los árboles músicos) (1957) es su mejor
ciel, l’espoir (El arcoiris, la esperanza). La gran mayoría de
novela, El compadre general sol debe ser reconocida como
estos autores (Pierre-Charles, Laraque, Phelps, Melon)
una de las grandes novelas del continente.52
tenían una obra hecha y reconocida antes de obtener
Después de la publicación de la novela de Depestre a
estos premios. Otros, como Placoly, Confiant y Pépin,
la que con anterioridad me referí (El palo ensebado, 1975),
se han situado en pocos años entre los más importantes
en 1977 se publicó Sena,53 de Fernand Hibbert (1873-
creadores de la literatura francocaribeña que se hace en
1928), el primer novelista haitiano con una obra
la actualidad. Es fácil sacar la conclusión del prestigio
significativa. Con este texto, aparecido en 1905, se brindó
ganado por este Premio, al que los concursantes con su
al lector cubano la oportunidad de completar su visión
participación también dotan de una mayor
de los cuatro grandes momentos de la novelística
representatividad.
haitiana. Obra realista, en la que con gran ironía se
Además de estos libros premiados, debe mencionarse
resaltan los defectos del hombre haitiano y la frustración
la publicación en 1986 de los dos tomos de la Anthologie
a que lo lleva su complejo de inferioridad, es un cuadro
de littérature caribéenne d’expression française, de Silvia
fiel de la sociedad de su época, a la que critica, y muestra
García Sierra, obra destinada a la docencia, pero de
la necesidad de abandonar las falsas posturas, el
mucha utilidad para todos los estudiosos e investigadores
bovarismo que desgasta la personalidad de muchos
interesados en estos temas.
18

El Caribe en la cultura cubana: un balance de la literatura francoantillana
Puede considerarse que en la década del 80 la difusión de la
literatura francocaribeña en Cuba recobró el nivel que había
alcanzado en los años 60. El Premio Casa de las Américas
contribuyó a ese propósito. La intención que ha predominado
es la de dar a conocer preferentemente a los nuevos autores,
aunque buena parte de los premiados hasta el momento son
autores ya conocidos y algunos con una obra valiosa.
Más recientemente, en 1989, apareció el libro
claridad la situación a la que se debían enfrentar los
Literatura caribeña. Bojeo y cuaderno de bitácora, de
escritores francocaribeños, sobre todo aquellos que
Emilio Jorge Rodríguez, editor de Anales del Caribe,
buscaban publicar sus primeros libros.
publicación que también contribuye a divulgar la crítica
Con anterioridad habían existido otros premios
de la producción literaria caribeña. En ella se han
literarios en las Antillas francófonas, como el llamado
publicado importantes trabajos de Nara Araújo, Silvia
Premio de las Antillas, que otorgaba el Gobierno
García Sierra, Margarita Mateo Palmer y otros críticos
francés. Desde 1990 existe un premio para los escritores
que se han dedicado al estudio de la literatura caribeña.
del área, el premio Carbet,56 auspiciado en Martinica
Debo añadir un factor que ha sido decisivo para que
por la revista del mismo nombre y otras instituciones.
la literatura francocaribeña sea conocida en Cuba y, con
En todo balance, para que sea completo, es necesario
sus ediciones, más allá de nuestras costas: la calidad de
tener en cuenta el debe y el haber; a lo que se ha hecho,
las traducciones. He mencionado a los traductores de la
que es bastante en mi opinión, se debe contraponer lo
mayor parte de los textos caribeños publicados para que
que faltó.
se compruebe cómo esta tarea, muy difícil —por el alto
Personalmente me gustaría que se facilitara el acceso
nivel poético de los textos, y las diferencias contextuales,
el empleo del creole y la imposibilidad de consultar con
del lector cubano a autores como Damas —de quien
los autores—, la han asumido casi siempre poetas —entre
solo se han publicado algunos poemas—; valdría la pena
los mejores— y escritores cubanos con una obra
que leyera alguna novela de los martiniqueños Raphaël
reconocida nacional e internacionalmente. Ello garantiza
Tardon y Joseph Zobel, así como de los haitianos
la fidelidad y creatividad, requisitos indispensables en
Anthony Lespès y Anthony Phelps; que conociera a
la traducción literaria, sobre todo cuando se trata de
escritoras como Marie Chauvet, Simone Schwartz-Barr
obras poéticas. Muchas de estas traducciones hubieran
y Maryse Condé; que se enfrentara a una muestra,
sido acreedoras de premios si tal galardón existiera en
también, de la poesía de Edouard Glissant —autor en
nuestro país.
extremo difícil de traducir— y, al menos, a otra de sus
Cuando en 1980 Julio Cortázar inauguraba el Premio
novelas;57 ¿por qué no algunas piezas teatrales?, y,
Casa de las Américas de ese año, fecha de inicio del
particularmente, las novelas de Constant, Placoly, Pépin
premio a la producción francocaribeña, expresó
y Chamoiseau, entre otros. Por supuesto que una lista
de autores como esta constituiría un verdadero reto para
que las literaturas de los países del Caribe [...] jamás habían
cualquier editorial; pero los lectores lo agradecerían.
recibido el menor estímulo, [...] jamás habían visto sus
escasos libros distribuidos más allá de sus fronteras, Gracias
El jurado del primer Premio Carbet de 1990 —entre
a la decisión de la Casa [de las Américas] de abrir el ámbito
cuyos miembros se encontraba la poeta y escritora
del Premio a los escritores caribeños de lengua inglesa o
cubana Nancy Morejón—, al concluir el certamen, por
francesa [...] el público no solo cubano sino internacional
boca del escritor guadalupano Ernest Pépin, expresó su
empezará a conocer a autores de valía cuyo destino hubiera
sido el anonimato casi total. En Europa, la poco frecuente
reconocimiento a la «obra inmensa asegurada desde hace
publicación de estas literaturas consideradas como
treinta años por el Premio Casa de las Américas,
marginales o exóticas, se ve siempre acompañada de un
discernido en La Habana, en favor de la afirmación y
paternalismo tras del cual se agita todavía la sombra del
del desarrollo de las culturas del Caribe y de las
colonialismo; y otra cosa importante, y es que los editores
extranjeros van siempre al seguro, a nombres ya
Américas, de su comunicación y de su enriquecimiento
consagrados después de infinitas dificultades y obstáculos,
mutuo». También su convicción de la «necesidad
mientras que el Premio de la Casa abre grandes las puertas
imperiosa de mantener este premio [...] en todas sus
a jóvenes creadores del Caribe [...] que se impondrán o no,
dimensiones, como una herramienta común de creación
que serán apreciados u olvidados según los casos, pero [...]
que [...] tendrán ahora el beneficio de una distribución
y de intercambio cultural en nuestra región caribe».58
internacional que hace años hubiera sido imposible.55
Tal reconocimiento de los autores francocaribeños
por la labor realizada desde Cuba en la divulgación de
Algo han cambiado las cosas en los tres lustros
su obra, llevada a cabo especialmente por la Casa de las
transcurridos desde que Cortázar planteó con toda
Américas y su Premio Literario, resulta en mi opinión,
18
19

Emilio Hernández Valdés
la mejor valoración posible de este esfuerzo editorial
contribuyeron a la difusión de los estudios caribeños y africanos en
cubano de tantos años y de la significación que para la
nuestro medio.
obra de estos autores ha tenido el contacto con Cuba.
9. Véase «Jacques Roumain y la novela haitiana» y «Literatura del
Caribe», en Delia E. Rivero Casteleiro, Georgina Arias Leyva, Noemí
Gayoso Suárez, et al., Literatura latinoamericana y del Caribe. Octavo
Notas
grado, La Habana: Pueblo y Educación, 1979: 186-91; 256-66; y «Una
muestra de la literatura caribeña. El valor de su expresión en lengua
española», en Delia E. Rivero Casteleiro, Carmen Hernández Novo,
1. Un ejemplo muy claro fue lo que ocurrió en las colonias francesas
Martha Batista Ramírez, et al. Español y literatura. 12º grado, La Habana:
del Caribe:
Pueblo y Educación, 1994: 54-95.
La balcanización de las Antillas [francesas], y la diferencia de los
regímenes políticos, el desfase entre los desarrollos económicos y
10. Isabel Martínez Gordo, «Sobre la hipótesis de un patois cubano»,
los niveles de vida de las distintas islas fueron, durante largo tiempo,
Anuario L/L, La Habana, (14), 1983: 161-70; «Situaciones de bilingüismo
obstáculos que impidieron la concreción de [una] toma de conciencia
en Cuba», Anuario L/L, (16) 1985: 334-44; Algunas consideraciones sobre
antillana. Por ser divergentes los intereses de la potencias coloniales,
Patois cubain de F. Boytel Jambú, La Habana: Editorial Academia, 1989.
se les hacía creer a los pueblos antillanos que sus propios intereses
eran divergentes.
11. Véase Sergio Valdés Bernal «En torno a la diversidad idiomática de
los países latinoamericanos y caribeños y la problemática cultural y
Véase «De la réalité coloniale à la réalité nationale aux Antilles», Antilles-
política que ello implica», Anuario L/L, (10-11), 1979-1980:135-9;
Guyane, Présence Africaine, (43), 3r trimestre, 1962: 245.
«Dificultades para la identificación de los grupos etnolingüísticos
subsaharianos introducidos en Cuba durante la esclavitud», Anales del
2. Ricardo López Muñoz, «Henri Bangou: Aliénation et sociétés post-
Caribe, La Habana, (16), 1985: 345-56; «Visión lingüística del Caribe»,
esclavagistes aux Antilles», Anales del Caribe, La Habana, (4-5),
La Habana, Anales del Caribe, La Habana, (9), 1989: 269-78; «El español
1984-1985: 429.
en Cuba como parte del español del Caribe», en Jens Lüdtke y Matthias
Perl, eds., Lengua y cultura en el Caribe hispánico, Tübingen: Max
3. Paul Estrade, «Las Antillas Hispánicas: defensa de un concepto
Niemeyer Verlag, 1995: 1-15.
inusitado», Contracorriente, La Habana, 2(3), enero-marzo, 1996: 16-
30.
12. Véase Patrick Chamoiseau y Raphaël Confiant, Lettres créoles. Tracées
antillaises et continentales de la littérature, 1635-1975, París: Hatier, 1991:
4. Ibíd.: 18.
25.
5. En la contrasolapa de Cuba, transformación del Hombre (La Habana:
13. Véase al respecto Jean Bernabé, Raphaël Confiant y Patrick
Casa de las Américas, 1961), se plasmaban ya los objetivos que se
Chamoiseau, Eloge de la créolité, París/Fort-de-France: Gallimard/
proponía la nueva institución:
Presses Universitaires de France, 1989.
La Casa de las Américas es una institución cultural creada para
14. Pradel Pompilus, Pages de littérature haitienne, Port-au-Prince:
servir a todos los pueblos americanos, a la América que está
Imprimerie Théodore, 1955: 13. Esta conjetura puede apoyarse en la
luchando en este momento por su liberación del colonialismo.
comparación entre la evolución de las sociedades coloniales de las antillas
Como quiera que la Cultura debe ocupar su puesto de combate,
españolas, específicamente de Santo Domingo y Cuba, y la de Saint
esta institución trata, en la medida de sus fuerzas, de situar la Cultura
Domingue. En las dos primeras se conservan ejemplos de la afición
junto al pueblo, junto a los que luchan.
literaria de sus habitantes cuya antigüedad se remonta al último cuarto
del siglo XVI y los inicios del XVII, respectivamente, y referencias a textos
6. Su primer número correspondió a los meses de junio y julio de 1960.
anteriores. Aunque en Saint Domingue nunca llegaron a fundarse centros
Acerca de esta publicación, Graziella Pogolotti ha dicho:
educacionales importantes, la riqueza acumulada por esa colonia permite
suponer que los ricos colonos blancos enviaran a sus hijos mestizos
La revista Casa de las Américas nace de la Revolución cubana y del
—a los que muchos de ellos legaron valiosas propiedades— a cultivarse
impulso que, desde los primeros momentos, la llevó a volverse
en Francia.
hacia el continente.[...] // Con su edad madura, la revista encuentra
una forma y un estilo. // Testimonio de las nuevas inquietudes de
15. Los historiadores consideran el texto de la Proclamación de la
la hora, es a la vez una expresión de las nuevas corrientes literarias
Independencia (redactado por Boisrond Tonnerre, secretario de
de la América Latina. (Graziella Pogolotti, «Introducción», en Indice
Dessalines) el primer documento de la literatura haitiana.
de la revista Casa de las Américas, 1960-1967, La Habana: Biblioteca
Nacional «José Martí», 1969.)
16. Un curiosísimo caso de excepción en ambos sentidos —el literario
y el ideológico—, en la literatura francocaribeña creole de finales del
7. Al decir de Camila Henríquez Ureña, «quizás la más ambiciosa de
siglo
sus colecciones, por su carácter histórico-literario de proyección
XIX lo constituye la novela Atipa, del guayanés Alfred Parépou
(seudónimo), «el primer libro digno de ese nombre escrito en este idioma
continental» y la que ha cumplido la función de «ayudar a combatir el
mal antiguo y grave que es el desconocimiento de los valores literarios
[...].» (P. Chamoiseau y Raphaël Confiant, ob. cit.: 100-4.)
de la América Latina, mal que aqueja no solo a los países de otros
continentes sino a los propios americanos.» (Camila Henríquez Ureña,
17. Michel Leiris, Contacts de civilisations en Martinique et en Guadeloupe,
«Sobre la Colección Literatura Latinoamericana», Casa de las Américas,
París: UNESCO/Gallimard, 1955: 106.
8(45), noviembre-diciembre, 1967: 159-62.)
18. Véase René Depestre, «Para Jacques Stephen Alexis», en: Por la
8. Con posterioridad colaboraron con él la profesora inglesa Jacqueline
Revolución. Por la poesía, La Habana: Instituto del Libro, 1969: 165-74.
Kaye y más tarde la francesa Colette Fayole, bajo la dirección de Graziella
Pogolotti. Cabe a los tres, especialmente a Goldberg, el reconocimiento
19. Las intervenciones de los intelectuales francocaribeños en el Congreso
de haber sido los primeros en contribuir al desarrollo estos estudios en
de París fueron las más radicales. En Roma el peso de la balanza fue
nuestro medio académico; además de sus cursos, también fueron los
alterado en favor de las teorías de Senghor y sus seguidores. El escritor
tutores de las primeras tesis de grado sobre estos temas, y formaron a
cubano Walterio Carbonell, que residía entonces en Europa, asistió a
los futuros profesores, investigadores y traductores, que más tarde
las dos convocatorias.
20

El Caribe en la cultura cubana: un balance de la literatura francoantillana
20. La atribución a Patrick Chamoiseau del exclusivo Premio Goncourt
30. Como se sabe, en 1948, Guillén publicó el segundo de sus grandes
en 1992 por su novela Texaco, aunque no es la primera vez que recae en
poemas elegíacos, «Elegía a Jacques Roumain en el cielo de Haití».
un autor de esa nacionalidad —en 1922 le fue otorgado a René Maran
Cuando lo publica nuevamente (La paloma de vuelo popular. Elegías,
por la novela Batouala, de tema negro, pero que se desarrolla en
Buenos Aires: Losada, 1958), como ocurrió con la «Elegía antillana»
Africa—, abre grandes perspectivas a la producción de otros autores.
(1944) —finalmente identificada solo como «Elegía» en El son entero,
Esperemos que estas expectativas se cumplan, pues en 1958, cuando el
(1947)— su título definitivo fue «Elegía a Jacques Roumain». Ya con
también martiniqueño Edouard Glissant recibió el Premio Renaudot
anterioridad el tema antillano había tenido una significativa presencia
—por su novela La Lézarde—, se concibieron similares esperanzas que
en la obra de Guillén. En el poema homónimo que da título a su libro
no llegaron a hacerse realidad. Es posible que entonces influyeran razones
West Indies Ltd., publicado en 1934, y que marcó el tránsito de Guillén
extraliterarias, principalmente relacionadas con la política francesa
a una poesía donde lo social cobraba una mayor peso que en sus
trazada para sus territorios caribeños. Pero hoy las circunstancias son
cuadernos anteriores, refleja, sin haberlas visitado aún, «la pobreza
otras. La política asimilacionista y el nivel indiscutible alcanzado por la
sustancial de las Antillas, [...] su desamparo económico y político, [...]
producción de los escritores de las más recientes promociones,
su mimetismo con el norteamericano, vecino poderoso». (Roberto
principalmente en Martinica y Guadalupe, permiten prever un desenlace
Fernández Retamar, «Guillén en la poesía contemporánea cubana», en:
diferente.
El son de vuelo popular, La Habana, UNEAC, 1972: 25.) Cuatro años
más tarde, a su regreso de Europa, una breve estancia en Guadalupe,
21. En cuanto a los estudios historiográficos cubanos sobre la región el
donde puede palpar la realidad que había vislumbrado, le inspira un
mérito corresponde a José A. Saco, quien escribió una Historia de la
breve poema que incorporaría en posteriores ediciones de su libro del
esclavitud en las Antillas francesas, obra que permanece inédita, cuyo
34, «Guadalupe W.I.». Prueba de esta «conciencia antillana» —al decir
manuscrito fue hallado en los fondos del archivo Fernando Ortiz. Véase
de Keith Ellis—, mantenida hasta el final de sus días, serán sus poemas
Orestes Gárciga Gárciga, «La Historia de la esclavitud en las Antillas
«Canción puertorriqueña» (La paloma de vuelo popular, 1958), «El
francesas, de José Antonio Saco», Anuario L/L, La Habana, (12-13),
Caribe», y «Tonton macoute» (El gran zoo, 1967).
1981-1982: 152-5.
31. Césaire lo dio a conocer en 1939 en la revista francesa Volontés,
22. José Martí, «Fleurs des mornes», en: Obras completas, La Habana:
poco antes de regresar a Martinica. Allí apareció solo una parte del
Editorial Nacional de Cuba, 1963; t. 5: 466. Es muy probable que Martí
texto. Fue esa la edición con la que trabajó Lydia Cabrera. La segunda
conociera personalmente a Durand, En 1892 y 1893, Martí, en tránsito
edición apareció en París en 1947, prologada por André Breton. La
hacia Santo Domingo para visitar a Gómez, o de regreso, estuvo en
edición de Présence Africaine (París, 1956) es la que puede considerarse
Haití y de allí saldría en 1895 para integrarse a la guerra en Cuba. En
definitiva. En mi opinión, las modificaciones sufridas por el texto en
septiembre-octubre de 1892 permaneció unos diez días en Port-au-Prince
sus sucesivas versiones responden más a la evolución ideológica de
y un año después, en junio de 1993, se instaló algunos días en esa ciudad.
Césaire que a razones de orden estético.
En esa época, Durand era Diputado a la Cámara de Representantes y
posiblemente aún su Presidente, cargo para el que había sido elegido en
32. El libro de Césaire fue la primera obra de estos poetas que alcanzó
1888. Teniendo en cuenta los contactos que Martí sostuvo con el
gran reconocimiento. Con anterioridad, el guayanés Léon Damas había
entonces presidente, Florvil Hyppolite (1889-1896), es muy probable
publicado Pigments (1937). Senghor presentó Chants d’ombre en 1945 y
que se estableciera una relación amistosa entre ambos poetas, como la
Hosties noires en 1948. La publicación por Damas de la antología Poetas
que existió entre Martí y el también escritor y político haitiano Antenor
de expresión francesa (1947), y de la Antología de la poesía negra y malgache
Firmin. Además, Durand patentizó su apoyo a la lucha cubana en su
(1948) seleccionada por Senghor, con el prólogo de Sartre titulado «Orfeo
poema «Aux cubains» («A los cubanos»), en el cual alienta a nuestros
negro», consolidaron la aceptación de esta doctrina literaria.
mambises a no desmayar hasta conseguir la victoria.
33. Aimé Césaire, «Batouc», Orígenes, 2(6), verano, 1945: 22-6.
23. René Depestre, refiriéndose a Durand, expresa: «Hubo en la segunda
mitad del siglo pasado una reacción saludable por parte de un gran
34. Jean F. Brierre, Black soul, La Habana: Lex, 1947.
poeta, Osvaldo (sic) Durand [...]. Por la audacia de su imaginación, es el
padre del lirismo en nuestro país, y ha dejado, tanto en francés como
35. Daniel Arty, «La Revolución cubana y Haití», en Cuba,
en creole, poemas que resisten el tiempo. (René Depestre, «Breve
transformación del hombre, La Habana: Casa de las Américas, 1961:
introducción a la literatura haitiana», en Panorama de la actual literatura
191.
latinoamericana, La Habana: Casa de las Américas, 1969: 242.)
36. René Depestre, Minerai noir, París: Présence Africaine, 1956; Mineral
24. Al revisar la Bio-bibliografía de don Fernando Ortiz, (La Habana:
negro, La Habana: Ediciones R, 1962. Con anterioridad había publicado
Biblioteca Nacional, 1970), puede encontrarse que la primera referencia
Etincelles (Chispas), Port-au-Prince: Imprimerie Nationale, 1945; Gerbes
directa al tema antillano es una breve nota titulada «La muerte de un
de sang (Flores de sangre), Port-au-Prince: Imprimerie Nationale, 1946;
antillanista» (Surco, La Habana, 1(3), octubre, 1930: 12), dedicado al
Végétation de clarté (Vegetación de claridad), París: Pierre Seghers, 1951;
arqueólogo y etnólogo norteamericano Jesse Walter Fewkes. Un año
Traduit du grand large (Traducido de la alta mar), París, Pierre Seghers,
más tarde, Ortiz publica un estudio geográfico titulado «Antillas»
1952.
(Geografía universal, Barcelona: Instituto Gallach, 1931; t. 5: 139-221).
37. Véase René Depestre, Journal d’un animal marin, París: Pierre
25. Este texto fue considerado de inmediato por el crítico y escritor
Seghers, 1964. De los libros publicados por Depestre durante su estancia
surrealista francés Raymond Queneau «uno de los libros más hermosos
en Cuba es en este donde incluye sus mejores poemas de amor.
que nos hayan llegado del Nuevo Continente en los últimos años».
38. René Depestre, Un arcoiris para el occidente cristiano. Poema-misterio-
26. Su visita circunstancial a Guadalupe en 1955 le inspiró otra de sus
vodú, La Habana: Casa de las Américas, 1967. Fue traducido por Heberto
grandes novelas, El siglo de las luces, a cuyos personajes desplaza por
Padilla, pero Roberto Fernández Retamar tradujo el Canto V.
todo el Caribe.
39. ——,
27. Angel Augier,
Cantata de Octubre a la vida y la muerte del Comandante Ernesto
Nicolás Guillén, La Habana: UNEAC, 1971: 218-9.
Che Guevara, La Habana: Instituto del Libro, 1968. La traducción es de
28. Jacques Roumain, «La poesía como arma»,
Max Figueroa Esteva.
Gaceta del Caribe, La
Habana, 1(1), marzo, 1944.
40. Con motivo de la celebración del Congreso Cultural de La Habana
29. Anthony Lespès, «El drama de los escritores haitianos»,
y del noveno Premio Casa de las Américas, el recién fundado Centro
Gaceta del
de Investigaciones Literarias de esa institución efectuó un ciclo de
Caribe, La Habana, 1(9-10), noviembre-diciembre, 1944: 15.
conferencias sobre la literatura latinoamericana. Allí Depestre presentó
20
21

Emilio Hernández Valdés
dos conferencias sobre la literatura del Caribe francófono. Véase «Breve
49. ——, Toussaint Louverture. La Revolución francesa y el problema
introducción a la literatura haitiana»; «Literatura antillana de expresión
colonial, La Habana: Instituto del Libro, 1967.
francesa», en Panorama de la actual literatura latinoamericana, ob. cit.:
241-50; 264-80.
50. ——, Poesías, La Habana, Casa de las Américas, 1969. Con
posterioridad a Ferrements (Herrajes), aparecido en 1961, Césaire no
41. ——, Por la revolución, por la poesía, ob. cit.; Buenos días y adiós a la
volvió a publicar otro libro de poesía hasta que dio a conocer Moi,
negritud, La Habana, Casa de las Américas, 1985.
laminaire... poèmes (París: Editions du Seuil, 1981).
42. René Depestre, El palo ensebado, La Habana: Instituto del Libro,
51. En otro lugar he señalado las deficiencias de esta edición,
1975. La traducción es de Pedro de Arce.
principalmente relacionadas con irregularidades en la traducción del
Cahier...(Emilio Hernández Valdés, «¿Dos traducciones de Cahier d’un
43. Gobernadores del rocío, es la obra francoantillana más difundida en
retour au pays natal? [ponencia]. IV Simposio de Traducción Literaria.
Cuba. Sumadas sus ediciones sobrepasan los ciento veinte mil ejemplares;
La Habana, Unión de Escritores y Artistas de Cuba, 16-17 de abril de
además, ha sido transmitida por radio y llevada al cine por Tomás
1996).
Gutiérrez Alea con el título de Cumbite (1964. Con anterioridad
Roumain había escrito otras obras de ficción que anunciaban al gran
52. Alexis escribió además L’espace d’un cillement (En un abrir y cerrar
novelista que se iba a revelar en Gobernadores del rocío. En su primera
de ojos) (1959), publicada en México en traducción del escritor
juventud escribió dos noveletas que apoyan este criterio: La presa y la
colombiano Jorge Zalamea. En esta novela, aunque su trama se desarrolla
sombra (La proie et l’ombre), (1930) y Los fantoches (Les fantoches) (1931),
en Puerto Príncipe, sus protagonistas son cubanos y Jesús Menéndez es
así como un relato campesino «La montaña embrujada» («La montagne
un personaje referido, un tanto a la manera balzaciana. Su último libro,
ensorcelée) (1931). Dedicado fundamentalmente a la política durante
Romancero aux étoiles (Romancero a las estrellas), publicado en 1960,
los años finales de la ocupación norteamericana, escribe, en colaboración
reúne cinco noveletas que deben mucho a la literatura oral haitiana y a
con Christian Beaulieu, un documento de sumo interés: «Análisis
la mitología de ese país.
esquemático 1932-1934» («L’analyse schématique»), que constituye el
primer ensayo de interpretación marxista de la realidad haitiana, y tiene
53. Fernand Hibbert, Sena, La Habana: Casa de las Américas, 1977.
una significativa concordancia, no solo temporal, sino también de
contenido con un texto fundamental del pensamiento político cubano
54. Paul Laraque, Les armes quotidiennes. Poésies quotidiennes, La Habana:
de la época: «Las contradicciones internas del imperialismo yanki en
Casa de las Américas, 1979. Fue traducido por Nancy Morejón.
Cuba y el alza del movimiento revolucionario», (1933) de Rubén
Martínez Villena.
55. Julio Cortázar, «Discurso en la constitución del Premio Literario
Casa de las Américas 1980», Casa de las Américas, 20(119), marzo-abril,
44. Véase Jacques Roumain, Pedro Mir y Jacques Viau, Poemas de una
1980: 3-8.
isla y dos pueblos, La Habana: Casa de las Américas, 1974: 11-33. Estos
poemas fueron traducidos por el poeta catalán Agustí Bartra, Nicolás
56. Carbet es el nombre de la playa por la que desembarcó Colón cuando
Guillén, Fayad Jamís y Roberto Fernández Retamar, a quien pertenece
descubrió la isla de Martinica en su último viaje a América. La elección
la selección.
del nombre del concurso parece expresar su objetivo: descubrir nuevos
talentos. En su primera edición resultó premiado el narrador de
45. Roberto Fernández Retamar, «Fanon y la América Latina», en:
Martinica Patrick Chamoiseau por su novela Antan d’enfance (1990).
Ensayo de otro mundo, La Habana: Instituto del Libro, 1965: 124.
Autor, junto con el lingüista Jean Bernabé y el novelista Raphaël
Confiant del ensayo Eloge de la créolité (1989), de gran resonancia, al
46. Frantz Fanon, Por la revolución africana. Escritos políticos, La Habana:
igual que sus novelas Chronique des sept misères (1988) y Solibo Magnifique
Edición Revolucionaria, 1966; Piel negra, máscaras blancas, La Habana:
(1991).
Instituto del Libro, 1968.
57. La editorial Arte y Literatura publicó en 1980 su novela La Lézarde
47. Aimé Césaire, «De Lumumba o una temporada en el Congo»; «De
(1958), con el título El lagarto. Es uno de los autores más importantes
Discurso sobre el colonialismo», Casa de las Américas, 6(36-37), mayo-
de Martinica. Poeta, novelista, ensayista, publicó también una obra de
agosto, 1966: 81-90, 154-67. Las traducciones son de Roberto Fernández
teatro que tiene como protagonista a Toussaint Louverture (Monsieur
Retamar y Magaly Muguercia, respectivamente. El estreno mundial de
Toussaint). Autor de otras novelas, como Le quatrième siècle, Malmort,
Lumumba..., se produjo en septiembre de 1967 en el XXVI Festival
y Mahagony.
Internacional de Teatro efectuado en Venecia, dirigida por Jean-Marie
Serrau. En 1969 se estrenó en La Habana, en una puesta de Roberto
58. Casa de las Américas, 31(182), enero-marzo, 1991: 165.
Blanco y la traducción de Nancy Morejón y Juan Larco. Próximamente
el grupo Teatro Popular estrenará en La Habana una nueva versión.
48. Aimé Césaire, «La tragedia del rey Cristóbal», Conjunto, La Habana,
2(4), agosto-septiembre, 1967: 15-62. Véanse en ese mismo número las
opiniones de varios teatristas sobre la polémica puesta en escena de
Nelson Dorr.
©
, 1996.
22

La literatura caribeña al cierre del siglo
no. 6: 23-34, abril-junio, 1996.
La literatura caribeña
al cierre del siglo
Margarita Mateo Palmer
Profesora. Universidad de La Habana.
It is not pressure of the past which torments great
bien el primer contacto cultural Europa-América se
poets, but the weight of the present.
produjo precisamente en el Caribe en 1492, medio
Dereck Walcott
milenio después, paradójicamente, la literatura caribeña,
«The Muse of History»
en tanto sistema regional de valores y direcciones
estéticas, sigue siendo un mundo por descubrir.
El Caribe ha producido, sin la menor duda posible,
Pero en el cierre del siglo XX, el más elemental
una literatura regional marcada por una singular
examen evidencia un importante cambio cuantitativo
complejidad en su orientación y desarrollo, que ha
y cualitativo frente a los primeros tanteos y la
incidido —muy a menudo negativamente— en la
fragmentación cultural observables, digamos, hace un
valoración crítica de sus realizaciones. Entre los factores
siglo. De hecho, la literatura caribeña exhibe
que han marcado la evolución literaria de este espacio
actualmente una madurez y una vitalidad tales, que más
sociocultural hay algunos que mantienen todavía, en esta
parecería obcecación que simple ignorancia o desinterés
última década del siglo XX, un peso importante, que
seguir desconociendo sus realizaciones. Puede resultar
obliga a tenerlos siempre en cuenta. Son, por ejemplo,
asombroso, por ejemplo, para quienes no han estado al
la pluralidad lingüística; la convergencia de diferentes
tanto de la evolución literaria del área, el hecho de que
etnias, y el consiguiente y variadísimo proceso de
el Caribe de colonización inglesa o francesa —para
transculturación; el desfase cronológico en la evolución
excluir, con toda intención, la literatura del Caribe
literaria de las distintas áreas culturales del Caribe, y,
español, que en general ha contado con una mejor
por este y otros factores, la no sincronía del discurso
difusión y recepción críticas— haya recibido varios
literario caribeño; el hecho de la muy escalonada
galardones de los más prestigiados en el mundo
obtención de la independencia política, que se vincula,
intelectual: Dereck Walcott, de Santa Lucía, el Premio
además, con importantes diferencias en las
Nobel; Raphäel Confiant, de Martinica, un Premio
interrelaciones metrópoli-colonia o excolonia. Si a eso
Noviembre de la prensa de París; y Patrick Chamoiseau,
se añaden las limitaciones en cuanto a valoraciones
también de Martinica, el Premio Goncourt 1992.1 Por
histórico-literarias de conjunto, podría decirse que, si
otra parte, no debe olvidarse el hecho poco comentado
23

Margarita Mateo Palmer
En el cierre del siglo XX, el más elemental examen evidencia un
importante cambio cuantitativo y cualitativo frente a los
primeros tanteos y la fragmentación cultural observables,
digamos, hace un siglo. De hecho, la literatura caribeña exhibe
actualmente una madurez y una vitalidad tales, que más
parecería obcecación que simple ignorancia o desinterés seguir
desconociendo sus realizaciones.
de que en los últimos treinta años esta área insular del
una enorme variedad y riqueza cultural. Es por ello que
Caribe ha obtenido en tres ocasiones el Premio Nobel
se impone una selección de esferas, de manera que se
y en dos de ellas ha sido otorgado a intelectuales de la
pueda ensayar consideraciones del mayor peso posible.
pequeña isla de Santa Lucía, cuya población es solo de
Si de lo que se trata es de enfrentar la energía ascendente
alrededor de 130 000 habitantes. Como ha afirmado el
de la región en las décadas señaladas, resulta más
crítico dominicano Pablo A. Maríñez:
elocuente, por paradójico que ello pueda parecer, el
centrar la atención, no en el Caribe de habla española,
Dos Premios Nobel para un mismo país del Caribe en
donde existen literaturas nacionales tiempo ha
apenas algo más que una década, es mérito suficiente como
consolidadas para sí y para el ámbito continental. Por el
para cuestionar los prejuicios eurocentristas que tratan de
negar toda importancia a la región, ni siquiera para que
contrario, la producción literaria de Barbados,
merezca ser estudiada.2
Guadalupe, Surinam, Trinidad y Tobago, Curazao,
Guayana francesa, Santa Lucía, Martinica, Guyana,
Las reflexiones que seguirán a continuación no
etcétera, puede ser un apoyo inestimable en el trazado
aspiran a realizar un balance de exhaustiva valoración
de las coordenadas literarias de los 70 y los 80, sin que
académica. Sentado ya el hecho de que el Caribe ha
ello implique —al menos en los puntos de vista que aquí
venido proyectándose —sobre sí mismo y sobre el
se sustentarán—, que el Caribe de habla hispana esté
mundo— como concierto de voces de suficiente estatura
excluido de los fenómenos que ahora serán comentados
literaria y cultural, conviene asumir una perspectiva
en términos de tónicas generales de la región.
crítica que sea, en su actitud, radicalmente distinta al
Hay que partir de una observación obvia, pero
vacío y desinterés con que se han enfrentado las voces
imprescindible: los 70 y los 80 no constituyen un período
regionales. En efecto, cien años atrás el Caribe no existía
autónomo; antes bien, son el resultado de un largo
como valor literario. Entiéndase: hubo grandes figuras,
proceso evolutivo. Perfilar sus características entraña
bien que poco numerosas; pero no eran vistas en el
tomar en cuenta constantes literarias del resto del siglo
trasfondo de la región sociocultural a que pertenecían,
XX. En el Caribe, durante las décadas precedentes a 1970
sino, todo lo más, enmarcadas rígidamente —y a veces
puede identificarse un rasgo —de actitud artística,
todavía lo son— en el ámbito de sus naciones respectivas.
temático y aun estilístico— dominante en buena parte
Pero en el cierre de este siglo el Caribe existe y una de
de la creación literaria: el problema de la identidad
las modalidades más vitales de esa existencia es la creación
sociocultural, proyectada también sobre el plano
literaria.
individual.4 La presencia sostenida de la identidad, ya
Es verdad que, desde el punto de vista del estudio de
sea como tema, ya como polémica explícita o implícita,
la literatura, no se ha logrado un verdadero enfoque que
respondía no solamente a la voluntad artística de los
abarque la región en sus más claras esencias de
escritores, sino también, desde luego, a una problemática
personalidad, de indagación temática y estilística, de
de hondas, complejas y torturadas raíces histórico-
difusión dinámica entre el artista y su público.3 Sin
sociológicas. Es importante, pues, tener sabido que la
embargo, no sería atinado seguir aguardando la aparición
literatura caribeña, desde muy temprano, concedió vital
de estudios definitivos sobre el decursar de la literatura
importancia a un qué somos, pregunta que se ramificó
caribeña hasta el momento. Se impone, cada vez con
en variantes sutiles: cómo ser, dónde serlo, por qué
más fuerza, la consideración prospectiva acerca de las
medios, con qué finalidad, con quiénes integrar la
direcciones artístico-estilísticas que en esta literatura
búsqueda socio-ontológica de la región. Es en esta línea
—cuya evolución ha sido notablemente acelerada en los
donde se inscribieron, en su día, obras aparentemente
últimos cincuenta años—, vienen cobrando fuerza y
tan disímiles como Banana Bottom (1933), Tuntún de pasa
hacen sentir su impronta desde la década del 60. Así pues,
y grifería (1937), Cahier d’un retour au pays natal (1939),
la proposición que aquí se presenta es la de examinar
Hay un país en el mundo (1949), Compère Général Soleil
siquiera algunas de esas vertientes ya advertibles en la
(1955) o Wide Sargasso Sea (1966), por solo mencionar
fase final del presente siglo.
algunas.
Pero el Caribe, en la relativamente limitada extensión
La primera variación de importancia fundamental
de sus islas —marinas y continentales— se despliega en
que se advierte como tónica en los 70 y los 80 consiste
24

La literatura caribeña al cierre del siglo
en que el tema de la identidad, que sigue siendo de suma
como sustratos importantes de la representación
importancia en la producción literaria de estos años, ya
histórica. En esa ficcionalización se tiende ya a
no se enfoca desde la perspectiva del autodescubrimiento
conformar arquetipos regionales, lo cual representa un
o del reconocimiento —inmediato, deslumbrado,
movimiento definido hacia la aprehensión de una
sorprendido, pero también en ocasiones, agónicamente
esencia que rebase los marcos nacionales en busca de
asumido— de las esencias caribeñas. Por el contrario, en
una mayor universalidad.
la medida en que el creador alcanza, a través de una
A partir de los 70 se produce una indagación más
angustiosa etapa de búsqueda precedente, una mayor
firme en este rumbo. Por una parte, se advierte un
integración de los fragmentos que componen su entorno
mayor interés, no solo por temáticas y problemas de
cultural e histórico, asume arduamente su otredad, ya
alcance más general, sino además, el ámbito mismo de
no para lamentar la diferencia o detenerse estérilmente
la indagación histórica —sus coordenadas espaciales—
ante ella, sino para afirmarse en esa conciencia de que
tiende a expandirse en un movimiento que abarca ahora
se es distinto. De este modo la literatura caribeña de las
las más diversas latitudes. No solo Africa, zona
últimas décadas ha convertido su alteridad en un gesto
tradicionalmente privilegiada por el artista caribeño,
creador y fecundo que se vuelca, enriquecido, hacia el
como se verá más adelante, sino otras regiones de Europa,
universo. Para estas fechas, aunque no todo el camino
Asia, el resto de América Latina o los Estados Unidos,
ha sido andado en profundidad, existe ya una conciencia
pasan a ser el escenario donde se despliega, en muchas
más sosegada y segura de los perfiles propios. En efecto,
ocasiones, el mundo ficcional del escritor.5 Es decir, no
estas dos décadas propician una literatura que está
solo desde el punto de vista de la problemática ideo-
bregando menos con el color local, el costumbrismo,
estética que se debate en los textos, sino también desde
la asunción inmediata del folklore y las peculiaridades
la más elemental perspectiva de su ubicación espacial, la
lingüísticas, y, en fin, con el arsenal pintoresquista que
literatura caribeña de las dos últimas décadas, aun cuando
también utilizó con fuerza la literatura latinoamericana
aparentemente retorna a un plano de mayor
continental en el siglo
particularidad, debido al nivel de concentración del
XIX y en las cuatro primeras
décadas del
plano espacial —en un movimiento que parece
XX. Mas debe advertirse que, en lo esencial,
los escritores no se apartan de sus fuentes culturales; lo
contradictorio con los arquetipos cronotópicos de los
que ocurre es una decantación de superfluidades a nivel
60— alcanza una universalidad mayor a través de esta
temático y estilístico. Pudiera decirse que, en términos
peculiar focalización que amplía sus fronteras.
de composición del discurso, se atenúa el descriptivismo
El escritor jamaicano John Hearne, por ejemplo,
precedente, la organización «sociologizante» de la
cuyo interés por la historia es notable en su amplia obra
materia literaria, de manera que el texto no es organizado
narrativa —«History is the angel with whom all we
Caribbeans Jacobs have to wrestle sooner or later if we
solo con la finalidad de elaborar una modelación literaria
de la identidad, sino que la necesidad de reflejar la
hope for a blessing» [«la historia es el ángel con el cual
identidad propia, no solo coexiste, además dinamiza las
todos los jacobos caribeños, tarde o temprano, tenemos
finalidades artísticas de la obra.
que luchar, si aspiramos a una bendición»], afirmó
decididamente el autor en 19766— abandona en
La indagación en la historia, ya como trasfondo o
The Sure
como arista temática central del mundo representado,
Salvation (1981) el espacio inventado de Cayuna, la isla
que fue escenario de varios de sus textos anteriores, para
fue una de las modalidades que con mayor frecuencia
en un gesto que lo acerca a otra temática reiterada en la
adoptó la búsqueda de identidad en la primera mitad
literatura caribeña —el viaje—, situar la acción a fines
de este siglo. En la medida en que las huellas del pasado
del siglo XIX en un barco inglés que transporta
parecían haber sido borradas por el largo olvido de la
ilegalmente esclavos a América.
sociedad colonial o por un conocimiento histórico que
En una dirección similar a la universalidad de los
respondía a intereses ajenos y aun hostiles, el artista
temas abordados, a través de la indagación histórica se
caribeño volcó su atención sobre aquellos eventos de
mueven las novelas de la guadalupeña Maryse Condé, y
ayer que le permitían asumir más diáfanamente un
en particular, Moi, Tituba, sorcière noire de Salem (1986),
presente en el que las resonancias de la tradición se
un texto en el que la protagonista, una esclava ya
mantenían vivas. Clásicos de la literatura caribeña como
conocida como hechicera en las islas del Caribe, es
El negrero (1933) de Lino Novás Calvo, New Day (1949)
acusada y perseguida por participar en algunos de los
de Vic Reid, o más recientemente, Land of the Living
hechos ocurridos durante la cacería de brujas de Salem
(1961) de John Hearne y Le Quatrième Siècle (1964) de
en 1692.7
Edouard Glissant son momentos importantes de este
No obstante, más significativa —y me animaría a
reconocimiento del devenir histórico que se orienta
afirmar que más representativa como tendencia de las
hacia una imagen abarcadora del mismo.
nuevas búsquedas ideo-estéticas de la región— resulta la
Es precisamente la década del 60 la que permite una
reafirmación, cada vez más perceptible, de aquellas
transición en la que la historia comienza a ser
estrategias en las que la historia se deconstruye para ser
remodelada con más libertad. Los creadores, antes
reconfigurada en una modelación muy especial, donde
detenidos ante el dato histórico —la fecha, el evento, la
se dinamitan las fronteras, ya confundidas en la década
fuente bibliográfica— se orientan hacia una mayor
del 60, entre historia y ficción. Esta tendencia se verifica
ficcionalización, que incorpora el mito y la tradición
a través de la pulsación de un espectro de posibilidades
25

Margarita Mateo Palmer
En la medida en que el creador alcanza, a través de una
angustiosa etapa de búsqueda precedente, una mayor
integración de los fragmentos que componen su entorno
cultural e histórico, asume arduamente su otredad, ya no para
lamentar la diferencia o detenerse estérilmente ante ella, sino
para afirmarse en esa conciencia de que se es distinto.
formales mucho más amplio que, sin duda alguna, se
anecdótica cuyos propios fundamentos tienden a quebrar
integra al conjunto de rasgos que hoy la crítica literaria
las claves tradicionales de la representación histórica.
considera caracterizadores del posmodernismo. Piénsese
En esta novela, cuya técnica narrativa actualizada se
por ejemplo, en procedimientos como la reevaluación
apoya en la fragmentación del texto y en los cambios
de formas no canónicas del discurso, la problematización
del punto de vista, se recrea la sociedad esclavista a partir
de la historia, la recuperación de lo ex-céntrico y lo
de una perspectiva que resulta inesperada y novedosa:
fragmentario, la reivindicación de las voces de los
la dinámica del intercambio sexual en la plantación de
vencidos o la inclinación a la autorreflexión, por solo
Bonavist, un motivo que oblicuamente reproduce la
mencionar algunos rasgos.8
estructura de dominación y poder que predominó en el
Sin embargo, no debe olvidarse que en el Caribe
Caribe del siglo XIX. Al privilegiar una óptica
—un espacio marginal dentro de la marginalidad,
tradicionalmente omitida en la representación de la
periférico en el borde mismo de la periferia y, por así
historia y centrar su atención en hechos aparentemente
decirlo, una de las últimas fronteras de un mundo
intrascendentes —subestimados, considerados no dignos
subalterno— la relación con el devenir histórico a través
de ser registrados por la Historia— Wages Paid propone
del discurso literario siempre ha sido una relación tensa
un modo diferente de recuperar el pasado, a través de
y problematizada, marcada por el cuestionamiento. El
las voces silenciadas, y de estructuras que, como la sexual,
contrapunteo entre la historia oficial y la historia real,
han sido discriminadas por el discurso y las fuentes
aquella cuyo rostro fue desdibujándose en el transcurso
historiográficas.
de un tiempo suspendido en un entorno colonial que
Igualmente en Natives of my Person (1972) George
perdía la memoria, y con ella, la posibilidad de fijar
Lamming había asumido la historia —en este caso la
algunos hechos trascendentes, fue una de las formas
prestigiosa historia de una metrópoli europea
presentes desde los inicios mismos de esta literatura,
colonizadora—, con un desenfado y una ironía notables.
inclinada entonces a la reconstrucción fidedigna de los
Todos estos textos, a los que me he referido muy
hechos históricos, escamoteados o tergiversados por la
rápidamente, parecen responder a una concepción
historiografía oficial. De este modo, no resulta extraño
general de la historia que no desconoce el poder de la
para aquellos que conocen la literatura del área, la
representación en la legitimación de algunas perspectivas
presencia en ella de algunos de los códigos privilegiados
ideológicas, y por ello mismo, no solo tiende a privilegiar
ahora por la posmodernidad, aunque, desde luego, sea
un nuevo conocimiento, contestatario y en pugna con
más notable y artísticamente depurada su resonancia
los intereses coloniales y neocoloniales, sino que, a partir
en las letras de las dos últimas décadas.
de una autoconciencia de la ficcionalidad en la recreación
Aunque, como se ha dicho, no se analizarán aquí
histórica, se mueve con mayor soltura y creatividad en
los textos del Caribe español, no pueden dejar de
el plano estético.
mencionarse brevemente obras como El arpa y la sombra
En Segou, la gran saga histórica sobre el pasado
(1979), la última novela del cubano Alejo Carpentier,
africano, Maryse Condé lleva a cabo una ruptura con el
La biografía difusa de Sombra Castañeda (1980) del
Africa mítica, a la vez que recupera, como una de las
dominicano Marcio Veloz Maggiolo o La noche oscura
coordenadas básicas de la elaboración del texto, algunas
del Niño Avilés (1984) del puertorriqueño Edgardo
formas tradicionales de la narración oral —cantos,
Rodríguez Juliá, en las cuales la presencia de la
leyendas, proverbios— y estructura su mundo ficcional
metaficción historiográfica, el amplio uso de la
sobre antiguas tradiciones, como la creencia en la
intertextualidad y la autorreflexión podrían ilustrar
predestinación, la adivinación del futuro o la presencia
cabalmente esta orientación. En textos como Mère
del espíritu de los muertos en el presente.
Solitude (1983) del haitiano Emille Olivier, quien desde
Una de las formas que adoptó la búsqueda de
fines de la década del 70 había mostrado su interés por
identidad en la literatura caribeña de la primera mitad
la indagación de tema histórico,9 puede advertirse una
de este siglo fue la indagación en las raíces étnicas de los
orientación similar.
pueblos del Caribe y, principalmente, la representación
El narrador James Carnegie, quien también había
de los conflictos del hombre negro, cuya presencia,
incursionado en el ensayo histórico,10 recupera una
amplia y marginada, es un denominador común en el
imagen del pasado jamaicano a través de una elaboración
variadísimo espectro de razas que integran la región.11
26

La literatura caribeña al cierre del siglo
Amplios movimientos de reivindicación de los
(1981) de Maryse Condé, por ejemplo, puede advertirse
descendientes de esclavos africanos y de sus tradiciones
cómo la visión utópica del espacio africano cede paso a
culturales dejaron su huella en la literatura de la primera
una imagen desmitificada de ese continente.
mitad del siglo XX. Trátese de la obra de autores como
La obra de René Depestre, Bonjour et adieu à la
el jamaicano Claude McKay, que se afirma en su lema
négritude (1980) representa un ajuste de cuentas con las
«Black is beautiful», al calor de la lucha ideológica
disímiles tendencias que había promovido en el Caribe
impulsada por el garveísmo; la del martiniqueño René
la búsqueda de reafirmaciones raciales. Este texto sella
Maran, que obtiene con su novela Batouala el Premio
una polémica que, en sus anteriores formulaciones,
Goncourt de 1922; de movimientos más extendidos
parece ya clausurada a partir de los 70: en la medida en
como la escuela indigenista haitiana —que recibe el
que el hombre negro, a través de un arduo período de
legado de las investigaciones de Jean Price-Mars sobre el
luchas anteriores, ha logrado una mayor reafirmación
vodú—; del negrismo, que cuenta en el Caribe de habla
de sí mismo, está en condiciones de abandonar también
hispana con autores de la talla de Luis Palés Matos, Alejo
el lastre que los prejuicios y odios raciales le habían
Carpentier, Manuel del Cabral o Nicolás Guillén; de
impuesto. Depestre, luego de un agudo balance crítico
los poetas de la negritud, entre cuyos gestores se
de los valores y desaciertos de la negritud, proclama una
encuentran el guayanés Léon Damas y el martiniqueño
identidad «panhumana» que permita al hombre caribeño
Aimé Césaire; lo cierto es que en esta diversidad de
proyectarse más allá del estrecho cerco del castillo de su
textos, escritos en distintas lenguas, puede apreciarse un
piel.
mismo afán común: el de reivindicar la imagen del
Es posible advertir, en la obra de este y otros
hombre negro y sus tradiciones como parte integral de
intelectuales caribeños, que las preocupaciones
un Caribe que no puede llegar a realizarse cabalmente
estrictamente raciales tienden a diluirse en líneas de
sin asumir esa importante herencia. No es superfluo
pensamiento más generales que, como la antillanidad,
recordar —pues muy a menudo se olvida este aspecto y
un concepto largamente elaborado por Edouard
se tiende a valorar estos movimientos solamente desde
Glissant,13 la insularidad, que tiene una larga tradición
una perspectiva ideológica— que estas expresiones
regional —recuérdese, por ejemplo, el diálogo de José
literarias implicaron también, desde el punto de vista
Lezama Lima y Juan Ramón Jiménez—14, la creolidad15
estrictamente formal, la incorporación de nuevas técnicas
o la caribeñidad tienden a afianzar una apertura en la
y procedimientos estilísticos que contribuyeron
sensibilidad de la región. Un diapasón más amplio, que
decisivamente al desarrollo de las vanguardias artísticas
se proyecta hacia la síntesis de diversos legados
en la región.
—anunciada ya en «Balada de los dos abuelos» de Nicolás
En la década del 60 la literatura sobre el tema negro
Guillén— va ganando fuerza, como tónica dominante,
mantiene su vigencia. Incluso podría hablarse de una
en el quehacer literario. Es en este sentido que debe
intensificación de esta temática al calor de los
entenderse el rechazo de Dereck Walcott a un pasado
movimientos raciales que tienen lugar, digamos, en los
histórico que deja como herencia «a literature of revenge,
Estados Unidos —Black Power, Black Panthers,
etcétera—, o de la mayor difusión del movimiento
written by the descendant of slaves, and a literature of
Rastafari en Jamaica. Africa continúa siendo una región
remorse, written by the descendants of the master» (una
mítica, añorada, una suerte de espacio abierto a la utopía
literatura de venganza, escrita por los descendientes de
sobre el que algunos artistas vuelcan su mirada. No
los esclavos, y una literatura de remordimiento, escrita
obstante, ya desde entonces, aparecen algunas tendencias
por los descendientes del amo).16
que serán dominantes en las décadas posteriores. Por
Mas es necesario advertir que no se trata del abandono
una parte, el énfasis en el aspecto racial comienza a
de una temática que —en su doble vertiente, estética e
diluirse en una concepción más amplia que abarca a otros
ideológica— mantiene su vigencia en tanto no han
grupos marginados, a la vez que hay un mayor interés
desaparecido las condiciones económico-sociales que la
por incorporar estéticamente la herencia cultural de
originan. Por el contrario, poetas como Christian Rollé17
origen africano. Obras como Other Leopards (1963), del
o Ellie Stephenson18 de Guayana francesa, han sido
guyanés Denis Williams, y más adelante The Children of
considerados, en esta dirección, seguidores de la obra de
Sisyphus (1964), del jamaicano Orlando Patterson, pueden
Léon Damas,19 aunque más inclinados hacia la guyanité
ser consideradas representativas del vuelco que comienza
ya proclamada por el viejo poeta de la negritud. Lasana
a tener lugar en esa orientación a partir del agotamiento
Sekou,20 nacido en Aruba, pero esencialmente vinculado
de una búsqueda, llevada hasta sus máximas
a la isla de San Martín, se acerca reiteradamente en sus
consecuencias en ambos textos.12
obras a la temática negra desde una perspectiva que hurga
Africa, aunque sigue siendo un polo de interés en
en sus tradiciones culturales —música, religiones de
los 70 y los 80, es abordada ahora desde una perspectiva
origen afro (entre ellas el rastafarianismo), ritmos,
que indaga más en su problemática actual, ya sea en las
danzas—, pero a la vez insiste en la búsqueda de una
luchas sociales y políticas, o en los diversos conflictos
identidad regional que también se proyecte hacia
surgidos después de la independencia. En novelas tan
América Latina y la lucha de otros pueblos.
disímiles como A Bend in the River (1979) de V.S.
El martiniqueño Vincent Placoly, autor de La vie et
Naipaul, Un homme en trois morceaux (1975) de Roger
la mort de Marcel Gonstran (1971) y L’eau-de-mort guildive
Dorsinville o Heremakhonon (1976) y Une saison a Rihata
(1973), es considerado un écrivain-charnière que, en estos
27

Margarita Mateo Palmer
Muy vinculado a la temática más general de la identidad aparece
desde muy temprano en la literatura caribeña el tema del exilio,
motivado principalmente por la experiencia, intensa y real, de
la emigración económica, política o de búsqueda intelectual y
artística.
textos, «va en quelque sorte clôturer les élans et les
movimiento de la imaginación. El viaje es reconocer,
dérades de la Négritude. Dans le même temps, et d’une
reconocerse», había afirmado Lezama26—, y acentuó la
certaine manière, il va annoncer, invoquer le
búsqueda de una identidad que se veía amenazada. Tanto
bouillonnement d’émergence d’une autre époque» [«va
la obra de Claude McKay27 —recuérdense los poemas
de algún modo a cerrar los impulsos y las escaramuzas
«The Tropics in New York», «I Shall Return», o el relato
de la negritud. Al mismo tiempo, y de cierto modo, va
«Truant»—, como Cahier d’un retour au pays natal (1939)
a anunciar, a invocar la efervescencia del surgimiento de
de Aimé Césaire —ubicado en el umbral mismo de los
otra época»].21 Más recientemente Dany Laferrière, en
dos planos espaciales contrapuestos—, pueden ser
Comment faire l’amour à un nègre sans se fatiguer (1985),
considerados textos representativos, en sus diversas
con un fuerte apoyo intertextual en autores como Miller
elaboraciones formales, de esa mirada nostálgica sobre
y Bukowski, aborda el problema de las relaciones
la región propia desde la perspectiva de un país ajeno.
sexuales interraciales desde una perspectiva que resulta
En las décadas del 50 y del 60 el tratamiento de esta
polémica.22
problemática se ve impulsado por el exilio, cada vez más
Un ejemplo de la universalidad alcanzada por la
común, de los escritores del área.28 En el quehacer
literatura de la región —que lejos de abandonar las
literario de estos años otros motivos van desplazando la
tradiciones de origen africano, las incorpora a una cultura
añoranza y atenúan el tono nostálgico. Tiende a
universal de la cual también es heredero el hombre
imponerse entonces, sobre esa rememoración, la ardua
caribeño— puede encontrarse en X/Self (1987), de
confrontación con el nuevo contexto, que demanda una
Edward Kamau Brathwaite.23
dinámica de adecuaciones: de pérdidas, pero también de
Muy vinculado a la temática más general de la
hallazgos, aunque estos aún estén privados de una
identidad aparece desde muy temprano en la literatura
perspectiva de futuro. Y es precisamente la ausencia de
caribeña el tema del exilio, motivado principalmente
esa mirada prospectiva la que convierte la literatura de
por la experiencia, intensa y real, de la emigración
estos años en una verdadera literatura del desarraigo,
económica, política o de búsqueda intelectual y artística
situada entre dos aguas.
—realizar estudios superiores, entrar en contacto con
En la literatura de los 70 y los 80 la experiencia de
casas editoriales o grandes centros de cultura, etcétera.
aprendizaje que implica el exilio va conduciendo no
Asociado con el motivo del viaje —pero con aristas ideo-
solamente a un reajuste de valores, sino a una
estéticas peculiares, que se acuñan a partir de las vivencias
metamorfosis ineludible que, poco a poco, pone su
prolongadas en un nuevo espacio—, el exilio ha sido
énfasis en la apertura hacia el nuevo espacio cultural y
expresado de muy variadas formas. Como experiencia
humano. Si la nostalgia, la remembranza de la región
natal, la despedida y el regreso, habían caracterizado esta
de conocimiento, este viajar a tierras extranjeras está
temática en las décadas precedentes, ahora el énfasis recae
vinculado al cronotopo del camino que, a su vez, guarda
en la dinámica de inserción en un nuevo contexto. En la
una estrecha relación con motivos literarios de muy
medida en que el escritor se va integrando al nuevo
antigua tradición, tales como la separación, la huida, el
espacio sociocultural que lo ha acogido, comienza a tener
encuentro, el hallazgo, el descubrimiento, la búsqueda,
lugar un proceso de reajuste de los puntos de referencia
etcétera.24 Estos motivos, que por su naturaleza son
que hasta entonces habían orientado su escritura. Si en
cronotópicos, suelen estar definidos a partir del cambio
las manifestaciones literarias del exilio de las décadas
del eje espacial, que a su vez se concreta en la oposición
anteriores el mundo representado se había modelado
fundamental espacio conocido/espacio desconocido, que
principalmente sobre un centro básico —la patria
es importante en la imagen literaria que se ofrece del
real—, a partir del cual se definían los enfoques, las escalas
exilio.
de valores y los puntos de vista que permitían organizar
En la primera mitad del siglo XX la experiencia de
la visión de países y culturas extrañas, ahora ese centro
los escritores ante un nuevo entorno propició,
comienza a desplazarse hacia un nuevo registro que surge
principalmente, una nueva mirada sobre el espacio ya
de la integración al espacio ajeno.29
conocido y asumido hasta entonces como propio. La
Desde esta perspectiva analiza Jean Joinaissant30 la
nostalgia, la recreación del paisaje añorado, la alienación
novelística de la diáspora haitiana, realizada en cuatro
del destierro, surgida del choque a veces brutal25 con las
centros principales: Africa (Dakar), Canadá (Montreal),
viejas metrópolis, condujo al escritor caribeño a otras
Estados Unidos (Nueva York), y Francia (París). Un
definiciones sobre sí mismo —«El viaje es apenas un
ejemplo de la nueva problemática que enfrentan estos
28

La literatura caribeña al cierre del siglo
escritores es la del narrador Gérard Etienne, quien siente
el créole, y aun aquellos como Pierre Lauffer o Elis
que pertenece tanto a la comunidad haitiana como a la
Juliana, que adoptan el bilingüismo y escriben tanto en
francocanadiense, y acoge en su obra múltiples lenguajes:
papiamento como en holandés. Pero el espectro de
el haitiano y el francés, pero también el québecois, en un
posibilidades es mucho más amplio. Como expresa R.B.
intento por alcanzar al público lector de la comunidad
Le Page, en una afirmación que es igualmente válida para
donde vive actualmente. En su novela Un ambassadeur
el Caribe anglófono:
macoute à Montréal (1979), la sátira, el humor y la
carnavalización —ejes centrales en la elaboración del
The writer in the West Indies today similarly has to
texto— se asientan, en buena medida, sobre esa
decide whether he is going to use dialect consistently
perspectiva
througout his book, or just for parts of it, and whether
otra que surge del desplazamiento de los
he is going to adopt every feature of the dialect or just
puntos de referencia en el nuevo espacio del exilio.
some features in any particular sentence. There is range
Igualmente no parece casual que Marlene Nourbesse
of options open to him.35
Philip en «And Over Every Land and Sea» —primera
parte de su poemario She Tries Her Tongue; Her Silence
(El escritor caribeño de hoy, asimismo, tiene que decidir
si va a utilizar el dialecto consistentemente a través de
Softly Breaks (1988)—, asocie explícitamente la idea de la
todo su libro o si lo empleará solamente en algunas partes
transformación a la búsqueda determinada por el
de este, y si va a incorporar cada rasgo del dialecto o solo
peregrinaje en nuevos territorios. Las referencias al mito
algunas de sus características en una oración particular.
griego de Proserpina, basadas en un directo juego
Hay un amplio rango de opciones que se le ofrecen.)
intertextual con la Metamorfosis de Ovidio, brindan un
sugerente punto de apoyo para la expresión del
De hecho, en la primera mitad del siglo XX estas
sentimiento de pérdida y de identidad amenazada por la
posibilidades fueron tanteadas por los escritores de la
ausencia del país propio, a la vez que alude a la inevitable
región. En un afán por asumir las raíces más populares
transformación del sujeto que participa de esa búsqueda.
de su cultura, con una orientación que no difiere
Según Bajtín «sobre la base de la metamorfosis se crea el
básicamente de las tendencias predominantes en el resto
tipo de representación de la totalidad de la vida humana
de la literatura latinoamericana de entonces, el escritor
en sus momentos cruciales y de crisis más importantes,
caribeño trató de incorporar a su escritura el habla
cuando el hombre se hace diferente».31 Hacia la
coloquial de su nación. Desde el punto de vista
representación de esa diferencia y de la transformación
estilístico este intento condujo, primeramente, a
inevitable del sujeto en un nuevo entorno, se mueven
contradicciones y rupturas en el seno de la propia
las expresiones literarias caribeñas asociadas al exilio,
escritura, que ya han sido ampliamente estudiadas. Es
en los últimos años, sobre todo cuando la permanencia
a partir de los años 50 y 60 —motivada por esa necesidad
fuera del país natal —Cuba, Haití, Puerto Rico, por
de incorporar las lenguas créoles, no como simples
ejemplo— se convierte en una experiencia cotidiana y
trasposiciones directas al texto, sino a partir de una
prolongada indefinidamente.
ardua reelaboración estética de las mismas— que la
Sumamente complejo ha sido, a lo largo de la historia
literatura caribeña tienta un amplio espectro de
de la literatura caribeña, la elección de una lengua que
posibilidades desde el punto de vista formal. Es esta
permita al escritor expresarse en la medida de su vocación
una época de intensa experimentación, que se nutre
e inclinaciones estéticas. No se trata solamente del dilema
ampliamente de los logros de las vanguardias artísticas,
general de todo creador en busca de un lenguaje artístico.
y produce hallazgos de gran importancia, por ejemplo,
En el caso del Caribe, la pluralidad lingüística de una
en la obra de Edouard Glissant. Este autor, a partir de
región donde coexisten diferentes lenguas metropolitanas
los presupuestos de la «poética de la oralidad»
con aquellas que fueron surgiendo del intercambio con
enunciada por él, aprovecha creadoramente las
la palabra del conquistador,32 pone al escritor en contacto
posibilidades lingüísticas de su área para la modelación
con una complejísima problemática que a veces se
de su escritura. En L’intention poétique (1969) el escritor
concreta en el más primario y elemental dilema sobre
martiniqueño establece una clara diferenciación entre
en qué lengua escribir.33 No es superfluo recordar que
lengua y lenguaje, que valida implícitamente las diversas
esta opción está íntimamente vinculada con otros
alternativas que en el plano de la expresión lingüística
problemas de recepción de la obra literaria —el público
pueda hacer el artista, pues es este a quien se considera
al cual va dirigido el texto, la accesibilidad del lector a
el verdadero creador de un lenguaje, más allá de la
una u otra lengua, etcétera—, pero también a la no menos
lengua en que se exprese.
importante cuestión de la universalidad y las
No obstante, todavía en las décadas del 70 y del 80,
potencialidades estéticas de cada lenguaje. Ante esta
se desarrollan intensas polémicas en torno al problema
extraordinaria gama de posibilidades, las preferencias de
de la lengua. Incluso algunos autores, como el mismo
los creadores han sido, desde luego, diversas. Así, hay
Edouard Glissant, se pronuncian contra lo que entonces
escritores como Dereck Walcott o Jacques Stephen
se denominó «el imperialismo lingüístico del creole»:
Alexis que se expresan principalmente en las lenguas de
origen europeo; otros, como Claude McKay o Félix
Si je m’élève contre l’impérialisme créolistique, c’est
precisément au nom d’une disponibilité
Morisseau-Leroy, escribieron tanto en las lenguas
multilinguistique, qui me parait être une des marques
créoles34 como en las metropolitanas; algunos, como
essentielles des civilisations à venir, et oú toutes les langues
Emile Roumer o Louise Bennet, asumen principalmente
et par conséquent, les créoles, auraient loisir de s’exercer.36
29

Margarita Mateo Palmer
[Si yo me pronuncio contra el imperialismo del creole es
sobresalientes de este afán de conciliación de la dicotomía
precisamente en nombre de una disponibilidad
lenguas europeas/lenguas creoles es la fecunda obra de
multilingüística, que parece ser una de las marcas
esenciales de las generaciones por venir, y donde todas
la escritora guadalupeña Simone Schwarz-Bart quien, en
las lenguas y, por consiguiente, los creoles, tendrían la
Pluie et vent sur Télumée Miracle (1972), y más adelante
oportunidad de ejercitarse.]
en Ti-Jean l’horizon (1979) realiza una profunda
renovación en el nivel linguo-estilístico de su escritura,
Debe recordarse que en algunos países como Haití,
al incorporar al francés la originalidad y riqueza propias
estos debates sobre las alternativas lingüísticas de la
del creole.
escritura no pueden desvincularse del llamado «mal
A través de estas nuevas estrategias ante el problema
disglósico», que adopta caracteres particularmente
de la lengua, que no olvidan el diálogo con las tradiciones
dramáticos en una nación donde apenas el 5 % de la
ni el deseo de renovación, van surgiendo nuevas
población habla francés, mientras que el 95 % restante,
expresiones que más allá del modo en que puedan ser
creolófono, no puede leer ni escribir en su lengua
nombradas —literatura en «francés creolizado», en
materna pues no está alfabetizado.37 Esta problemática,
desde luego, genera intensos dilemas de recepción del
«francole» o «freole», o literatura en «spanglish» o en
texto literario que pesan profundamente sobre las
«nuyorican», por ejemplo—, son testimonio de una
elecciones creativas del escritor.
voluntad estética que tiende a la integración de lenguas
No obstante, en los últimos años se advierte, en la
y culturas: a la síntesis y fusión de lo diverso, que es, en
literatura caribeña, una mayor madurez ante la gama de
última instancia, una de las mayores fuentes de
posibilidades, ciertamente compleja, que ofrece la
originalidad de la cultura caribeña, consolidada a partir
pluralidad lingüística. Por una parte, hay escritores que
de intensos y sucesivos procesos de transculturación.
continúan perfilando su propio lenguaje a través del
La presencia de los distintos creoles en la literatura
creole, contribuyendo con ello a la dignidad literaria de
de la región se vincula también a una problemática que
una lengua que sigue siendo subestimada. A esta
cada vez adquiere mayor repercusión: la oralidad, forma
marginación debe añadirse el hecho, no menos
tradicional de expresarse estos pueblos, y construir sus
importante, de que una de las principales vías de difusión
imaginarios culturales. No es casual, por ejemplo, que
de la literatura del área se realiza a través de casas editoras
en el Caribe francófono Ernst Mirville haya acuñado el
europeas, interesadas en mantener determinadas normas
término oraliture, o que en el Caribe anglófono sea ya
lingüísticas. Un ejemplo reciente de la problemática
común la referencia a la orature, denominaciones que se
generada por estos mecanismos de difusión es la
diferencian del concepto tradicional de literatura oral.
experiencia del escritor martiniqueño Patrick
Como expresa el crítico haitiano Maximilien Laroche,
Chamoiseau, quien tuvo que traducir del creole al francés
estos nuevos vocablos no responden a un problema de
cuarenta y siete expresiones de su novela Chronique des
simple terminología, sino a la necesidad de reformular,
sept misères (1988) a instancias de la editora Gallimard.38
desde nuevas perspectivas, las expresiones artísticas
Un acontecimiento de la mayor importancia para la
vinculadas a la oralidad.
literatura en creole tiene lugar en 1975 cuando se publica
No debe perderse de vista que las distintas
la primera novela escrita en lengua haitiana: Dezafi, del
manifestaciones de la oralidad también ofrecen una
narrador Frankétienne. Solo después de casi cien años
amplia gama de posibilidades al escritor desde el punto
de haberse escrito en Haití el primer poema en creole
de vista de su creatividad. Una de las formas que ha
—el difundido texto de Oswald Durand, Choucoune
nutrido fuertemente la literatura caribeña, ha sido la
(1884)— un escritor accede a ese género de madurez que
música, expresión de extraordinaria vigencia y difusión
es la novelística a través de esa lengua. Y no se trata de
en el área. En el Caribe español, por ejemplo, ya Nicolás
un hecho que solamente tenga importancia desde el
Guillén había logrado en Motivos de son una apropiación
punto de vista de la evolución histórico-genética de la
y reelaboración estética de algunas de las características
literatura del área. Por el contrario, Dezafi, más allá del
de este ritmo tradicional cubano en el plano de la
indiscutible mérito que pueda poseer en tanto texto
escritura.40 Más recientemente —piénsese en textos como
fundador de un género en creole, es ante todo una
De dónde son los cantantes (1967) de Severo Sarduy, La
excelente novela que utiliza audazmente técnicas
guaracha del Macho Camacho (1976) o La importancia de
narrativas complejas y actualizadas, a la vez que lleva a
llamarse Daniel Santos (1988) de Luis Rafael Sánchez y
cabo una ardua renovación, desde el punto de vista de
las posibilidades del creole como lengua literaria escrita.39
Solo cenizas hallarás (1980) de Pedro Vergés— se hace
Paralelamente, en el resto del Caribe, continúan las
evidente esa intención de recuperar las fuentes musicales
búsquedas directamente relacionadas con las tesituras
caribeñas, a través de una compleja y ardua elaboración
lingüísticas, en una marcada tendencia a la reconciliación
intertextual sobre géneros y formas diferentes de
de lenguas tantas veces contrapuestas por razones de tipo
expresión artística.
ideológico. De esta difícil batalla que, desde luego, se
Este fenómeno —que es general para toda la
desarrolla básicamente en el nivel de la escritura misma,
región41— se ha desarrollado recientemente con mucha
pero no solo en ese plano, surgen importantes textos
vitalidad en el Caribe anglófono. La gran creatividad
que enriquecen el acervo de posibilidades formales de la
musical de esta área —por ejemplo el reggae o el calypso,
literatura del área. Uno de los ejemplos más
por solo mencionar dos ritmos que han alcanzado una
30

La literatura caribeña al cierre del siglo
mayor difusión internacional— ha tenido una influencia
integran creadoramente a la escritura, son una muestra
directa sobre algunos autores.
representativa de cómo el artista del área incorpora a
En las dos últimas décadas el espectro de posibilidades
su quehacer intelectual las expresiones populares del
formales en que se incursiona a través de la música ha
imaginario colectivo.
extendido su rango. Predomina en estos textos un amplio
De que este no es un fenómeno exclusivo del ámbito
nivel de experimentación, desde el punto de vista
de la poesía dan fe otros textos como The Dragon Can’t
estético, que tiene como base la difuminación de las
Dance (1979), la conocida novela del narrador trinitario
fronteras entre los géneros y entre la «alta» y la «baja»
Earl Lovelace, que recrea toda una tradición carnavalesca
culturas. Expresiones como los Sound Poets de Trinidad
y musical como punto de partida para penetrar el vasto
—Brother Resistance y el grupo Network, por
mundo social de su país. En su obra Lovelace pone en
ejemplo—, o el dub poetry —surgido en Jamaica, pero ya
juego diversos procedimientos vinculados a la tradición
difundido en otras islas—, pueden dar una idea del
popular: el baile de enmascarados, la representación de
extraordinario movimiento de renovación que está
personajes mitológicos en las fiestas, el sentido de
teniendo lugar actualmente en la poesía de la región a
subversión y de «mundo al revés» que permite el
partir de este fecundo contacto con la música popular.
carnaval.
Michael Smith, Abdul Malik, Linton Kwesi Johnson y
En general, los escritores caribeños de los 70 y los 80
otros dub poets han explorado ampliamente las
han continuado recreando en su escritura la fuerte
posibilidades de obtener un apoyo peculiar para su
tradición mitológica característica del área, a través de
poesía en algunas sonoridades musicales, a través de un
muy disímiles modalidades. En décadas anteriores la
gesto —muy cercano a los deejay performers—, que
incorporación del mito al texto literario se tradujo en
remeda viejas tradiciones afrocaribeñas. Que la vocación
verdaderas adquisiciones estéticas en obras como
por la palabra es el afán principal de estos artistas se
Compère Général Soleil (1955), Palace of the Peacock (1960)
advierte claramente cuando Linton Kwesi Johnson —el
o Paradiso (1966). No es casual, de otro lado, que aparte
poeta que acuña el término dub poetry— expresa en una
del papel privilegiado que, en sus textos, concedieron al
entrevista:
plano mítico dos escritores caribeños —Alejo Carpentier
y Jacques Stephen Alexis— igualmente llevaran a cabo
if I am performing in a musical context [...] I always do a
una teorización acerca de nuevos métodos de
couple of poems, two or three poems always, without
configuración artística donde la recreación mitológica
musical accompaniment, to remind my audience that that
y el elemento maravilloso desempeñaban un papel
is what I am about: poetry. [...] I think people should
importantísimo.44 Como continuadores de esta
remember that poetry is much wider than dub poetry.
tradición, los escritores de las últimas décadas integran
To talk dub poetry alone or to call yourself a dub poet is
a limitation [...] I think when asked how would you
a sus textos, con toda naturalidad, algunas de las muestras
describe yourself you should say that you are a poet [...]42
y procedimientos propios de una visión mágico-religiosa
del mundo, que aún mantiene una inusitada vigencia.
[si yo estoy haciendo un performance en un contexto
No obstante, si en años anteriores era necesario legitimar
musical [...], siempre hago un par de poemas, dos o tres
estos esfuerzos haciendo explícita la poética que los
poemas siempre, sin acompañamiento de música, para
recordarle a mi auditorio que eso es justamente lo que yo
sustentaba, en la actualidad el escritor maneja con mayor
hago: poesía [...] Yo creo que la gente debe recordar que
confianza estos elementos, cada vez más difundidos y
la poesía es mucho más amplia que el dub poetry. Hablar
reivindicados como parte importante de su cultura. Este
del dub poetry o llamarte a tí mismo dub poet es una
último proceso de difusión abarca también al receptor
limitación [...] Yo creo que lo que uno debe responder
de la obra literaria, lo cual permite al escritor prescindir
cuando le preguntan cómo se describiría a sí mismo, es
afirmar que uno es un poeta...]
de algunas referencias que antes contribuían a la
legibilidad del texto, e influye notablemente en el
Un ejemplo de la depurada elaboración estética que
desenfado con que estos elementos son manejados en la
es posible alcanzar a partir de los diversos contactos
actualidad. A su vez, la mayor familiaridad —del lector
entre música y poesía puede hallarse en Man to Pan
y el artista— con manifestaciones que habían sido
(1982), del guyanés John Agard, un texto concebido para
severamente reprimidas, contribuye a la liberación del
ser ejecutado directamente ante el público. A partir de
signo mítico, antes subordinado a un referente más
una poderosa imagen central que alude a la unidad y
restringido y ahora utilizado, cada vez más
diversidad de los pueblos del Caribe —las islas como
frecuentemente, en función de nuevas significaciones, e
fragmentos del pan del steelband—, se modelan otras
insertado muchas veces en una peculiar dinámica de
metáforas. Las asociaciones que se establecen a través
desmitificación.45 Esta última tendencia, si bien no había
de los atributos de algunos orishas como Shangó y
sido ajena a la literatura anterior, se perfila con mayor
nitidez en las últimas décadas y está integrada a una
Oggún —el rayo, el hierro; «and the only gun/ah
orientación más general de la escritura a la difuminación
carrying/is O/gun/dream of iron/on new ground» [«y
del aura y la desacralización de algunos mitos
la única pistola/ que estoy cargando/ es O/ gun/ sueño
contemporáneos.
de hierro/ en una nueva tierra»]43—; la presencia de
Como se ha tratado de ir mostrando hasta ahora, los
Anancy —el hombre araña, figura del trickster
70 y los 80, aunque no son períodos autónomos, sino
caribeño—; los diversos ritmos y lenguajes que se
que responden a un complejo proceso evolutivo
31

Margarita Mateo Palmer
La pluralidad lingüística de una región donde coexisten
diferentes lenguas metropolitanas con aquellas que fueron
surgiendo del intercambio con la palabra del conquistador, pone
al escritor en contacto con una complejísima problemática que
a veces se concreta en el más primario y elemental dilema sobre
en qué lengua escribir.
imposible de obviar, presentan una especificidad que,
otras esferas culturales y sociales que tradicionalmente
en más de un sentido, los distingue claramente del
han recabado la atención del artista caribeño. Las nuevas
quehacer literario anterior. Si bien la literatura caribeña
estrategias de estos textos —que de hecho implican una
de las décadas precedentes había dado muestras
recuperación de las voces ex-céntricas— van dirigidas,
importantes de una calidad estética que se iba haciendo
en última instancia, contra un sistema de poder que ha
cada vez más extendida entre los escritores del área, ya
legitimado ciertos tipos de representación, a la vez que
la indiscutible madurez de muchos de los textos
subestima otros.
publicados en las últimas décadas —cuyo valor sobresale
Entre las voces que se han hecho sentir en los últimos
no solo en el ámbito regional o continental, sino en
años pueden ser mencionadas, entre otras, Erna Brodber,
esferas más amplias de confrontación literaria— es un
(Jamaica), Jamaica Kincaid (Antigua), Zee Edgell (Belice),
testimonio convincente de la fuerza y originalidad de
Pamela Mordecai (Jamaica), Myriam Viera (Guadalupe),
esta literatura.
Jacqueline Manicom (Guadalupe), Liliane Dévieux
En estos años, escritores cuya obra ya había alcanzado
(Haití), Marie Chauvet (Haití), Astrid Kroemer
un reconocimiento anterior —Martin Carter, Wilson
(Surinam), Nidia Ecury (Aruba), Jocelyne Clemencia
Harris, V.S. Naipaul, Dereck Walcot, Jan Carew,
(Curazao) y otras.
Edward Brathwaite, Edouard Glissant, René Depestre,
Paralelamente, en los 70 y los 80 se advierte una
Jean Métellus, Paul Laraque, Anthony Phelps, Robin
mayor madurez ante el hecho artístico, un mayor oficio
Dobrú, entre otros— han continuado su labor de
y decantación estética: algunas expresiones que habían
creación, en la mayor parte de los casos a través de una
tenido un peso desmesurado se equilibran y hallan cauces
línea ascendente y sumamente fecunda. Por otra parte,
artísticamente más depurados para su expresión. No se
un nutrido grupo de escritores se ha sumado con una
trata, sin embargo, de que algunas de las orientaciones
creciente fuerza al quehacer literario del área. Algunos
básicas de la literatura regional —su vocación social, por
de ellos, como Mervyn Morris, Dennis Scott, Garth St.
ejemplo— hayan perdido vigencia. Por el contrario, una
Omor, Alfred Melon, Simone Schwarz-Bart, Michael
comprensión más cabal y lúcida del entorno colonial o
Slory, aunque ya eran conocidos en años anteriores,
neocolonial —surgida de la sostenida confrontación con
realizan su obra principal en las últimas décadas. Otros,
los graves problemas sociales y políticos del área— parece
como Kendel Hippolyte, Lorna Goodison, John Robert
regir soterradamente la más serena expresión de estas
Lee, David Dabydeen, Maryse Condé, Henri Corbin,
inquietudes en el texto literario. Un ejemplo de ello es
Raphaël Confiant, Jean Bernabé, Patrick Chamoiseau,
el modo en que han sido tratados, como tónica general,
Jean Claude Charles o Ernest Pépin, irrumpen
los problemas raciales: expandiendo su resonancia hacia
repentinamente en el panorama literario reciente.
otras manifestaciones de desigualdad social, que
El surgimiento de una importante literatura escrita
trascienden el color de la piel y abarcan otros sectores,
por mujeres es otro de los fenómenos que se advierte
últimamente con mayor nitidez. Como se ha podido
para reclamar un ideal de justicia y delinear un
apreciar aquí, no es posible estudiar la literatura caribeña
humanismo más completo y esencial.
actual sin tomar en consideración textos que, más allá
La realización de una nueva poética, madura,
de la marca genérica que pueda distinguirlos, sobresalen
multifacética, que en muchos casos ya venía
por su propio valor estético y su universalidad. No
anunciándose desde antes, es otro de los rasgos que se
obstante, sería injusto dejar de mencionar que una de
advierte con más claridad cuando se lanza una mirada
las líneas que se perfilan con fuerza en las últimas décadas
abarcadora sobre el quehacer literario más reciente.
es la de una escritura femenina que denuncia las falsas
Algunos de los dilemas que debía enfrentar el escritor
hegemonías y tiende a socavar —a partir de entronizar
para la realización de su obra —y no solo dilemas, incluso
como sujeto de la representación voces tradicionalmente
serios obstáculos, como los analizados en torno a la
subordinadas—, los códigos literarios que responden a
lengua—, se han venido sorteando, y además es posible
una estructura de poder patriarcal, centrada en lo
afirmar que en el enfrentamiento audaz y creativo a la
masculino. Esta perspectiva, sin embargo, no se
compleja problemática cultural de la región, ha hallado
circunscribe únicamente al problema de lo femenino,
la literatura caribeña de las dos últimas décadas una de
sino que —como había sucedido anteriormente con la
las mayores fuentes de originalidad y riqueza que la
excelente escritura de Jean Rhys—, se proyecta hacia
caracterizan actualmente.
32

La literatura caribeña al cierre del siglo
Sumamente amplio es el espectro de posibilidades
significado de la identidad cultural», Unión, La Habana, (8), octubre-
formales que se han venido tanteando a través de una
diciembre, 1989.
búsqueda que, lejos de desconocer las tradiciones
5. No debe olvidarse que a ello ha contribuido decisivamente la
esenciales de los pueblos del Caribe, las integra
experiencia del exilio.
eficazmente a su escritura. Trátese de los paradigmas
propios de la oralidad, de ritmos y gestualidades
6. John Hearne: Carifesta Forum: An Anthology of Twenty Caribbean
Voices, Kingston: Institute of Jamaica, 1976: vii.
expandidos por la música o la danza, de los mitos de
orishas desangrados de amor y de celos, o de esa larga
7. En esta novela Maryse Condé parte de la verdadera historia de este
vocación para la parodia, la burla camuflada y mordaz
singular personaje, tomada de los archivos del condado de Essex.
Sumamente interesante resulta el análisis de esta obra desde el punto de
del original, la simulación o el encubrimiento tras la
vista de la triple subalternidad (clase, raza, género) de la protagonista.
mascarada y el carnaval de un mundo que siempre ha
(Nara Araújo, «La otra bruja de Salem», Revolución y Cultura, La
parecido estar al revés; lo cierto es que la literatura
Habana, (6), noviembre-diciembre, 1992.
caribeña, en su largo devenir, ha venido integrando
8. Linda Hutcheon, The Politic of posmodernism, Londres/Nueva York:
fecundamente a su quehacer las resonancias de una
Routledge, 1989.
tradición viva, que hoy constituye una de sus más
preciosas fuentes de originalidad. Como se ha podido
9. Recuérdese, por ejemplo, su ensayo Haiti, quel développement (1975),
escrito en colaboración con Charles Manigat y Claude Mose, o su novela,
apreciar aquí, muy diversa ha sido la respuesta de los
Paysage de l’aveugle (1977), de tema histórico.
escritores a estos retos y motivaciones, tan diversa y
abigarrada como la propia cultura de una de las regiones
10. James Carnegie, Some Aspects of Jamaica’s Politics. 1918-1938,
del mundo donde más intenso ha sido el proceso de
Kingston: Institute of Jamaica, 1973.
transculturación.
11. Entre los grupos étnicos más sobresalientes del área pueden
Cabría preguntarse, por último, hasta qué punto la
identificarse blancos, negros, aborígenes, indios, chinos, javaneses, y
perspectiva crítico-valorativa que ha primado en este
desde luego, mestizos de los más variados tipos y procedencias. En la
literatura caribeña también se ha hecho sentir la presencia de estos grupos
acercamiento a la literatura caribeña de los 70 y los 80
aunque en menor medida.
responde aún, en alguna medida, a las coordenadas que
en el plano de la exégesis fue modelando una praxis
12. En el Caribe francófono este proceso es más demorado, ya que, a
literaria anterior. De cualquier modo, el ajuste de cuentas
pesar de haber sido enunciada en el período de entreguerras, no es hasta
la década del 60 que la negritud alcanza mayor difusión al calor de los
con viejos tópicos y modalidades de la literatura regional
movimientos africanos de liberación. Sobre esta temática se publican
—que, en muchos casos, mantienen su vigencia bajo
durante esta década, entre otros: Balles d’or (1961) de Guy Tirolien; A
formas y apariencias diferentes—, es una de las tantas
seuil d’un nouveau cri (1963) de Bertène Juminer; Les nègres servent
d’exemple (1964) y Le Monde tel qu’il est (1967) de Salvat Etchard, por
maneras de acercarse a lo nuevo a través del necesario
no mencionar la obra, más conocida, de Aimé Césaire en estos años.
deslinde de un pasado que, sin embargo, también está
Véase Patrick Chamoiseau y Raphaël Confiant, «Le miroir noir brisé»,
contenido en el presente.
Lettres créoles. Tracées antillaises et continentales de la littérature 1635-
1975, París: Hatier, 1991.
13. Edouard Glissant, Le discours antillais, París, Editions du Seuil, 1981.
Notas
14. José Lezama Lima, «Coloquio con Juan Ramón Jiménez», en
1. Pedro Ureñarib, «Hijos de la violación y el miedo reinventaron el
Analecta del reloj, La Habana: Orígenes, 1953: 40-61. Es interesante
francés», El Gallo Ilustrado, México, D.F.: domingo 6 de diciembre de
advertir cómo en estos momentos el poeta cubano considera que «las
1992.
exigencias de una sensibilidad insular no tienen tangencias posibles con
una solución de mestizaje artístico» y rechaza la poesía «cuyo principal
hallazgo ha sido la incorporación de la sensibilidad negra y más
2. Pablo Maríñez, «Piel negra, máscara blanca», El Gallo Ilustrado.
frecuentemente la incorporación del vocablo onomatopéyico».
3. Se han venido dando pasos de importancia para alcanzar una
15. Raphaël Confiant y Patrick Chamoiseau (en colaboración con Jean
ponderación integradora, tanto desde el punto de vista literario como
Bernabé), Eloge de la créolité, Gallimard/Presses Universitaires Créoles,
histórico-cultural, entre otros: Henry Bangou, «Ensayo de definición
1989.
de las culturas caribeñas», Anales del Caribe, La Habana, (1), 1981: 234-
46; Ileana Rodríguez y Marc Zimmerman, eds., Process of Unity in
16. Dereck Walcott, «The Muse of History», Carifesta, 11.
Caribbean Society, Minnesota, 1983; Ana Pizarro, «La noción de la
literatura latinoamericana y del Caribe como problema historiográfico»;
17. Le Négoce, París: Ed. Saint-Germain-des-Près, 1975 o Saignote ma
y Angel Rama, «Algunas sugerencias para una aventura intelectual de
vie, París: Debresse, 1982.
integración», ambos en La literatura latinoamericana como proceso,
Buenos Aires: 1985; Edward Brathwaite: Roots La Habana, 1986; y
18. Une flèche pour le pays à l’encan, París: P.J. Oswald, 1975.
Emilio Jorge Rodríguez, Literatura caribeña. Bojeo y cuaderno de bitácora,
La Habana, 1989.
19. Maryse Condé, La poésie antillaise, Nancy: Fernand Nathan, 1977.
4. Sobre este concepto pueden consultarse, entre otros: Fernando Ainsa,
20. For the Mighty Gods, 1982; Marrons Lives; for Granadian Freedom
«Universalidad de la identidad cultural latinoamericana», en Culturas,
Fighters, 1983; o Born Here, 1986.
diálogo entre los pueblos, París: 1986; Jacques Lafaye, «¿Identidad literaria
o alteridad cultural?»; y Raúl Dorra, «Identidad y literatura. Notas para
21. Patrick Chamoiseau y Raphaël Confiant, Lettres créoles. Tracés
un examen crítico», ambos en Identidad cultural de Iberoamérica en su
antillaises et continentales de la littérature. 1635-1975, París: Hatier, 1991:
literatura, Madrid: 1986; Nara Araújo, «Apuntes sobre el valor y
153-4.
33

Margarita Mateo Palmer
22. Maximilien Laroche, «Dany Laferrière: Comment faire l’amour à un
descolonizadora era utilizando la lengua del oprimido, el créole, y por
nègre sans se fatiguer», Anales del Caribe, La Habana, (7-8), 1987-1988:
ello reclamaban a los escritores esa presencia en su obra. Si bien es
436-43.
cierto que algunas de estas tendencias se basaron en posiciones extremas
y poco flexibles en torno a un problema tan delicado como el lenguaje
23. Edward Kamau Brathwaite, X/Self (Oxford-New York, Oxford
del artista, no es menos cierto que hubo una subestimación bastante
University Press, 1987). Este es el último libro de una trilogía iniciada
generalizada de las lenguas créoles. Un caso ilustrativo de este rechazo
con Mother Poem (1977) y Sun Poem (1982).
es el de Louise Bennet, cuya obra permaneció inédita durante años y
solo a finales de la década del 60 comenzó a ser oficialmente aceptada.
Mervyn Morris, «The Dialect Poetry of Louise Bennet», en Edward
24. Mijail M. Bajtín, «Formas del tiempo y del cronotopo en la novela
Baugh, Critics on Caribbean Literature, Londres: George Allen and
(ensayos sobre poética histórica)», en Problemas literarios y estéticos, La
Unwin, 1978.
Habana: Editorial de Arte y Literatura, 1986.
34. En este trabajo se utilizará la denominación genérica de créole/créoles
25. Recuérdese, por ejemplo, las experiencias narradas por Frantz Fanon
para hacer referencia a las diversas lenguas surgidas en el Caribe a partir
en Peau noire. Masques blancs, 1952.
del proceso de transculturación iniciado con la dominación europea.
26. José Lezama Lima, Recopilación de textos sobre José Lezama Lima, La
35. R.B. Le Page, «Dialect in West Indian Literature», en Edward Baugh,
Habana: Casa de las Américas, 1970: 30.
Critics on Caribbean Literature, ob. cit.
27. No debe olvidarse que, según Kenneth Ramchand, McKay «fue el
36. Edouard Glissant, «Entrevista al Consejo de Redacción de CARE»
primer novelista negro del Caribe anglófono y el primero de los
exiliados; aunque la dirección escogida por los últimos escritores
en Silvia García-Sierra, «La problemática “lingüística” en la literatura
emigrados fue Inglaterra y no los Estados Unidos, McKay fue el primero
del Caribe», Temas [primera época], La Habana, (20), 1990:145.
de una larga fila». Kenneth Ramchand, The West Indian Novel and Its
Background, Londres: Faber and Faber, 1970: 241.
37. Jean Bernabé, Fondal Natal, París: L’Harmattan, 1983.
28. A partir de la Segunda Guerra Mundial, tanto en el Caribe anglófono
38. Silvia García-Sierra, ob. cit.: 129-56.
como en otras áreas —por ejemplo, Puerto Rico— se produce un boom
migratorio que dejará sus huellas en la literatura.
39. Patrick Chamoiseau y Raphaël Confiant, 173-82.
29. Este fenómeno, desde luego, es particularmente notable entre los
40. Cintio Vitier, «Hallazgo del son», en Recopilación de textos sobre
escritores que pertenecen a una segunda o tercera generación de
Nicolás Guillén, La Habana: Casa de las Américas, 1974: 147-58.
emigrados. Un caso especialmente interesante es el de la literatura
puertorriqueña en los Estados Unidos, que ha sido objeto de diversas
41. Para el estudio de esta problemática en el Caribe francófono puede
aproximaciones y muestras. Véanse entre otros, Alfredo Matilla e Iván
consultarse «Musique, Dance, Réligion», en Maximilien Laroche, La
Silén, eds., The Puerto Rican Poets/los poetas puertorriqueños, Nueva York:
double scène.
Bantam Books, 1972; Efraín Barradas y Rafael Rodríguez, eds., Herejes
y mitificadores: muestra de la poesía puertorriqueña en los Estados Unidos,
42. Esta entrevista fue publicada en Jamaica Journal: «Linton Kwesi
Río Piedras: Ediciones Huracán, 1980; Miguel Algaraín y Miguel Piñero,
Johnson Interviewed by Mervyn Morrys». No puedo proporcionar
eds., Nuyorican Poetry: An Anthology of Puerto Rican Words and Feelings,
más datos bibliográficos por no tener al alcance esa serie de revistas.
Nueva York: Willian Morrow, 1975; Nina Menéndez, «En-clave
cultural: la comunidad puertorriqueña en los Estados Unidos y su
43. John Agard, Man to Pan, La Habana: Casa de las Américas,
expresión poética», Anales del Caribe, La Habana, (3), 1983:187-228.
1982: 62. Aquí el autor crea un juego de sentidos entre la palabra inglesa
gun (pistola) y Oggún, deidad guerrera, dueña del hierro.
30. Jean Joinaissant, Le Pouvoir des mots, les maux du pouvoir. Des
romanciers haïtiens de l’exil, París/Montréal: Ed. de l’Arcantère/Les
44. Me refiero a la teoría de lo «real maravilloso», formulada por Alejo
Presses de l’Université de Montréal, 1986.
Carpentier en 1949, y al «realismo maravilloso», fundamentado por
Jacques Stephen Alexis en la ponencia presentada al Congreso de
31. Mijail Bajtín, ob. cit.: 305.
Escritores y Artistas Negros de 1956.
32. El créole en el Caribe francófono, el dialect o nation language
45. Maximilien Laroche ha estudiado este proceso en relación con el
—como le denomina Edward Brathwaite— en el Caribe de habla inglesa,
zombi, un mito de amplia significación en la cultura haitiana, a través
o el sranantongo y el papiamento en el Caribe holandés. Debe advertirse,
del análisis comparatístico del texto «Mó vivan» (1978) de Fritz
por otra parte, que hay zonas de una extrema pluralidad lingüística,
Champagne. Maximilien Laroche, L’Avènement de la littérature haïtienne,
como Surinam, donde se hablan actualmente dieciséis lenguas. Esta
Québec: GRELCA, 1987.
complejísima problemática ha llevado al surgimiento de una literatura
multilingüe en países tan pequeños como Curazao; para no hablar de la
problemática literaria del bilingüismo en zonas como Puerto Rico, o
de la disglosia en países como Haití, donde hay críticos que consideran
la existencia de dos literaturas diferentes, una en créole (o lengua haitiana)
y otra en francés.
33. No debe olvidarse que hubo quienes consideraron que el único
modo de afirmar una identidad nacional y mantener una postura
©
, 1996.
34

Plástica del Caribe actual: encuentros y desencuentros
no. 6: 35-39, abril-junio, 1996.
Plástica del Caribe actual:
encuentros
y desencuentros
Yolanda Wood
Profesora. Universidad de La Habana.
El siglo XX se abrió paso en el Caribe con un signo: el pero siempre, de un modo u otro, presentes. De tal
de la autorreflexividad y la autodefinición, en una
manera que, en una visión histórica retrospectiva, los
evidente voluntad desalienadora que ha significado
encuentros sucesivos de las culturas participantes en
asumir el sentido de lo propio en su condición de
nuestro devenir social revelan el modo en que se
diferente a lo metropolitano, en un proceso más o menos
producen también, en simultaneidad, sucesivos procesos
profundo de autopenetración para, en la larga historia
de desencuentros. En ellos ha intervenido el tipo de
de encuentros y desencuentros, avanzar hacia el
relaciones comunicativas creadas por las condiciones
reencuentro con la personalidad cultural caribeña.
coloniales.
La secuencia de acontecimientos históricos en el
Los diversos tiempos históricos encontrados en la
Caribe fue generadora de un proceso de mestizaje
sincronía natural-real y la dominación colonial,
cultural, no solo en el plano etno-racial sino también
generaron la incomunicación y la incomprensión
temporal-social. Las diversas culturas que se mezclarían
—también el menosprecio— ante expresiones culturales
en el crisol de la región, vivían en tiempos históricamente
y artísticas que, por desconocidas o subestimadas,
diferenciados y las condiciones coloniales las colocaron
quedaron desvalorizadas por los sistemas orientadores
en relaciones de polarización social, tendientes a la
de la norma axiológica. Del mismo modo, en la dirección
desvirtuación de sus propias características históricas
opuesta, los sistemas hegemónicos fueron validados
originales. El primer planteamiento reconoce que en
como permanentes e inmutables.
nuestra condición integrativa y transcultural se
Esos tiempos en simultaneidad y convergencia —a la
mezclaron distintos tipos de cultura con diferentes
manera de decir de Alejo Carpentier— que coexisten en
niveles de desarrollo histórico-social, sometidos a
nuestra realidad son, ellos mismos, generadores de
procesos deculturativos que fragmentaron e hicieron
marcos de visualidad de una gran diversidad iconográfica,
discontinuas las cadenas culturales originales.
que se presentan ante el creador como un universo de
Ninguna de esas cadenas se reprodujo íntegramente
imágenes que convive con él en su inmediatez o en su
en el Caribe y todas han participado en la definición de
memoria, y que participa de diverso modo en sus
nuestra identidad cultural, en proporciones diversas,
operaciones de modelación artística.
3 4
3 5

Yolanda Wood
Los diversos tiempos históricos encontrados en la sincronía
natural-real y la dominación colonial, generaron la
incomunicación y la incomprensión —también el menosprecio—
ante expresiones culturales y artísticas que, por desconocidas
o subestimadas, quedaron desvalorizadas por los sistemas
orientadores de la norma axiológica.
Así, en el arte del Caribe se produjo primero la
procesos de simulación—, suele mostrar en el Caribe
asunción, para su quiebra después, del modelo
dos modos de comportamiento en el análisis visual: la
paradigmático original europeo. En el proceso de
abstracción y la figuración, dos grandes modos de ver el
apropiación y reproducción esto pareció una especie de
mundo en imágenes que denotan, en gran medida, la
camino necesario para integrarse a la expresión del arte
inutilidad de aplicar clasificaciones estilísticas precisas.
autónomo. Con los desfases característicos generados por
En ocasiones se distingue el predominio de una
la condición colonial, y de manera asincrónica en el
tendencia, dado esencialmente no por la definición de
Caribe, estos modelos intervinieron en la activación de
sus postulados estéticos, sino por filiaciones formales o
un concepto de arte y un tipo de recepción que no fueron
conceptuales que nunca se rigen por los estatutos
homogéneos en la región, pues al iniciarse el siglo XX no
artísticos de manera sistémica.
todos los países habían alcanzado un nivel de desarrollo
Por el contrario, determinados modos de hacer han
similar en lo artístico.
resultado clasificados, apriorística o exteriormente, con
Con las apuntadas disimilitudes en un momento
manifiestas expresiones reduccionistas de su
inicial, hacia la segunda mitad del siglo XX, y en particular
condicionalidad real, como ha ocurrido en el caso de la
desde los años 60, se observa una mayor fuerza y
pintura popular haitiana.
coherencia del proceso plástico regional. La tónica que
El artista opera con una gran heterodoxia en la
engarza sus propósitos es la penetración indagatoria en
selección de sus enunciados artísticos, lo cual lo libera
nuestra mismidad y la versatilidad liberadora ante los
de ataduras formales; aunque en ese trayecto selectivo
textos icónicos cargados con el peso de la autoridad
se verifiquen preferencias que, sin embargo, no pueden
histórica o con su evocación centrista. De ello ha
resultar modelos clasificatorios.
resultado una práctica de descentramiento, pues en la
En esa posibilidad de activar con libertad electiva e
propia voluntad del reencuentro estaba implícita una
indiscriminada los textos visuales de los denominados
acción liberadora, toda vez que implicaba una intención
centros emisores, el Caribe recompone su propia historia
intelectual y consciente de relectura de la propia historia,
original y la recupera en imágenes alusivas a ese arsenal
observada ahora en un doble sentido de introspección-
de posibilidades expresivas, que funciona más como
retrospección.
campo de indagación que como proveedor de motivos.
El artista, en el Caribe reciente, ha transitado, en la
La tradición aborigen constituye en nuestros países un
conformación de su imagen visual, por varios procesos
ingrediente referativo más, pero no el que distingue
mezclados discursivamente de distinta manera. En ello
esencialmente su personalidad cultural. Por eso participa
ha influido su propia formación profesional, los altibajos
y se integra al universo visual contemporáneo por
de la circulación y el consumo —cuando entren en juego
intenciones sociocomunicativas del creador, pues su
como factor estimulador-desestimulador—, el papel de
verificación en la inmediatez y cotidianidad es limitada,
la crítica en su rol orientador-desorientador y sobre todo
así como la persistencia de sus formas de vida y
una voluntad indagatoria para establecer nuevos engarces
pensamiento original.
y nexos históricos con el contexto original. La plástica
La tradición visual africana lega, sin embargo, una
caribeña no revela en su diacronía contemporánea
perspectiva de otra escala y dimensión. Siendo los
filiaciones estilísticas definidas. Su campo de
africanos participantes activos de nuestro proceso social,
posibilidades expresivas y vías de experimentación se
sus expresiones visuales no siempre tuvieron la misma
ha desligado intensamente de los recursos tradicionales
suerte. La acción deculturadora de los colonizadores no
e incursiona en nuevas versiones integrativas de formas
permitió la continuidad de muchas de sus formas
y medios. La proliferación y mezcla de tendencias en el
escultóricas y pictóricas; sí persistieron con mayor
ámbito del arte internacional y la ampliación de sus
intensidad sus leyendas, mitos y ritos vinculados a
circuitos de circulación pública con el desarrollo de los
deidades de los panteones africanos, mediante los cultos
medios masivos, han propiciado una extensión e
sincréticos transculturados en tierras del Caribe.
intensificación de la diversidad en el proceso plástico
A estos referentes se añaden los oriundos de otras
caribeño.
zonas de influencia, como la India y China, y lo que
Esta libertad en el uso de los estilos internacionales
resulta esencial: el color local, que también deja una
—donde no han faltado en ocasiones la parodia y los
sensible huella en la plástica caribeña. De tal modo que
3 6

Plástica del Caribe actual: encuentros y desencuentros
La operatoria discursiva de la plástica caribeña en los últimos
años anuncia su capacidad para actuar en la orientación de los
redescubrimientos y para catalizar la perspectiva de los
encuentros y desencuentros de nuestro devenir histórico en su
interpretación sincrética y transcultural.
paisaje, hombre y ambiente, inquietudes sociales y
proyectos interdisciplinarios en los que el artista plástico
conflictos raciales, participan en el andamiaje
interviene para desarrollar un trabajo en equipo con la
estructurador del texto artístico, a partir de una
participación de otras especialidades afines. La
multiplicidad de recursos que denotan una capacidad
experiencia serigráfica ha constituido una vía de gran
regeneradora de los sistemas visuales de que se sirve el
utilidad para dinamizar la obra de arte, así como la
artista, de acuerdo con sus intenciones estético-artísticas.
incursión de los artistas plásticos en el diseño gráfico.
La plástica del Caribe en los últimos años supera cada
Como en otros espacios, en el proceso de
vez más, aunque quizás no lo suficiente, la escala y los
construcción de la imagen la plástica reciente del Caribe
formatos tradicionales del arte. La propia persistencia
opera por integración y síntesis, y al hacerlo reelabora
de los modelos europeos derivó hacia una permanencia
los referentes a partir de una lectura crítica en la cual la
de determinados géneros en la pintura, asociados a
poética histórica se asume disociativamente para
funciones contemplativas o de servicio a determinados
integrarse en una autodefinición del arte, a partir de la
sectores sociales, en su función decorativista o
subjetividad del artista. De ahí la disimilitud en el Caribe
apologética.
de las poéticas sobre un estatuto de modernidad-
La plástica no solo superó el estatuto artístico que
identidad que resulta cohesionador de su sensibilidad
sustentaba la condición de validez perdurable de esos
plástica.
géneros artísticos, sino que, además, ha regenerado su
Pero ese propio estatuto predispone la búsqueda,
sentido en nuevas interpretaciones y reelaboraciones que,
pues una realidad múltiple y compleja como la caribeña,
si bien hacen persistir el enunciado retórico de su peso
solo parece poder penetrarse a partir de convenciones
histórico o su representación formal, han implicado una
culturales que por su valor sígnico funcionan más como
nueva perspectiva de lectura que de hecho coloca al
unidades de sentido que como verificación de
artista en una propuesta indagatoria, crítica en ese
contenidos. De ahí la importancia sintagmática en las
sentido.
operaciones discursivas; de ahí la propia capacidad de la
Lo más interesante resulta de la apropiación libre de
imagen de funcionar por imbricaciones en la sintaxis
esos recursos, y del modo de integrarlos en una obra
textual. Cuando la pintura, en las primeras décadas de
reivindicadora de la personalidad cultural caribeña. En
este siglo, pretendió penetrar en nuestro entorno y lo
ese sentido me parece esencial el espacio de este campo
hizo mediante relaciones asociativas simples,
exploratorio en el proceso de la enseñanza del arte, donde
cumpliendo una especie de ciclo imagen-idea-objeto, el
se afina la mirada y se desenvuelve el oficio. El desarrollo
efecto de composición en el espacio pictórico resultó
y ampliación de esta esfera del arte en la región,
convencional y poco convincente, aunque reconozcamos
constituye una de las más preciadas urgencias. Observar
que se trató de un momento esencial y hasta necesario
el entorno y saberse valer, con libertad, de los medios
en la diacronía del proceso plástico caribeño para
para expresarse, hace más intenso el camino de la
alcanzar sus rasgos de madurez actual.
autopenetración. En ello pueden intervenir desde los
El referente real limitó en ocasiones la capacidad
recursos naturales más diversos hasta los medios técnicos
funcional de la obra para revelar la condicionalidad
más sofisticados; aunque la propia trascendencia de
integrativa de la personalidad cultural caribeña. No
nuestra historia, pasada y actual, la tradición artesanal y
bastaba ser modernos, no bastaba asumir temas de la
manual —no necesariamente primitivista o naif—,
inmediatez para colocarse en las coordenadas del arte
verifican una presencia cualificadora de nuestra plástica
deseado. Para penetrar la realidad del Caribe se necesitaba
más reciente como tendencia.
algo más, una voluntad de penetración al objeto y su
Se hace necesario, cada vez con mayor intensidad,
apropiación por procesos más intelectuales, más
extender los márgenes de consumo de la obra e insertarla
sintéticos que descriptivos. Esto colocó al artista ante
en contextos de más amplias posibilidades de difundirla
un nuevo problema: su preparación conceptual para
socialmente, a partir de procesos de reproducción
componer el discurso, su conocimiento de nuestra
múltiple, medios de comunicación masiva, soportes
realidad.
educativos o de una visualización más abierta, que
Las condiciones históricas en que se desenvuelve la
sobrepasen los marcos de las galerías, para integrarse en
plástica del Caribe reciente no han permitido al arte
proyectos ambientales o muralistas. Ello se demuestra
evadirse de sus circunstancias. En su manipulación de
en la experiencia, en ocasiones tan interesante, de
estos elementos, el artista tiene en sus manos la historia
3 6
3 7

Yolanda Wood
La plástica no solo superó el estatuto artístico que sustentaba
la condición de validez perdurable de esos géneros artísticos,
sino que, además, ha regenerado su sentido en nuevas
interpretaciones y reelaboraciones que, si bien hacen persistir
el enunciado retórico de su peso histórico o su representación
formal, han implicado una nueva perspectiva de lectura que de
hecho coloca al artista en una propuesta indagatoria, crítica
en ese sentido.
pasada y presente, pero historia al fin. La conciencia de
La operatoria discursiva de la plástica caribeña en
que esa es también su propia historia resulta el factor
los últimos años anuncia su capacidad para actuar en
esencial en el modo de comportamiento textual y es en
la orientación de los redescubrimientos y para catalizar
esta dirección donde se verifica la tendencia más
la perspectiva de los encuentros y desencuentros de
interesante del momento.
nuestro devenir histórico en su interpretación sincrética
El modo de operar en este campo se orienta hacia la
y transcultural. Con sus instrumentos operacionales
historicidad del propio concepto de identidad, que no
el artista caribeño ha logrado elevar la capacidad
resulta una esencia inmutable, sustancialista, ontológica;
funcional del texto visual en relación con el sistema de
sino un proceso cambiante, vinculado a los propios
la cultura, y al resultar actuante su obra en este sentido,
mecanismos de metabolismo cultural. Con estas
se amplían extraordinariamente sus capacidades
indagaciones penetran en la plástica las perspectivas
denotativas y connotativas, sobre todo cuando su vía
antropológicas y etnológicas, para establecer una nueva
de apropiación es sígnica-simbólica.
relación dialógica del creador con la cultura.
Ello es la revelación de un camino transitado que
Ese autorreconocimiento étnico se elabora por los
admite una línea de continuidad y permanencia, en los
más diversos caminos formales y sin simplismos
extensos márgenes de unidad y diversidad del Caribe
facilistas cuando se indaga con profundidad y el proceso
contemporáneo. Pierre Gaudibert, refiriéndose al arte
de autopercepción persigue un fin descontaminante.
africano, señala cinco facetas de lo que llama el «reto
Para ello resulta imprescindible el conocimiento del
africano a la colonización». La última de ellas, después
medio, de los contextos. Alcanzar al hombre en su
de transitar por el dominio técnico, el rechazo, la
realidad significa distinguir una vivencialidad. Al
reconquista y la creación, es la de «dar a conocer», poner
respecto decía Luis Camnitzer que «un arte de
en evidencia los resultados de su producción artística
resistencia, por lo tanto, no es más que un texto ubicado
con sus aciertos y desaciertos.2
en nuestro propio contexto, nutriéndolo y
En su caso, la plástica del Caribe adquiere su
fortaleciéndolo». Y comentaba al respecto que ello
momento de mayor coherencia precisamente en los
significaba el rompimiento con una manera de actuación
años en que los centros emisores comienzan a referir
de la hegemonía que «opera dentro de contextos
el agotamiento de la modernidad y el ordenamiento
unificados», por lo que «toda resistencia a la hegemonía
del pensamiento posmoderno, con sus claves de nueva
se tiene que basar en el rescate del contexto propio».1
sensibilidad. Ello puede significar un nuevo desfase si
Al penetrar en el contexto, el artista comienza a
pretendemos entrar en el juego. Los presupuestos
dirigir un tráfico constante de metáforas, según palabras
posmodernos parecen comenzar a indicar una nueva
de Ticio Escobar. En ellas se descubren la matrices de
variación de sentido para el arte. Como en otras
la identidad cultural y el archivo de la propia sociedad.
oportunidades, sabremos emplear una vez más los
En ese comportamiento, el artista enfrenta una doble
prefijos para refuncionalizar, redescubrir y
reinterpretar a nuestra manera. Cada artista entonces
complejidad relacionada con la memoria y la actualidad.
construirá su modo personal de operar, con lo que
Con la primera se penetra en los mensajes ancestrales
nuevamente la diversidad marcará con su sello el
de codificación visual diversa, por haber intervenido
devenir de nuestras artes plásticas. La unidad,
en ellos procesos combinatorios que, en su devenir
contrapartida infatigable de todo lo diverso, resultará
histórico, pueden derivar hacia modelos iconográficos
de la comprensión no de un estilo, no de un modo de
transculturados y mestizos. En su propio contexto
hacer; sino de una operatoria discursiva en la que se
significante ese arsenal verifica su función como
descubre un rasgo de originalidad inmanente y una
contenedor infinito de variables referenciales.
voluntad modernizadora.
Las condiciones sociales epocales, la inmediatez y
Participamos de un mundo que parece
la trascendentalidad de la historia cotidiana emergen con
hipotéticamente común, pero que, en verdad, es
fuerza decisiva, así como los complejos momentos de
históricamente diferenciado dentro del mismo espacio
nuestras sociedades en sus propios conflictos.
humano que habitamos; de lo que resulta su
3 8

Plástica del Caribe actual: encuentros y desencuentros
compartimentación en zonas también diferenciadas a
de los problemas. Años también de victorias comunes
las que convencionalmente denominamos con rangos
como la de Playa Girón y de glorias compartidas como
ordinales (Primer mundo, Tercer mundo) o también por
el triunfo de la Revolución cubana.
razón de cardinalidad (Norte, Sur).
Con nuestra producción artística será necesario
En una nueva lectura, los centros emisores hablan
desarrollar un intenso programa. Se requiere conocer la
de descentramiento, lo que parece indicar una especie
plástica caribeña, divulgarla más ampliamente y
de perspectiva para las denominadas periferias. En el
estudiarla con mayor sistematicidad. Los centros, en
Caribe, coincide un proceso orgánico y coherente en
realidad, no están dando cabida a las periferias, porque
sus artes plásticas, con esa orientación de las teorías
solo lo fueron como categoría ordenadora del centro en
posmodernas, y lo mismo ocurre en otras latitudes del
cuestiones de arte. Al desvalorizar nuestras producciones
Sur. La meditación del centro no es la causa, sino el
auténticas y nuestros modos discursivos, tergiversarlos
efecto de una circunstancia que marcaba una nueva
o convertirlos en productos exóticos de mercados y
confrontación a partir del modo en que resaltaban las
aeropuertos, se desvalorizó un potencial que no dejaron
propias diferencias. De ellas, en mayor o menor grado
de integrar y valorar Nicolás Guillén, Jacques Stephen
fueron conscientes los intelectuales y artistas de la región,
Alexis, Aimé Césaire, Edna Manley, Alejo Carpentier,
quienes las han expresado —en distintos niveles— en su
Wifredo Lam, entre otros.
producción artística desde hace más de cincuenta años,
El mundo actual sigue ordenado por los centros de
cuando nuestra realidad comenzó a protagonizarse, en
poder, de modo que se desenvuelve dentro de los
la plástica, con un reordenamiento crítico de los
márgenes de las disyuntivas hegemónicas. De ahí la
presupuestos formales de la modernidad. Al hacerlo los
enorme significación de la Bienal de Pintura del Caribe
artistas asumieron con desenfado el reto: «las parodias y
y Centroamérica inaugurada en 1992 en la República
los reciclajes como estrategias descolonizadoras», según
Dominicana, así como también de la Bienal de La
Nelly Richard.3
Habana, el Carib Art en Curazao, la Bienal de Grabado
El Caribe comenzó tempranamente los procesos de
de San Juan de Puerto Rico y el Festival de Artes Plásticas
revertimiento, de desobediencia a la normativa que, por
de Guadalupe, al intentar significar el valor de nuestra
demás, satisfacía los intereses de un sector dominante y
producción artística en su propio contexto, evaluarla
actuante socialmente. El modelo tuvo un momento de
con él, y contribuir a dinamizar los sistemas de
mimesis inicial, pero —como parte de los procesos de
circulación y divulgación de la obra de arte en el Caribe
autoconciencia— la búsqueda de la originalidad comenzó
y en el mundo.
a actuar alternativamente con la marca culturológica de
nuestra personalidad. En ello desempeñaron un papel
esencial la procedencia de los artistas, su filiación a
Notas
determinados sectores sociales, el compromiso del
movimiento intelectual con las ideas de renovación y
1. Luis Camnitzer, «El arte, la política y el mal de ojo», en Dominación
cambio, y el modo en que se revalorizó la cultura popular
cultural y alternativas ante la colonización, La Habana: IV Bienal de La
como ingrediente esencial de nuestra formación nacional.
Habana, 1991: 4.
En el Caribe contemporáneo este proceso se
desenvuelve simultáneamente con los movimientos
2. Paul Gaudibert, «El reto africano a la colonización», ob. cit.: 19.
sociales por la reivindicación política del negro y sus
derechos en las sociedades aún coloniales, en los marcos
3. Nelly Richard, «Periferias culturales y descentramiento», ob. cit.: 7.
de la agudización de una crisis económica de la que no
logramos salir, y de la aglutinación de fuerzas por la
autodeterminación. Son años de desafío al colonialismo
y de descolonización, que han hecho más aguda la visión
©
, 1996.
3 8
3 9

Mayra Pastrana y Rufo Caballero
no. 6: 40-48, abril-junio, 1996.
Cine caribeño,
una utopía tan paradójica
como inspirada
Mayra Pastrana
Profesora y crítica de cine. Centro Provincial del Cine de Ciudad de La Habana.
Rufo Caballero
Crítico de cine. Miembro del Consejo Editorial de Temas.
En la impresionante película antillana Ava y Gabriel, afrocaribeño, a diferencia del credo que profesa el
una historia de amor (Félix de Rooy, Curazao, 1989),
hombre de algunas culturas prehispánicas del
una preciosa mulata, maestra de escuela, es seleccionada
subcontinente, las figuras son imágenes de dioses y no
por cierto artista local para servir de modelo a la pintura
los dioses mismos; esto es que, con todo, el afrocaribeño
de la Virgen María que habría de iluminar la iglesia Santa
no pierde de vista el carácter icónico de la imagen en el
Ana de Surinam. Una vez concluido el modelaje, la vida
sentido representacional, adquirido a partir de la
de la mulata se verá definitivamente desordenada,
preeminencia en estas sociedades del proceso de
porque en lo sucesivo, el pueblo, que aparentemente
nombramiento y señalización. Es así que la indexación
no puede distinguir entre la santa y su «referente
llega a prevalecer sobre la continencia misma o la
modélico», la adorará, le rogará milagros, la convertirá
descripción de atributos analógicos, lo cual se explica
en fetiche, en un talismán.
para más de un estudioso en los principios de la
La crítica del área —valdría decir, la críptica—, de
iconoclastia africana, en que la imagen adopta un
común tan entusiasta con la visibilidad del iceberg, ha
carácter virtual y lo decisivo está entonces en la palabra,
insistido en el costumbrismo folklorista, las calidades
que al indexar y conferir un nombre, aporta asimismo
fotográficas o lo bien urdido del argumento de Ava y
un sentido, fragua una realidad.1 Ava será adorada como
Gabriel, pero ha soslayado las densas revelaciones
santa porque ella fue aludida como la Virgen, y no
socioculturales de la película, que pudieran
importa tanto si de un modo temporal o de préstamo
perfectamente ejemplarizar la consistencia a que ha
instrumental.
arribado el exiguo cine caribeño y el modo cada vez
Así, Ava y Gabriel participa con madurez de una
más profundo en que dialoga con su realidad.
medular reflexión sobre las complejas y múltiples
Desde los años 60, los más avanzados estudios
transferencias entre el referente, el modelo y otras
culturológicos vienen insistiendo en que para el feligrés
mediaciones, y la concreción icónica en medio de una
dinámica virtualidad que caracteriza a la axiología
litúrgica afrocaribeña, para la cual el realismo reviste
Este ensayo, hasta hoy inédito, recibió en 1995 el Premio de la crítica
cinematográfica cubana «Eduardo López Morales in Memoriam».
un profundo alcance conceptual que puede llegar a
40

Cine caribeño, una utopía tan paradójica como inspirada
permitirse la transferencia interna de sus medios de
inmensa mayoría de obras que a lo sumo sirven como
expresión o representación.
experiencias de comunicación o vivenciación estética.
De ese modo vista, la película deviene el pináculo
Por supuesto que la jerarquía de lo estético sobre lo
de una cinematografía que, aunque desigual y
artístico en el espacio Caribe obedece a otras muchas
fragmentaria —o a ratos inexistente—, no ha dejado de
razones, entre ellas la inexorable contextualidad ritual
producir obras de altísima elaboración estética que sin
de la experiencia cultural o la cierta iconoclastia heredada
embargo no cuentan con los estudios necesarios, en
con el legado africano. Pero el principio común y
tanto críticos y teóricos suelen impresionarse con las
desacralizado de lo artístico en pos de una experiencia
dificultades geográficas y etnoculturales del área —no
estética que puede contenerlo, pero que en cualquier
pocas ciertamente. Pero de seguir postergando la
caso lo trasciende, nos conduce a reparar en las analogías
meditación seria y abarcadora sobre el cine y la cultura
entre el comportamiento del diseño sociocultural
del Caribe, vamos a sucumbir a la falacia de que nuestros
caribeño y las especificidades del cine, respaldadas
pueblos son tan «prelógicos» que el mareo de las mulatas
además por el hecho de que en el cine, si bien no se
y los cocoteros nos sustrae del más mínimo intento de
puede renunciar a la objetivación o a los
pensamiento racional.
condicionamientos materiales del soporte, a menudo el
Antes bien, y tomando como motivación el desafío
acto de recepción valoriza mucho más la
en que nos deja pensando Ava y Gabriel, ¿determinados
referenciabilidad del argumento, el «embrujo» de la
perfiles de la cultura caribeña no son acaso curiosamente
historia, las coordenadas del relato que los principios
proclives a la discursividad cinematográfica?, ¿no podría
de su articulación en la pantalla, lo cual viene dado
atisbarse la correspondencia —extraña pero
también por la celeridad con que se suceden las acciones
enjundiosa—, entre la morfología canónica del cine y el
a los efectos de la percepción de un receptor medio. De
diseño de la lógica sociocultural caribeña en más de un
esta manera, el común de los mortales se apropia de las
rubro?, ¿el cine en el Caribe no será acaso la posibilidad
películas con un sentido pragmático vital en el que el
—antes escurridiza— de conciliar virtualidad y realidad?
referente llega a importar tanto o más que las
Y tal convergencia idónea, ¿no sería la mayor sorpresa
elaboraciones personales a que es sometido. A la salida
que pudiera regalarse el cine en ocasión de su centenario?
del cine, la valoración ejercida suele tener el carácter de
Nacido con el siglo, el cine podría venir —entre otras
«no me gustó porque la muchacha no se queda con el
cosas— a legitimar la expresión de culturas erróneamente
muchacho», a diferencia de los mecanismos de
tenidas hasta ayer como periféricas, adolescentes
apreciación de una pintura, por ejemplo, aun por parte
e irracionales.
de un receptor ingenuo que, como mínimo, si no se
referirá a la perspectiva sí ponderará «lo bonito del
color». Ello es que, mientras ante otras artes el receptor
El cine y el Caribe: una proclividad en el
—aun de modo subconsciente— no pierde de vista lo
sendero de los caminos que se entrecruzan
definitorio de la convención artística —un poco sabiendo
que no de otra forma es posible la existencia misma de
De inicio, se observa como una paridad sospechosa
la manifestación—, el cine suele ser recibido en cambio,
entre la naturaleza sociocultural del gesto y el objeto
con mucho más arreglo a los ideales de la vida y las
estético en el Caribe, y la decidida remisión del discurso
expectativas de comportamiento del perceptor, por
audiovisual al acontecer consuetudinario y los rituales
aquello de que la narración de una historia funciona
del hombre común. En los contextos caribeños lo
como otro fragmento de vida, contado con la naturalidad
estético predomina sobre lo artístico, lo espiritual sobre
o las elipsis de la vida misma. Es por ello que a menudo
lo material, la vivencia y la experiencia por sobre la
el cine se vivencia como una experiencia estética donde
objetivación definitiva; y, por paradójico que parezca
lo artístico no desaparece del todo en la modelación del
al caso, la condición del cine, bien apreciada, no se
argumento, pero es recibido por el espectador de una
distancia mucho de tales correlaciones. Así, por ejemplo,
manera, si se quiere, subliminal.
la mediación industrial, la estrategia de producción y
Si el cine llega a ser una mitología cultural que endiosa
las condicionantes de la recepción impiden que el
a sus artífices —básicamente a sus intérpretes— y se
discurso fílmico se consagre a una protagónica
ritualiza en su dinámica, el Caribe lo es por naturaleza,
artisticidad, al punto de que muchos teóricos hablan
sin necesidad de una industria de la cultura. Por otro
hoy del cine como de una experiencia estética
lado, así como el cine constituye un idioma universal
enriquecedora que no incluye necesariamente en su
—según la esencialidad humanista de sus argumentos—,
naturaleza la cualidad de lo artístico exclusivo. Al
las disímiles transculturaciones caribeñas redundan en
contrario: en la medida en que el cine no siempre se
una cultura inclusiva y abierta, resultado de las diversas
proponga ser arte, podrá consolidarse como
colonizaciones, fluctuaciones migratorias, alteraciones
manifestación estética; y en la medida en que la industria
de la composición demográfica, superposición de
estandarice un lenguaje, serán menos, pero más
tiempos históricos y fuentes culturales muy variopintas.
inspiradas, las obras maestras. La excepción existe
Pero sin apartarnos del idioma y la lengua, se aprecia
porque existe la regla, y muchos clásicos del cine lo son
—o más bien se precisa— una convergencia menos
en tanto subvierten la gramática establecida por una
especulativa: el cine, junto a otros medios como la
40
41

Mayra Pastrana y Rufo Caballero
televisión o el video, tiende a ser idóneo en el contexto
los intervalos y la cadencia del tempo en el cine, así mismo
de unas sociedades con tasas considerables de
el Caribe parece existir, entre otras muchas portentosas
analfabetismo, en las cuales el acceso a la comunicación
cosas, para ser contado por el cine.
audiovisual suele ser el principal canal de conocimiento.
Pulsando otras equivalencias de interés, tenemos que
la contextualización ritual de la experiencia estética en
¿Cine caribeño o cine en el Caribe?
el Caribe, donde se desdibuja la autonomía de la imagen,
Presunciones y denuestos
de hecho debe potenciar una cierta proclividad al carácter
narrativo del cine, cuya morfología opera como una
Si ya lo es para la plástica o la literatura, el problema
metaimagen de muy escasos sintagmas autónomos: por
de una definición certera se hará especialmente sensible
lo general, la estructura fílmica se define más por el
a los efectos de la noción de un cine caribeño, por razones
diálogo enfebrecido de los sintagmas entre sí (montaje)
obvias. Para recordar polémicas recientes, pudiéramos
y de ellos con los ideales y modelos vitales que les
evocar los famosos cinco requisitos que hacia 1982
sobrepone el receptor (nociones de verosimilitud,
demandó el realizador guadalupeño Christian Lara,
realismo, transparencia, evasión, tropología, etc.), que
quien en una interesante y controvertida entrevista
por la independencia autotélica de la imagen y su
propusiera que una película podría considerarse caribeña
discursividad en planos, secuencias o unidades mayores.
en la medida que lo fueran su director, el asunto, la actriz
Más aún, el arte en el Caribe tiende a no desprenderse
o el intérprete principal y la producción, y siempre que
de eso que James Clifford llama «el aura de la producción
usara el creole.5 No muy distantes se colocan los
cultural» y que determina una preeminencia de lo
requerimientos planteados por Keith Q. Warner, a la
genérico en menoscabo de la individualidad, que no es
luz de los cuales un filme sería aceptado como caribeño
anulada sino «abstraída». Clifford ha reparado en que la
si lo fuera la mayoría del personal que en él interviene
pintura «primitiva» haitiana es valorada, más que como
(ya no solo el director o los protagonistas), la producción
el trabajo de artistas individuales, como pintura
y otros rubros tan subjetivos como la «concepción,
realización y gusto».6 Incluso la misma Euzhan Palcy
de haitianos. La pintura haitiana está rodeada por
asociaciones especiales con la tierra del vodú, la magia y la
—virtualmente tan lúcida en torno a los procesos
negritud. Aunque artistas específicos han llegado a ser
culturales del área— a menudo se ha mostrado fatalista a
conocidos y premiados, el aura de la producción «cultural»
fuer de exigente: para ella, puede hablarse de cineastas
los acompaña mucho más que, digamos, a Picasso, que no
caribeños pero no de cine caribeño, en tanto es demasiada
es valorado de ninguna manera esencial como un «artista
español».2
la dependencia de las metrópolis para la producción,
posproducción y distribución de las obras. Euzhan Palcy
No sería ocioso percibir que, paralelamente, el cine,
llega a ser francamente determinista y reductora cuando
en su protagónica condición de mass media, asola la
ironiza con la posibilidad lógica de que algún extranjero
individualidad, la dificulta y la absorbe, la evita o la
quiera hacer cine sobre el Caribe:
anula. No por gusto el cine serio, aspirante a la
dimensión artística, acomete la ilusión de la autoría, una
nunca podrán hacerlo como nosotros, así que déjenlos que
estrategia reactiva contra la medianía del «cine de género»
traten. ¿Por qué no? Podrán sentir como nosotros, mas no
hacerlo como nosotros. Un blanco no hubiera podido
y las homogeneizaciones del encargo industrial. Y este
realizar Rue Cases-Nègres [una de sus valiosas películas, del
punto reviste un particular interés a nuestros fines, no
año 1983]; no hubiera llegado a la gente igualmente porque
solo porque incrementa este preámbulo lúdicro
hay ciertos aspectos de la cultura, los no verbales, que solo
—irónicamente paradójico— sobre las posibles
personas de esa cultura pueden entender.7
equivalencias de un medio y otro, sino porque nos
adelanta un rasgo hasta hoy distintivo del cine en el
Unos y otros reduccionismos excluyentes han sido
Caribe: la subordinación del principio de la autoría a la
—por fortuna— muy pronto contradichos por
ambición de lo genérico; pero no ya por la virtual
importantes artistas y teóricos de la zona. Alan Ménil y
carencia de poéticas personales, sino, en muchos casos,
Daniel Boukman refutan la peregrina idea de los cinco
incluso por el elemental desinterés ante el crédito.3 En
requisitos, tomando como muestra la propia producción
su momento veremos la explicación racional de por qué
de Christian Lara, cuyas películas «de Caribe en el
la autoría se hace muy difícil y tampoco interese mucho;
Caribe» son sin embargo tremendamente limitadas en
sin embargo, desde ya habría que aclarar que, estén
su «caribeñidad», por cuanto padecen su afán imitativo,
conscientes ellos o no, se les respete o no como tales, el
su exotismo externo y simplificador y «subvierten
cine del Caribe cuenta hoy con verdaderos autores;
inconscientemente sus pretensiones militantes».8 Para
contados, excepcionales, pero muy intensos autores.4
estos autores otras obras filmadas fuera del Caribe y por
Por último —de momento—, en este seductor asunto
no caribeños, hacen mucha más justicia a nuestra
de las afinidades, valdría subrayar que así como en la
condición.
santería o el vodú el sonido y la acción corporal
Es evidente que aquellos reclamos son insostenibles.
conducen a un cinetismo sonoro de peculiar relieve, o
Barroco y Latino bar, dos piezas del mexicano Paul Leduc
así como en todo el ritual la danza, la música y el canto
—no precisamente caribeño— que deben su motivación
coadyuvan a una idea de ritmo no precisamente ajena a
y parte sustancial de su excelencia a las recreaciones de
42

Cine caribeño, una utopía tan paradójica como inspirada
los perfiles culturales del Caribe, tendrían que
se está haciendo una película, todo debe lucir brillante y
considerarse ajenas. El criterio de pertenencia debe
perfecto. He tratado de usar la presencia de la naturaleza,
animales gritando y otros sonidos naturales que quedan
operar de un modo abierto, porque el espacio Caribe
intactos porque todos forman parte de la vida allí. Si estoy
sería hoy impensable sin la integración, digamos, de sus
luchando con niños, niños que juegan y saltan, tengo que
prolongaciones en las diásporas del éxodo o el exilio,
usar la cámara a su nivel; es decir, una cámara en mano y
donde se desarrolla una experiencia de vida que es otra
no otra firme que se mueva suavemente en un dolly.11
y es la misma. Por el carácter mutable de su población,
los flujos continuos de las migraciones o los múltiples
De modo que, sumergidos en el proyecto de una
procesos transculturales, el Caribe tiene cada vez más el
gramática más funcional y propia, los realizadores
carácter de un espacio tan inclusivo como centrífugo.
caribeños festejarán (¿festejarán?) los primeros cien años
Por otro lado, con todo y el magnífico «elogio de la
del cine. Y no es casual que la centuria sorprenda a
creolidad» martiniqueño, la diversidad idiomática del
nuestros creadores abocados a su primera madurez,
área no puede reducirse al creole, ni al papiamento ni a
porque justo cuando el cine llega a longevo en otras
ningún «esperanto insular» pretendidamente
muchas latitudes, en el Caribe apenas si cumple sus
predominante o absolutizado por una cierta imposición
primeros treinta años.
de nobles, pero imposibles vocaciones integradoras. El
caso de la producción y las figuras es, en especial,
Calidez y aridez de la estación
cuestionable. De ser tan «puristas», o sea tan aldeanos,
no tendría lugar una película tan atendible como Una
Aunque el llamado séptimo arte, en tanto aparato o
árida estación blanca, de la misma Euzhan Palcy, que
invento tecnológico, llegó bien temprano a la cuenca, y
contó con capital hollywoodense y un divísimo Marlon
no obstante advertirse antecedentes de gran interés en
Brando de segundos, además de no acontecer
los años 50 ó 60 o aun antes, es en la década del 70 que
propiamente en el Caribe, aun cuando su denuncia es a
puede hablarse de un cine caribeño avalado por una
todas luces coincidente. O habría que sospechar del
producción mínimamente respetable y un cuerpo de
admirable Félix de Rooy —que trabaja en Holanda y
ideas y experimentos formales relativamente orgánico.
tiene allí su productora— solo porque busca relacionarse
Esto es que, cuando en el mundo ya el cine había sido
«con el mundo occidental para lograr que el Caribe pueda
moderno y se cansaba de ello experimentando la nueva
expresarse con suficiente nivel profesional».9 Solo un
lógica posmoderna, entonces emerge con alguna
extremista no entendería la estrategia de Rooy que apela
coherencia y sistematicidad el cine en el Caribe.12 Cierto,
a la otredad en pos de la cualificación de lo propio. La
no es un desfase para menospreciar, pero tampoco para
misma Elsie Haas reside en París; pero únicamente desde
arrastrar como un estigma fatídico de por vida.
allí ha podido concretar sus muy agudos documentales
Y está claro que el atraso obedece, en primera
y cortos de ficción, donde confirma la dramática
instancia, a una paradoja irresuelta aún hoy: siendo la
situación antillana, en los entretelones de los sutiles
infraestructura industrial una condición sine qua non de
salones parisinos.10
cualquier intento de cinematografía nacional o regional,
Todo este debate viene conduciendo a la certeza de
todavía hoy no puede hablarse de una verdadera
que la dimensión de lo caribeño debe examinarse de un
industria, ni siquiera incipiente, en el espacio Caribe.
modo casuístico, sin demasiados preconceptos ni
No solo por los condicionamientos de la herencia
restricciones que atenten contra la multiplicidad de
africana y otros factores ya suficientemente estudiados,
aristas que reviste el complejo proceso de la identidad
la música y la danza son las expresiones más generalizadas
en el Caribe. En ese sentido, hoy se ensayan algunas
en nuestras culturas; lo son también, y no en poca
nociones que apuestan a lo caribeño ya no en la dirección
medida, por su carácter de manifestaciones espontáneas
de una «dignificación conceptual», sino incluso de una
que pueden prescindir de las exigencias materiales y
cierta estética fílmica que pudiera ser ejemplar como
tecnológicas; lo son, asimismo, porque otros géneros,
nueva búsqueda lingüística de lo definitorio, siempre
como los relativos al discurso audiovisual, vienen
que no aspire a convertirse en una —¡otra!— normativa
padeciendo una muy conflictuada historia, en medio de
didascálica. Así, la propia Euzhan Palcy —cuyas películas
países tan dependientes en lo económico y lo técnico.
están curiosamente plagadas de fórmulas dramatúrgicas
El arte audiovisual caribeño es a ratos un discurso-
del cine hollywoodense o por lo menos del comercial
fantasma que vive en su ilusión y que existe por su coraje,
estándar— ha develado su ánimo de que el cine pueda
como un desafío a su improbabilidad histórica. El hecho
hablar a mucha gente diferente de distintas partes del
de que la industria de la cultura esté controlada por los
mundo, pero al mismo tiempo deba ser
países ricos no solo aplaza y desplaza los proyectos
propios, sino que también —lo que no es menos
muy específico en términos de movimientos de cámara,
pernicioso—, establece un grupo de valores «modélicos»
iluminación, elección de tomas, encuadre, ritmo de la gente
que atrofian y desvirtúan la percepción autóctona
y la manera en que caminan y se comportan. Estas cosas
—o cuando menos la debilitan, la fragmentan, la
vienen naturalmente primero y luego uno se refleja en ellas.
En
incapacitan en sus búsquedas de identidad.
Rue Cases-Nègres, por ejemplo, si uno está en una casucha
la luz debe ser natural. No se puede jugar con la luz o
Ya en el decenio de los 60, evidenciada la falacia de
tratar de diseñarla como Hollywood, pensando que como
los modelos desarrollistas, se hace obvia la ineptitud de
42
43

Mayra Pastrana y Rufo Caballero
El cine caribeño —el genuino, no el que se prostituye y subordina
sus historias al anuncio de automóviles o casas cerveceras— es
por naturaleza un cine independiente, lo cual lo abandona a no
pocas carencias, pero le permite también ciertos experimentos
y licencias creativas que no penden necesariamente de una
normatividad tiránica.
los gobiernos «nacionales» para financiar el discurso
ilusión de una falsa conciencia. Esa primacía de la
audiovisual, en parte por desdén y concentración en
aspiración por sobre la realidad, esa anteposición del
otros renglones considerados acuciantes y, más que todo,
ideal a la vida, fue la responsable de que durante muchos
por la atrofia y la inopia de una economía dependiente,
años ciertos sectores de la intelectualidad cubana
hipotecada. Sin embargo, la historia del Caribe en estos
divulgaran un denodado rechazo al cine cubano anterior
años desacredita las tesis del causalismo y el
a la Revolución, precisamente porque ese cine nuestro
determinismo tecnológico, pues la irrupción de una
era visto desde la Revolución, desde su perspectiva ética,
escuálida pero continente cinematografía aparece justo
y no teniendo en cuenta los irrecusables
en uno de los momentos de mayor penuria económica
condicionamientos de aquella otra realidad; cuando si
y social.13
de algo pecaba aquel cine era de su desmesurado afán de
El despegue se asocia, por el contrario, a una etapa
identidad, su excesivo subrayado de lo tenido por
de marcado fervor ético cultural, que sabrá del auge y
cubano, que terminó siendo —incluso en los cauces del
consolidación de un pensamiento caribeño; de prácticas
cine revolucionario— un vulgar cubaneo.
sociopolíticas radicales con paradigmas en los
Pero tales desvaríos e inflexibilidades son
movimientos independentistas que sacuden el área; el
comprensibles si estudiamos las condiciones en que el
desarrollo de géneros musicales como el reggae y el
cine caribeño existe —valga decir, subsiste—, tan
calypso, decididamente identificados con las ansias de
alarmantes como para desanimar o despistar a cualquier
emancipación y dignidad cívica; efervescencia ideológica
espíritu romántico. Mientras los gobiernos locales
de los años 70 a la que se integra la expresión fílmica
favorecen las inversiones de las industrias extranjeras
con una voluntad participativa y de aporte a la
interesadas en el Caribe como un paraíso de cocoteros y
afirmación cultural del Caribe. La, hasta ese momento,
sensuales turgencias, la producción cinematográfica
balbuciente creación cinematográfica se crece y
caribeña muchas veces tiene lugar en las metrópolis, en
consolida, estimulada por los legítimos vectores de la
un cine que no siempre logra despojarse de nuevos
época y una involucradora necesidad histórica. «El cine
intentos colonizadores más o menos conscientes, o de
haitiano nació como cine político»,14 ha dicho Arnold
una cierta visión despectiva, cuando menos externa y
Antonin, y es esa una premisa válida para el surgimiento
turística; bien que en otros casos, cada vez más
del cine caribeño como sistema, que así como le permite
numerosos, ese cine, realizado por descendientes de
ser, lo lastra a partir de determinado momento, con una
caribeños, caribeños mismos o sencillamente otros
cierta retórica, según veremos después.
autores, sitúa su presupuesto al servicio de una expresión
Pero es preciso comprender las circunstancias tan
perfectamente identificable como caribeña. En cuanto a
orgánicas en que brota este cine para cuidarnos, incluso,
las películas filmadas en nuestros territorios, la mayoría
del acechante ahistoricismo que descalifica hasta los
de ellas son el resultado de una iniciativa eventual de un
mejor intencionados ideales de cierta izquierda. En ese
grupo de interesados, sin continuidad ni inserción
sentido, hay quien persiste en rehusar la categoría de
orgánica en una producción contigua. En ocasiones una
cine caribeño con el argumento de que nuestro cine no
empresa se ha instituido para financiar un determinado
expresa aún los signos de una identidad cristalizada y
proyecto, y luego desaparece una vez consumados sus
sus hallazgos son muchas veces parciales, coyunturales,
circunstanciales intereses. Y es curioso cómo esa
periodísticos. En cualquier caso, una entidad no existe a
inseguridad económica influye en los signos imaginales
partir de los sueños o las esperanzas, sino de esos estadios
de muchos «frescos» históricos y políticos que revelan
graduales que van delineando la vida de los pueblos. El
la ansiedad de quien no solo lo quiere decir todo, sino
cine que hacemos hoy es un cine caribeño que marcha
que siente que lo debe decir todo por esa vez, pues le
de acuerdo con el grado de desarrollo de la conciencia
amenaza la incertidumbre del futuro. El mismo Arnold
social y hasta con las disímiles fragmentaciones de
Antonin caracterizó su legendaria película Haití, el
nuestro ser, y ello no es fundamento para que se
camino de la libertad como «una obra de lucha inmediata
desconozca o invalide tras la demanda romántica de lo
y al mismo tiempo con una gran ambición de decirlo
que debe ser. Un cine con otro alcance, con otro
todo como si fuera la primera y la última película del
desarrollo, vuelo y poder integrador sería ciertamente
autor»,15 y aunque él se explique esa grave «espacialidad»
muy tentador, pero sería hoy, también, la peligrosa
a partir de la necesidad de abarcadoras parábolas que
44

Cine caribeño, una utopía tan paradójica como inspirada
divulguen la verdad y esclarezcan la historia, es muy
Jacques Arcelin en 1983, se filmó clandestinamente
posible también que subconscientemente lo asedie el
durante seis años; y así tantos otros materiales se
temor al silencio.
producen y circulan en las sombras, bajo el peligro de
De cualquier manera, dichas iniciativas temporales
la persecución y el encarcelamiento, al punto de que el
o individuales vienen aportando mucho. En Martinica,
caro Antonin llegara a preguntarse: «¿La esclavitud, el
por ejemplo, habría que destacar el papel de la APDCC
exilio o la prisión serán eternamente el precio de la
(Asociación para la Promoción y Desarrollo del Cine
actividad artística en Haití?.»16
Caribeño), fundada en 1985 por el entusiasmo de Susy
Todos estos frenos y desgarramientos laceran
Landau y Viviane Duvigneau, que cuenta ya entre sus
sensiblemente al artista caribeño y le impiden una
logros la celebración bianual de un importante festival;
producción sostenida. Al respecto el libro Diez años del
o el auspicio de la misma SERMAC (Servicio Municipal
nuevo cine latinoamericano,17 que recoge la participación
de Acción Cultural) a las primeras obras de varios
de nuestros países en el importante festival habanero
artistas. Otros comitentes encauzan su dinero, sin
de 1979 a 1988, nos permite extraer un par de elocuentes
embargo, a los dudosos placeres del video comercial.
estadísticas, siempre con un carácter aproximado, puesto
Así las cosas, no tendría sentido hablar en el Caribe
que por abarcador y representativo que se proyecte el
de un «cine independiente» que en otros contextos existe
festival, la producción de cine caribeño en modo alguno
precisamente como reacción o alternativa ante la
se reduce a su nómina. En cualquier caso, no deja de ser
supremacía de una producción hegemónica más o menos
locuaz el hecho de que el promedio de participación de
estándar. El cine caribeño —el genuino, no el que se
los países caribeños a lo largo de diez años de experiencia
prostituye y subordina sus historias al anuncio de
fílmica sea de siete películas. ¡Siete películas en diez años!
automóviles o casas cerveceras— es por naturaleza un
Aunque hay países con una cifra mínimamente
cine independiente, lo cual lo abandona a no pocas
reverenciable —digamos Puerto Rico con veinte y por
carencias, pero le permite también ciertos experimentos
supuesto, volviendo a salvar la peculiaridad de Cuba,
y licencias creativas que no penden necesariamente de
que llega a 335, la mayor producción de
una normatividad tiránica.
Latinoamérica—, el balance no puede ser más
Aunque esta independencia pronto se hace muy
preocupante. Otro indicador poco favorecido es el que
relativa por otras razones: no son pocos los autores que
se refiere a los formatos, dado que continúa
prefieren satelizarse a las formas de decir ya
prevaleciendo el de 16 mm, que alcanza a doblar el
convencionalizadas por patrones cinematográficos que
número de películas en el internacionalmente
saturan el mercado; en esos casos, por muy personal que
generalizado de 35 mm —por descartar otros cada vez
sea el esfuerzo de producción o el enfoque de los
menos exclusivos en el mundo tecnológico
contenidos, se trata de un cine estéticamente
contemporáneo, como el panorámico de 70 mm,
dependiente, y un cine estéticamente sumiso jamás será
pongamos por caso. Y vale la observación porque el
un cine independiente. Luego está la problemática de la
uso casi aficionado del formato de 16 mm no responde,
distribución y la relación con el público, una de las zonas
en la inmensa mayoría de las obras, a una voluntad de
más accidentadas del cine caribeño, que la mayor parte
factura underground, textura «vanguardista» o aridez
de las veces es desconocido por su primer destinatario,
opositora al lustre de la industria —como curiosamente
destinado a restringidos círculos fílmicos en las capitales
se aprecia en ciertos creadores jóvenes cubanos—, sino
metropolitanas, o confinado a fugaces festivales y a saciar
a una obligada necesidad. Sin embargo, la duración se
la curiosidad de coleccionistas adictos a «rarezas
comporta equilibrada, con especial tendencia a los
periféricas». Es común el hecho de que luego de
largometrajes en la ficción y a los medio y cortometrajes
insufribles malabares y prestidigitaciones, el creador
en el documental, como suele ser propio de ambos
consigue realizar su película para extraviarla más tarde
géneros. Del mismo modo, abunda el color con
entre los intereses de las compañías distribuidoras.
naturalidad y, por lo general, cuando no se lo usa es
No menos crucial resulta el problema de la
por deliberados propósitos expresivos. Las dificultades
legitimidad de los filmes para circular en los mismos
de posproducción y trabajo de laboratorio sí los azotan
países de origen. En la medida en que se oponen a un
tremendamente, al punto de que terminan realizándose
estado de cosas vigente, decenas de películas no existen
en las metrópolis o diásporas.
sino en las condiciones de cimarronaje cultural; han sido
Un intento de índice temático arrojaría un nítido
filmadas y conocidas en los márgenes de la
repertorio engrosado en primera instancia por aquellos
clandestinidad. Si ahora tomamos por muestra a Haití,
asuntos que apuntan a los enunciados de «libertad,
tenemos que muchas de las cintas realizadas durante el
emancipación, soberanía, independencia»; para
gobierno de la dictadura duvalierista tuvieron que
concentrarse luego en los temas relativos a la penetración
articularse sobre la conjunción de grabados, imágenes
de las metrópolis en la economía, la sociedad y la cultura
de archivo, fotos fijas, recortes de revistas y periódicos,
—particularmente los mecanismos manipuladores de los
y solo un mínimo de filmaciones directas,
mass media— o decenas de fenómenos en torno a las
imposibilitadas por la furia de la represión. Es el caso de
migraciones, el éxodo por causas económicas y políticas,
la antes aludida Haití, el camino de la libertad. El
y las experiencias de vida, prolongaciones culturales,
interesante documental Caña amarga, rubricado por
frustraciones y conflictos internos en el exterior. Otras
44
45

Mayra Pastrana y Rufo Caballero
temáticas recurrentes son el movimiento hacia las
genérico de su actitud en la vida y de su proyección
ciudades, sobre todo con la abolición de la esclavitud; la
consciente, urgido como está de vislumbrar su identidad
negritud y la imagen de Africa como rescate, homenaje
como ser social, desde la elucidación de los más
o nostalgia; índices del desarrollo socioeconómico, el
compactos e inextricables procesos transculturales hasta
ferrocarril, la industria cafetalera, etc.; los desalojos y el
la elemental delimitación del verdadero idioma. No
cimarronaje. Al lado de cuestiones políticas específicas,
olvidar que muchos caribeños pertenecen a un
pero agobiantes en todas las latitudes, como el circo
subcontinente que, desde su mismo nombre, los excluye,
electoral, su demagogia y el ascenso al poder de los
porque como han alertado los más progresistas de
diversos partidos, abundan los tratamientos artísticos
nuestros intelectuales, de José Martí a Fernández
de las religiones, en especial del vodú y la santería; el
Retamar, eso de «América Latina» deja fuera la sustancial
mito, la tradición oral y las cosmovisiones múltiples a
historia y cultura de los caribeños de lengua no española
partir de leyendas y nociones religiosas heredadas en el
o portuguesa. El retardado acrisolamiento de las
rito; como también las reflexiones estéticas alrededor
nacionalidades, las fragmentaciones naturales y
del idioma, la cultura y la autoctonía.
artificiales de toda suerte, y el espíritu defensivo de las
Dentro del reflejo por el cine de expresiones artísticas
poblaciones emigrantes para con la preservación de sus
hermanas en el contexto del Caribe, se percibe un
tradiciones y costumbres, explican en conjunto esas
histórico maridaje con la música, tanto en su protagónica
«urgencias de identidad», el inaplazable esfuerzo de
utilización como recurso cinematográfico fuertemente
afianzamiento, la alta referenciabilidad del cine caribeño.
expresivo, como en el homenaje a disímiles géneros y
Es históricamente lógico que prevalezcan lo
músicos del área. La poesía y la pintura son otras
reporteril y el testimonio, incluso el «manifiesto
manifestaciones particularmente destacadas, de las que
filmado» que conscientemente avasalla el medio al fin y
se resaltan los elementos que apuntalan la identidad y
acentúa la función del discurso audiovisual como medio
problemáticas candentes en el discurso sociocultural, a
de difusión de ideas en un cine que condensa sus esfuerzos
la manera del llamado «arte ingenuo» y sus
de densidad estética en la alusión, la descripción y la
mistificaciones o manipulaciones comerciales y políticas.
indexación referencial, del mismo modo sustantivo en
O sea, el discurrir fílmico en el Caribe es, sobre todas
que la plástica, ocupada en el registro de paisajes y tipos
las cosas del mundo, un acto de responsabilidad con su
populares, modela un «acercamiento al entorno visual
historia y su cultura.
en términos de objetivación».19
La gravedad expositiva hace prevalecer el drama
Las películas caribeñas asumen hoy el desafío de
histórico o sociológico —a menudo el docudrama—, en
congeniar la respuesta a tal necesidad histórica con el
detrimento de los géneros psicológico, de comedia,
principio de una, tampoco aplazable, creatividad artística
musical o fantástico, por citar solo estos. El cine
más incisiva en indagaciones personales y exploraciones
esencialmente sustantivo del Caribe mostrará asimismo
psicológicas universales, consustanciales al hombre
una fundada vocación por el registro documental, ya no
mismo, porque sucede acaso que el proyecto sociológico
como género independiente, sino incluso como
constriñe la búsqueda ontológica y estética o retarda no
impronta de los códigos y estilos en la ficción.
pocas posibilidades de renovación cultural. No se trata,
obviamente, de un reclamo que intenta «occidentalizar»
la operatoria de una dispar identidad genérica, de una
Universo y circunstancia, escaramuzas de la
creatividad otra, sino de, acaso, enriquecerla con
historia
alumbramientos de la subjetividad que no tienen por
qué excluírselos, serles ajenos. Pues, ciertamente, el
Y es que en países donde la cultura espiritual
didactismo y la gravedad trascendentalista de parte
permanece ocupada en la formación y desarrollo de la
importante de este cine ha redundado en un dudoso
conciencia, en el autoconocimiento, el arte se genera
discurso de preconceptos que provoca un cierto rechazo
como proceso de afirmación colectiva y exploración
del público. Se ha suscitado una retórica en la que el
intersticial. De común sucede que el argumento,
afán de esclarecer ideas sobre la vida, determina que el
motivación primera del discurso fílmico, pasa a ser
cine a menudo verse sobre las ideas y no sobre la vida. Y
secundario, puesto que la Historia importa más que la
está claro que si algo no puede permitirse el cine caribeño
historia. Si la vida apremia, el arte no ha de entretener.
es contribuir a incrementar la ya desconsoladora
Por eso Antonin ha confesado, con total sinceridad, lo
distancia de su público.
siguiente: «algunas veces los compañeros extranjeros se
Pero los años 80 nos alentaron con novedosas
ríen con esto, porque cuando me preguntan qué película
vertientes de elaboración imaginal que ya trascienden el
estoy haciendo, respondo sencillamente que una película
mero proceso de connotación y el diálogo cerrado o
sobre Haití».18 Por ello también ese carácter contingente
estrecho con la realidad: una película como la
que si en otros lugares es síntoma de cine pedestre, de
puertorriqueña
una crisis de talento y de imaginación, en el Caribe ha
Lo que le pasó a Santiago revela un
conveniente mundo de introspección e indagación
correspondido a una insoslayable necesidad histórica de
reconocimiento.
existencial; la trilogía de Félix de Rooy sobre el mito en
el Caribe es de un complejo simbolismo que requiere
El artista caribeño muchas veces relega la
individualidad, habida cuenta del trabado diseño
de los más exigentes estudios semióticos y tropológicos;
46

Cine caribeño, una utopía tan paradójica como inspirada
los filmes de Paul Leduc blasonan de su estilizada y
conceptual, los peligros del abaratamiento mercantilista
lucubrada parábola cultural. Aun más, el inquietante
y las concesiones al turismo acechan de un modo más
grupo de cintas que emerge en Martinica a finales de la
físico, al presentarse en muchas ocasiones como el más
década —las llamadas «películas de sueños», que
rápido y cómodo medio de vida. Y no solo ocurre con
contienen peculiares premoniciones, alucinaciones y
la pintura «primitiva» o la futilización de los géneros
ensueños—, significan un síntoma notorio de esos otros
musicales: en particular el cine es bien dable a la
predios de la individualidad y la psicología social que
exaltación de ese engendro degenerador que Alan Ménil
en mucho pueden enriquecer los derroteros del cine
llama «síntesis periodística de las tres S: sex, sea and sun».20
caribeño.
Bajo aquel pretexto cínico de que «la razón es helénica
También inmerso en la ineludible descolonización
y la emoción, negra», incontables epígonos y
de la conciencia y el comportamiento, en el dibujo de
subproductos de la creación caribeña se hacen eco de la
una cultura de resistencia que haga frente a la franca
imagen de la insularidad como fondo exótico y
amenaza deculturadora de la metrópoli y el gobierno
estereotípico propicio al lujo, la calma y la sensualidad,
títere, nuestro cine ha debido participar de una actitud
un paraíso enardecido solo de salvajismos interesantes y
contracultural —cuya estrategia más conocida es el
encantamientos fugaces, sin lugar para la razón y el
fenómeno de la negritud— que se desgasta ante la otredad,
pensamiento.
que se debilita en la lucha contra el otro. Si bien, como
Afortunadamente, contra los desvaríos de todas las
planteara Moreno Fraginals, la colisión entre las culturas
lujurias, cada vez más autores dignifican la imagen del
dominada y dominante de hecho ha proporcionado
cine caribeño con poéticas verdaderamente personales
inagotables nuevas fuentes culturales, llega un momento
que contienen y rebasan lo genérico, que nos cuentan
en que la obsesión de rechazo a la otredad desvirtúa el
de nuevo la historia, pero sin el prisma de un par de
asentamiento de lo propio, toda vez que el proceso de
relatos tan axiomáticos como empobrecedores; ahora
identidad no parte de raseros establecidos por la cultura
con el poder clarificador de sus fabulaciones y
interesada en definirse, sino de los rubros impuestos por
reelaboraciones estéticas. Los haitianos Raoul Peck y
una otredad que aun para ser negada condiciona el
Elsie Haas, los ya emblemáticos Félix de Rooy y Euzhan
sentido y el rumbo de los comportamientos.
Palcy, los puertorriqueños Jacobo Morales y Marcos
Ahora, si la desalienación respecto al «complejo del
Zurinaga, los cubanos Tomás Gutiérrez Alea y
otro» constituye un reto poco menos que imposible en
Humberto Solás, solo a la luz de sus propias realidades
el contexto de unos pueblos tan distantes de su verdadera
fílmicas engrosan el proyecto cultural del Caribe. Y no
independencia, donde el sojuzgamiento del otro es una
es que la espesura del cine caribeño dependa exactamente
carga demasiado pesada, no menos embarazoso resulta
de una «política de autores» que responde a cierta lógica
para el artista caribeño desentenderse de las mil
moderna algo desfasada ya, pero los creadores tampoco
tentaciones del mercado y el turismo, que tratan
parecen proseguir aquel estadio primario y necesario en
constantemente de banalizar la obra de arte hasta tornarla
que el cine era la realidad, como en Ava y Gabriel la
en un mero y trivial objeto comerciable. Si la cuestión
virgen morena era la Virgen María. Como si el Caribe
de la otredad requiere de una profunda madurez
se cansara, de una vez, de todas las malas hierbas: los
Veinte películas imprescindibles21
The Harder They Come
Almacita di desolato
(Perry Henzell, Jamaica, 1972)
(Félix de Rooy, Curazao, 1986)
Haití, el camino de la libertad
La gran fiesta
(Arnold Antonin, Haití, 1974)
(Marcos Zurinaga, Puerto Rico, 1986)
Destino manifiesto
La ronde des vaudous
(José García, Puerto Rico, 1975)
(Elsie Haas, Haití, 1986)
Puerto Rico: paraíso invadido
Haitian Corner
(Alfonso Beato, Puerto Rico, 1976)
(Raoul Peck, Haití, 1987)
Dios los cría
Un pasaje de ida
(Jacobo Morales, Puerto Rico, 1980)
(Agliberto Meléndez, República Dominicana, 1988)
Anita
Krik? Krak! Tales of a Nightmare
(Rassoul Labuchin, Haití, 1980)
(Jac Avila y Vanyöska Gee, Haití-EUA-Canadá, 1988)
¿Puede un Tonton Macoute ser poeta?
Ava y Gabriel, una historia de amor
(Arnold Antonin, Haití, 1980)
(Félix de Rooy, Curazao, 1989)
La operación
Lo que le pasó a Santiago
(Ana María García, Puerto Rico, 1981)
(Jacobo Morales, Puerto Rico, 1989)
Rue Cases-Nègres
Barroco
(Euzhan Palcy, Martinica, 1983)
(Paul Leduc, México, 1989)
Caña amarga
Latino bar
(Jacques Arcelin, Haití, 1983)
(Paul Leduc, México, 1991)
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47

Mayra Pastrana y Rufo Caballero
prostíbulos paradisíacos, las adoraciones acríticas, los
del Caribe. De cualquier modo, insistimos en que todos estos «cortes»
fanatismos políticos. Así, desprovisto de prelogicismos
son premisas de método en un acercamiento preliminar al tema; futuras
y folklorismos ideológicos, el sentido de la
aproximaciones alcanzarán, posiblemente, otras precisiones e integrarán
zonas de producción en este primer momento aplazadas.
responsabilidad histórica y las distancias propias del arte
parecen urdirse en el difícil arcano de la lucidez. La
5. Véase el ensayo de Mbye Cham, «Introduction: Shape and Shaping
madurez asoma justo cuando la realidad fílmica deja de
of Caribbean Cinema», en Ex-Iles. Essays on Caribbean Cinema, Nueva
proponerse como análoga virtualidad de la realidad real:
Jersey: Africa World Press, 1992.
eso que ayer fue espejo orgulloso, hoy es muchas veces
6. Véase el ensayo de Keith Q. Warner, «Cine, literatura e identidad en
coartada de la mediocridad. Al trenzarse con los
el Caribe», en Ex-Iles. Essays on Caribbean Cinema, ob. cit.
alumbramientos del arte, lejos de desaparecer, el mito
de Narciso se complejiza extraordinariamente. En efecto,
7. Véase la entrevista de June Givanni a Euzhan Palcy, en Londres,
Ava podrá ser la santa, pero solo si así lo desea el
1988, mientras la cineasta hacía la postproducción de Dry White Season,
ibíd.
temperamento del pintor.
Y de este modo orquestado el instinto genérico
8. Ver nota 5, y consultar además el ensayo de Alan Ménil «Rue Cases-
proveniente de Africa con el aura de la originalidad
Nègres or the Antilles from the Inside», ibíd.: 155.
emblematizada por la tradición de Occidente, podrá
9. Véase la entrevista de Karen Martínez a Félix de Rooy durante el
realizarse el Caribe en su última y verdadera hibridez.
Festival de Martinica en 1988, ibíd.
Porque además, caribeño o de todos los mundos
probables, el hombre es uno solo, y en definitiva se
10. Al respecto, consúltese en especial su trabajo Les saints et les anges,
debate entre similares coordenadas. ¿Un Caribe
de 1985.
metafísico no será acaso un Caribe mejor dotado para
11. Ver nota 7.
responder a su fortísimo cometido histórico? ¿Sería ese
el colmo de las paradojas, salvadoras y desconcertantes,
12. Para un estudio de los llamados «pioneros» del cine en el Caribe,
que alimentan la utopía? En la confluencia de los tiempos
habría que revisar cuidadosamente las obras fundacionales de creadores
no existe el presente sino sometido a los
como Gabriel Glissant, Perry Henzell, Raphaël Stines, Bob Lemoine,
Rassoul Labuchin, Christian Lara, et al.
vislumbramientos que el futuro le arrebata a la historia.
13. Otra constatación del fracaso determinista se experimenta al
comprobar que algunas de las plazas más fuertes de la cinematografía
Notas
caribeña —el cine haitiano, por ejemplo— acontecen justo en el contexto
de los países más desvalidos, de escuálida economía e hipertrofiada vida
1. Para un análisis detenido de estos tópicos se recomienda, en particular,
social. En dicho sentido, pudiera ser elocuente la relación de 20 títulos
el ensayo de Juan Acha «Reafirmación caribeña y sus requerimientos
imprescindibles en el cine caribeño, con la que concluye este ensayo.
estéticos y artísticos», en Plástica del Caribe, La Habana: Letras Cubanas,
1989: 7-28.
14. Arnold Antonin, «Panorama del cine en Haití», Cine Cubano, (110):
60.
2. Véase James Clifford, «Sobre el coleccionismo de arte y cultura»,
15. Ibíd.: 50.
Criterios, cuarta época, (31), enero-junio, 1994: 142.
3. En algunos libros y artículos consultados, con desconcierto
16. Ibíd.: 55.
advertimos que decenas de películas son presentadas no ya sin un «autor»,
sino incluso sin un responsable cualquiera de la producción, como si
17. Teresa Toledo, Diez años del nuevo cine latinoamericano, La Habana:
ello nada cambiara, o se aspirara a que la película brotase del
Verdoux/Sociedad Estatal Quinto Centenario/Cinemateca de Cuba,
«subconsciente colectivo».
1990: 725.
4. A esta altura del texto, el lector echará de menos las referencias a los
18. Véase «Haití: el camino de la libertad», entrevista de Vivian Argilagos
autores cubanos, algunos de ellos con vasto reconocimiento
a Arnold Antonin, Cine Cubano, (97): 89.
internacional. Preciso es aclarar desde ya que este ensayo excluye el
caso de la cinematografía cubana, que por sus acentuadas peculiaridades,
19. Yolanda Wood, «La pintura contemporánea en el Caribe», en su De
desde la existencia de una historia continua y una infraestructura
la plástica cubana y caribeña, La Habana: Letras Cubanas, 1990: 155.
industrial mínima hasta otros derroteros del discurso ético, requiere
Aunque la frase citada alude en este ensayo a la pintura guyanesa de la
un estudio independiente o un análisis comparado que excede los
primera mitad del siglo, en modo alguno la precisión conceptual de
intereses de nuestras reflexiones. Asimismo se han minimizado las
la investigadora cubana se reduce a ese espacio ni a ese tiempo.
alusiones a Puerto Rico, cuyas especificidades históricas, sociopolíticas
y culturales también se apartan un tanto de la lógica general que en esta
20. Ver nota 8.
ocasión intentamos desentrañar. Como parte de la referida licencia de
método, habría que entender también la temporal exclusión de los
21. Esta lista de hitos fílmicos caribeños se conforma sin distinción de
espacios continentales que engrosan el concepto sociocultural de lo
géneros, y atendiendo no únicamente a virtudes estéticas, sino también
caribeño y la cuenca misma, en razón esta vez de la dificultad que entraña
a poderosas razones de índole histórica o sociológica. Por demás, es
el deslinde de lo propio y específicamente caribeño en el contexto de
evidente que no se manejaron las películas cubanas, que solo ellas
producciones nacionales que en modo alguno se limitan a la lógica
requerirían una lista de veinte títulos significativos. Tampoco se incluyen
socioestética que rige nuestro objeto de estudio, y son incluso generadas
las obras de los «pioneros», merecedoras de otras consideraciones.
en centros proindustriales la mayoría de las veces enrumbados a
presupuestos de identidad de otro alcance, que insertan lo caribeño de
manera orgánica mas no se agotan en ello. Un caso bien diferente muestra
la cinematografía mexicana, donde varias cintas sí revelan una pertenencia
raigal, tanto en los signos sociolingüísticos como en lo ético, al designio
©
, 1996.
48

La integración en la cuenca del Caribe. Institucionalidad y realidad
no. 6: 49-56, abril-junio, 1996.
La integración
en la cuenca del Caribe.
Institucionalidad
y realidad
Tania García Lorenzo
Investigadora. Centro de Estudios sobre América.
Se ha abierto un nuevo ciclo de expansión económica y
Entorno internacional
de conquista de mercados, que es de la mayor importancia.
Hay una necesidad de Tratados Comerciales ventajosos
No es objetivo de este trabajo hacer una evaluación
tan intensa como la hubo hace algunos años de concesiones
de canales y de Enmiendas Platt. Los «Guantánamos»
detallada de los elementos que caracterizan las corrientes
económicos y las «Zonas del canal» mercantiles son de
económicas mundiales contemporáneas. No obstante,
tanta urgencia, en estos tiempos de depresión y desempleo
comoquiera que la participación en un esquema
en los Estados Unidos, como lo fueron las posiciones
integracionista es parte esencial del diseño de inserción
estratégicas y las vías interoceánicas en otras épocas.
externa de cualquier país, resulta imprescindible para
Ramiro Guerra
el análisis partir de la aceptación de que el
(1934)
recrudecimiento de la vocación universal del capital,
expresado en niveles mayores de transnacionalización,
La cuenca del Caribe tiene una trayectoria discursiva ha marcado de forma sustancial la recomposición del
integracionista de larga data. Sin embargo, existe una
sistema de relaciones internacionales, tanto económicas
corriente de intercambio económico que, aunque
como políticas y de seguridad del Hemisferio, que a su
muestra una relación comercial tendencialmente
vez imprime un particular sello al desenvolvimiento
creciente, poco responde a la magnitud de la voluntad
de la cuenca del Caribe.
institucional expresada.1
En nombre del objetivo y contradictorio proceso
En el diagnóstico de las instituciones multilaterales
globalizador, pretende consagrarse un sistema de
generalmente se aprecia una evaluación positiva hacia la
relaciones políticas, económicas, culturales y sociales
tendencia creciente de esa relación de intercambio.2 No
que al propio tiempo que integra y concentra capitales,
obstante, resulta interesante llevar a cabo un
produce un efecto marginalizador y excluyente a
acercamiento a otros elementos causales que se
hombres, pueblos y regiones que no le resulten
encuentran presentes en este comportamiento y que son
funcionales. De hecho, lo que se intenta es hacer
poco tratados en la literatura.
prevalecer una nueva dimensión del concepto «espacio
48
49

Tania García Lorenzo
económico» que cuestiona el Estado-nación y las
argumento de que la mayor liberalización compulsa a
nociones de soberanía e independencia a él asociadas.
niveles crecientes de competitividad, sin reconocer el
Se perfila en la actualidad una nueva forma de
papel que en este contexto tiene la evidente incapacidad
expresar la política históricamente expansionista del
demostrada para generar valor agregado con mayor
capital norteamericano, pero adaptada a las condiciones
componente tecnológico, que es el elemento principal
de acumulación contemporáneas y a los condicionamientos
que marca la dinámica del mercado mundial
que la ideología neoliberal ha impuesto al propio
contemporáneo.
funcionamiento económico de los estados.
Una política exportadora basada en el abaratamiento
Así, los programas de estabilización primero y de
de la moneda y no en los parámetros contemporáneos
ajuste estructural después, han producido profundos
de los mercados dinámicos, o una política captadora de
cambios en las funciones de los estados
recursos a partir de la elevación indiscriminada de las
latinoamericanos, pasando de un llamado «Estado
tasas de interés y no por la solidez de su economía,
benefactor» a un Estado «facilitador del proceso de
constituyen instrumentos que están condenados al
acumulación de los capitales», lo que inhibe su función
fracaso porque no basan su perspectiva en la creación
empresarial y reguladora, con lo que se crean
de riqueza, sino en la obtención de ganancias. Es
disfuncionalidades contradictorias.
extrapolar mecanismos cortoplacistas, de una deficiente
Un ejemplo evidente de la incoherencia de las
conducción microeconómica, a la conducción
políticas económicas se puede apreciar en la utilización
macroeconómica, con las consecuencias que ello
de los instrumentos fundamentales de la política
conlleva para cualquier país.
monetaria y crediticia.3 Resultado: el crecimiento de la
Y es que los modelos económicos latinoamericanos
economía está atrapado en esas contradicciones.
no parten de un proyecto de desarrollo nacional que
No obstante, en la aplicación de los preceptos
otorgue al mercado interno el verdadero papel que le
tecnoideológicos del modelo neoliberal, se aprecian
correspondería, tanto por la sociedad que ampara como
evidentes diferencias cuando analizamos su forma de
por el poder que emergería de una verdadera integración
operar en los países desarrollados.
nacional.
Los acuerdos intergubernamentales adoptados en la
Ronda Uruguay del GATT consagraron los principios
de política comercial basados en la disminución
La cuenca del Caribe. Su historia y posición
sistemática de los aranceles, con lo cual se desprotegen
las vías fundamentales de obtención de recursos en
La cuenca del Caribe es un entorno internacional
divisas. La industria latinoamericana sufre un alto nivel
heterogéneo, con dimensiones de profundas diferencias,
de exposición en el comercio internacional, al participar
con raíces etnohistóricas diferentes, con características
en igualdad de condiciones a las del mundo desarrollado,
e intereses políticos generales similares, pero no
cuando no existe igualdad de posibilidades, dados los
congruentes, carentes de interdependencia, y cuya
niveles de subdesarrollo que hoy tipifican a las
historia ha estado marcada por las conveniencias o
economías del continente. Vale recordar que los países
inconveniencias de los centros hegemónicos de poder.
d e s a r r o l l a d o s m a d u r a r o n l a s c o n d i c i o n e s
Los Estados Unidos consideran a la cuenca del
tecnoproductivas de su planta industrial bajo un férreo
Caribe su traspatio natural, entendiéndose por ello su
proteccionismo, y no impusieron, con su fuerza
área de influencia, en la que tiene, bajo su peculiar
económica, los renovados criterios del «libre cambio»
concepto de jurisdiccionalidad, el «derecho» a
en los foros internacionales, hasta que le resultó
intervenir. El auto-otorgado «destino manifiesto»,
necesario al desarrollo del capital.
enraizado, en su concepción hegemónica, en el
También ha quedado consagrada —vía
hemisferio, e impuesto con toda su intensidad desde
privatización— la desregulación estatal de la economía
hace siglo y medio, se mantiene inalterable en su
y la desintermediación financiera, lo que, unido a la
percepción del papel a desempeñar en las relaciones
globalización de los flujos de capital y monetarios
interamericanas contemporáneas, aunque bajo nuevas
—por la supremacía del capital financiero sobre el
modalidades. La historia de las intervenciones militares
productivo—, cierra el cuadro por el cual, entre otros
en el continente lo hace evidente.
múltiples factores, los estados latinoamericanos han ido
Así, como dijera Andrés Serbin, las consecuencias
perdiendo soberanía económica y, con ello,
de la Guerra fría, la consolidación de la Revolución
instrumentos de conducción efectiva de sus economías.
cubana y su inserción en el entonces existente campo
Esto ha generado un estado creciente de polarización
socialista; la descolonización del Caribe no hispánico y
de los ingresos, y desempleo y pobreza estructurales de
el desencadenamiento de la crisis centroamericana,
dramáticas dimensiones.
dieron lugar, en términos geoestratégicos, a una marcada
Los modelos económicos aplicados mayoritariamente
relevancia de la cuenca del Caribe en la política exterior
en América Latina han producido un giro en los
norteamericana en la década de los 70 y 80. Ello llevó a
referentes de acumulación hacia el sector externo. En
la puesta en práctica, en enero de 1984, de la Iniciativa
nombre de la llamada «modernización», se aplican
para la cuenca del Caribe, como una forma de rediseñar
criterios de desenfrenado aperturismo, bajo el
el sistema de relaciones imperante en el subcontinente.
50

La integración en la cuenca del Caribe. Institucionalidad y realidad
Sin embargo, los cambios en esos contextos han
referentes importantes de complementación en México,
determinado una pérdida de su relevancia estratégica,
salvo en el caso de dos o tres países.
tradicionalmente asociada con la Guerra fría, y están
Ese gran entramado institucional de acuerdos
siendo remplazados por temas de diferente alcance
demorará en poder impulsar un marco de acciones
estratégico global: narcotráfico, flujos migratorios y
concretas que incremente el nivel de intercambio. Sin
amenazas ambientales.
embargo, se despliega un creciente proceso de consultas
En consecuencia con las tendencias mundiales
políticas y diplomáticas en la búsqueda de estabilidad
descritas, se va expresando un marcado desinterés de
para la región y tratando de consolidar alianzas y
los Estados Unidos por sus vínculos económicos
vínculos regionales frente a las transformaciones
tradicionales de carácter preferencial. La eventual
hemisféricas y globales. Es en ese contexto que se crea
desaparición de los márgenes de preferencialidad que
la Asociación de Estados del Caribe en julio de 1994,
disfruta la mayoría de los países de la cuenca del Caribe
aún en fase de organización de su aparato secretarial,
amenaza la supervivencia de un grupo de estados
definiciones presupuestarias, etc. La Cumbre de agosto
predominantemente vulnerables y de economías
de 1995, dedicada al comercio, turismo y transportes,
frágiles, altamente dependientes de sus vínculos
constituye un primer paso en la dirección de impulsar
externos.
una nueva relación de intercambio al interior de la
No obstante, los Estados Unidos siguen
cuenca del Caribe. Los hechos dirán la última palabra.4
considerando al Caribe su área de influencia y, por lo
La ampliación de los acuerdos fraccionados entre
tanto, los pasos que realiza no son ignorados por ellos.
grupos de países dentro de la Asociación, complejiza
La gran dependencia de los Estados Unidos que afrontan
aún más la ya ardua labor que espera a ese incipiente
los países que afloran a la cuenca del Caribe, y que tiene
mecanismo de cooperación si pretende comenzar un
una expresión múltiple (económica, militar), convierte
proceso de armonización de los acuerdos preexistentes.
a este país en un actor presente en la realidad económica
Hay que resaltar, sin embargo, que los conductores
de la cuenca, incluso con una fuerza renovada en los
de estos procesos no ocultan su intención de verse
últimos años, a partir de sus propias necesidades,
subsumidos en la llamada integración hemisférica.
afectados por su relación-competencia con los países
Aunque se declaró en Miami (1994) y se reafirmó en
europeos y asiáticos, pero con diferencias sustanciales
Denver (1995) que ese proceso se iría produciendo
según los países. No estamos hablando, sin embargo,
cohesionando los esquemas subregionales existentes,
de una relación interdependiente, sino de una relación
comoquiera que los Estados Unidos siguen siendo un
de subordinación.
jugador internacional de primera línea, solo irá
Si bien los gobiernos de la mayoría de los países de
articulando países al TLCNA en la medida en que sean
la cuenca del Caribe comprenden la necesidad de
funcionales a sus necesidades domésticas y de
reconformar una agenda regional, y reconocen la
supremacía hegemónica. No olvidemos que la capacidad
importancia que en ese entorno tiene la consolidación
para decidir sobre la elegibilidad de nuevos aspirantes
de los vínculos económicos recíprocos, no se aprecia
es una prerrogativa unilateral de los Estados Unidos.5
una voluntad de erigirse en espacio económico propio,
Tal y como, hasta ahora, están definidas las cosas,
sino la intención de prepararse para subsumirse en una
no se trata de una integración hemisférica. Antes bien
supuesta y esperada integración hemisférica. Y esa
sería una absorción por los Estados Unidos de las
agenda regional tiene hoy, como soporte un complicado
economías latinoamericanas, sin tener que pagar el costo
entramado de acuerdos bilaterales y multilaterales
de las sociedades. Como hace siglo y medio, los Estados
institucionales, pero una casi inexistente relación
Unidos no desean absorber nuevos territorios, sino que
económica, salvo en el caso de los países
estos resulten manejables como «posesiones». Adquiere
centroamericanos, cuyos vínculos económicos reales
las capacidades productivas y de servicios instaladas,
son significativos en el contexto subregional.
abaratadas por la depreciación de las monedas, y el costo
La CARICOM, después de 20 años de constituida,
social lo asumen los gobiernos, que han perdido
y adoptada una Unión Aduanera, alcanza un comercio
soberanía y capacidad de actuación, pero pueden
recíproco del 10,2 %. El llamado Grupo de los Tres
cumplir las funciones que les asigna el capital.
(México, Venezuela y Colombia) es, en la práctica, un
John Saxe-Fernández ha señalado que la llamada
acuerdo marco tripartito, que se refleja después
integración hemisférica constituye una versión
bilateralmente, pero con una desproporcionada
actualizada de la Enmienda Platt,6 denunciada
composición del comercio recíproco, determinado por
abrumadoramente por la práctica económica de los
la influencia de terceros en sus proyecciones principales.
propios Estados Unidos y sometida a los avatares de la
Las relaciones de México con el Caribe insular están
política doméstica norteamericana, que se litigia entre
determinadas por otras dinámicas. La firma del Tratado
republicanos y demócratas. Hay una continuidad
de Libre Comercio de Norteamérica (TLCNA) ha
histórica en los objetivos de la política hemisférica de
desbalanceado el acceso a los mercados y capitales
los Estados Unidos, al propio tiempo que, en su
estadounidenses y la terciarización dependiente que han
actuación, el capital norteamericano modifica sus
producido las economías caribeñas no ha encontrado
mecanismos e instrumentos de acuerdo con los
50
51

Tania García Lorenzo
requerimientos del patrón de acumulación
líneas generales comunes en el diseño económico
contemporáneo.
latinoamericano, no hay realmente un modelo de
Los programas continentales desplegados por los
aplicación homogéneo. Sí se aprecian diferencias
Estados Unidos, solo han dejado como resultado más
sustanciales en distintos componentes de los procesos
dependencia. Un ejemplo de ello es que la Iniciativa
de reforma, tanto por su intensidad, profundidad y
para la cuenca del Caribe provocó que por cada dólar
frecuencia como por sus características técnicas.8 No
exportado por el Caribe al mundo, se le compraran a
obstante, se desconoce el hecho de que, incluso, políticas
los Estados Unidos 75 centavos.
similares aplicadas a realidades concretas diferentes,
Al nuevo diseño hemisférico del capital —y en este
ofrecen resultados contrapuestos y en ocasiones
continente al capital norteamericano— no le resulta
contradictorios. Esta realidad también provoca que los
funcional la preferencialidad sino la reciprocidad; en
países participantes de un mismo esquema integracionista
lugar de la protección, la liberalización; y en nombre
presenten, en el desarrollo de sus economías, importantes
de la competitividad, la desregulación. El peligro de
divergencias y asincronías en el comportamiento de sus
fraccionamiento nacional y regional es cada vez más
ciclos económicos.
evidente.
No se trata solo de la heterogeneidad múltiple que
Hoy no se trata de la integración para el desarrollo,
se presenta entre los países miembros de los esquemas
ni del ideario integracionista de nuestros próceres. El
de integración, referidos a dimensiones, interdependencias,
dilema está en que ningún país puede, por una parte,
carácter competitivo y no complementario de sus
enfrentar un programa nacional de desarrollo de forma
producciones, etc.9 Estas divergencias presentan
aislada en las condiciones actuales de acumulación y,
correlaciones de poder, por lo tanto influirían en las
por otra, defender a ultranza los esquemas actuales.
relaciones de costo/beneficio entre los miembros de los
Defender un marco institucional que permita enmarcar
esquemas, pero no tendrían que limitar el incremento
la acción irrestricta del capital en cierto contexto
del intercambio recíproco.
ordenador, resulta cuestionable, porque algunos
Se trata de que los ciclos productivos y las
esquemas de integración han sido remodelados y otros
manifestaciones estructurales y funcionales de estos, tales
estructurados con mecanismos funcionales al modelo
como el comportamiento de la tasa de inflación, nivel
neoliberal de acumulación.
de déficit público, estructura de las balanzas de pagos y
la evolución del tipo de cambio nominal de las monedas
de los países participantes, entre otras, son distintos y,
El marco institucional
en consecuencia, las políticas que están obligados a
aplicar los gobiernos tienen que ser sustancialmente
Al margen de las divergencias que en el orden
diferentes, lo que afecta las relaciones entre las partes.
conceptual existen alrededor de la categoría integración,
La evolución del producto interno bruto (PBI) de
hoy bajo ese rubro se hace necesario analizar una doble
los países miembros de los distintos esquemas
dinámica: la acción institucional que se estructura en
integracionistas, entre 1989 y 1995, presentan
los esquemas gubernamentales constituidos y la acción
comportamientos extremadamente asimétricos y
práctica de los capitales en el proceso de privatizaciones,
asincrónicos de sus tasas anuales de variación. El caso
fusiones y adquisiciones, y que en ausencia de un
del Grupo de los Tres, que tiene firmado un Tratado de
programa de verdadero desarrollo nacional producen,
Libre Comercio, es, tal vez, de los más evidentes.
en la mayoría de los casos, una amplia concentración
Mientras que Venezuela pasó de -7,8 %, en 1989 a 6,8 %
de los capitales y una articulación dependiente y
en 1990, y continuó con un comportamiento
desnacionalizada.
completamente errático provocado por la crisis que
Es prolija la información disponible sobre el estado
atraviesa esa economía, México presentaba su propio
de los esquemas de integración existentes. En 1995, los
comportamiento de crisis, pero en años contrapuestos,
de mayor comercio intrarregional fueron el Mercado
mientras que el de Colombia fue el más estable. En esas
Común Centroamericano (MCCA) y el MERCOSUR;
condiciones, comoquiera que las crisis financieras que
estos alcanzaron solo el 24,1 % y 22,0 % en relación
padecen tienen naturaleza y raíces distintas, las vías de
con su comercio total, respectivamente; la Comunidad
salida no son coincidentes, por lo que en su conjunto,
Andina alcanzó el 11,7 % y la CARICOM el 10,2 %.
las políticas económicas que deberá aplicar cada uno de
El conjunto de la región alcanzó apenas el 19,2 %.7
ellos resultarán contrapuestas y afectarán las relaciones
Problemas de carácter estructural en el
de intercambio entre los tres países. Los datos
funcionamiento de estas economías pueden estar
demuestran que la firma del Tratado de Libre Comercio,
impidiendo en algunos casos y condicionando en otros,
cuando menos, no ha sido suficiente para obtener
los resultados prácticos de los esquemas de integración
resultados relevantes en el comportamiento de los flujos
actualmente vigentes.
comerciales de estos países.
En múltiples ocasiones se ha argumentado que la
Aunque con niveles diferentes de dispersión, se puede
homogeneización de las políticas económicas de los
apreciar un semejante grado de asincronía en los restantes
países latinoamericanos propende y es, a su vez, garantía
grupos de integración existentes. Obviamente, la
del éxito del proceso integracionista. Aunque existen
circunstancia de crisis por la que han atravesado dos de
52

La integración en la cuenca del Caribe. Institucionalidad y realidad
los tres países del G-3 incluyen elementos de significación
fundamentales no respondan inclinando sus
en este análisis, que reclaman consideraciones en extenso.
preferencias.
Cada uno de los restantes esquemas integracionistas
Siendo las políticas monetarias parte esencial de los
presenta características causales específicas que reclaman
instrumentos de control y conducción de la economía,
su tratamiento individual. El objetivo que se persigue
presentan en su aplicación resultados contradictorios.
ahora es la identificación del hecho como similitud y
Los requerimientos contrapuestos del crecimiento y el
necesario objeto de análisis en cualquier labor
control de la inflación han estado presentes en el diseño
prospectiva al respecto.
de las políticas económicas. En consecuencia, el auge
En el caso de la CARICOM, las diferencias son
de crecimiento del continente se ha desacelerado, y
significativas, particularmente en los de Trinidad y
tiende a presentar una nueva fase de precrisis.
Tobago, Guyana, Jamaica y Surinam. Niveles altos de
Y es que aun existiendo niveles de intercambio
inflación plantean una disyuntiva inmediata entre el
relativamente altos, como es el caso de Centroamérica,
control de la inflación y el crecimiento del PBI.10 El
el diseño de las políticas económicas está principalmente
control de la inflación y del desequilibrio fiscal casi
determinado por el impacto que tiene, en los países, el
siempre compele a implantar políticas contractivas,
peso relativo de sus vínculos con la economía
mientras que los países que no tienen esos problemas
norteamericana. Tanto por su cercanía como por el nivel
difícilmente puedan someterse a esos requerimientos en
de dependencia que han consagrado los esquemas
virtud de sus relaciones recíprocas.
preferenciales que existen entre los países de la cuenca
Aunque con menores niveles de dispersión —al
del Caribe y los Estados Unidos y Canadá, el manejo
menos aparentemente—, el esquema centroamericano de
instrumental y el diseño mismo de las políticas
integración no es ajeno a este comportamiento. Habría
económicas latinoamericanas tienen como prioridad las
que destacar, sin embargo, que es, de todos los esquemas
necesidades derivadas de sus vínculos con los Estados
integracionistas, el que menos disgregación tiene en sus
Unidos.
indicadores macroeconómicos analizados, lo que resulta
En ninguno de los esquemas integracionistas que
significativo si apreciamos que el de Centroamérica es,
afloran en la cuenca del Caribe, existe al menos un país
de hecho, el que más relación de intercambio comercial
que sirva de polo de atracción en sí mismo. El papel
recíproco tiene, y que ha producido un importante nivel
que a esos efectos hubiera podido tener México quedó
transformado por su reconversión hacia la economía
de elaboración de políticas conjuntas.
norteamericana, que se consolidó y se ha acrecentado
No se trata, sin embargo, de un fenómeno
con el TCLNA. Cifras recientes del Instituto Nacional
instrumental de las economías, ni se resuelve con intentos
de Estadísticas, Geografía e Informática de México
de la llamada «armonización de las políticas». Es un
indican que entre enero y marzo del presente año los
problema de naturaleza estructural, donde el nivel de
Estados Unidos y Canadá recibieron el 85,9 % de las
apertura de las economías de nuestro continente, unido
exportaciones y suministraron el 77,6 % de las
a la ausencia de verdaderos proyectos nacionales, entre
importaciones de este país. Sin embargo —aunque tiene
otras causas, ha motivado que las políticas no se diseñen
firmado acuerdos de libre comercio con Bolivia,
con carácter preventivo, sino que se adopten a partir del
Colombia, Costa Rica, Chile y Venezuela—, en el
estallido de las crisis —o en evitación de su
primer trimestre de 1996, México colocó en América
explosión—, pero luego de ser engendradas.
Latina menos del 8 % de sus exportaciones totales y
Resulta evidente que «el desarrollo del modo de
solo adquirió en la región el 5 % de sus importaciones.12
producción capitalista no es lineal, sino que, a lo largo
Estos son elementos que no pueden evadirse cuando
del mismo se producen períodos de crisis y de auge que
se trata de medir la eficiencia de los proyectos de
tienen por misión corregir los desajustes que lleva
integración. Los esfuerzos integracionistas del
implícito su propio funcionamiento».11
continente, el andamiaje institucional establecido y la
En el caso de América Latina, ese comportamiento
larga lista de declaraciones anunciando una voluntad
está influido por el hecho de que su crecimiento
política de integrarse, no se han visto compensados
económico no ha estado sustentado por un desarrollo
suficientemente por los volátiles niveles de crecimiento
endógeno, tanto de la investigación como de la
del comercio recíproco.
innovación tecnológica. Su ahorro interno es débil, y
Es que la integración económica nunca ha sido, y
depende de la afluencia de capital foráneo, de
mucho menos en las condiciones actuales de inserción
importaciones crecientes para sustentar sus
externa, un fenómeno esencialmente comercial. La
exportaciones. Por lo que sus períodos de recuperación
participación en el mercado mundial contemporáneo
y auge, están sometidos a avatares no siempre
y, más bien, el posicionamiento de rubros dinámicos
administrables por sus políticas y sí dependientes de las
de exportación en determinados mercados, no pueden
decisiones de sus suministradores de tecnología y capital.
ser logrados sin determinadas condiciones económicas
Esa ausencia de convergencia provoca que la relación
internas, que atañen a todo su funcionamiento
costo/beneficio sea asimétrica y variable, lo que pudiera
estructural, incluso en los vínculos intrarregionales.
explicar que, por mucha «voluntad institucional» que
Esta nueva percepción de la integración ha estado
expresen los gobiernos, los actores empresariales
presente en la reformulación de los esquemas de
52
53

Tania García Lorenzo
integración del continente que se ha producido en los
Como señalara Alberto Arroyo,
90. Sin embargo, siguiendo la normatividad general del
TLCNA, algunos actores pretenden que las estructuras
La inversión extranjera es un complemento necesario, por
conceptual y técnica de los tratados de libre comercio
lo que el problema no debe plantearse como sí o no a la
inversión extranjera. El problema es en qué condiciones
pudieran devenir ejes articuladores de las relaciones
de acuerdo puede jugar un papel en la dinámica del
económicas recíprocas, con lo cual se estarían
desarrollo nacional. Cómo orientarla según las prioridades
estableciendo condicionantes internas y externas y no
nacionales para un desarrollo sustentable, democrático,
solo comerciales. Particular fuerza tienen en esa dirección
equilibrado, generador de empleo, distributivo del ingreso
y que tienda a disminuir la dependencia tecnológica.13
las normas de origen y la cláusula de trato nacional.
Estas constituyen las bases sobre las que se han
Pero la integración económica supone alcanzar un
reformulado los viejos esquemas y surgido los nuevos
nivel de interdependencia determinado y su diseño, por
mecanismos integracionistas, que buscan consolidar y
tanto, tiene que ser básicamente funcional al modelo
comprometer un sistema de relaciones determinado.
económico que se aplique. En nombre de la integración,
Como este sistema se basa en la reciprocidad y no en la
concepto identificado con sentido positivo en el
cooperación, estará signado por las relaciones de poder
discurso de las más variadas corrientes ideológicas, se
que se ejercen en el mercado y se proyectan como sello
pueden estar produciendo procesos que no siempre
distintivo de las relaciones contemporáneas. Esas
tienen que ser confluyentes con los intereses de los
relaciones de poder que subyacen en los mecanismos
estados-naciones y en particular de las sociedades. Y es
integracionistas contemporáneos pudieran ser refractadas
que generalmente se mide la integración por las
en los ámbitos políticos y militares, si las articulaciones
intervinculaciones comerciales, pero no se registra cuál
económicas así lo justificaran o demandaran. La historia
es el vínculo de las fusiones y adquisiciones
de América es prolija en ejemplos.
transnacionales con los mecanismos integracionistas y
Las asimetrías que existen entre los firmantes de los
sus resultados.
tratados al interior del hemisferio están enmarcadas en
Una euforia extraordinaria y desproporcionada tiene
esos contextos, sean estos de los Estados Unidos con
lugar en determinados círculos latinoamericanos por
México, de México con Centroamérica, y aunque en
lo que se ha dado en llamar el «retorno de América
diferente magnitud, de Venezuela y Colombia con el
Latina a los mercados de capital». Según el Informe de
Caribe. El reflejo esencial de tratamiento asimétrico está
1995 de la CEPAL, la inversión extranjera en América
dado por los ritmos de desmantelamiento de cualquier
Latina y el Caribe, señala que «esta masiva entrada de
rasgo de protección y la búsqueda de mayores niveles
recursos externos ha significado la desaparición de la
de desregulación, pero no de subsanación, por diversas
restricción financiera externa que la región enfrentó
vías, de las diferencias estructurales, que es insoslayable
durante el decenio de los años 80 y la reversión de las
en cualquier intento de integración económica, vista
transferencias netas al exterior que caracterizaron la
desde la perspectiva del desarrollo.
década pasada». Sin embargo, el 95 y el 92,5 %
Los casos en que existen vínculos amplios buscan
respectivamente, de las emisiones internacionales de
consolidar ese sistema de relaciones dependientes. En
bonos de los años 1993 y 1994, se concentraron en cuatro
los casos en que los vínculos deben incrementarse bajo
países. Por otra parte, el 94,7 % de las emisiones
esos criterios, se comprometerán las relaciones a partir
internacionales de acciones se concentraron también en
de un sistema que no reconoce realmente, en toda su
cuatro países. Tres de ellos son los mismos en las dos
magnitud, las asimetrías existentes.
listas: México, Argentina y Brasil.
De los 100 proyectos de inversión más importantes
en el continente, en 1993, 86 se concentraron en cinco
La integración vertical
países.14 Es decir, que los flujos de capital no están
llegando a todos los países y sí se están concentrando
Hoy se está produciendo una yuxtaposición entre
en los llamados «emergentes». Hay una ausencia
los procesos de integración constituidos
significativa de la llamada cuenca del Caribe y más aguda
institucionalmente como esquemas subregionales, a
aún, del Caribe insular.
partir de los acuerdos de complementación económica,
Pero la concentración no es solo en el número o en
las desgravaciones arancelarias recíprocas y las uniones
países determinados con mejores condiciones. También
aduaneras constituidas, y los procesos que, en la práctica,
es sectorial. De los 100 proyectos de inversión
se producen como «integración vertical». Esta es en
mencionados, 60 están concentrados en cinco sectores;
realidad una integración de capitales, o la articulación
a saber, telecomunicaciones, minería, petróleo y gas,
de ciertos sectores productivos latinoamericanos con los
industria automotriz y electricidad. Otros datos reflejan
capitales norteamericanos o europeos en su expansión,
una clara terciarización de los flujos financieros y una
que está produciendo una nueva noción de espacio
marcada tendencia a la privatización y desregulación
económico. Esta yuxtaposición pretende ser
cada vez mayor del sector bancario.
convergente, pero aún no lo ha demostrado, por sus
Otro rasgo relevante es la ampliación de capitales,
múltiples dinámicas contradictorias.
pero dentro de una misma rama económica. Las nuevas
54

La integración en la cuenca del Caribe. Institucionalidad y realidad
corrientes de los procesos de privatización permiten
Los resultados excluyentes de estos procesos
apreciar en su estructura sectorial cierta tendencia a la
constituyen la causa real de los alarmantes niveles de
especialización y al control monopólico sobre
pobreza, frente a los cuales los propios funcionarios
determinadas ramas.15
del Banco Mundial se proponen un programa de
En 1993, el 52 % de las 100 empresas más grandes de
atención, a fin de contener la explosión social que
América Latina estaban concentradas en los sectores del
representaría el traspaso de los niveles de sobrevivencia.
petróleo, industria automotriz, telecomunicaciones,
No puede ignorarse que esta atención tiene un carácter
electricidad, comercio y alimentación.
asistencial lo menos costoso posible y no se pretende
Vale destacar, no obstante, que las empresas privadas
enfocarla desde el punto de vista de una solución
locales son en muchos casos joint ventures con control
estructural.
nacional del paquete accionario, pero no deja de estar
¿En qué punto pudieran confluir ambos procesos
presente el capital extranjero. Es interesante detenernos
de integración, o sea, el «institucional» y el «vertical»?
en algunos de los razonamientos de los llamados
Los tratados de libre comercio, como nuevos ejes
«depredadores». Un estudio publicado en América-
articuladores de los procesos de integración, pueden ser
Economía de mayo de 1995, señala elementos muy
más funcionales al movimiento de capitales o a la
reveladores al respecto. Los inversionistas buscan
integración vertical que a la integración o
empresas dentro de su propio sector, especialmente para
interdependencia de las naciones como conjuntos
entrar a un nuevo mercado o para favorecer una
sociales. El crecimiento del comercio intrafirma e
integración vertical; se aseguran financiamiento a un
intraindustrial así lo verifica. Por otra parte, el rediseño
costo razonable; están dispuestos a soportar un entorno
que ha tenido lugar en los esquemas de integración, con
recesivo durante cierto plazo, esperando con paciencia
el objetivo de hacerlos más viables, no ha cambiado la
la llegada de mejores tiempos, pero neutralizan la
naturaleza esencialmente comercial de su espectro. La
posibilidad de expansión de otro grupo o el surgimiento
corriente de inversión intrarregional sigue siendo
de nuevos competidores. ¿Y qué tipo de presas buscan?
abrumadoramente minoritaria. Aunque ascendente, no
Compañías con participación en el mercado y canales
tiene aún una fuerza que haga variar los patrones de la
de distribución; empresas que tengan un alto
conducción macroeconómica, profundamente
endeudamiento, lo que las hace más vulnerables, pero
subordinada al capital norteamericano. Otorgarle al
que dispongan de potencial de mercado, idealmente del
actor empresario un papel relevante en el diseño de los
sector de bienes de consumo masivo o exportables.
nuevos esquemas, no tiene obligatoriamente que
En los procesos de fusiones y adquisiciones recientes,
significar una mayor integración. En ausencia de un
se aprecia una inclinación marcada a privatizar el
proyecto nacional de desarrollo, más bien pudiera
servicio eléctrico en algunos países.
contribuir a una mayor transnacionalización.
Resulta obvio que también se está produciendo, en
Desde la perspectiva del capital, el reacomodo
algunos países importantes, la privatización de puertos,
operacional que se está produciendo es el idóneo a su
ferrocarriles y aerolíneas para asegurar los componentes
vocación universal de ingobernabilidad.
totales de los procesos productivos y comercializadores.
Ahora bien, desde una perspectiva de desarrollo, y
Este nuevo estadio de la transnacionalización de los
ante el hecho de que la globalización de la economía
procesos productivos, que es uno de los rasgos más
tiene un carácter objetivo, una interrogante válida sería:
sobresalientes de la globalización, está en la base de la
¿cuáles son las condiciones mínimas requeridas para
pérdida de la soberanía y la independencia de los países
alcanzar objetivos de desarrollo económico nacional y
subdesarrollados.
participar en el mercado mundial contemporáneo?
Otro ejemplo elocuente del nuevo contexto es la
Al decir del profesor Jaime Estay,
expansión de las zonas francas industriales para la
exportación que, según estudios realizados por
La globalización económica trae aparejados requerimientos
investigadores caribeños, incorporan muy poco valor
de competitividad, pero en esa dinámica está presente la
agregado a la planta industrial latinoamericana.
relación competencia-competitividad-productividad versus
Esta integración «vertical» no se basa siquiera en la
equidad-cohesión social. Pero la globalización no es un
reciprocidad. En nombre de la modernidad y de la
fenómeno que llegue de forma estructurada y aunque
competitividad, «es una guerra de todos contra todos»,
existen márgenes de limitación de actuación, existe la
posibilidad y debería construirse la posibilidad de que las
como señalara Andrés Olivos, gerente financiero de
políticas nacionales erijan estrategias frente a la
Andina. En ese contexto se reconoce como natural y
globalización. Ello resulta indispensable porque su no
propicio que «la productividad crece gracias a la eficiencia
enfrentamiento atraviesa la vigencia del Estado-nación.17
que traen los despidos».16
La propia desregulación de los flujos de capital
El acercamiento a un diseño económico alternativo
propicia el mayor descontrol y en ocasiones hasta el no
en las actuales circunstancias es de alta complejidad, pero
registro de los movimientos de capital en algunos países.
resulta inevitable. Sin embargo, para que sea realmente
Se trata de un fenómeno de magnitudes tales que los
alternativo tiene que partir de que el eje o centro del
gobiernos no pueden controlar en qué medida la
modelo de desarrollo sea la sociedad y no el capital. La
capacidad de desinversión de los flujos contemporáneos
alternativa al Estado neoliberal tiene que ser democrática,
puede impactar la tasa de acumulación.
con una economía también democrática.
54
55

Tania García Lorenzo
El diseño alternativo tampoco puede ser visto como
y equitativo» a su mercado a las exportaciones de los Estados Unidos,
de países aislados. Diseñar un modelo de integración
además de revestir interés económico para los Estados Unidos. Estar
funcional a las condiciones alternativas no podría ser
de acuerdo en que el compromiso de integración estará basado en la
reciprocidad, sin expectativas de tratamiento «especial y diferencial»
visto solo como un problema de inserción externa, sino
por su menor grado de desarrollo. Véase LC/MEX/L.295, «El grado
como la búsqueda de complementariedades activas de
de preparación de los países pequeños para participar en el ALCA»,
producción-comercialización con rangos de
México, DF: CEPAL, 1995.
competitividad que permitan niveles aceptables de
6. John Saxe-Fernández, Seminario Teoría del Desarrollo, UNAM,
posicionamiento en los mercados.
Instituto de Investigaciones Económicas, México, 1995.
Ese proceso de integración debería, por tanto,
contemplar una agenda tal que mantenga la equidad y la
7. Balance Preliminar de CEPAL, 1995, Nueva York: Naciones Unidas,
justicia social como objetivos en sí mismos.
1995: 35. Vale destacar que estos esquemas han arribado ya a operar
con un arancel externo común, lo que supondrá un incremento de sus
vínculos comerciales. Sin embargo, aunque el MCCA tiene vigente este
arancel común desde mediados de 1993, solo ha incrementado su
Notas
comercio intrarregional en el 2 % de esa fecha a la actualidad.
1.. La evaluación del proceso integracionista latinoamericano ha estado
8. Osvaldo Rosales, CEPAL Chile, Intervención en el Seminario
generalmente fundamentada en el nivel de comportamiento de las
Internacional América Latina y Cuba ante la Economía Internacional
tendencias del comercio intrarregional, así como por consideraciones
Contemporánea. La Habana, Universidad de La Habana, 9-11 de julio
acerca del tipo de acuerdos que han sido adoptados o negociados en la
de 1996.
época. La ausencia de información sistémica y sistemática acerca de los
flujos financieros y otras dimensiones de las relaciones recíprocas ha
9. Un análisis de ese carácter sobre la Asociación de Estados del Caribe
impedido hacer una evaluación a fondo de otros aspectos de las relaciones
puede verse en Tania García Lorenzo, «La AEC: potencialidades y
económicas intrarregionales, e inhibe la posibilidad de analizar el
desafíos», Cuadernos de Nuestra América, La Habana, 11(22), julio-
verdadero impacto que los procesos de integración tienen en el desarrollo
diciembre, 1994: 83-95.
de la economía de los países que en ellos participan.
10. Mientras que Guyana tiene un déficit fiscal del 22 % del PBI,
2. En ocasiones se expone el nivel de afectación que se produce por la
Barbados, Bahamas y Trinidad oscilan entre el 1 y el 3 %. Así, Jamaica
falta de complementariedad de las economías en cuestión y el efecto, en
tiene un índice de precios al consumidor (promedio 1992-1994) del
cuanto a la creación o el desvío del comercio, que provocan la
34,3 % y Surinam del 71,1 %, Barbados tiene el 0,6 % y Belice el 2,0 %.
desgravación arancelaria recíproca y los aranceles externos comunes.
11. Jesús Albarracín, La economía de mercado, Madrid: Editorial Trotta,
3. Las palancas principales —el control de la tasa de inflación; la tasa de
1994.
interés y los tipos de cambio— son utilizadas con objetivos contrapuestos
y con efectos esencialmente contradictorios. La desaceleración del
12. Cable de Prensa. México, IPS, 17 de julio de 1996.
crecimiento del PIB, el carácter estructuralmente deficitario y ascendente
de la cuenta corriente de la balanza de pagos, el nivel creciente de
13. Véase Alberto Arroyo, El Tratado de Libre Comercio. Texto y contexto,
endeudamiento externo y los repuntes ascendentes de los déficits
México, DF: UAM-Iztapalapa, 1994.
presupuestarios, demuestran que se pudieran estar sentando las bases
para una nueva ola depresiva en el desempeño económico
14. Revista América-Economía, Edición Anual 1994/1995.
latinoamericano.
15. Un ejemplo fehaciente está en el proceso de expansión, vía
4. La ronda de negociaciones efectuada por Centroamérica —incluidos
privatizaciones, que tiene lugar en la industria latinoamericana de bebidas
Belice y Panamá— con México, y el establecimiento del Foro
y licores por la Coca Cola y la Pepsi, buscando no solo más ventas,
Mesoamericano, son puntos a considerar. Comoquiera que solo está
sino mejorar los niveles de rentabilidad. Lorenzo H. Zambrano,
aún en el plano de las intenciones y no se convertirá en realidad hasta
ejecutivo principal del grupo CEMEX, cuarto complejo cementero
que la práctica lo demuestre, la forma en que está prevista la aplicación
del orbe, opina que el mundo estará dominado por cuatro o cinco
de los acuerdos «Tuxtla Gutiérrez II» pudiera propiciar una relación
grandes actores, en lugar de decenas de propiedades familiares dispersas
conocida como «ejes y rayos» de México hacia Centroamérica y otros
en cada país. Bajo estos criterios, este consorcio está en un proceso de
países, que facilite la articulación de esas economías con los capitales
ampliar sus propiedades, que ya incluye posesiones en Panamá y
norteamericanos presentes en la economía mexicana. Por otra parte,
Trinidad y Tobago, y, hasta recibir la presión norteamericana por la
este posible, pero aún cuestionado, escenario también podría servir
Ley Helms-Burton, pretendía extenderse hasta incluir la industria
para crear mejores condiciones de expansión al capital mexicano que
cementera cubana.
no tenga opciones competitivas en el Norte, o que vaya siendo
desplazado internamente por la recomposición de los espacios
16. Ricardo Zisis, editor, América-Economía, Edición Anual 1995-1996.
económicos internos del país.
17. Jaime Estay, intervención en el Seminario «América Latina y Cuba
5. La lista más clara y reciente de condiciones de elegibilidad que, según
ante la Economía Internacional Contemporánea», La Habana,
el Gobierno de los Estados Unidos, debe cumplir un país de la cuenca
Universidad de La Habana, 9-11 de julio de 1996.
del Caribe antes de entrar en la negociación de un acuerdo recíproco
con ese país, está contenida en las estipulaciones de la sección 202 de
H:R: 553, todas referidas a las condicionantes marcadas en la OMC o
en los TLC. Sin embargo, añade, entre otras: proveer un acceso «justo
©
, 1996.
56

Universidades en el Caribe
no. 6: 57-65, abril-junio, 1996.
Universidades
en el Caribe
Mariana Serra
Profesora. Universidad de La Habana.
Cristóbal Díaz Morejón
Especialista. Ministerio de Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente.
Por más que pueda parecer una perogrullada, resulta la universidad primada de América y que este tipo de
insoslayable referirse a la diversidad política, social,
institución aflorara en sus dominios; en cambio, el
lingüística, entre otros rasgos, para definir cualquier
sistema implantado por las restantes potencias europeas
aspecto de la realidad pasada o presente de la cuenca del
—no obstante su mayor desarrollo socioeconómico—
Caribe; diversidad que se acrecienta cuando se enfoca un
incidió en que no fuera hasta el presente siglo —al calor
horizonte que incluye la zona continental. Desde 1492,
de los movimientos democráticos y descolonizadores,
este ha sido un espacio altamente permeable al impacto
surgidos después de la II Guerra Mundial— cuando
de los sucesos y movimientos externos, codiciado por su
varios de los centros de educación superior, creados por
relevancia estratégica, y foco de una intensa y continuada
la presión de las élites locales, adquirieran el rango de
miscibilidad y fecunda transculturación de elementos
universidades. El Caribe francófono no contó con ellas
provenientes de distintas partes de Europa, Africa y Asia.
hasta la creación de la Universidad Estatal de Haití, pues,
Si bien la acción ejercida por las diferentes potencias que
pese a que en este país se produjo la primera revolución
se adueñaron de estos territorios (España, Inglaterra,
nacional-liberadora de la región, múltiples factores
Francia, Holanda y otras) acentuó sus contrastes y
externos e internos trajeron como consecuencia un
fragmentación originarios, igualmente imprimió en ellos
retraso todavía patente no solo en la esfera educacional.
signos de semejanza; esto fue así también como resultado
En la subárea anglófona, el Colegio Universitario de la
del proceso neocolonialista. La hegemonía
Indias Occidentales —fundado en 1948 en Mona,
estadounidense llegó a penetrar, incluso, los últimos
Jamaica, y adscrito a la Universidad de Londres—
vestigios del colonialismo europeo en el área. Estos
constituyó el centro de los estudios superiores en el
procesos no solo conforman la unidad plural de la cuenca
marco de la Federación de las Indias Occidentales entre
del Caribe, sino que explican la existencia de una
1958 y 1962, cuando devino una institución universitaria
comunidad regional más allá de las especificidades de cada
autónoma, después de que Jamaica alcanzó su
país o subárea lingüística.
independencia. De manera bastante similar se produjo
El modelo colonialista hispano posibilitó que en una
el advenimiento de la Universidad de Surinam (1968) en
fecha tan temprana como 1538 se fundara en La Española
el Caribe neerlandófono.
56
57

Mariana Serra y Cristóbal Díaz Morejón
Una de las funciones de la cooperación interuniversitaria es
acompañar críticamente el proceso de integración económica y
concertación política y, simultáneamente, coadyuvar al
crecimiento y modernización económica y a la elevación de la
calidad de la vida, en el conjunto de países involucrados en dicha
empresa.
Si en el tipo de universidad vigente en América Latina
autonomía institucional y rango universitario en países
han obrado múltiples aportaciones —destacadamente las
y territorios de habla francesa, inglesa y holandesa, con
del modelo estadounidense, en décadas recientes—, en
muy diferente estatuto jurídico-político. En las dos
el caso de la subregión caribeña esas influencias se han
décadas siguientes, las autoridades gubernamentales y
amalgamado sobre un basamento histórico-estructural
académicas de la Comunidad del Caribe (CARICOM)
británico, francés u holandés, de acuerdo con pasadas y
estuvieron atentas a que la Universidad de las Indias
presentes dependencias. No obstante esas diferencias en
Occidentales mantuviera su carácter de sistema integrado
cuanto a antigüedad y conformación, estas instituciones
al servicio de la educación superior en las excolonias
muestran actualmente —tanto a nivel nacional, como
británicas, al que incorporaron la Universidad de
subregional o regional—, rasgos semejantes, y están
Guyana. Al mismo tiempo se buscó conceder una
igualmente afrontadas a desafíos cuyo vencimiento
autoridad efectiva a los campus de Mona (Jamaica), Cave
reclama una acción cooperada de signo solidario, máxime
Hill (Barbados) y Saint Augustine (Trinidad y Tobago)
cuando la vocación de unidad caribeña se ha fortalecido
y dar una mayor cobertura a los territorios carentes de
con el acuerdo de los respectivos gobiernos de
centros universitarios.
transformar el destino de este espacio.
A diferencia de la Universidad de las Indias
A la luz de fuerzas aparentemente contradictorias,
Occidentales —como sistema transnacional integrado
que inclinan tanto a la diversificación y descentralización
por varios centros—, la Universidad de las Antillas y la
como a la uniformidad y globalización, debe enfocarse
Guayana francesas constituye una entidad única
el problema que representan las actuales disimilitudes
esparcida en tres sedes (Martinica, Guadalupe y
de los sistemas o subsistemas nacionales de educación
Guayana), pero —como aquella— desempeña una
superior en la cuenca del Caribe.
función nucleadora respecto a la educación superior en
Es inherente a la existencia de la Asociación de
los mencionados departamentos franceses; por lo cual,
Estados del Caribe1 una potenciación de las relaciones
aunque autónoma, mantiene fuertes nexos con la distante
interuniversitarias dentro del área, en provecho de sus
metrópoli. Un alto grado de importancia tienen también
aspiraciones inmediatas y de las trascendentes. Ello
esos nexos en el caso de las universidades de Aruba y
demanda, amén de los mecanismos apropiados, estudios
Antillas Holandesas (territorios asociados de diferente
comparativos y prospectivos de sus sistemas o
forma al Reino de los Países Bajos), pero estas
subsistemas nacionales de educación superior, que
universidades están poco interrelacionadas entre sí y con
faciliten identificar hacia dónde deben encaminarse los
la de Surinam, país que, como se sabe, obtuvo su
principales esfuerzos para el intercambio de experiencias
independencia en 1975. Por su parte, las tentativas por
e información; la movilidad de estudiantes, profesores e
extender y modernizar la educación superior en el
investigadores; la ejecución de determinados programas
ámbito hispanófono de la cuenca del Caribe, y al mismo
conjuntos de interés común, y la construcción de un
tiempo imprimir coherencia a los sistemas o subsistemas
estándar subregional de educación superior, que estimule
nacionales, chocaron con los procesos de ajuste
el ascenso global de su calidad y pertinencia. Pero
estructural que alentaron el crecimiento de las
precisamente es acerca de la subregión caribeña donde
universidades privadas, las cuales, en países como El
existen mayores vacíos informativos para llevar a cabo
Salvador, están hoy en peligro de sucumbir ante la
esta tarea.
imposibilidad de acrecentar la calidad de la enseñanza,
Debe destacarse el peso relativo de la cuenca del
y la negativa de apoyo estatal.2
Caribe en la explosión de la educación superior que ha
Aunque, debido a la presión de las fuerzas sociales y
tenido lugar en la región, como parte de un proceso
al propio avance del conocimiento científico y
acelerado por la crisis universitaria de los años 60, que
tecnológico, desde hace varias décadas se viene
fue paliada con una expansión inorgánica, redundante
produciendo una sustancial expansión en la educación
en la deformación estructural, como respuesta a la
superior de los países del Gran Caribe (en cuanto a planta
presión social, entre otras causas. Al vertiginoso
física, claustro profesoral, ampliación de las cuotas de
crecimiento de altos centros de estudios que se produjo
matrícula y diversificación de las opciones en carreras,
desde entonces en el ámbito hispanófono de la cuenca
tipos y métodos de enseñanza, así como en las relaciones
del Caribe, se sumaron los que fueron adquiriendo
interinstitucionales); al mismo tiempo se observan
58

Universidades en el Caribe
signos de burocratización en los sistemas de gobierno y
disfruten de autonomía, posibilita que cada uno de ellos
entrecruzamiento de concepciones asaz tradicionalistas
pueda llevar adelante su propio proyecto —en los
con las innovadoras.
marcos de las políticas y prioridades nacionales—,
No cabe duda de que para hacer fluir por los
encarando con independencia sus asuntos académicos,
derroteros adecuados las misiones y funciones de esos
administrativos y financieros; al tiempo que se
sistemas o subsistemas, se precisa de una flexibilidad
responsabilizan más directamente con los resultados.
estructural que permita la multiplicación, tanto vertical
En estas circunstancias, se han ensayado vías de
como horizontalmente, de vasos comunicantes bien
autofinanciamiento institucional o nuevas fuentes de
articulados para una expedita interactuación a nivel
ingreso (entre ellas, fundaciones) y se han incrementado
interno y con el entorno nacional y subregional. Al
las gestiones de los rectores en beneficio de sus centros,
Estado corresponde evitar el riesgo de que el proceso
mediante el intercambio de experiencias e información,
de descentralización —como consecuencia de su propia
la creación de consorcios, la búsqueda de colaboración
transformación institucional— incida en una mayor
para programas académicos y científicos conjuntos, la
desintegración y segmentación del sistema de educación
ampliación de contratos con las empresas de producción
superior y se exacerben las diferencias cualitativas.
de bienes y servicios, y otras modalidades de
Evidentemente, debido a diversos factores (inflexibilidad
cooperación interuniversitaria e interinstitucional. De
de la normativa jurídica, desiguales capacidades de
inicios de los 90 para acá ha venido aumentando el
gestión y otros), en varios países de la subregión el
número de visitas que, bien de forma individual o
proceso de descentralización en el sector educacional
colectiva —al estilo de la Comisión de Rectores
no ha ido acompañado de una elevación efectiva del
Europeos—, realizan los rectores a otros centros de la
grado de autonomía. Situación sumamente compleja por
subregión caribeña para explorar vías alternativas de
el estatuto político-jurídico y la sujeción a las decisiones
colaboración, lo que ha dado lugar a la firma de nuevos
del poder central en varios países del Caribe.
convenios bilaterales o de protocolos de intenciones.
El 73,4 % de las universidades públicas de la
Incluso universidades de territorios no autónomos
subregión se clasifican como autónomas. El 76,5 % de
(como es el caso de la Universidad de las Antillas y la
ellas están ubicadas en los países hispanófonos (el 90 %
Guayana francesas) han establecido acuerdos con otras
de todas las de Centroamérica lo son, y en los cinco
de la subregión, sin que medien los mecanismos
países restantes, el 75,2 %). En ese índice influye una
diplomáticos del poder político central. Es de esperar,
tradición a la que han contribuido notablemente el
Consejo Superior de Universidades Centroamericanas
por tanto, que los procesos de descentralización, el
(CSUCA) y la Unión de Universidades de América
fortalecimiento de la autonomía institucional y la
Latina (UDUAL). Las dos universidades públicas del
decidida gestión de los rectores, coadyuven a agilizar y
Caribe francófono también son autónomas. Las demás
potenciar los procesos de cooperación horizontal y de
universidades públicas de la subregión están, de una
integración subregional en los campos de la educación
forma u otra, bajo la supervisión estatal. El
superior caribeña y la investigación científica y
financiamiento de este tipo de instituciones proviene
tecnológica.
básicamente de los gobiernos, excepto unas pocas que
En este sentido, es preciso enfatizar que, si bien las
cuentan con donaciones y medios propios de ingreso.
acciones de cooperación e integración universitarias
No obstante, en toda la cuenca del Caribe —siguiendo
están alentadas por propósitos semejantes a los de otras
una tendencia mundial— se está generalizando un
instituciones e iniciativas —convergiendo,
movimiento hacia la búsqueda de fuentes alternativas
yuxtaponiéndose o entrecruzándose con ellas—, no
de financiamiento, debido al impacto de los recortes
pueden enfocarse como un mero epifenómeno de los
presupuestarios estatales a lo largo de los últimos años.3
vínculos comerciales y diplomáticos al interior de la
En cambio, los institutos tecnológicos públicos están
subregión, puesto que constituyen una dinámica
en su inmensa mayoría controlados por el Estado, salvo
integracionista con sus peculiaridades y voluntad
muy escasas excepciones en los casos de Centroamérica,
propias, canalizada por los mecanismos y políticas que
México y Venezuela. Los gobiernos son la principal
le son inherentes.
fuente de financiamiento de estas instituciones, que muy
Una de las funciones de la cooperación
raramente disponen de recursos propios o reciben
interuniversitaria es acompañar críticamente el proceso
donaciones. Por otra parte, el 42,3 % de los institutos
de integración económica y concertación política y,
tecnológicos privados están catalogados como
simultáneamente, coadyuvar al crecimiento y
autónomos, cuadro en el que sobresale Colombia. En
modernización económica y a la elevación de la calidad
el 90 % de ellos, los recursos propios (cobros de servicios
de la vida, en el conjunto de países involucrados en dicha
y variadas iniciativas) constituyen la principal fuente
empresa; de ahí que sea fundamental —también en el
de financiamiento y muy limitadamente reciben algún
caso del esquema configurado por la Asociación de
apoyo estatal o donaciones.
Estados del Caribe— tanto la creación, análisis y
El hecho de que actualmente, en la cuenca del Caribe,
aplicación del conocimiento científico al estudio de los
alrededor de las tres cuartas partes de los centros de
problemas socioeconómicos, biológicos y culturales que
educación superior públicos y la mitad de los privados
frenan el desarrollo integral e integrado de esta
58
59

Mariana Serra y Cristóbal Díaz Morejón
subregión, como la construcción de una nueva ética
las condiciones que rodean la actividad de estudiantes
personal y colectiva, basada en la solidaridad.
y profesores, para ser consecuentes con el nuevo enfoque
Un fuerte escollo al propósito de alcanzar una
del desarrollo.
armonización subregional es el hecho de que todavía
En este sentido, vale destacar que entre 1980 y 1992
no se han logrado resolver las desigualdades y las
se produjo un incremento de la tasa de escolaridad de
dificultades que, para una genuina integración,
tercer nivel, del 11 al 14,4 %, como promedio para toda
presentan los centros de educación superior en la mayor
la cuenca del Caribe, lo cual denota el esfuerzo de un
parte de los países de la subregión. Estos problemas se
conjunto de países por ampliar el acceso a la educación
han planteado sobre la base del reconocimiento de la
superior, aunque, sin llegar a cubrir cabalmente las
función desempeñada por la formación de los recursos
necesidades reales. Las dificultades han aumentado en el
humanos y los procesos de creación, transmisión y
período de 1990-1995, debido en gran medida a las
aplicación de los conocimientos en sus proyectos de
políticas de ajuste estructural aplicadas por la mayoría
inserción ventajosa en la competencia mundial, lo que
de los gobiernos, que se han traducido —como ya se ha
ha determinado un enrumbamiento de estrategias,
dicho— en una notable restricción de las asignaciones
políticas y acciones en el que los mecanismos de control
estatales destinadas a la enseñanza universitaria. Por esa
y evaluación (externos e internos) de dichos procesos
razón, aunque las cifras no lo muestran elocuentemente,
resultan claves.
la calidad de la vida estudiantil en las instituciones
Tres ejemplos bien diferentes ilustran las variantes
universitarias ha venido empeorándose de manera
en las respuestas que se vienen dando actualmente, en
general.5
la subregión caribeña, a los retos de la educación
Para hacer frente al veloz incremento de la demanda
superior: el de Cuba, donde —aun en medio de una
de acceso a la educación superior, aumentó igualmente
adversa coyuntura económica— se ha mantenido un
el número de profesores, los cuales en ocasiones
nivel satisfactorio de inversiones gubernamentales en
recibieron una formación acelerada o comenzaron a
la educación superior, y tanto el Estado como el
impartir las materias insuficientemente preparados, lo
conjunto de los actores sociales han velado porque su
que trajo como consecuencia una merma en la calidad
crecimiento, basado en una verdadera equidad en el
de la enseñanza. Los centros de mayor tradición
acceso, mantenga una adecuada coherencia con los
sortearon el problema mediante la transmisión de
niveles precedentes y se exprese en resultados
experiencias de su avezado claustro profesoral al personal
aportadores a la docencia, la investigación y la extensión
docente de nuevo ingreso y/o dándole a este la
a las exigencias de los planes de desarrollo nacional y
posibilidad de utilizar parte de su fondo de tiempo para
de reinserción en la economía mundial; el de México,
la superación; pero los centros nuevos —con menos
cuyas reformulaciones en estrategia, política y acciones
recursos— tuvieron que comenzar con un personal
están enmarcadas en la apertura de este país al mercado
bisoño, que se fue formando sobre la marcha. En algunos
mundial y, especialmente, por el compromiso
se apeló a la contratación temporal de profesores en el
contraído dentro del Tratado de Libre Comercio de
extranjero, con la doble función de impartir clases y
Norteamérica (TLCNA);4 y, por último, la
formar al personal de nuevo ingreso. Pero en el presente
Organización de Estados del Caribe Oriental (OECO),
todavía encontramos centros universitarios que carecen
cuya estrategia para reformar la educación terciaria
de planes coherentes para la formación y superación de
aspira a movilizar a los gobiernos y al conjunto de los
su personal docente, por lo que, de este modo, se
actores sociales hacia un desarrollo cimentado en la
sanciona la existencia de profesores mediocres y
óptima preparación de los recursos humanos y la
repetitivos. Esa situación ha influido en los marcados
producción de conocimientos y tecnologías, a pesar de
desniveles de calidad que actualmente presenta la
carecer, en el presente, de una adecuada infraestructura
educación superior. Como bien se conoce, dentro de
local. Así, si en el caso de México la respuesta ha sido
los sistemas o subsistemas nacionales de la subregión
enfocada de manera uninacional, asociada a un proceso
caribeña conviven prestigiosos centros de excelencia con
de integración comercial con países de diferente
otros de un nivel muy inferior. Estos contrastes se
desarrollo económico y cultural, en el caso de la
observan nítidamente en Colombia, México, Venezuela
OECO, por el contrario, se sustenta en el interés de
y El Salvador, por solo mencionar algunos países.
conformar un sistema multinacional, conjugando las
Paradójicamente, mientras en un grupo de centros
posibilidades de países con niveles similares, en la
—en especial los más recientemente instituidos— la
tentativa de eliminar los rezagos de la dependencia
mayor parte de sus profesores están contratados a tiempo
colonial en la esfera de la educación superior y no
parcial y se depende para ciertos programas de profesores
superados dentro del esquema integracionista de la
foráneos, en otros se observa que, de manera general,
CARICOM.
los profesores e investigadores están subutilizados y, al
La evolución de nuestra educación superior, sobre
mismo tiempo, subremunerados. En varios países y
todo en el transcurso de las tres últimas décadas, hace
centros de nuestra subregión se han instrumentado
impostergable la búsqueda de mecanismos que
fórmulas heterogéneas dirigidas a elevar la eficiencia y
garanticen no solo alcanzar altos niveles de calidad
calidad de la educación superior, incluyendo un sistema
académica, sino también elevarlos en lo que respecta a
de estímulos a los docentes e investigadores, sobre la
60

Universidades en el Caribe
La evolución de nuestra educación superior, sobre todo en el
transcurso de las tres últimas décadas, hace impostergable la
búsqueda de mecanismos que garanticen no solo alcanzar altos
niveles de calidad académica, sino también elevarlos en lo que
respecta a las condiciones que rodean la actividad de estudiantes
y profesores, para ser consecuentes con el nuevo enfoque del
desarrollo.
base de los resultados obtenidos; sin embargo, no se ha
es necesario resolver a toda prisa, porque la débil
puesto en función de esta finalidad la cooperación
correspondencia entre la oferta curricular y las
interuniversitaria subregional con la misma intensidad
necesidades nacionales de formación de recursos
y coherencia que se observa, por ejemplo, en los espacios
humanos para el desarrollo se han venido agravando año
configurados por el Tratado de Cooperación Amazónica,
tras año. Entre otras iniciativas, quizás pudiera
el Tratado de Asunción y el Convenio Andrés Bello
solucionarse (como sucedió en Cuba, por ejemplo)
para la Integración Educativa, Científica y Cultural de
aumentando la cuota de ingreso en las carreras de interés
la Región Andina. Es preciso que las acciones de
priorizado para la economía nacional, teniendo en cuenta
cooperación interuniversitaria e integración académica
los planes perspectivos, y desarrollando una labor de
—en el marco de la Asociación de Estados del Caribe—
orientación vocacional y captación entre los estudiantes
se dirijan de manera esencial y a pasos agigantados a la
de la enseñanza media.
eliminación gradual de las distinciones entre
Asociada con ello está la falta de vinculación de las
universidades de élite y de masas, que influyen en el
carreras cursadas con la demanda en el mercado laboral,
destino diferenciado de sus egresados, y basamenta la
en buena parte de los países de la subregión. Las
contradicción de que a títulos iguales existan valores y
universidades están formando profesionales que son
ocupaciones distintos. Eso implica, desde luego, una
candidatos al subempleo o al desempleo. La presión
nivelación en la calidad de la enseñanza, tanto a escala
ejercida por grupos de jóvenes que aspiraban a ascender
nacional como del conjunto de la subregión. Para la
socialmente gracias a un título universitario, llevó a que
ingente tarea que ello representa es indispensable
los centros les franquearan el acceso, sin reparar en que
la organización de los dispositivos pertinentes, el
muchas de las carreras escogidas —por vocación, por
máximo aprovechamiento de las experiencias de la
tradición o búsqueda de una mejor remuneración y
CARICOM, el CSUCA, la Asociación de Universidades
prestigio social— estaban saturadas de profesionales en
y Centros de Investigación del Caribe (UNICA) y la
el mercado laboral.
UDUAL, así como contar con el consecuente respaldo
Los centros de educación terciaria que ofrecen
de los gobiernos, las empresas y las fundaciones
carreras cortas han venido surtiendo el efecto de válvulas
interesadas en ello, e incentivar una incorporación
de escape, aliviando la presión sobre las universidades.
responsable de la ciudadanía en general.
Los esfuerzos que se han realizado en ese sentido, desde
La distribución de la matrícula por especialidades
hace varias décadas, son todavía insuficientes, dadas las
en los centros de educación superior de la cuenca del
condiciones específicas de los países del Caribe, las cuales
Caribe evidencia de inmediato el conflicto de que los
demandan enfatizar aún más en las carreras intermedias
estudios y carreras determinantes para los planes de
y tecnológicas. Este es un terreno en el que algunos países
desarrollo nacional y de la subregión son los que poseen
de la subregión (como Cuba y Costa Rica, por ejemplo)
las cifras más bajas, contrariamente a las ciencias sociales,
pueden ofrecer valiosas experiencias.
las económicas y las humanidades6 —las cuales, desde
Por otra parte, entre los mayores reclamos de la
luego, no dejan de tener importancia, sobre todo en el
sociedad a la educación superior, hoy día, está el que los
objetivo de enfocar críticamente y proyectar, desde
recursos asignados sean mejor utilizados y que se
nuestra propia perspectiva, las metas del desarrollo en
produzca un aumento de la eficiencia, sobre todo en
medio de las actuales tendencias globalizadoras. Así, por
cuanto a la relación ingreso-graduación. Para las
ejemplo, las carreras agropecuarias tienen un menor peso
exigencias del desarrollo de nuestros países resulta más
relativo (con excepción de algunos países
ventajoso lograr un alto porcentaje de egresados que
centroamericanos, donde —entre otros factores— ha
abultar anualmente las matrículas con repitentes. Los
tenido determinada influencia el Instituto
países de la subregión no pueden darse el lujo de soportar
Iberoamericano de Ciencias Agropecuarias), a pesar del
tal gravamen. Por eso se debe continuar perfeccionando
peso de la agricultura y la agroindustria en las estructuras
las vías de ingreso a la universidad —sin que ello se
económicas nacionales, y los planes de diversificación y
traduzca en inequidad—, e igualmente desarrollar
modernización de estas esferas. Este es otro dilema que
mecanismos que garanticen la eficiencia y la calidad del
60
61

Mariana Serra y Cristóbal Díaz Morejón
proceso enseñanza-aprendizaje. Aunque determinadas
empresas y los gobiernos, así como de la cooperación
investigaciones recientes han demostrado que los
internacional —por el interés en el estudio y la
problemas de repitencia y deserción, en algunos centros
preservación del patrimonio ecológico y cultural, del auge
del área, están determinados más por el ambiente externo
que se pretende dar al turismo y a otros importantes
y las restricciones en la asistencia económica a los
sectores de interés subregional—, pueda descentralizarse
estudiantes que por la calidad institucional.7
la enseñanza universitaria caribeña.
Transformar la organización académica de la
Justamente, es muy significativa la promoción y/o
educación superior —y con ello las premisas tanto
creación de proyectos o programas para la defensa del
pedagógicas como culturales en las que esta se asienta,
medio ambiente y la educación ambiental, tanto en el
superando la dicotomía entre la formación general y la
sistema de educación formal, como por vías informales,
profesional y una falaz jerarquización y aislamiento de
los que han ido surgiendo del seno de las universidades,
los saberes y aprendizajes—, supone asimismo, como han
para unirse a los de otras instituciones, como el Proyecto
expresado con entera razón varios especialistas, no solo
Mar Caribe de la UNESCO. Gran importancia reviste el
cambiar las políticas y flexibilizar las estructuras, sino
Consorcio de Universidades Caribeñas para el Manejo
también diseñar e implementar una legislación acorde con
de los Recursos Naturales, que agrupa a más de una docena
ese proceso e imprimirle con ello un sentido sistémico.
de universidades, varios centros de investigación y otras
Como parte de los esfuerzos por extender y elevar la
instituciones colaboradoras, a instancias de la UNICA.
calidad de la educación superior en el área del Gran Caribe,
A esa misma finalidad se encaminó la propuesta de un
la cooperación interuniversitaria subregional debe otorgar
grupo de docentes de la Universidad Nacional Pedro
mayor peso a la innovación y a las modalidades no
Henríquez Ureña (UNPHU) y del Instituto Tecnológico
tradicionales como la educación abierta y a distancia, entre
de Santo Domingo (INTEC) —ambos centros
otras que han venido aplicándose para dar respuesta a las
universitarios dominicanos privados—; y, más
crecientes demandas de acceso —que exceden las
recientemente, las gestiones para organizar un consorcio
capacidades de planta, profesores disponibles con la
entre un grupo de universidades caribeñas (de Belice,
adecuada preparación, etcétera. Estos son asuntos que
Cuba, Guatemala, Honduras, México y Jamaica), con
continúan suscitando debates y propuestas teóricas y
vistas a la implementación de programas académicos sobre
prácticas en todo el mundo, y a los que prestan atención
el medio ambiente, particularmente sobre ecología
varios organismos y organizaciones —fundamentalmente
marina. Los centros de educación superior están llamados
los encargados de la educación de adultos y la enseñanza
a desempeñar un papel protagónico en la protección
a distancia—; en el caso específico de nuestra subregión,
ambiental, pues en ellos se concentra —como en ninguna
resulta de interés el quehacer de la Red Caribeña para el
otra institución— el grueso de los especialistas más
Desarrollo de Inovaciones Educacionales (CARNIED),
capacitados para llevar adelante programas de formación,
debido a su impulso y difusión de la innovación
adiestramiento e investigación científica, los que resultan
educacional y sus repercusiones en el futuro de la
de vital interés para nuestra subregión, donde tiene lugar
educación terciaria.8
un desarrollo turístico acelerado, una industrialización
Algunos de los convenios bilaterales firmados entre
en ascenso y una tentativa de diversificación agrícola para
universidades de nuestra subregión confirman la
la exportación, en mercados altamente competitivos, lo
conveniencia de poner al servicio de las relaciones de
cual podría agravar los problemas de contaminación y
cooperación los mecanismos de la educación a distancia
las afectaciones a los ecosistemas, si no se toman las
(tanto convencionales como los telemáticos). Asimismo,
medidas y previsiones que atenúen los efectos negativos.
en varios de estos documentos se plasma el interés por la
Pero existe otro problema al que parece que nuestras
aplicación del principio de la extramuralidad —definido
universidades no han prestado el mismo nivel de atención,
como la posibilidad de que grupos de estudiantes
en cuanto a una respuesta integrada y eficiente. Se trata
oficialmente matriculados en una de las universidades
de las diferencias lingüísticas generadas por la diversidad
involucradas puedan continuar su carrera en la otra,
de metrópolis actuantes en la cuenca del Caribe. El
manteniendo esencialmente su plan original—, con las
plurilingüismo en esta área se expresa —como bien se
variantes adecuadas a los intereses y necesidades de las
conoce— no solo en la vigencia oficial de las diferentes
instituciones en cuestión. Por lo general, en dichos
lenguas de las ex y actuales metrópolis, sino también en
acuerdos se ha puesto de relieve que resulta indispensable
las variadas formas peculiares del habla, nacidas a nivel
una armonización —aunque sea mínima— de los
local en el proceso de transculturación: el creole en el
programas vigentes en esas universidades, y el beneficio
Caribe francófono; el dialecto del Caribe anglófono, el
que ello reportaría a la integración subregional.
stranantongo y el papiamento en la zona neerlandófona,
Uno de los problemas cuya solución es imprescindible
donde Surinam constituye un caso extremo, puesto que
acometer progresivamente es la alta concentración de
allí conviven alrededor de dieciséis formas de expresión
centros de educación superior y de investigación —y
hablada. A todo ello se suman las lenguas de las
consecuentemente de profesores, investigadores y
comunidades indígenas en los países continentales de la
estudiantes— en las capitales de los países de la cuenca del
subregión.
Caribe. Es presumible que en el futuro, con la
Resulta obvio, por tanto, que la enseñanza de idiomas
participación conjunta de las comunidades locales, las
extranjeros es un factor clave para los proyectos de
62

Universidades en el Caribe
Las universidades están formando profesionales que son
candidatos al subempleo o al desempleo. La presión ejercida
por grupos de jóvenes que aspiraban a ascender socialmente
gracias a un título universitario, llevó a que los centros les
franquearan el acceso, sin reparar en que muchas de las carreras
escogidas —por vocación, por tradición o búsqueda de una mejor
remuneración y prestigio social— estaban saturadas de
profesionales en el mercado laboral.
cooperación y procesos de integración en la cuenca del
sido la ausencia de un cuerpo de premisas que, aceptado
Caribe, así como para el desarrollo de sectores
generalizadamente, sirva de base para la armonización
económicos priorizados, como el turismo. Sin embargo,
de estrategias de educación superior a nivel subregional.
aunque se ha venido intentando sortear los obstáculos
Ello ha sido puesto de relieve por varios especialistas,
en la consecución de objetivos semejantes,9 parece difícil
como Kathleen Drayton —de la Facultad de Educación,
que de inmediato pueda instaurarse en nuestro contexto
campus de Cave Hill de la Universidad de las Indias
un programa como el LINGUA de la Comunidad
Occidentales—, al resumir una de las sesiones de una
Europea, el cual ha constituido un vehículo privilegiado
reunión sobre estrategias de formación de recursos
para el intercambio de estudiantes y profesores, así como
humanos en el área caribeña. En esa oportunidad
para fomentar un sentido paneuropeo.
también se enfatizó en el alto costo y los problemas de
Si bien muchas universidades han ido perfeccionando
financiamiento afrontados en relación con los programas
sus programas de pre y posgrado en la enseñanza de
de formación y capacitación de los educadores y de las
idiomas —sobre todo con vistas al desarrollo del turismo
investigaciones sobre educación. Se persistió en la
en sus respectivos países—, esta es una cuestión que
necesidad de acoplar nuestros sistemas informativos
merece ser respaldada rápidamente por los gobiernos,
sobre educación superior y capacitación y del
las empresas y las organizaciones internacionales
establecimiento de un banco de datos sobre las
interesadas en ello; así como poner en función suya las
experiencias acumuladas en la subregión, que tendría
relaciones entre las universidades del área.10 Poco
entre sus objetivos la preservación de nuestros
lograremos si el aprendizaje de idiomas comenzado en
especialistas; y asimismo de acometer una investigación
la secundaria (e incluso en la primaria) no alcanza
acerca de la influencia de la ayuda financiera y la
funcional continuidad en el nivel universitario, no solo
asistencia técnica externa en nuestros empeños de
con el dominio de una lengua extranjera, sino —de
investigación y desarrollo. Aunque estos asuntos suelen
acuerdo con nuestro contexto subregional— de, al
tratarse en foros como los de la UNICA, es preciso
menos, dos de ellas.
divulgar de manera más amplia lo que están realizando
Dentro del estudio de las lenguas en nuestras
nuestras universidades, especialmente en lo que atañe a
universidades se contempla lo relacionado con las
la cooperación y la integración subregional.
modalidades peculiares del habla popular en cada uno
Por otra parte, en el transcurso de los últimos cinco
de los países y territorios de la cuenca del Caribe. En
años han venido incrementándose los estudios y
cuanto al creole, por ejemplo, los estudios lingüísticos
reuniones en torno a las políticas públicas en educación
ya tienen tradición y riqueza, como el papiamento o las
superior de los países caribeños. Estas acciones —entre
lenguas indígenas habladas en las zonas continentales de
las que se inscriben reuniones como la convocada por la
nuestra subregión; pero aún queda mucho por hacer,
Universidad de Puerto Rico, en octubre de 1995—
sobre todo para poner esos conocimientos —desde la
constituyen importantes avances en la tentativa de
perspectiva de estudios relacionados con el derecho
alcanzar una armonización para el trazado de estrategias
lingüístico comparativo— en función del desarrollo de
subregionales.
la cultura nacional y de las relaciones interculturales al
La débil fluidez que ha caracterizado, por diversos
interior de los países y de toda la subregión. Tanto en el
motivos, las interconexiones entre los centros de
caso de Haití como en el de algunos países
educación superior en la cuenca caribeña —incluidas las
centroamericanos, las universidades pueden devenir
universidades— ha impedido una utilización más
eficaces colaboradoras en la campaña promovida por la
racional y efectiva de los recursos materiales, humanos
UNESCO de alcanzar la educación para todos en el año
y financieros, de los que podría disponerse en conjunto,
2000, lo cual supone erradicar las elevadas cifras de
para ponerlos en función de resolver los problemas que
analfabetismo que aún mantienen algunos de esos países.
los aquejan y que no han podido solventar cabalmente
Otro de los frenos al proceso de integración y
por separado: desniveles en la calidad de la enseñanza;
cooperación interuniversitaria en el ámbito caribeño ha
limitaciones presupuestales; alta demanda de acceso;
62
63

Mariana Serra y Cristóbal Díaz Morejón
insuficiencias en la capacidad y en el mantenimiento de
no retornar a sus países de origen, deslumbrados por los
la instalaciones; escasa utilización de las modernas
«atractivos del Primer mundo».
tecnologías para innovar el proceso de enseñanza-
Las nuevas modalidades de colaboración
aprendizaje, la transferencia y acumulación de
interuniversitaria a nivel subregional alimentarían
información, experiencias y tecnologías, entre otros.
relaciones solidarias, regidas por la equidad. Ello
Varios factores acentúan esta laxa articulación; entre
conllevaría realizar un inventario de las ofertas y una
ellos la aparente falta de comunicación entre las
precisa identificación de las demandas, a la hora de
asociaciones de instituciones educacionales públicas y
establecer los convenios. Entre los países con
las de las privadas, así como aquellas de sectores
posibilidades de asimilar cantidades significativas de
profesionales. No se pretende, por supuesto, que pierdan
estudiantes para cursar la educación superior
su identidad y autonomía, sino que logren una mayor
(universitaria o no) están Cuba (con suficientes
coordinación, de manera que puedan identificar mejor
capacidades en infraestructura y disponibilidad de
las zonas urgidas de una acción cooperada, canalizar
profesores, en un grupo de centros de excelencia),
adecuadamente iniciativas valiosas, evitar repeticiones
México, Venezuela, Colombia, Costa Rica y Puerto
que devengan dilapidación de recursos, etcétera.
Rico. Estos países pudieran cubrir una parte de las
Una vía de acercamiento que es preciso explotar al
necesidades del Caribe anglófono (especialmente de la
máximo en esta etapa son las investigaciones conjuntas
OECO), del Caribe de habla holandesa, de
—interuniversitarias e interinstitucionales—, sobre todo
Centroamérica e incluso del Caribe francófono, si llegara
en los conocimientos de frontera. Al igual que en las
a necesitarlo. Las diferencias idiomáticas no serían un
actividades docentes, algunos de los actuales convenios
obstáculo, toda vez que los países del Caribe Oriental
bilaterales de investigación en varios campos de la ciencia
expresaron, en 1991, la aspiración de que el 90 % de sus
y la tecnología pueden alcanzar, con su extensión, el
egresados de segunda enseñanza dominara con fluidez
carácter de programas multinacionales. Significativamente,
un idioma extranjero y el 50 %, dos. Por otra parte,
en nuestras universidades se concentra el 56 % del total
muchos profesores de los centros superiores del área
de profesores e investigadores dedicados a actividades
dominan perfectamente el inglés, además de que pudieran
de investigación-desarrollo en la cuenca del Caribe.
organizarse cursos de formación acelerada o de
El doctor Juan R. Fernández, rector de la Universidad
perfeccionamiento de idiomas para los docentes, a fin
de Puerto Rico,11 cuestionaba, con toda razón, que
de cumplir los convenios.
siendo relativamente fáciles los convenios con los
No hace falta argumentar exhaustivamente la
necesidad de establecer una entidad encargada de activar
Estados Unidos e incluso con Europa, «¿cómo es posible
los mecanismos para la armonización de estrategias y
que sea tan difícil lograr un intercambio de profesores,
programas académicos, y la acreditación de la calidad
investigadores o estudiantes entre la República
de las instituciones y los egresados, enlazando —en el
Dominicana y Puerto Rico?, ¿es en verdad tan difícil o
contexto de la Asociación de Estados del Caribe—
es que lo hacemos difícil nosotros?» Y se preguntaba:
organismos subregionales (como el CSUCA y el ACTI)
«¿Por qué no es posible superar las pequeñas dificultades
con los nacionales, para —entre sus múltiples
que puedan haber impedido este intenso intercambio
contribuciones— posibilitar la expedita movilidad de
que debería existir entre nuestros países cuando lo
estudiantes, profesores e investigadores dentro de la
ubicamos en el contexto de lo positivo que este
subregión, así como una más rápida implementación del
intercambio resultaría?» Para él, además, había llegado
Convenio Regional de Títulos, Diplomas y Estudios de
el momento de pasar de las palabras a los hechos.
Educación Superior para América Latina y el Caribe.
Indicaciones de este tipo resultan altamente
Unido al fortalecimiento de los lazos
significativas, sobre todo si se tienen en cuenta las
interuniversitarios e interinstitucionales en el ámbito
palmarias reducciones en las ofertas de becas en
caribeño, las tendencias actuales favorecen el
universidades europeas y norteamericanas para
enriquecimiento de los vínculos de colaboración e
estudiantes y asociados procedentes de los países del
intercambio con otras universidades y con centros de
Caribe. De ahí que se haya hecho mucho más perentorio
investigaciones de diversas partes del mundo, lo cual
satisfacer esa demanda dentro de la propia subregión, la
también necesita ser gestionado por nuestras
cual dispone de potencialidades para ello. Orientar los
universidades, a fin de acortar la distancia que nos separa
esfuerzos en esa dirección reportaría ventajas
de las instituciones del Norte.
económicas, sociales y culturales. En primer lugar, se
Por último, no podemos conformarnos solo con
reducirían de forma considerable los gastos, pues estos
graduar profesionales altamente calificados, con vistas
programas de colaboración se establecerían sobre la base
al crecimiento económico y la inserción ventajosa en la
de beneficios y costos compartidos. En segundo lugar,
competencia mundial; es preciso rescatar también la ética
contribuiría a fortalecer la identidad cultural caribeña.
profesional —como un componente, tradicionalmente
Y finalmente, no se perdería el sentido de pertenencia a
importante, de esa formación, cualquiera que sea la
países pobres y el pensar desde esa perspectiva, lo que
modalidad y especialidad cursada— y junto con ella la
disminuye el riesgo de que nuestra zona siga perdiendo
ética ciudadana, es decir, un sentido de responsabilidad
una gran cantidad de sus talentos promisorios, que suelen
y servicio que, sin menoscabo del patriotismo, esté
64

Universidades en el Caribe
comprometido con los intereses tanto de la subregión
externo influye más poderosamente en la conducta de los estudiantes
como de la región, y sea expresión consustancial del
que la calidad institucional, y que la ayuda financiera resulta un elemento
humanismo. Estos propósitos no pueden hacerse
sustancial.
depender de meros enunciados en las políticas
8. En el contexto caribeño, las universidades públicas exhiben un
institucionales, ni de cambios curriculares, sino que
incremento sostenido de innovaciones como la educación abierta y a
requieren de una remodelación de carácter cultural, a la
distancia y la implementación de la educación continua, a fin de canalizar
que deben contribuir consciente y activamente nuestras
y solventar las presiones masivas para obtener una formación profesional
—que comprende un amplio número de personas que, por diversas
universidades.
razones, han rebasado la edad establecida para seguir cursos regulares o
que no pueden abandonar sus puestos de trabajo para emprender,
actualizar o perfeccionar una formación avanzada. El más elevado
Notas
porcentaje de instituciones enfrascadas en esas acciones se concentra en
los países hispanófonos —fundamentalmente Colombia, Cuba y
México—, por una cuestión meramente aritmética, porque, bien
1. Se constituyó en julio de 1994 en Cartagena de Indias, Colombia.
examinado, no puede olvidarse que el sistema constituido por la
Inicialmente expresaron su voluntad de integrar la AEC, como
Universidad de las Indias Occidentales ha logrado vertebrar una
miembros plenos, los países miembros de la CARICOM (Antigua y
importante armazón para la educación continua, que cubre los países
Barbuda, Bahamas, Barbados, Belice, Dominica, Granada, Guyana,
de la CARICOM e incluso las dependencias de Gran Bretaña, así como
Jamaica, San Cristóbal y Nevis, Santa Lucía, San Vicente y las
para la enseñanza a distancia, extendida por varias islas, por medio de la
Granadinas, y Trinidad y Tobago), cinco de Centroamérica (Costa Rica,
red UWIDITE; igualmente, la Universidad de las Antillas y la Guayana
Guatemala, Honduras, Nicaragua y Panamá), los miembros del Grupo
francesas [UAG] garantiza la educación continua y la enseñanza a
de los Tres (Colombia, México y Venezuela) y cuatro no incluidos en
distancia en los Departamentos Franceses de Ultramar; las universidades
los esquemas integracionistas previamente conformados en el área (Cuba,
puertorriqueñas también ofrecen estos servicios. Sin embargo, el
Haití, República Dominicana y Surinam). Como miembros asociados
porcentaje disminuye en relación con las universidades privadas y
podían participar los territorios vinculados a Francia, Gran Bretaña y
—por la razón antes indicada— la mayor cifra corresponde a la subárea
Holanda, porque Puerto Rico e Islas Vírgenes Estadounidenses se
hispanohablante —incluyendo en este caso a Puerto Rico. Obviamente,
autoexcluyeron. Al celebrarse la Cumbre inaugural en agosto de 1995
el trabajo académico en la mayoría de esta clase de instituciones ha
se había sumado El Salvador.
permanecido circunscrito a la oferta de programas de estudios regulares,
manteniéndose bastante ajena a las tentativas de apertura hacia el entorno
2. Los países de la cuenca del Caribe disponen en la actualidad de
externo, mediante los sistemas innovativos, debido tanto al interés por
aproximadamente 1 181 centros de educación superior; 362 son
complacer las demandas de su clientela como a la falta de recursos, en
universidades (139 públicas y 223 privadas), 264 institutos tecnológicos
algunos casos. En relación con los institutos tecnológicos, se observa el
(205 públicos y 59 privados) y 555 centros de educación superior de
mismo fenómeno —en el que se destacan países como Cuba y México—
otro tipo (406 públicos y 149 privados).
e igualmente respecto a los centros de educación superior de otro tipo;
en estos últimos habría que mencionar a República Dominicana y en
3. El 48,4 % de las universidades públicas del área aparecen registradas
especial a Colombia, la cual sobresale singularmente en cuanto a los
como autónomas. Sobresale la cifra de los países hispanoparlantes con
privados.
el 48,1 % (en Centroamérica representan el 63,4 % y en los otros cinco
países el 49,7 %). En Puerto Rico lo son el 100 %. Se trata de centros sin
9. En la IV Conferencia de América Latina y el Caribe sobre Idiomas
fines de lucro, vinculados en un gran por ciento a órdenes religiosas y
—celebrada el pasado año en la Universidad de Guyana, con la
grupos empresariales, cuyos ingresos provienen fundamentalmente del
colaboración del Instituto Nacional de Educación Superior,
cobro de los servicios prestados, algunas donaciones y, en muy contados
Investigación, Ciencia y Tecnología (NIHERST) de Trinidad y Tobago
casos, del apoyo de los gobiernos locales y del federal.
y la participación de representantes de varias universidades, organismos
y organizaciones internacionales involucrados en estos asuntos— se
4. Una interesante apreciación de las respuestas gubernamentales a los
arribó a importantes consideraciones, expuestas en una Declaración
actuales desafíos internos y externos de la educación superior mexicana
definidora de lineamientos para el trabajo futuro. A ello se suma que,
es la de Axel Didrikson en «La educación superior ante el desarrollo
durante la preparación de la VII Bienal de Consulta CARNIED-
integrador», Diálogo, Caracas, (13), septiembre, 1994:10-2.
UNESCO sobre Innovaciones Educativas —celebrada en La Habana
en julio de 1995 con la asistencia de representantes oficiales de 14 islas y
5. En 1980 existían, aproximadamente, unos 2 040 780 estudiantes y
varias organizaciones internacionales— la enseñanza de idiomas fue
178 458 profesores en el conjunto de los centros universitarios del Gran
propuesta como uno de los puntos focales del programa para 1996-
Caribe, lo que daba como resultado una relación alumno-docente
1997.
de 11,4 : 1. Para 1992, el número de estudiantes había ascendido a unos
4 149 490 (el doble respecto a 1980; de ellos, el 95,2 % correspondía a
10. Una de las iniciativas en esa dirección es que la cátedra DEA Caribe,
los países hispanófonos: a Centroamérica el 8,6 y el 86,6 % restante
América Latina y Norteamérica de la Universidad de las Antillas y la
repartido entre Colombia, Cuba, México, República Dominicana y
Guayana francesas ha instaurado la opción del francés como lengua
Venezuela) y la cifra de profesores a 298 985 (tuvo un crecimiento del
extranjera que, inicialmente abierta para estudiantes de la Universidad
67,5 % en relación con el lapso indicado), lo que situaba la proporción
Autónoma de Santo Domingo, como programa piloto, gracias al
alumno-docente en 13,9 : 1 (el incremento fue de casi tres estudiantes
financiamiento del FIC, en la actualidad se ha extendido a Jamaica,
por profesor).
Puerto Rico y Cuba.
6. Dentro de la matrícula total en pregrado, las áreas del conocimiento
11. Juan R. Fernández, La educación universitaria, el desarrollo y la
que presentan mayor densidad de manera global son: ciencias de la
integración latinoamericana (Palabras pronunciadas al otorgársele la
educación y formación profesoral, enseñanza comercial y administración
distinción de Profesor Honorario en la Universidad Iberoamericana de
de empresas y ciencias sociales y del comportamiento. En la formación
Santo Domingo, República Dominicana, el 12 de julio de 1990), Río
posgraduada la concentración se encuentra en las mismas especialidades
Piedras: Universidad de Puerto Rico, División de Impresos, s/f: 13.
más ciencias médicas, sanidad e higiene.
7. Por ejemplo, un estudio sobre la retención que ha venido
desarrollándose durante cuatro años en la Universidad Interamericana
de Puerto Rico, en colaboración con la Oficina local de la Junta de
Colegios, demuestra en sus resultados preliminares que el ambiente
©
, 1996.
64
65

Isabel Jaramillo Edwards
no. 6: 66-72, abril-junio, 1996.
El Caribe
y los Estados Unidos:
la frontera marítima
Isabel Jaramillo Edwards
Investigadora. Centro de Estudios sobre América.
Una cosa es segura...el Mar Caribe es la llave
el comercio. En el caso de una hipótesis de guerra, el
estratégica de dos grande océanos, el Atlántico y el
control de la cuenca del Caribe siempre fue y es una
Pacífico, nuestras propias fronteras marítimas
premisa prioritaria.4
principales.
Alfred Thayer Mahan
(1897)
El Caribe en la imaginación geopolítica antes
de la guerra fría
l Caribe, percibido actualmente —más que nunca
antes— como zona estratégica,1
E
ha sido calificado
Ya en la década del 20, los Estados Unidos asentaron
—de acuerdo con la coyuntura de que se trate— de
su hegemonía en la región, frente a una Europa debilitada
«mediterráneo americano», la «cuarta frontera», el «patio
por la guerra. Los cuatro ejes de la política exterior de
trasero» y, últimamente, como el «pórtico» de los
los Estados Unidos hacia América Latina y el Caribe,
Estados Unidos.
antes de la II Guerra Mundial fueron:
Desde fines del siglo XVIII, la política norteamericana
para el hemisferio occidental —concebida a partir de
1. Remplazar paulatinamente a las potencias coloniales
enfoques geopolíticos2— se ha caracterizado por los
y asentar su papel neocolonial en la región. Formular
diferentes grados de atención prestada y las
su política —del «buen vecino»— encaminada hacia
intervenciones llevadas a cabo en una zona que considera
lo que percibía, desde su punto de vista, como
su esfera de influencia.
objetivos más positivos.5
En el siglo pasado el Caribe y el Golfo de México
—como entidades diferenciadas— fueron disputados
2. La adquisición de una gran variedad de materias primas
«preeminentemente [como espacios decisivos] en el
necesarias para su defensa y preparación para la guerra.
dominio de las potencias marítimas».3 La relevancia
adjudicada a la zona, a partir de su importancia en cuanto
3. En cuanto a la defensa, desarrollar una política de
vías marítimas de comunicación, era fundamental para
control de los extranjeros asentados en la región, ya
66

El Caribe y los Estados Unidos: la frontera marítima
La invasión a la pequeña isla de Granada, en el Caribe oriental,
para la cual la OECO fue instrumento fundamental, respondió
a razones geopolíticas y al paradigma de la contención del
comunismo. La invasión a Panamá en 1989 marcó un hito en
cuanto a la persistencia de la opción unilateral y a la búsqueda
de nuevos argumentos intervencionistas.
que no estaban dispuestos a permitir una
operaciones en el Caribe, constituía una de las bases
manipulación exitosa de las minorías fascistas
navales fundamentales.9
partidarias del Tercer Reich, en el hemisferio
Pero más importante aún era Panamá, debido al canal
occidental.6
interoceánico. Perspectivamente, se estimaba que
4. Apoyar a los aliados, para evitar el avance de los
Nicaragua podría aumentar su valor en el esquema
alemanes en Africa del Norte, y protegerse de un
geopolítico, ya que había intenciones de construir una
ataque militar directo que podía ser facilitado por el
segunda vía interoceánica a través de su territorio y
establecimiento de estrechas relaciones militares de
Hitler con América Latina y el Caribe. Algunos
establecer allí otra base naval,10 proyecto que no llegó a
autores sostienen que esta medida fue dictada por la
concretarse.
debilidad militar de los Aliados y de los Estados
Desde el punto de vista militar, los elementos de la
Unidos.7
estrategia norteamericana en esta etapa se relacionaban
con los tres principios generales de la guerra:
Los métodos de aplicación de la Doctrina Monroe
concentración, acción ofensiva, y seguridad.11
—en primer lugar, la no aceptación de la expansión
La concentración se refiere a la idea del almirante A.T.
territorial de Europa y Asia en el hemisferio occidental—
Mahan, consistente en enfrentar al enemigo con una
variaron con el tiempo y han mostrado diferentes facetas.
fuerza superior en un punto y un tiempo decisivos. Con
Durante la II Guerra Mundial, se planteaba que la
este principio se relaciona la distribución y despliegue
opinión pública norteamericana habría reaccionado
de bases norteamericanas en el área y la importancia de
vigorosamente frente a un intento secesionista de la
las fronteras marítimas y del Canal de Panamá señaladas
población alemana de Río Grande do Sul, en el Brasil,
arriba.
partidaria de ubicarse bajo la protección del Reich
La acción ofensiva deriva su fuerza y se logra por
alemán. Se consideraba que, de crearse una situación de
medio de la concentración. No basta la defensa ante una
este tipo, se hubieran dado condiciones militares
invasión, sino que la acción ofensiva es central, ya que
negativas para los Estados Unidos en el Atlántico Sur.
los Estados Unidos
Cabe señalar que América Latina y el Caribe
dependían militarmente —durante la guerra— de la fuerza
tiene[n] muchos intereses externos en mar y tierra, la
naval norteamericana. Este segundo aspecto, en términos
destrucción e interrupción de los cuales causaría profundas
más generales, implicaba posibles enfrentamientos con
dificultades al país, comparables a un desastre como lo sería
potencias europeas o asiáticas que pudieran tener
la invasión de un ejército enemigo y mucho más serio en
sus efectos negativos que el esfuerzo necesario para proteger
intereses en América Latina y el Caribe. En la etapa el
estos intereses externos.12
gobierno norteamericano esgrimía el anticomunismo
como justificación para una potencial intervención.8 Un
A partir de esta lógica de la acción ofensiva, se
aspecto que se destacaba como el más importante e
desarrollará la teoría de la «disuasión», uno de los
instrumental para aplicar la Doctrina Monroe, era el
conceptos básicos de la política exterior de los Estados
desarrollo del sistema interamericano.
Unidos durante la guerra fría.
El tercer punto de consenso era la cuestión
La seguridad, como principio de la guerra, se refiere
migratoria, percibida como un asunto de política
a las propias fuerzas e intereses vitales utilizados en
exterior. En este sentido, el consenso se orientaba a
contra de la acción ofensiva del enemigo y, además, al
restringir la inmigración extranjera y a la exclusión total
establecimiento de un fundamento firme para la acción
de la inmigración oriental. Las hipótesis de conflictos se
de los Estados Unidos. Desde esta perspectiva, para ellos
referían a Japón y a México.
era relevante la necesidad de contar con bases en el
La posibilidad de una intervención futura en el Caribe
Pacífico13 y se consideraba la posibilidad —poco
era una constante. El interés de los Estados Unidos en
probable— de enfrentar una guerra simultánea en dos
Cuba, desde el punto de vista militar, no solo estaba
océanos: en uno se organizaría la defensa y la ofensiva
determinado por su posición geográfica, sino también
en el otro. Dentro de esta lógica, se incrementaba la
por la importancia que concedían al territorio que
importancia del Canal de Panamá.14 La duplicación de
ocupaban en Guantánamo que, en un teatro de
escenarios bélicos era también una constante en los
66
67

Isabel Jaramillo Edwards
planes de contingencia de las fuerzas armadas
brindaba el hemisferio, en tanto almacén de materias
norteamericanas.15
primas necesarias para la industria de la guerra, y cuya
En la preguerra, los especialistas norteamericanos
demanda era creciente.
estimaban que, desde el punto de vista de su seguridad,
En el marco de sus preparativos para entrar en la
los Estados Unidos aún no necesitaban una segunda
guerra, los Estados Unidos intensificaron su activismo
flota,16 ya que no existían las condiciones para la
neocolonial en América Latina y el Caribe, que sirvió
unificación de las dos flotas enemigas, las de Alemania
para imponer las bases de lo que, después de Pearl
y Japón. Aunque no se consideraba probable un ataque
Harbor, sería un pie forzado para una relación intensiva
al Canal de Panamá, los Estados Unidos tomaron, debido
entre los Estados Unidos y las repúblicas americanas.
a su importancia estratégica, todas las medidas para su
defensa.
Siguiendo la lógica de A.T. Mahan, quien planteaba
Otra vuelta de tuerca a la guerra fría
que «los valores comerciales no pueden separarse de los
militares en la estrategia naval, ya que el principal interés
Después de la II Guerra Mundial, los Estados Unidos
en el océano se relaciona con el comercio»,17 se definía
orientaron su atención hacia Europa y el Cercano y
la frontera marítima de los Estados Unidos en el
Medio Oriente. América Latina pasó a ocupar un nivel
Atlántico como una línea costera que iba desde el estado
relativamente bajo en la escala de prioridades de su
de Maine al de la Florida, y desde allí hasta Puerto Rico,
política exterior. El dominio norteamericano en la región
las Islas Vírgenes y el Golfo de México, este último
emergía fortalecido de la guerra, y se proponía no
definido como el «lago americano». Tal análisis destacaba
desatender los logros en la relación interamericana.19
la importancia geográfica y económica del este de los
Al enfoque geopolítico y a la Doctrina Monroe se
Estados Unidos y la significación clave del Caribe. A
agregó la idea de la contención del comunismo; desde
partir de esta línea de pensamiento, se estructuró una
entonces, estos serían los elementos centrales de su
cadena de bases en el territorio de los Estados Unidos y
política hacia la región, matizada con diversos grados
en el Caribe, cuya principal misión era proteger la vías
de intervencionismo, de acuerdo con la coyuntura y el
caso específico.20 En términos geoestratégicos, el triunfo
marítimas de comunicación.
de la Revolución cubana en 1959 fue el desafío mayor
El «mediterráneo americano», estaba compuesto por
que enfrentaría esta política en el Caribe.
una serie de islas, que conformaban una barrera natural
En los años 80 —en el marco de un nuevo énfasis en
protectora, y un complejo de bases de avanzada
las doctrinas de la geopolítica y en el mantenimiento de
destinado a expandir la influencia estadounidense hacia
las esferas de influencia—, el control y la política
el Atlántico. En este contexto, la base naval de
norteamericana hacia la cuenca del Caribe no sufrieron
Guantánamo, aunque no estaba fortificada, constituía
alteraciones en los ejes centrales que los habían guiado,
un baluarte insustituible, dado el control que ejercía
sino que se reperfilaron tácticamente.21 En el terreno
sobre el Paso de los Vientos y todo el Caribe, y como
político, los presupuestos de la contención fueron
un enclave de gran utilidad en medio de las rutas de
traspolados en el ámbito de la guerra fría.22
reaprovisionamiento naval y aéreo.
Por aquel entonces, la preocupación militar de los
El sistema de bases se articuló —siguiendo la estrategia
Estados Unidos se centró en cuestiones de orden
de la priorización de las fuerzas navales— partiendo del
permanente, como las vías marítimas de comunicación23
territorio de los Estados Unidos y luego escalonándolas,
y los puntos claves de «estrangulamiento» —esto es, el
de manera que eslabonaran una cadena a lo largo y ancho
Canal de Panamá, el Paso de los Vientos, el Canal de
del Caribe. La zona más débil era el Caribe oriental,
Mona y el Estrecho de la Florida—, todos de importancia
donde no había fortificaciones. Se analizó entonces la
estratégico-económica y vitales para el comercio, el
conveniencia de establecer una base en Trinidad o
transporte de petróleo y, en el terreno militar, para los
Barbados, y otra al sureste del Caribe, necesaria para el
suministros a la OTAN, en el caso de que se produjera
control naval del Atlántico Sur. Esta zona también era
una conflagración en Europa.24
importante para la defensa del Brasil, por estimarse que
En cuanto al Caribe, «la protección de las líneas
para el teatro del Atlántico Sur «el Caribe [es] clave; la
marítimas de comunicación tiene una gran importancia
posición central desde donde [ los Estados Unidos]
para los militares norteamericanos porque sus fuerzas
puede[n] actuar decisivamente y con la mayor movilidad
se despliegan en ultramar o están comprometidas para
estratégica».18 A partir de este criterio, se argumentaba
combatir en teatros de operaciones lejanos».25 El
que los puertos no podían considerarse bases navales y
Atlántico y el Caribe, como zonas de enlace con otros
se resaltaba que, en caso de producirse una guerra en el
teatros de la guerra, constituyeron el centro de los planes
Caribe, los puertos del Golfo serían incuestionablemente
globales de la Marina de los Estados Unidos en la
fuentes de abastecimiento, si se tenía la ventaja de contar
perspectiva de un conflicto bélico en Europa
con líneas de comunicaciones protegidas. Se consideraba
—específicamente con la URSS26— en esta etapa. Los
también la importancia de las posesiones de las potencias
planificadores militares argumentaban al respecto:
colonialistas: Gran Bretaña, Holanda, Francia.
es de máxima importancia que continuemos impulsando
En la perspectiva de su defensa militar, los Estados
el perfeccionamiento de las fuerzas de nuestros aliados en
Unidos buscaron también aprovechar las ventajas que
América Central y Sur [...] y prosigamos el adiestramiento
68

El Caribe y los Estados Unidos: la frontera marítima
Es evidente la disposición de Cuba al diálogo internacional en
lo que se refiere a temas vinculados con la seguridad. La creación
de un escenario propicio al entendimiento mutuo —tanto en el
terreno de las relaciones bilaterales como en el ámbito
multilateral— pasa por la adopción de medidas de confianza,
que son un elemento fundamental en el desarrollo de un ámbito
hemisférico realmente seguro.
periódico con ellos para que sean capaces de contribuir a
de las naciones del mundo subdesarrollado y que son de
la defensa de las líneas marítimas de comunicaciones.27
carácter regional. Estas consideraciones reafirman la
supuesta validez de la presencia de las bases de los Estados
En este escenario, se consideraba que Cuba podía
Unidos en el área, y a nivel global; con distintos énfasis,
obstruir las vías marítimas en caso de ocurrir un conflicto
de acuerdo con la región de que se trate y con los intereses
en Europa y, por consiguiente, los planes bélicos
en juego. En el caso de la cuenca del Caribe, el control
norteamericanos estipulaban que «cuando fuese
—y por ende la presencia de bases y demostraciones de
necesario, oponerse a las posibilidades ofensivas aéreas
fuerza militar— y las relaciones de dependencia, seguirán
y navales de Cuba [es] garantizar el libre tráfico marítimo
siendo características de la hegemonía norteamericana.36
por el Estrecho de la Florida, el Golfo de México y el
Formalmente parecería que disminuyen las medidas
Canal de Panamá».28
de fuerza. Sin embargo, la introducción y el incremento
Cuba, considerada una base de avanzada de la URSS,
y/o remplazo de mecanismos tradicionales de control
constituía —según declaraciones oficiales— un peligro
por otros de tecnología avanzada, de hecho implican la
en el caso de una conflagración en Europa. Incluso a
permanencia de las tradicionales concepciones de
fines de la década, cuando la posibilidad de una guerra
nuclear parecía muy poco probable, se insistía en que
hegemonía rectora de la política de los Estados Unidos
Cuba seguía siendo un peligro en un escenario de guerra
en el área.
convencional, y más aún en el de la guerra no
convencional,29 argumentos relacionados, en el terreno
específicamente político-ideológico, con la persistencia
El nuevo contexto internacional y el Caribe
del proyecto socialista en la Isla.30
en los años 90
En el caso de la cuenca del Caribe, la percepción este-
oeste prevaleció durante el decenio de los 80. En el
Al concluir la guerra fría, se ha abierto un período
Caribe, como zona de peligro potencial,31 y
de transición en el que coexisten elementos de aquella
Centroamérica, considerada como el peligro inmediato
política conjuntamente con iniciativas y propuestas
para los Estados Unidos,32 se concentraron
destinadas a la conformación de un nuevo orden
demostraciones de fuerza que no disminuyeron a fines
mundial. En el contexto de la recomposición de la
de esos años. La militarización del área era una realidad.33
hegemonía a nivel global, el unipolarismo militar de los
Entre 1981-1982 se fundaron dos organizaciones
Estados Unidos es parte integral del transito hacia lo
relacionadas con la seguridad en el área: la Organización
que se identifica como una «hegemonía compartida»,
de Estados del Caribe Oriental (OECO)34 y el Sistema
con un mayor peso de los instrumentos multilaterales.
de Seguridad Regional (SSR).35
Los conceptos de seguridad en este nuevo entorno
La invasión a la pequeña isla de Granada, en el Caribe
internacional están estrechamente ligados a factores
oriental, para la cual la OECO fue instrumento
económicos y sociales. A nivel hemisférico los temas
fundamental, respondió a razones geopolíticas y al
más relevantes de la agenda, desde el punto de vista
paradigma de la contención del comunismo. La invasión
estratégico, son la migración, el narcotráfico, la no
a Panamá en 1989 marcó un hito en cuanto a la
proliferación de armamento avanzado, el control nuclear
persistencia de la opción unilateral y a la búsqueda de
y la seguridad colectiva. Son comunes los desafíos del
nuevos argumentos intervencionistas.
desarrollo social, la necesidad de integración y pluralismo
Tradicionalmente las bases militares norteamericanas
en la perspectiva de la coexistencia en diversidad de la
en el área del Caribe han desempeñado un papel
región, la vulnerabilidad de las economías pequeñas y
relacionado con la defensa, coordinación, monitoreo y
abiertas, y la volatilidad implícita en una subregión que,
entrenamiento de las fuerzas destinadas al control
como el Caribe, conserva —aun en la posguerra fría—
hemisférico. Resulta difícil suponer la eliminación de
una importancia geopolítica.37
estas bases en la zona, dado que el énfasis de la política
Después del fin de la guerra fría, los argumentos
exterior de los Estados Unidos se centra ahora en las
medulares sobre América Latina han variado: los temas
amenazas y el peligro de conflicto, caos e inestabilidad
y la escala de prioridades de la política; su discurso e
68
69

Isabel Jaramillo Edwards
instrumentos; el nivel de desarrollo político, económico
coordinación marítima regional, la ecología y el medio
y social de los países del área, y el sistema interamericano
ambiente, así como la emigración y sus consecuencias
en crisis.38
económicas y sociales.46
La seguridad de los pequeños estados del Caribe39 se
Cuba se inserta en este contexto internacional.
enmarca en un contexto dual. De un lado, la
Estratégicamente la Isla constituye un factor importante
subordinación en el ámbito económico internacional;
en el hemisferio. Su relevancia se relaciona con su
de otro, la reafirmación de los propios intereses de cada
ubicación en el centro de las vías marítimas de
país.
comunicación —de alta incidencia para el comercio en
Desde el punto de vista militar, los Estados Unidos
el contexto de la globalización—, y gran peso para cada
mantienen una presencia consolidada en la región.40 Las
uno de los países del hemisferio. En lo que se refiere a la
responsabilidades en cuanto a este aspecto, se dividen
América del Sur, Cuba es un punto intermedio para su
actualmente entre el Comando Sur (SOUTHCOM), que
acceso al mercado norteamericano y caribeño.47 En el
se encarga de la América Central y del Sur, y el Comando
ámbito caribeño, el nivel de desarrollo logrado por la
del Atlántico (LANTCOM) que se ocupa del Caribe.
Isla complementaría los esfuerzos de la integración
En el caso del narcotráfico, el LANTCOM —que cuenta
regional en la perspectiva de lograr una postura
con unidades de la Marina, la Fuerza Aérea, las unidades
coordinada, para lograr espacios de relativa autonomía
de guardacostas y la Guardia Nacional— se ocupa de la
en el contexto hemisférico frente a la hegemonía
vigilancia y represión de ese tráfico, en coordinación
norteamericana.
con el Drug Enforcement Administration (DEA) del
Departamento de Justicia, y el FBI, entre otras agencias.
Además, se ha establecido una red de radares para el
Reflexiones finales
control aéreo del área.
En la IX Conferencia de Seguridad del Caribe, se
La definición de las fronteras marítimas, el
definió el papel de los Estados Unidos: «ayudar al área
establecimiento del sistema de bases militares
en sus esfuerzos de reorganización de la defensa» y
norteamericanas en la región y la articulación del sistema
«auspiciar una mayor cooperación regional, buscar
interamericano han estado presentes en el Caribe desde
formas para consolidar y centralizar el entrenamiento y
la II Guerra Mundial. En los años 90, a la luz del nuevo
adaptar los programas de ejercicios, de forma de enfrentar
contexto internacional, se han reestructurado los
las amenazas emergentes», tales como el narcotráfico, la
sistemas de defensa, redefinido los roles y funciones,
polarización racial, los grupos delincuenciales, la
reasignado las tareas y rediseñado los esquemas de
desprotección de las zonas costeras, y los desastres
seguridad, en la perspectiva de la defensa coordinada de
naturales. También se determinó su contribución en
los intereses norteamericanos.
temas relacionados con el mantenimiento de la paz
Los problemas que plantea a la seguridad y soberanía
regional.41 El «éxito colectivo», depende de «un enfoque
caribeñas la aplicación del poder supranacional
regional consistente hacia los asuntos de seguridad del
intervencionista, son esenciales para establecer las
Caribe».42
definiciones de un sistema de seguridad colectivo en el
El fin de la guerra fría y la contracción de los
que los intereses de los estados y la identidad nacional
presupuestos militares ha alentado la creación de
sean considerados equilibradamente.
instituciones que respondan a las necesidades del Caribe
Es evidente la disposición de Cuba al diálogo
internacional en lo que se refiere a temas vinculados con
y aseguren la estandarización del entrenamiento y
la seguridad. La creación de un escenario propicio al
equipamiento militar en la región.43 Ambos aspectos
entendimiento mutuo —tanto en el terreno de las
elevan la capacidad de interoperabilidad entre las fuerzas
relaciones bilaterales como en el ámbito multilateral—
y facilitan la compra de repuestos para los equipos
pasa por la adopción de medidas de confianza, que son
militares. También se apunta como necesario el
un elemento fundamental en el desarrollo de un espacio
desarrollo de una filosofía regional de entrenamiento
hemisférico realmente seguro.
con dimensiones nuevas, que incluya operaciones de
En general, tanto para Cuba como para el conjunto
mantenimiento de la paz y la posibilidad de una respuesta
del Caribe, valdría la recomendación de que «para evitar
sistémica —y no de un país específico— a los problemas
futuras crisis, los adversarios potenciales deben tratar
que se susciten en la región en el terreno de la seguridad,
de comprender de qué forma serán interpretadas sus
y la forma de prepararse, en cuanto a la acción colectiva,
acciones por otros».48 Entre vecinos que comparten una
para dar una respuesta regional. La lógica con que se
misma frontera, esta parece ser una lección fundamental.
desarrollaría esta filosofía regional implicaría que no
habría espacio —o se restringiría— para el pluralismo
ideológico.44
Notas
En la XI Conferencia de Seguridad del Caribe,
realizada en República Dominicana en marzo de 1995,45
1. P. Sutton, U.S. Intervention, «Regional Security and Militarization in
los temas discutidos se centraron en la integración
the Caribbean», en A. Payne y P. Sutton, eds., Modern Caribbean Politics,
caribeña, la lucha conjunta contra el narcotráfico, la
Baltimore/London: Johns Hopkins University Press, 1993: 277-94.
70

El Caribe y los Estados Unidos: la frontera marítima
2. Almirante Albert T. Mahan, The Interest of American Sea Power, Present
19. E.S. Furniss, Jr., ob. cit.: 387-9.
and Future, Boston: Little Brown, 1988. Sus presupuestos influyeron
muy directamente en la Doctrina Monroe y siguen siendo la base última
20. Los Estados Unidos intervinieron en Guatemala en 1961, intentaron
de la estrategia norteamericana y de su proyección como potencia
invadir a Cubapor Playa Girón, desestabilizaron el gobierno de Guyana
marítima.
entre 1962 y 1964, invadieron República Dominicana en 1965, apoyaron
el golpe militar en Chile en 1973, desestabilizaron Jamaica entre 1975 y
3. Capitán A.T.Mahan, «The Strategic Features of the Gulf of Mexico
1976, sometieron a Nicaragua a una guerra durante 10 años, y durante
and The Caribbean Sea», Harper’s New Monthly Magazine, octubre, 1897.
más de 30 no han dejado de intentar destruir la Revolución cubana.
4. Véase Isabel Jaramillo Edwards, «La estrategia intervencionista
21. H.J. Wiarda, Updating US Strategic Policy: Containment in the
estadounidense hacia el Medio Oriente y en la cuenca del Caribe», Avances
Caribbean Basin, [ponencia], Seminario sobre Relaciones
de Investigación, La Habana, Centro de Estudios sobre América, (18),
Interamericanas, CEA-LASA, La Habana, julio de 1987.
febrero, 1983; «El conflicto de baja intensidad en el Caribe: la fase
preventiva», en Andrés Serbín ed., Venezuela y las relaciones internacionales,
22. En la década de los 80, en el extremo neoconservador nos
ILDIS-AVECA, Caracas, Venezuela, 1987: 41-60; y Steven R. David,
encontramos con el Documento de Santa Fe I, que marcará de alguna
«Why the Third World Matters», en S.E. Miller y S.M. Lynn-Jones, eds.,
manera el retorno y reforzamiento de los parámetros más extremos de
Conventional Forces and American Defense Policy, Cambridge, Ma.: MIT
la guerra fría en la cuenca del Caribe.
Press, 1989: 78-83.
23. En torno a las percepciones estratégicas entre 1980 y 1990, véase
5. La política del «buen vecino» formaba parte de un enfoque emergente
David Ronfeldt, «Geopolitics, Security and US Strategy in the Caribbean
hacia el hemisferio occidental. Esto es, una tendencia hacia los acuerdos
Basin» [A Project Air Force Report, prepared for the Unites States Air
regionales, como alternativa a los arreglos globales imperantes hasta el
Force], Rand Corporation, noviembre, 1983; Thomas H. Moorer y
momento, en el marco de una readecuación de la política exterior hacia
George A. Fauriol, «Caribbean Basin Security», The Washington Papers
la zona. Véase A. Iriye, «The Globalizing of America 1913-1945», en The
No.104, CSIS, New York, Praeger, 1984; Jorge I. Domínguez, «US
Cambridge History of American Foreign Relations, Cambridge University
Interests and Policies in the Caribbean and Central America»,
Press, 1993; vol. 8: 147-148.
Washington/ Londres: American Enterprise Institute for Public Policy
Research, 1982; M. Foucher, «Le Bassin Méditerranéen d’Amerique:
6. Particularmente de las minorías alemanas, italianas y japonesas.
Approches Geópolitiques», Herodote, Paris, 3r trimestre, 1982; Isabel
Jaramillo Edwards, ob. cit.
7. Edgar S. Furniss, Jr., «American Wartime Objectives in Latin America»,
en
24. En este contexto el papel de Cuba es considerado esencial. Para dos
World Politics II, abril, 1950: 373-4.
enfoques en torno al tema, véase M.C. Desch, «Turning the Caribbean
8. Este argumento, invocado a partir de sucesivas conferencias, tiene su
Flank: Sea-Lane Vulnerability During a European War», Survival,
Londres, 29(6), noviembre-diciembre, 1989: 528-51; Isabel Jaramillo
hito —después del ataque a Pearl Harbor— en la celebrada en Río de
Edwards, «Cuba and the Caribbean: Perceptions and Realities», en
Janeiro, en 1942, con la subsiguiente ruptura de las relaciones diplomáticas
Conflict, Peace and Development, Londres, P. Figueroa, E. Greene, J.
de las repúblicas americanas, excepto Argentina, con el Eje. En marzo se
Rodríguez-Beruff, eds., Macmillan, 1991: 62-78.
estableció el Interamerican Defense Board, en Washington, para diseñar
una estrategia conjunta. A. Iriye, ob. cit.: 195-6.
25. W.M. Arkin y R.W. Fieldhouse, El campo de batalla nuclear,
Barcelona, Ariel, 1987: 136.
9. Para una referencia a la importancia estratégica de Cuba y su valor
extrínseco, véase A.T. Mahan, ob. cit.; G. Fielding Elliot, ob. cit.; W.
26. «Hay en esta zona más submarinos con misiles estratégicos (SSBN)
McDonald, «Atlantic Security: The Cuban Factor», Jane’s Defense Weekly,
que en cualquier otra parte, y todos los SSBN británicos o franceses, así
22 de noviembre de 1984; M. Desch, «That Deep Mud in Cuba: The
como casi todos los SSBN norteamericanos, patrullan por el Atlántico.
Strategic Threat and US Planning for a Conventional Response During
En cualquier momento hay dos o tres SSBN soviéticos en las aguas
the Missile Crisis» en M. Desch, When The Third World Matters: Latin
abiertas del Atlántico central, a la altura de las costas norteamericanas,
America and The United States Grand Strategy, Baltimore/London, Johns
cerca de las Bermudas.» W.M. Arkin y R.W. Fieldhouse, ob. cit.: 135.
Hopkins University Press, 1993: 89-114.
27. Almirante W. McDonald, «Status of the Atlantic Command»,
10. La idea de instalar una base militar en Nicaragua volvió a cobrar
Statement before the Senate Armed Services Committee, 98º Congreso,
auge en la década de los 80.
2ª sesión, febrero 23, 1984.
11. Para una discusión en profundidad de estos principios, basados en
28. Almirante W. McDonald, ob. cit.
Clausewitz, véase G. Fielding Elliot y R. Ernest Dupuy, If War Comes,
Londres: New York: Macmillan, 1937.
29. Estos argumentos un tanto absurdos son los que han sido esgrimidos
desde los departamentos de Estado y de Defensa. En términos de
12. G. Fielding Elliot, ob. cit.: 111-2.
realpolitik, Cuba no representa una amenaza real para la seguridad de
los Estados Unidos. Véase Isabel Jaramillo Edwards, «La seguridad de
13. En esta etapa fue cuando se discutió la cuestión del trueque de las
Cuba en los 90», Sociológica, México, DF, 9(25), mayo-agosto, 1994:
Filipinas por las Indias Occidentales británicas. G. Fielding Elliot, ob.
125-48 y Cuadernos de Nuestra América, La Habana, 11(21), enero-junio,
cit.: 59.
1994: 139-58. En inglés, en Security Problems and Political Economy in
the Post Cold War, Londres: Jorge Rodríguez Beruff & Humberto García
14. G. Fielding Elliot, ob. cit.: 116.
Muñiz, eds., Macmillan, 1996.
15. En los años 90, el enfoque será el enfrentar dos conflictos regionales.
30. Véase Isabel Jaramillo Edwards, «Cuba and the Caribbean.
Véase National Security Strategy, Washington, D.C.: The White House,
Perceptions and realities», ob. cit.
febrero, 1995.
31. Isabel Jaramillo Edwards, «El conflicto de baja intensidad en el
16. G. Fielding Elliot, ob. cit.: 119.
Caribe: la fase preventiva», ob. cit.
17. A.T. Mahan, Naval Strategy, citado por G. Fielding Elliot: 140.
32. J. Cirincione y L.C. Hunter, «Military Threats, Actual and
Potential», en R. Leiken, ed., Central American: Anatomy of a Conflict,
18. G. Fielding Elliot, ob. cit.: 154-6.
New York: Pergamon Press, 1984: 173-92.
70
71

Isabel Jaramillo Edwards
33. Véase en este sentido H. García Muñiz, Boots, Boots, Boots:
42. Este comando tenía a su cargo las operaciones navales contra la URSS.
Militarization, Intervention and Regional Security, 1986.
Con el fin de la confrontación este-oeste, las tareas de LANTCOM se
han reorientado y, además de sus tareas dentro de OTAN, ha asumido
34. Se formó en junio de 1981 y agrupó a Antigua y Barbuda, Dominica,
nuevas responsabilidades, como entrenamiento conjunto, apoyo a las
Granada, Montserrat, Saint Kitts y Nevis, Santa Lucía, y San Vicente y
operaciones de mantenimiento de la paz de la ONU, despliegues durante
las Granadinas. El Memorándum fue firmado el 29 de octubre de 1982,
crisis y desastres naturales, entre otros. Algunos autores plantean la
por Antigua y Barbuda, Barbados, Dominica, Santa Lucía y San Vicente
posibilidad de que el LANTCOM, como único comando conjunto con
y las Granadinas.
base en el continente, aumente sus responsabilidades en el hemisferio
occidental, si es que asume las tareas del Comando Sur (SOUTHCOM).
35. Ambas instancias aportaron un mandato para la defensa colectiva y la
Otra tendencia es la de trasladar este último al Estado de la Florida.
preservación de la paz y la seguridad. Desde 1985, a partir del Ejercicio
«Palma Exótica», auspiciado por los Estados Unidos, el entrenamiento,
43. La variedad geográfica característica de la región facilita áreas para
tanto de las fuerzas de defensa como de la policía, ha sido sistemático. En
cursos de entrenamiento en la selva, como en Guyana; Dominica aportaría
1986 se sumó el Reino Unido y se acordó establecer instalaciones de
entrenamiento de montaña y Jamaica y Trinidad y Tobago pueden hacerlo
entrenamiento en Antigua y Barbuda y Barbados. También se elevó la
sobre su vasta experiencia en operaciones de seguridad interna.
capacidad de las instalaciones de entrenamiento, ubicadas en Antigua
CANSEC´93, Puerto España, Trinidad: 6.
con una donación de USD 8 millones de la administración Reagan.
44. CANSEC´93, Puerto España, Trinidad: 10, punto 34.
36. Sobre las bases militares de los Estados Unidos, véase Isabel Jaramillo
Edwards, «El sistema de bases militares norteamericanas en la cuenca del
45. Participaron el General J.J. Sheehan, comandante del Comando del
Caribe», Cuadernos de Nuestra América, La Habana, 8(16), enero-junio
Atlántico (LANTCOM) de los Estados Unidos, y representantes militares
1991: 87-105.
de Haití, Belice, Antigua y Barbuda, Barbados, Jamaica, Bermudas,
Trinidad y Tobago, Santa Lucía, San Kitts y Nevis, San Vicente y las
37. Desde el punto de vista de la seguridad nacional de Cuba, los factores
Granadinas, además de observadores militares y policías de Canadá,
fundamentales son la viabilidad económica y el mantenimiento de la
Francia, Holanda y el Reino Unido. Véase Listín Diario, República
unidad y el consenso interno que garanticen la consecución del proyecto
Dominicana, 21 de marzo de 1995.
de justicia social de la Revolución en esta etapa. La reinserción de Cuba
en la economía internacional pasa —en el ámbito caribeño— por su
46. El General Sheehan, comandante del LANTCOM, anunciaba en mayo
participación en la Asociación de Estados del Caribe (AEC) y se le abre
de 1995, conjuntamente con Janet Reno, fiscal general de los Estados
un espacio a partir de la creación de la Comisión Conjunta Cuba-
Unidos , los acuerdos migratorios entre Cuba y los Estados Unidos. A
CARICOM y el incremento de las relaciones bilaterales con los países
partir de estos acuerdos, LANTCOM, bajo cuya esfera de control está la
del área.
Base Naval de Guantánamo —instalación que atenta contra la soberanía
de la Isla— y el Servicio de Guardacostas, tendrán que asumir las
38. Sobre el sistema interamericano, véase Ana Julia Faya, «La
operaciones de reintegración de los emigrantes ilegales cubanos a la Isla.
modernización de la OEA: hacia nuevos mecanismos de seguridad
hemisférica», Cuadernos de Nuestra América, La Habana, 11(21),
47. En el caso de Europa, siguiendo la lógica geopolítica, Cuba sigue
enero-junio, 1994: 30-43.
siendo importante para Rusia, como plataforma económica y desde el
punto de vista de su seguridad. Véase Isabel Jaramillo Edwards, «La
39. Véase, en este sentido, Ivelaw Ll. Griffith, The Quest for Security in the
seguridad de Cuba en los 90», ob. cit.
Caribbean: Problems and Promises in Subordinate States, M.E. Sharpe, 1993.
48. A Schlesinger Jr. recoge esta idea expuesta por R. McNamara en una
40. H. García Muñiz, La estrategia de los Estados Unidos y la militarización
reunión sobre la Crisis de Octubre realizada en La Habana en 1992.
del Caribe, Río Piedras, P.R.: Instituto de Estudios del Caribe, 1988.
Véase «Four Days With Fidel: A Havana Diary», The New York Review,
26 de marzo de 1992: 22-9. Véase también Rafael Hernández, «Treinta
41. Véase el texto del Mayor General R. O´Mara, «Opening Remarks»,
días: las lecciones de la Crisis de Octubre y las relaciones cubanas con los
Ninth Caribbean Island Nations Security Conference, Puerto España,
Estados Unidos», Cuadernos de Nuestra América, La Habana, 8(16),
30 de marzo de 1993. También participaron las fuerzas de defensa del
enero-junio, 1991: 3-25.
Caribe anglófono, las RSS; la República Dominicana y también
representantes de los Estados Unidos, Gran Bretaña, Canadá, Francia,
Holanda y Venezuela. Esta conferencia ha tenido lugar solo tres veces en
el Caribe; en 1992 se celebró en Kingston, Jamaica. Véase «PM: Less $$
for WI Security», Trinidad Guardian, 31 de marzo de 1993: 3. Citado
por H. García Muñiz y J. Rodríguez Beruff, «US Military Policy Towards
the Caribbean in the 90s», The Annals, 1994.
©
, 1996.
72

A. Faya, R. Giro, J. Gómez, J. Gómez Cairo, H. Gramatges, H. Manduley, V. Torres, G. Vilar
no. 6: 74-85, abril-junio, 1996.
La música
y el mercado
Alberto Faya
Radamés Giro
Jorge Gómez
Jesús Gómez Cairo
Harold Gramatges
Humberto Manduley
Víctor Torres
Guille Vilar
Alberto Faya (moderador): Tenemos el privilegio de vivir uno de los momentos más
fecundos de la música en nuestro país, cuando los jóvenes creadores producen un arte
nacido de las esencias nacionales; y cuando, a la vez, diversas manifestaciones confluyen
en el caudal generado por nuestros artistas más representativos. Aquellos sonidos que
nos llegan de afuera se combinan y enredan en esa fronda de la que Fernando Ortiz
hablara tanto y con formas novedosas. Así ha sucedido con nuestros géneros musicales
—el son, la guaracha, el mambo, la rumba. Sin embargo, nuestra realidad histórica
también nos ha ubicado entre los países dependientes, lo que implica una herencia
colonial, de la que, a pesar de la Revolución, no nos hemos desembarazado del todo.
Uno de los grandes retos que Cuba ha tenido siempre ha sido el de superar el status
colonial. Esto solo es posible, entre otras medidas, mediante el ejercicio de una libertad
creativa que tenga sus fuentes nutricias en aquella parte original de la nación; no puede
surgir una verdadera creación atada y definida por la industria de consumo. No podemos
alcanzar una libertad plena, sin ejercer a plenitud, también, la creatividad.
La más genuina música cubana ha existido siempre en oposición a un modo de ser
definido ahora por el poder neocolonial, el cual se ha encargado de «orientar» el gusto
de la población para que se ubique dentro de las corrientes fundamentales del consumo
musical a nivel mundial.
Detrás de términos como desarrollo o progreso, se enmascara un buen comercio
artístico que produce fórmulas elementales y esquemas para una gran cantidad de
productos musicales; y, con ello, contribuye a la minimización de la influencia de
aquellos factores populares que garantizan nuestras más saludables transformaciones.
74

La música y el mercado
Un buen agente de esta alienación han sido los medios masivos de comunicación. La
gran revolución industrial que ha significado la conservación y reproducción del sonido,
apunta hacia el desarrollo de los monopolios industriales que controlan la distribución
sonora a nivel global y reducen una parte de la música de nuestro pueblo al término de
música alternativa. Hablo de aquella parte que afortunadamente ha sido grabada, pues
existe también una enorme masa musical que va pasando diariamente al olvido con la
muerte de las generaciones que la han cultivado. El proceso de discriminación que ha
afectado a esa producción popular, hermosa y genuina, va ocurriendo ante de todos
nosotros, con nuestra complicidad o con la ayuda de una ingenuidad inculta.
Lo brutal de los procesos de dominación y de movilización cultural es que se
llevan a cabo dentro de nosotros mismos, amparados en la inviolabilidad de lo que se
llaman gustos personales; gustos que defendemos a toda costa, sin darnos cuenta, muchas
veces, de cómo han sido creados. Esos gustos están insertados dentro de la cultura a la
cual pertenecemos; porque, independientemente de que existe una cultura individual,
también el conjunto de valores adquiridos, su producción, su manera de conservar su
patrimonio y su psicología, constituyen una cultura específica. Para los grupos sociales
cubanos más humildes la música ha sido de vital importancia; no solo para aliviar las
circunstancias en las que se desenvuelven sus vidas, sino para mantener la cohesión del
grupo social y hasta para elevar sus valores dentro de la escala social establecida y por
esa vía superar los marcos económicos de su clase.
El desarrollo de una industria masiva de la música ha creado las condiciones para
«el salto» y en él se han visto envueltos numerosos músicos nacidos en el seno de la
población. El costo de este salto se ha pagado siempre culturalmente. Cuando el portador
sale de las entrañas del pueblo, tiene que adaptar sus valores, su experiencia y creatividad
a los requisitos de la industria. La historia de la música popular contemporánea recoge
procesos de estandarización implícitos en toda producción a gran escala, pero también
algunas formas de evadirse de ello y abordar lo que la cultura original exige. ¿Qué son
las descargas entre los músicos cubanos, sino una manera de acercarse a la otra música,
al verdadero y sincero proceso de creación y discusión, lejos de las ataduras de las
exigencias mercantiles?
Pero la voracidad de los intereses lucrativos ha invadido hasta estos espacios privados.
Este dilema históricamente ha constituido uno de los grandes dramas de los músicos.
Afortunadamente, una de las características del genio creador ha sido siempre la de
saberse mover con éxito en ese campo tan difícil. Sin embargo, con el tiempo la
definición de ese éxito se complica más, pues tiende a relacionarse con cifras de ventas
de grabaciones, cantidad de personas que asisten a los conciertos, frecuencia en las listas
de éxitos de las estaciones radiales o revistas especializadas, o con la cotización de las
presentaciones del artista en cuestión, por solo citar algunos ejemplos.
En el caso de los músicos que viven en los países dependientes, el éxito también
puede significar el ser aceptado como bueno por la cultura dominante metropolitana,
aun cuando esto implique concesiones estéticas. La gravedad del problema consiste en
que muchos de los mecanismos con que la sociedad contemporánea cuenta para
preservar la obra de los músicos están estrictamente vinculados con la política de las
grandes compañías grabadoras y con los grandes centros de promoción y difusión; lo
que se hace mucho más agudo en el caso particular de Cuba debido al bloqueo a que
está sometida.
Lo preocupante es el modo en que las políticas comerciales promueven la idea de
que la medida del éxito está dada por el nivel de excelencia en el trabajo artístico, con
igualdad de oportunidades para todos aquellos que alcancen altos resultados cualitativos,
sea cual fuere el tipo de música que cultiven. Esto pudiera parecer coincidente con una
de las características fundamentales de la política cubana en lo que respecta a la cultura
artística: el estímulo a la creación genuina como fundamento de los valores socialistas
revolucionarios. Pero este principio ha entrado en contradicción con el creciente avance
de los mecanismos comerciales y estandarizadores, lo cual no solo constituye un peligro
para la música, sino para la cultura, que se nutre de su esencia creadora.
74
75

A. Faya, R. Giro, J. Gómez, J. Gómez Cairo, H. Gramatges, H. Manduley, V. Torres, G. Vilar
De las soluciones revolucionarias de estas contradicciones depende mucho nuestro
futuro. En ese proceso los músicos tienen un papel muy importante, de manera que
les propongo empezar nuestra discusión por el examen de estas cuestiones.
Guille Vilar: De las cosas que tú dijiste, lo que más me preocupa es la honestidad
creativa. Yo no pude disfrutar en su momento, porque no tenía edad, de la música de
antes del 59. Y me pregunto, ¿cuáles eran los patrones que existían antes, en la realización
de los discos, para juzgar la calidad de las piezas, para determinar el repertorio de las
agrupaciones? Porque ahora hay obras ordinarias, sin un buen texto, sin una buena
música que se difunden por la televisión y la radio; y uno se queda prácticamente
perplejo. Las agrupaciones que se divulgan responden a esas características, a los
requisitos de la industria de que tú hablabas. Los parámetros de calidad se van a guiar
por la capacidad de esas agrupaciones para reunir cierta cantidad de moneda libremente
convertible.
Me pregunto en qué medida las empresas productoras cubanas pueden influir en lo
que hace un grupo. Me han dicho que muy poco; si acaso alguna sugerencia. Entonces,
¿en manos de quiénes estamos? ¿Quién puede evitar que se difundan esas obras?
Radamés Giro: Creo que todos estamos pensando en lo que están haciendo los
llamados salseros cubanos. El maestro Harold Gramatges, que sabe más que todos
nosotros, puede contarnos cómo se manejaba esto en el pasado. Antes del año 59
existía una política, que se llamaba de ética radial, o algo así, a la que todo era sometido.
En el gran monopolio de la salsa que dirige Ralph Mercado en los Estados Unidos,
hay un departamento de literatura donde todos los textos que se van a cantar o a
grabar son analizados y este departamento puede vetarlos. En el caso nuestro, en aras
de una gran libertad, prácticamente todo el mundo hace, dice, escribe, compone,
armoniza, como le parece, sin que haya ningún tipo de freno.
En relación con la salsa —y aclaro que no me opongo a la salsa—, quiero decir algo.
En primer lugar, todos recordamos que en Cuba la salsa fue rechazada prácticamente
por todos los sectores. Incluso los propios cubanos que viven en los Estados Unidos
defendían el criterio de que la salsa era música cubana de los años 40 y 50 actualizada.
Posteriormente, se asumió la salsa acríticamente y no se tomó lo mejor de los grandes
salseros. Esto es contradictorio, pues el músico cubano actual tiene una gran formación
musical, una cultura, un dominio de su instrumento, sabe lo que hace, por qué y hacia
dónde puede ir lo que hace. Y yo me pregunto, ¿para qué sirve todo esto si no se pone
en función de la calidad de la letra, de la factura, del acabado, desde el punto de vista
estrictamente musical?
Sin crear ningún tipo de camisa de fuerza, hay que atajar esta deformación de
alguna manera, y atajarla en discusiones, aunque estas no siempre son aceptadas. No es
fácil que los músicos acepten una opinión contraria; cuando algún periodista hace
algún tipo de crítica, lo asumen como una ofensa personal. Por otra parte la crítica es
poca. La radiodifusión divulga todo indiscriminadamente; y los investigadores
musicales, los musicólogos, los músicos que tienen una formación, prácticamente no
tienen ninguna función dentro de nuestros medios masivos. Los programas a veces los
hacen los locutores, quienes enaltecen a algunos autores y a otros no, quién sabe por
qué motivo.
Por su parte, la prensa plana a veces hace una alabanza total, donde todo es bueno;
o bien no dice absolutamente nada, que es lo más frecuente y lo peor. En la radio y la
televisión todo el mundo se viste y se presenta como le parece, y yo, como espectador,
en mi casa, no puedo ejercer mi derecho a ver a los artistas vestidos de manera adecuada,
y no como si estuvieran en la playa, con la gorra virada para atrás y todos esos atavíos
que son una forma de llamar la atención. Estamos en el peor momento de una etapa
parecida a lo que alguna vez se llamó el «sistema de estrellas». Todos resultan ser
genios, supertalentos, etcétera.
76

La música y el mercado
Aquí hubo muchas polémicas en los años 60, en relación con la música de
vanguardia, la música sinfónica, que eran muy serias, y con debates muy
interesantes. Hoy en día no existe ese debate, en este caso acerca de la música
popular cubana.
Jesús Gómez Cairo: Entre los músicos creadores, entre los estudiosos, los
promotores, los difusores, hay un lógico interés por la música popular, que se
proyecta desde distintos ángulos, como un componente de la cultura musical cubana.
Relacionada con el fenómeno salsa —contra el cual, como Radamés, tampoco
tengo nada— se encuentra la base del desarrollo de la música popular en general,
incluso de la música de concierto. Si recordamos la revolución que significó para
el sinfonismo cubano el llamado cubanismo, que tuvo su punto de partida en la
obra de grandes compositores como Caturla y Roldán y sus seguidores, vemos
que a partir de ahí se inició una cadena interminable en la evolución de la música
culta en Cuba, que, al analizarla, se comprueba que en su base están presentes
aquellos elementos que parten de la música popular bailable que los compositores
estilizan y convierten en factores expresivos de otro orden, con otro lenguaje,
otro sistema de comunicación. Estoy simplificando un proceso sumamente
complejo. Este proceso tuvo una significación grande. Dar la espalda a la música
bailable es darla a la música cubana; como lo sería dársela a la cancionística, sin la
cual no hay desarrollo de nuestra música. Porque la música bailable tiene muchos
elementos de carácter armónico, un sentido natural diferente del contrapunto, de
la utilización de la forma, la incorporación de las formas abiertas a las formas
cerradas de la música de concierto, que se puede ver, por ejemplo, en una obra
como La rumba, o en muchas otras, durante y después del movimiento folklorista
de la primera etapa.
No hay que obviar ese aporte de la música bailable. Ahora bien, de lo que se
está tratando aquí no es tanto de la música bailable en sí, sino de su difusión. Se
trata de determinar en qué medida la difusión de la música bailable tiene un relativo
equilibrio, y no quiero decir equidad, pues en el arte no puede haber equidad. Es
un hecho genuinamente individual, donde el artista individualmente crea la obra,
la proyecta, le impone un sello. No hay democracia. La cuestión está en que esa
individualidad sea capaz de captar un numeroso espectro de ideas, sentimientos y
expresiones. Pero en el proceso difusor sí tiene que haber democracia.
Ahora bien, la cuestión que se debate, no solo tiene que ver con el criterio del
consumo. Está presente por una parte, el arte de consumo que imponen ciertos
medios de comunicación, sobre todo en las grandes metrópolis, las grandes
transnacionales. Y está el arte de consumo que impone el propio público con su
gusto, y que no se puede dejar de tener en cuenta —no para seguir sus dictados al
pie de la letra, sino para considerarlos desde el punto de vista de una educación
recíproca. Hay que partir de cuáles son los parámetros y objetivos que esa masa
tiene como propios; de lo contrario, en la educación —o en el intento de educación—
se produce rápidamente una dicotomía entre el público y lo que queremos
promover.
La información sí tiene que ser democrática. No se puede informar solo acerca
de lo que gusta; la divulgación tiene que considerar todo lo que existe y tiene
valor. Pero no a partir de una lógica predeterminada. No puedo formarme un
criterio sobre lo que no es bueno si no se me informa. Es necesario informar de
todo, y que se decante a través de varios procesos. Uno de estos es el del gusto del
público y su reacción; otro es uno que aquí se ha perdido, el de la crítica profesional.
Entonces, de lo que se trata no es de la música bailable o de la música moderna.
No se trata de analizar la música bailable por separado, sino de compararla con los
otros géneros, y de la necesidad de que haya un proceso más democrático de la
información que se brinda sobre toda la música, más extenso y profundo, menos
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77

A. Faya, R. Giro, J. Gómez, J. Gómez Cairo, H. Gramatges, H. Manduley, V. Torres, G. Vilar
determinado por el criterio de un programador, un radiodifusor, o un realizador
de programas musicales. Que se pronuncie el público, la crítica y los profesionales.
Víctor Torres: Quiero hablar sobre el tema de música y masividad. En primer
lugar, no solo por el hecho de llevar la música a la televisión estamos provocando la
masividad, sino que tenemos que encontrar fórmulas estéticas adecuadas para hacerlo.
Por otro lado, está el fenómeno de lo nuevo dentro del contexto de la música, que no
encuentra eco en todas las emisoras radiales o en todos los programas. Cuando en el
programa que yo hago en la televisión presentamos algo nuevo, alguna agrupación
nueva o algún músico nuevo, estoy siempre corriendo el riesgo de que los demás,
inmersos en otros asuntos de promoción de fórmulas baratas, no continúen esa línea.
Por otra parte, están los repetidores de música inconscientes. Son aquellas personas
que se encuentran a pie de tarima, en algunas provincias, repitiendo horas y horas de
música sin saber de difusión musical, estableciendo patrones que muchas veces no son
nacionales, pero por fuerza de repetición se convierten en nacionales. Se mata así lo
más genuino de agrupaciones que se encuentran muy distantes de la capital. Cada vez
que estas agrupaciones suben al escenario empiezan a ejecutar música a la usanza de lo
que peor suena en el centro de la capital como única forma para hacer bailar, como
única forma para recibir el aplauso.
Mi programa me ha permitido conocer la interioridad de la música y de los músicos.
Pienso que el fenómeno radial y la presencia en Cuba de firmas productoras, de casas
discográficas, han influido grandemente en el gusto de la población, en la dinámica de
hacer la música. Y también ha contribuido a este cambio, en muchos casos, la dinámica
de producir y dejar plasmado en discos compactos el acontecer de nuestros días. Por
otra parte, se perdió cierta coherencia, pretendida por algunos difusores, en cuanto a
tratar de darle una imagen sonora inusual al acontecer de la música popular general.
El fenómeno de la música popular cubana, en alguna medida, provocó —como una
necesidad, en un momento determinado— un cambio en los patrones estéticos en el
ámbito social. Yo fui testigo de la decadencia de la música popular ligera, y, para
suerte de nosotros, algunos representantes de esa decadencia se fueron del país.
Por otro lado, fuimos muy lejos con la música de vanguardia, en especial en lo que
toca a la nueva trova. Pero llegó un momento en que a la fórmula de la nueva trova le
faltaban luces, movimiento escénico, toda una serie de resortes que estaban incidiendo
en su imagen dentro de los medios de difusión.
La nueva floración del arte musical —aunque en una etapa de crisis económica— se
dio mediante la música popular bailable. En una etapa determinada, esta se convirtió
en el arte de la masividad. No quiero decir que no existiesen espacios para pensar o
música para la reflexión. Lo que pasa es que el abuso en cuanto a la promoción de la
música popular en los medios de difusión, y la falsa expectativa creada como fórmula
para elaborar programas de salsa, han estado provocando un proceso de negación, de
rechazo en parte del público. Uno de los mayores retos que tienen en estos momentos
los medios de difusión radica en la necesidad de alcanzar una proyección estética de
vanguardia. No se puede pretender, por ejemplo, que la gente disfrute un programa
de boleros, si estéticamente corresponde a patrones de los años 60 o de los 70. Cuando
nosotros vemos a José Carreras o a Luciano Pavarotti en un concertazo de esos
gigantescos, tocado en Milán, nos llegan envueltos en una fórmula escénica y televisiva,
acorde al espectador de nuestros días. Nos hemos olvidado de que el gusto del espectador
ha avanzado junto con los medios de difusión. Cualquiera en este país ya tiene un
disco compacto. Y a veces pretendemos hacer a la gente bailar, por ejemplo, como en
el Paseo del Prado, con tres trompetas, de esas metálicas del carnaval.
También la televisión necesita de la evolución estética y la evolución sonora. Hoy
no se ejecuta en la televisión música digital; entonces, cuando llega el grupo Moncada
con un disco grabado en Italia, la gente dice: ¡Qué bien suena Moncada! Y tienes a uno
que viene de Las Tunas, con una camisita, que puede hacer un son tradicional muy
78

La música y el mercado
bueno, pero que estéticamente no está a la altura ni en presencia ni en sonoridad. Yo
he estado entre los que sacaron la Charanga Habanera a la palestra nacional, con traje
y corbata, y de la noche a la mañana me regresaron de no sé dónde con gorritas viradas
hacia atrás. Lo que pasa es que cuando la Charanga rebota, después de haber sido
trasmitida tantas veces en la radio, y vuelve a mi programa en la televisión, ya viene
transformada en un fenómeno social de amplitud. En estos momentos es la radio,
muy por encima de la televisión, la que tiene la responsabilidad en los códigos de
comunicación.
Yo siempre pienso en cómo hacer para llegar a la gente. Y también corro el riesgo
de que, cuando presento en mi programa un artista genuino, la gente apague el televisor;
porque hemos deformado el gusto y no hay espacio para lo nuevo dentro de los
medios. No existe un mecanismo coherente de lanzamiento de nuevas figuras. Yo
podría presentar al trovador más importante de Cuba, atendiendo a valores musicales,
poéticos; pero si no se hace coherentemente, al otro día nadie lo pone en la radio, o la
gente apaga el televisor o se va a ver otra cosa que no tiene nada que ver con la promoción
de figuras.
¿Cómo hacer para que, dentro de las normas de la estética el espectador amplíe su
espectro en lugar de reducirlo? Hoy los programas televisivos son sectarios, no
solamente por problemas de cultura, sino por seguir fórmulas muy baratas de hacer
televisión. Pienso que ha habido facilismo en la fórmula de hacer televisión y radio.
Harold Gramatges: Podríamos pasar muchas horas y hasta días enteros hablando
sobre todos los problemas concernientes a la música popular. Desgraciadamente,
respecto a la música culta no hay material para encender una buena discusión. ¿Por
qué? Por la ausencia desdichada de este mundo tan suculento, importante y vigente,
en los medios difusivos. Yo soy jefe de cátedra de esos tremendos talentos que hay en
el Instituto Superior de Arte. Y donde quiera que van, y se presentan con una obra,
vienen con un premio, con un aval, a la altura de lo que estamos consiguiendo en el
terreno del deporte. No quiero en ningún momento confundir las cosas; por suerte el
deporte es naturalmente masivo, ha estado bien encaminado, organizado. Pero cuando
voy a reuniones internacionales y me preguntan a qué se debe el triunfo, la vigencia
del talento musical serio, tengo que hacer entonces referencia al deporte y decir: los
deportistas de mi país no son más inteligentes, ni más fuertes, ni más hábiles, tal vez
están menos bien alimentados que los deportistas de otros países, pero hay un sistema,
una organización, un cuidado; y hemos resuelto el problema, sin lo cual no hay atletas,
es decir, vigilamos la posibilidad, la capacidad, el incentivo del niño, y desde ese
momento lo sustraemos de esa masa infantil, lo cultivamos, lo cuidamos, lo
organizamos, y cuando pasan los años y van a una competencia internacional, son los
campeones mundiales, gracias al sistema.
Nosotros tenemos el mismo sistema organizado para la educación artística. Salen
inclusive grupos de compañeros técnicos a recorrer el país, de Maisí a San Antonio,
montañas, llanos, a buscar el talento. No estamos esperando que el talento nos llegue,
salimos a captarlo, a descubrirlo, y después lo traemos, lo organizamos, lo educamos
y, claro, cuando van a un concurso internacional, a una competencia, vienen con
premios importantes.
Aludiendo a la divulgación, nada de esto siquiera se conoce. Todo el mundo sabe
más o menos quién es Portocarrero, Mariano, Amelia Peláez. Pero no hay la más
mínima idea del compromiso que tiene la historia de la cultura de este país con la
música culta. Cualquier gran músico cubano puede estar huérfano porque no tiene
divulgación, no se conocen sus conciertos y mucho menos las grabaciones. Cualquiera
de nosotros puede salir de aquí y hablar de lo que pasa con la pintura y la literatura;
todo el mundo tiene un libro en la mano, pero nadie puede acudir a un disco, nadie
puede encender un radio para oír qué pasa con esa otra música «extraña», «rara». No
hay derecho a decidir sobre ella —si gusta o no gusta— a priori. Si algo no se prueba, y
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79

A. Faya, R. Giro, J. Gómez, J. Gómez Cairo, H. Gramatges, H. Manduley, V. Torres, G. Vilar
no se enseña a apreciar, no se puede saber si gusta o no, no se da la oportunidad
siquiera de que a algunos les guste y a otros no. Aunque este sea generalmente un arte
elitista, hay una falta de equilibrio en la difusión, como se ha dicho antes. En este país,
últimamente se han celebrado dos festivales internacionales de coros a los que han
asistido agrupaciones de todas partes del mundo. El movimiento coral de esta islita es
impresionante. ¿Dónde se trasmite un programa de coros? ¿Quién ha visto un cuarteto
de cuerdas o una orquesta sinfónica en la televisión? Los pocos programas que existen
no hacen otra cosa que repetir a los Pavarotti sin descanso.
En cuanto a la música popular, tenemos una cantidad de músicos con una capacidad
de primera, que pudieran estar haciendo cosas bellas. Ha ido bajando la calidad, eso es
indiscutible. Hablando de los textos, estos toda la vida han tenido su malicia, su picardía;
se trata de una característica idiosincrásica nuestra. Somos maliciosos, nos gustan las
cosas de doble sentido, somos así. Pero no hay que llegar al grotesco. El problema es
de balance.
En el mundo, las grandes empresas están contratando a compositores de gran talento
—sobre todo gente joven—, poco conocidos, que pueden armar una obra sinfónica
para grabarla por una buena orquesta, donde de momento aparece el ritmo popular,
un poco de jazz, sin nada sustancial, todo eso con vistas al comercio, ese gran monstruo
del siglo XX. En la medida en que se ha desarrollado todo el fenómeno de la tecnología
y los medios de difusión masiva se han ido ampliando, ello ha traído como consecuencia
el consumo, la imposición de un gusto. Es necesario sanear este fenómeno, pues al
menos nosotros, los cubanos, somos aquí los dueños de los medios. Es lo que discuto
con los compañeros dirigentes de la radio y la televisión. Si todavía los capitalistas
fueran los dueños, podrían disponer. Y aquí contamos con criterios, con conocimientos
técnicos, con una conciencia de pueblo, y de que hay un pueblo al que hay que
alfabetizar, que educar culturalmente.
Jorge Gómez: Me interesa mucho lo que dijo el maestro Harold y me satisface mucho
haber escuchado a Víctor, que es una persona muy metida en el mundo de la música
popular. Como bien decía él, la sensibilidad contemporánea también tiene sus leyes.
Vivimos en un mundo en el cual pretendemos, cada día más, insertarnos. Nosotros
no hemos querido apartarnos del mundo, sino que nos han apartado; y en la misma
medida en que estamos insertándonos nuevamente en él, no nos queda otro remedio
que estudiar, comprender, utilizar lo que el lenguaje internacional ha generado en
cuanto a sensibilidad —lo cual no quiere decir usar todos los mecanismos, que pueden
ser incluso nocivos. Se trata de que los lenguajes internacionales, la sensibilidad
posmoderna, por decirlo de alguna manera, dan un caldo de cultivo, un medio, y la
gente más joven, que es la mayor consumidora de la música, tanto en el disco, como
en la televisión y en los conciertos, tiene la propensión a identificarse con ese medio.
Determinado tipo de música, la llamada música culta o seria, o de concierto, también
tiene diferenciaciones; alguna se oye más que otra. Lo mismo pasa con la música popular,
el jazz se oye un poco menos, la nueva trova se oye más, y mucho más la salsa.
Nosotros, los que somos creadores o difusores, tenemos un gran reto. Nosotros somos
parte de una sociedad que ha creado un conjunto de mecanismos, de instituciones, de
escuelas. Con esto no estamos creyéndonos el ombligo del mundo, pero nuestro país
puede que sea el país más culto del Tercer mundo. Hemos llegado a eso gracias a un
desarrollo que no es solo institucional, sino que ha tenido que ver con todo el
autodesarrollo de la cultura. Esto se relaciona con el otro problema de que venimos
hablando. Estamos viviendo en un mundo donde, cada vez más —y esto es lamentable,
maestro Harold—, el comercio adquiere un mayor peso a nivel global.
Tengo la impresión de que en nuestro país ciertas tendencias a la comercialización
no van a desaparecer cuando pase la crisis económica; sino que van a ser el pan nuestro
de cada día. Y si nosotros, los que hacemos televisión, o radio, o música, o discos, no
nos damos cuenta de eso, estaremos encerrados en una campana de cristal. Y como
80

La música y el mercado
dice la canción de Noel Nicola, «afuera el mundo está por estallar, afuera la gente hace
lo suyo por vivir, afuera me están llamando y voy».
A partir de esa filosofía, cualquier otra cosa que discutamos puede estar bien, en el
orden de las buenas intenciones, y puede que exprese lo que ha sido la historia cultural
de la Revolución; pero se quedaría a mitad de camino. Y yo estoy de acuerdo con el
maestro Harold y con Jesús sobre la necesidad de una mayor democracia en este
orden; pero afuera la gente va a seguir haciendo lo suyo por vivir, y va a seguir
existiendo el mercado, la propaganda comercial y todo lo demás.
Uno de los grandes problemas que se planteaban en el último congreso de la Unión
de Escritores y Artistas, incluso en sesiones plenarias, era la relación entre cultura y
turismo. Se hablaba de cómo habría que llevar a los turistas a nuestra propia cultura;
y la gran preocupación era si nuestra verdadera cultura influía en ese proceso o si se
estaba fabricando una pseudocultura para el turismo. Lo que ha pasado en menos de
los tres años transcurridos desde entonces, es que llegamos al momento en el cual el
turismo está dominando la cultura que se está haciendo. La existencia de un desarrollo
turístico determina que los grandes centros en que se presenta hoy la música en vivo,
por ejemplo, tengan posibilidades que no tienen las instituciones de la cultura —que
funcionan en pesos— de producir grandes conciertos y espectáculos que sean, como
fueron en algún momento, focos de gran atracción. Así, las noches de conciertos, en
general, se dan mayoritariamente en grandes o pequeños centros turísticos, donde se
están creando los focos más importantes del desarrollo de determinadas manifestaciones
en la música popular. Porque esa parte de la clientela turística que viene a Cuba, que
no viene buscando las bellezas naturales del país, o la gran cultura que nuestro pueblo
ha creado en más de 36 años de Revolución, sino que —como el turismo en muchas
partes— viene a divertirse, a pasarla bien de determinada manera —que no es la nuestra,
maestro, que no nos dedicamos a recorrer las noches habaneras buscando donde
divertirnos. Esos lugares forman parte importante del desarrollo económico del país,
y para llenarlos hace falta que la gente vaya —aunque el grueso de la población no tiene
moneda convertible, en esa cantidad al menos, para gastarla en esas cosas. Y esta situación
está influyendo muy directamente en lo que está pasando en la calle, en una especie de
teoría estética de la calle. Si uno va al interior del país se dará cuenta de que no pasa lo
mismo en los grandes polos turísticos —como La Habana o Varadero— que en Santa
Clara o Camagüey. Hay una enorme diferencia entre el comportamiento del público
en los lugares donde no hay polos turísticos importantes respecto a aquellos donde sí
los hay. Este es un asunto totalmente extramusical. Harold decía: los medios de difusión
siguen siendo nuestros. Pero, ¿qué nos ha pasado a nosotros? Que aun teniendo
instituciones que están responsabilizadas de dictar, e incluso de ejecutar, la política
musical, por decirlo de alguna manera, no hay, en la práctica, la posibilidad real de
ejercer su función, por lo que no tenemos prácticamente contrapartida. Cuando una
música determinada, como la que hoy llamamos salsa, está de moda, y se pone en los
centros turísticos y en los programas de radio, no existe un regulador real por parte de
las instituciones. En determinados países capitalistas el Estado tiene la posibilidad de
decidir, incluso, a quién se puede comercializar y a quién no. Hay además, mecanismos
estatales que no entran en la competencia y que existen para la defensa del patrimonio
cultural. Las leyes pueden obligar a todas las emisoras de radio y de televisión a tener
determinados programas, y a las casas discográficas a hacer la promoción de aquellos
valores que constituyen patrimonios del país.
En Cuba no existen espacios para la expresión artística que no estén controlados
estatalmente, sea la televisión, la radio, o un hotel. Pero para financiar el arte, el Estado
requiere hacer una inversión en moneda convertible; y esa moneda no se puede recoger
presentando un excelente concierto de los alumnos del maestro Harold, que son glorias
de Cuba. Por eso las propias instituciones culturales de la música tienen que terminar
haciendo programaciones que no son tan democráticas como nosotros quisiéramos,
pues terminarían sin poder pagar la inversión que se hizo para fomentarlas.
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A. Faya, R. Giro, J. Gómez, J. Gómez Cairo, H. Gramatges, H. Manduley, V. Torres, G. Vilar
No tengo una solución para esos problemas. Me parece que si aceptamos el reto
que nos impone la vida y queremos ser agentes activos en la transformación de estas
cosas, tenemos que reconocerlas. De lo contrario, podemos decirnos todas las cosas
bellas que querramos oír, haciendo una exposición teórica formidable, pero la vida,
que es muy obstinada, va a seguir por su lado. No basta con denunciar cómo el
neocolonialismo cultural nos avasalla, el mal del comercialismo, y cómo las grandes
empresas de discos imponen determinadas leyes. Nos guste o no, hay que aceptar este
reto y ser más inteligentes que ellos, porque siempre nosotros hemos tenido que ganar
con la inteligencia.
Radamés Giro: Yo no comparto en su totalidad lo que plantea Jorge. También me
quiero referir a algunas cuestiones dichas por Víctor.
Estamos de acuerdo en que enfrentamos un reto; y que en determinados países
—como Colombia— hay estaciones de radio con una programación que es un verdadero
ejemplo; patrocinada por un montón de empresas de discos, de cerveza, de automóviles,
y que presentan todo tipo de música, de toda América Latina y del Tercer mundo.
¿Cuál es el motivo, si nosotros tenemos los medios, para que no podamos cumplir a
cabalidad una de las funciones que tienen la radio y la televisión en cualquier parte del
mundo, que es informar y educar? Ese problema no tiene nada que ver con las
circunstancias actuales, sino que se trata de una deformación de nuestros medios.
Jorge Gómez: Perdona ¿y cuál es la causa de esa deformación?
Radamés Giro: Porque se están siguiendo los patrones del llamado gusto masivo.
Estamos demasiado preocupados por la masividad. La radio, la televisión, el libro, las
modas de la ropa, tienen su historia y existen zonas de interés. Es necesario ir cubriendo
las diferentes zonas de interés o se corre el riesgo de no cubrir ninguna. Puede haber
un sector del público, digamos mil o dos mil personas , que le guste escuchar un
concierto por la televisión. ¿Y por qué no se lo damos? Pues porque hay otro porciento
que apaga el aparato, sin embargo ese es un sector al que yo estoy obligado a atender.
Cuando nosotros publicamos a Lezama Lima sabemos que es un sector minoritario el
que lo va a leer, pero tenemos que publicarlo. Y tanto la radio como la televisión se
dejan arrastrar por lo que supuestamente le gusta a la gente —y que generalmente es lo
que les gusta a los funcionarios, productores, locutores, programadores, directores.
Tengamos presente que el Che alertó muy temprano acerca de esta tendencia. Al
público se le prepara; cuando se va a lanzar una moda de vestir no basta con poner los
vestidos en la vidriera; se hace todo un trabajo de preparación psicológica y de
ambientación, para que la gente acepte eso, lo que los diseñadores quieren imponer.
Esa es la razón por la que se imponen determinados géneros, como la salsa. Tenemos
una responsabilidad social que no debemos eludir, igual que no podemos eludir las
circunstancias ambientales, la realidad circundante a la que Jorge hacía referencia.
Tampoco podemos eludir la responsabilidad de transformar, en la medida de lo posible,
esa realidad que no nos imponen desde afuera, sino que nos la hemos impuesto nosotros
mismos, porque los medios son nuestros y el programa lo hacemos nosotros, no el
imperialismo. Y si efectivamente la gente tiene acceso a todo esto por fuera, nosotros
tenemos que darle la otra cara de la moneda, las dos caras de la moneda, no solamente
una, que es lo que se está haciendo.
Hay un gran sector de la población que quiere oír y ver determinados programas
y no puede hacerlo porque no existen. No solo se trata de la música sinfónica sino de
la música instrumental simple. Mientras tanto la Orquesta Sinfónica de Londres, por
ejemplo, acaba de grabar un disco compacto muy interesante con canciones de César
Portillo de la Luz y otros autores cubanos. Me pregunto por qué lo hace. O Plácido
Domingo, que también grabó un DC con las mismas obras. Porque saben que hay un
sector que quiere oírlas interpretadas por Plácido Domingo o la Sinfónica. ¿Y por qué
82

La música y el mercado
no lo hacemos nosotros? Porque estamos parcializados con lo que está de moda, «lo
que le gusta a la gente». Y no solo con la salsa. En los años 50 se escuchaba a Beny
Moré, a Matamoros, a Chapotín, a Roberto Faz, a la orquesta Riverside, y la radio y
la televisión ponían de todo. Y existía la competencia sana en los bailables, donde
había una diversidad grande para escoger. Ahora solo se trasmiten algunos pocos
programas donde se pone «la música de ayer». Por lo menos estos programas deben
trasmitirse en horarios estelares para que la gente asuma la música también como un
fenómeno de cultura. La música es un fenómeno cultural, no solamente comercial. El
problema es buscar el equilibrio que nosotros nunca encontramos. Si no escuchamos
a Caturla, no podemos echarle la culpa a nadie más que a nosotros mismos, que tenemos
los medios para darlo a conocer. De lo contrario nos van a imponer lo que quieren,
que no siempre es lo mejor.
Jorge Gómez: Por mi parte quiero aclarar que estoy totalmente de acuerdo con lo que
has dicho.
Jesús Gómez Cairo: Comparto todo lo dicho por Jorge y por Radamés. Ahora bien,
es necesario ir deslindando. Hablamos de los medios de difusión de manera muy
general y muchas veces atacamos indiscriminadamente a los radiodifusores y a los
realizadores de programas. Los responsables de la difusión cubana —que no son los
realizadores de los programas— sí tienen que tener muy claro que hay que abrir
opciones, otros campos, y tienen que hacerlo ellos, no esperar a que el realizador tenga
la iniciativa. Hay terrenos en los que se ha avanzado, hay algunos buenos programas.
Pero debe haber otras opciones y programas especializados. Hay que crear espacios
nuevos, buscando una racionalidad de recursos, para que existan programas que puedan
llenar esos espacios, con materiales que no sean enlatados. Esto que estamos llamando
responsabilidad histórica, o responsabilidad social, la tienen que asumir los dirigentes
de la difusión. Es necesario que las instituciones que rentan servicios en divisas puedan
dar recursos a otras cuya función es más cultural.
Humberto Manduley: Aquí se ha hablado bastante de la relación entre la música y
toda esa esfera económica que tiene que ver con el problema del turismo y el mercado.
Yo me preocupo de qué va a pasar con los músicos, con la música y con las obras que
por su carácter elitista, como decía el maestro Harold en algún momento, nunca van
a tener difusión; porque la probabilidad de recuperar la inversión va a ser ínfima.
¿Qué va a pasar con esos que hacen música de concierto, música electroacústica, jazz?
Se están formando muchos jóvenes valores en las escuelas de música; pero luego, al
salir, tienen que formar una orquesta de salsa para poder viajar o tocar en un cabaret.
Toda esa enseñanza y ese talento se desvían. Esos mismos músicos a veces se quedan a
vivir en otros países, aprovechando todo el bagaje teórico y técnico que adquirieron
aquí en la escuela.
Víctor Torres: Hoy en día estamos haciendo televisión para 11 millones de cubanos,
con una programación insuficiente. Carecemos de una crítica especializada en la prensa
plana, como bien decía Radamés. Hay ausencia de soportes alternativos que en otros
países sí existen. Aquí la televisión se convierte en el medio idóneo para todo —y para
los 11 millones. Hablando como realizador, ¿cómo hacer televisión para consumirla
yo mismo? La televisión nuestra es muy pequeña, por el tiempo de trasmisión. La
música en televisión establece patrones y módulos de conducta, escénicos y sonoros,
que se convierten en cliché para futuras producciones, para hacer la música.
Hablando de la música de concierto, de la música de cámara, por así llamarla,
pienso que falta una metodología más dinámica para hacer ese tipo de análisis.
Desgraciadamente no solo se trata de que seamos importadores de videos de la gran
escena de otros países, sino que falta también ser más agresivos al elaborar ese tipo de
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A. Faya, R. Giro, J. Gómez, J. Gómez Cairo, H. Gramatges, H. Manduley, V. Torres, G. Vilar
música, a la hora de transmitirla. Se requieren otros resortes de información, gráfica,
colores, luz, sonido. Las fórmulas de vanguardia para hacer la música de concierto no
se practican; la forma televisiva se remite a estilos viejos. Hay programas antitelevisivos,
tanto en la difusión de la música como en los programas informativos. A veces
pretendemos informar al pueblo mediante debates, y el esquema con que se hace el
programa es antitelevisivo; y, por tanto, la gente no lo ve. Estamos distanciando de
esas opciones al espectador que quizás nunca en su vida ha ido a un teatro a ver la
sinfónica o la ópera. Para ese individuo hay que trabajar con otro lenguaje. No han
evolucionado las formas televisivas para hacer llegar a las grandes masas alguna que
otra tendencia artística; son viejas las maneras en que a veces pretendemos encauzar las
ideas o los movimientos culturales.
Por lo tanto, pienso que tiene que haber, además de política de difusión, además de
conciencia de difusión, una línea o patrones de cuidado de las formas televisivas, para
que no se nos pierdan ideas buenas en programas malos. No solamente el gusto del
difusor es lo que bloquea la música; es preciso encontrar, o al menos propiciar, las
fórmulas televisivas adecuadas, encontrar a su vez el lenguaje idóneo para hacerlas
asequibles —al menos con esa pretensión— a las grandes masas. De esa manera se pudiera
eliminar el sectarismo o el desbalance que se ha producido entre la música popular y
otros géneros.
Guille Vilar: No solamente es necesario talento, tesón, vocación; hace falta también
inversión. Estoy de acuerdo con que se pongan las cosas en el lugar donde hay que
ponerlas, con la dignidad y la elegancia que hace falta; pero también lo que está sonando
ahora tiene que estar; si no, vamos a volver pasar por la triste experiencia de los años
60. Lo que está sonando hoy debe ser conocido por el televidente nuestro.
En relación con la difusión, no reniego de la responsabilidad que tenemos los
difusores. Pero hay que puntualizar la importancia que tienen las casas discográficas.
Apoyando lo que dijo Jorge, yo lamento que no se haya instaurado una ley en nuestro
sistema musical que programe de alguna manera la ética de determinado tipo de música
o de la música en general. No creo que se deba continuar con una tolerancia
indiscriminada de que cada cual grabe lo que le dé la gana. Hay que preocuparse
porque exista una ética que limite hasta dónde puede llegarse. En todas partes del
mundo hay un límite.
Jorge Gómez: Estoy de acuerdo prácticamente con todo lo que se ha dicho, especialmente
con lo que planteó Manduley: ¿qué va a pasar con los músicos? Creo que nadie lo
puede responder. Como decía Jesús, ese es un problema, sobre todo para los que
tienen que dictar una política —y la política no necesariamente tiene que ver con que
se establezca una censura.
Debería existir toda la libertad de crear todas las cosas. Y los difusores deberían
tratar de difundir aquello que les parece bien. Yo no estoy a favor —pero no podría
decir que estoy totalmente en contra— de ciertas expresiones vulgares en las canciones.
La vida nos demuestra que no solo en nuestra cultura, ni solo en nuestra sociedad, se
da este tipo de manifestaciones. Se da en el rap en los Estados Unidos, en la nueva
música de Bahía, en Brasil, lo que demuestra que nada tiene que ver con la crisis
económica ni con la falta de dólares, sino con todo un entorno cultural internacional.
Por eso se produce lo que decía Radamés de la gorra para atrás, con lo cual yo, realmente,
quisiera convivir; porque, en última instancia, muchas de estas cosas —que podrían ser
nocivas si se convierten, por cualquier mecanismo, como nos está sucediendo, en
cultura oficial— no son más que crónicas ciudadanas de todos los días. Yo creo que
cuando los músicos dicen o hacen este tipo de cosas, reflejan mucho de lo que la gente
piensa. Hay que enfrentar ese reto, con eso hay que convivir. Yo no quiero que la
censura, ni que la imposición de patrones, haga que la nueva trova que yo hago, o que
hacen algunos otros grupos, se imponga por la vía de la minimización de lo que otros
84

La música y el mercado
están haciendo. Por otra parte, como decía Víctor, hay otros retos, que tienen que ver
con la tecnología y con el modo en que la sensibilidad contemporánea necesita ser
seducida a favor de una determinada tendencia musical, sea o no de vanguardia. Y los
creadores están en la necesidad de no dejarse avasallar. Hay que seguir creando y hay
que tratar de imponerse, y buscar la tecnología. Hay que reunirse y volver a hacer
causa común. Y exigir de las autoridades no una censura, sino una defensa de esto, que
es el patrimonio que estamos defendiendo. Y obligar a los productores de radio y
televisión a difundir nuestra obra porque hemos sido capaces de hacerla mejor,
contemporánea, seductora, inobjetable; incluso, para al mercado. Si en vez de hacer
eso, lo que hacemos es patrocinar conciertos masivos de esas agrupaciones, si las
organizaciones y la propia televisión no toman cartas en el asunto, entonces no se
podrá aplicar una política coherente. Hay que hacer que funcione esa democracia de
que hablaba Jesús, que no se logra mediante la censura, ni mediante minimizar al otro.
No se trata de quitar a uno para poner a otro, sino de ponerlos a los dos.
Alberto Faya: Yo quiero agradecerles su participación, no solo en nombre de la revista
Temas, sino también en el mío. Me parece muy bueno que este grupo se haya reunido
para debatir, cuando otros piensan que no hay nada que discutir o que están cansados
de hacerlo. Es importante discutir, en una revista como esta, un conjunto de ideas y
criterios en un país que atraviesa una crisis, porque el país es expresión de una voluntad
colectiva, y de una cultura que va mucho más allá de las voluntades individuales. Creo
que lo más importante es hacer una obra, un trabajo concreto, artístico, que valga la
pena; un trabajo respetuoso, serio, profundo, dedicado, que ustedes conocen tan bien
como yo, porque son artistas. Les agradezco nuevamente por haber venido y haber
participado.
Participantes
Alberto Faya. Músico y director de programas musicales de radio. Casa de las
Américas.
Radamés Giro. Ensayista, crítico musical y editor. Editorial Letras Cubanas.
Jorge Gómez. Músico y realizador de programas musicales de radio. Director del
grupo musical Moncada.
Jesús Gómez Cairo. Musicólogo. Centro «Odilio Urfé»
Harold Gramatges. Músico y profesor. Instituto Superior de Arte.
Humberto Manduley. Crítico y realizador de programas musicales de radio.
Víctor Torres. Realizador de programas de televisión. Instituto Cubano de Radio y
Televisión.
Guille Vilar. Realizador de programas musicales de radio y TV. Instituto Cubano de
Radio y Televisión.
©
, 1996.
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85

Sociedad civil y hegemonía
no. 6: 87-93, abril-junio, 1996.
Sociedad civil
y hegemonía
Jorge Luis Acanda González
Profesor. Universidad de La Habana.
Quiero comenzar recordando una anécdota que me «el principal mérito de la victoria corresponde al
parece asaz pertinente. En 1866, Prusia entró en
maestro de escuela prusiano».
guerra con Austria-Hungría, para reafirmar, por la
Que tan formidable confesión asombrara a los
fuerza de las armas, su papel hegemónico entre los
comensales de Bismarck, es algo comprensible. Que siga
distintos reinos en que se fragmentaba la nación
siendo indescifrable, 130 años después, para algunos que
alemana. Una sola batalla fue suficiente para que el
hoy se ocupan de pensar la relación entre lo político y
ejército prusiano, haciendo gala de celeridad
lo social, es ya más preocupante. Que Bismarck,
movilizativa, férrea disciplina y una demoledora
paradigma del despotismo y el militarismo, tuviera una
precisión que asombraron al mundo, derrotara en toda
tan clara visión del complejo entramado que conecta el
la línea al austríaco, con lo que dio la primera
aula con el batallón, puede servirnos para confirmar lo
demostración de lo que durante los 80 años posteriores
que ya Gramsci vislumbrara: que todo Político, si es
sería su estrategia favorita: la guerra relámpago.
tal —y no por gusto escribo el sustantivo con
Cuéntase que una noche, Bismarck, el Canciller de
mayúscula— es un Filósofo; pero también para asumir
Hierro, artífice del II Imperio Alemán, celebraba con
la necesidad de partir de un enfoque sistémico y
sus generales la victoria. Al calor de las libaciones,
totalizador cuando se quiere pensar sobre la esencia,
empezaron estos a discutir a quién correspondía el
funciones y espacios del Estado y la política; sobre la
principal mérito en el triunfo. Uno argumentó que
existencia o no de esferas sociales autónomas, que
era la infantería la que, resistiendo a pie firme las
escapan a la determinación de lo estatal y lo político, y
embestidas enemigas, había desempeñado el papel
para iniciar una reflexión sobre las complejas relaciones
clave. Otro adujo que había sido la caballería, con sus
entre los mecanismos e instituciones de producción de
oportunas cargas, la principal responsable del éxito.
normas y valores, y las estructuras de control y
Un tercer general, inconforme, atribuyó el papel
conducción estatal. Diciéndolo brevemente, utilizando
fundamental a la correcta posición y acertada puntería
un concepto tan privilegiado en el actual imaginario
de la artillería. Cuando un cuarto general se disponía
social como maltratado por muchos que lo usan: para
a hablar, Bismarck los hizo callar a todos, y sentenció:
pensar sobre la sociedad civil.
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87

Jorge Luis Acanda González
El concepto de sociedad civil es instrumento no solo de análisis,
sino también de proyecto. Es decir, se construye y se utiliza desde
una determinada intencionalidad. No solo para fundamentar y
legitimar (o no) un cierto estado de cosas, sino también para
enunciar y describir un ideal social que funciona como horizonte
de referencia.
El enfoque integral
Un análisis atento permite captar lo común entre
tanta diversidad. En primer lugar, el término «sociedad
Cuando nos abocamos al estudio del tema de la
civil» es definido por exclusión y por antítesis con
sociedad civil, lo primero que podemos constatar es una
respecto al Estado y la política. Se utiliza para designar
paradoja: si bien el concepto es definido en formas muy
la región de lo no político, de la asociación libre y
diversas por los autores que lo tratan, y utilizado en la
voluntaria de los individuos. Sería lo opuesto al Estado,
formulación de proyectos políticos divergentes, existe
al gobierno, a la sociedad política. En segundo lugar, y
entre la mayoría de estas diferentes posiciones una
derivada de lo anterior, está la función que se le asigna
comunidad de elementos teóricos básicos.
en la intención de reconstrucción de lo social: la sociedad
Desde que fuera incorporada al vocabulario de la
civil ha de ser el guardián del Estado; ella ha de
teoría política por los clásicos del liberalismo en el siglo
controlarlo, desempeñándose —para usar la muy gráfica
XVII, esta categoría ha transitado por varias
expresión habermasiana— como un «asedio constante»
interpretaciones. No voy a hacer el recuento de estas,
a una fortaleza «que no se ha de tomar jamás». La
ya que en recientes artículos, Rafael Hernández y Helio
fortaleza sería el Estado, al que se asume como un mal
Gallardo han ofrecido un resumen histórico de esta
inevitable, eterno y necesario, en tanto institución que
evolución.1 Solo quiero destacar que, en la actualidad,
ha de tener el papel de árbitro y mediador entre los
prima la pluralidad de criterios en cuanto al contenido
distintos intereses sociales, pero hacia el cual la sociedad
que se le asigna. Habermas identifica la sociedad civil
civil ha de ejercer siempre una presión que le impida
exclusivamente con la razón y la esfera pública. John
desbordar esta mera función de intermediario, y evitar
Keane la describe como el conjunto de instituciones
así intervenciones espurias —por «políticas»— en las
comprometidas en actividades no estatales —producción
relaciones interpersonales. La sociedad civil, por un
económica y cultural, vida doméstica y asociación
lado, y la sociedad política, por el otro, se interpretan
voluntaria. Cohen y Arato la asocian con la totalidad
en una relación de exterioridad. Coexisten, pero a la
de la vida social que se encuentra fuera de la economía,
vez se oponen. Y la apuesta, en todos estos proyectos
el Estado y la familia. Jeffrey Alexander la entiende como
políticos —desde la derecha y desde la izquierda— se
forma de conciencia colectiva, la esfera universalista de
hace solo por la sociedad civil, en tanto receptáculo y
solidaridad social.2 La misma situación encontramos en
garante de la democracia.
América Latina. Para algunos, es el espacio privado
Está claro que la interpretación de esta categoría lleva
delimitado tanto de la familia como del mercado. Para
implícita la de otras tan importantes como las de Estado,
política, autonomía, democracia, por solo citar algunas.
otros, abarca a todos los grupos y organizaciones que
Y ello porque, aunque muchos lo vean como marcando
no son parte del orden dominante. A menudo se le
la antítesis de lo político, el concepto de sociedad civil
utiliza, en forma intercambiable, como sinónimo de
es una noción política, que no tiene una sola acepción,
«movimientos populares», «organizaciones sociales o de
y que no es un instrumento neutro. Como cualquier
base», u «organizaciones no gubernamentales».
otro concepto —por demás—, solo cobra un significado
Esta variedad de significados permite que tanto la
cuando se le asume dentro de un contexto sistémico.3
derecha como la izquierda la utilicen como pieza clave
Por ello, si queremos definir qué entendemos por
en sus respectivos discursos políticos. Ambas incorporan
sociedad civil, tenemos que empezar por preguntar qué
la consigna de «rescatar la sociedad civil», aunque cada
entendemos por Estado, por política, por autonomía y
una de ellas entienda por tal una cosa distinta. Para la
por democracia. Pero también —y esto muchos no lo
derecha, este rescate se interpreta desde la perspectiva
tienen en cuenta— qué entendemos por libertad y por
neoliberal de despojar al Estado de sus funciones
dominación, puesto que es a eso a lo que nos referimos,
económicas y redistributivas, abriendo paso a un
en definitiva, cuando hablamos de aquellos temas. Aquí
proyecto moral y cultural que se basa en el narcisismo
quiero retomar una idea a la que Hugo Azcuy hiciera
del mercado y el desprecio a los valores de justicia y
mención en su último artículo, publicado en esta misma
solidaridad. La izquierda lo formula como respuesta a
revista: el concepto de sociedad civil es instrumento no
la crisis de los Estados históricos y a la ineficacia de las
solo de análisis, sino también de proyecto.4 Es decir, se
estructuras tradicionales para superar la dominación.
construye y se utiliza desde una determinada
88

Sociedad civil y hegemonía
intencionalidad. No solo para fundamentar y legitimar
y a no pensar de otras, le indican los valores que tiene
(o no) un cierto estado de cosas, sino también para
que compartir, las aspiraciones que son permisibles, las
enunciar y describir un ideal social que funciona como
fobias que son imprescindibles. La familia, la iglesia, la
horizonte de referencia. Y muchas de las confusiones y
escuela, el idioma, el arte, la moral, han sido siempre
ambigüedades que acompañan al uso del concepto de
objetivos del poder, que ha intentado instrumentalizarlos
sociedad civil se salvarían si se tuvieran en cuenta estos
en su provecho.
dos principios básicos en su conformación: la
La concepción restringida y fenoménica de la política,
intencionalidad de su uso y su vinculación sistémica
que la vincula solo con el poder como imposición, ha
con otros conceptos, lo cual implica la necesidad de
de complementarse con otra que la vincule con el
pensarlos a todos en su concatenación, y no por
consenso; es decir, con la capacidad de ese poder de
separado.
instalarse en las regiones de producción espiritual de la
La irrenunciable urgencia de asumir su
sociedad, para conformarla de acuerdo con sus intereses.
interpretación desde una perspectiva integradora se nos
Que permita, por lo tanto, extender el campo de «lo
hace evidente. Por su alto nivel de concreción y
político» a todas las instancias y estructuras que
generalidad, no puede entendérsele como un
socializan a los individuos, ya que desde ellas se consolida
instrumento válido solo para análisis estrechos de
el poder, o se le desafía. Porque el asalto al poder empieza
sectores específicos de la sociedad, sino que es pieza clave
no cuando se atacan sus centros detentadores de
para lograr una visión unitaria y cohesionadora de lo
violencia, sino cuando se incita a cuestionar normas y
social.
valores, a romper con la «clausura de sentido» 5 que
Ante todo, porque cuando hablamos de sociedad
legitima su existencia. Esta concepción «implícita» del
civil estamos hablando sobre la construcción y/o
poder (Castoriadis), el estudio de su «expansión
desconstrucción, el estrechamiento o ampliación, de
molecular» (Gramsci), de su «microfísica» (Foucault),
determinados espacios que encarrilan, en un cierto
da paso a una interpretación de la política que ha de
sentido, la actividad y el despliegue de sujetos sociales
abarcar también las actividades que se realizan por los
específicos.
distintos grupos sociales para obtener y mantener el
control de esas instituciones, estructuras y relaciones
productoras de sentido y normatividad.
Política y dominación
Normalmente, se define la política por su vinculación
Sociedad civil y hegemonía
con el poder. Se la entiende como el conjunto de
actividades que realiza un grupo de sujetos (individuales
Es esta acepción amplia de la política —y del poder
o colectivos) para obtener, consolidar y mantener el
como dominación— lo que nos permite escapar de un
poder sobre el resto de la sociedad; y al poder como la
modo de entender la sociedad como agregado de esferas
capacidad o facultad de imponer normas conductuales
separadas y bien diferenciables entre sí. De ahí que el
obligatorias para todos, las que regulan la interacción
filósofo español José Miguel Marinas, en un reciente
de los individuos en la esfera pública, y de estos con el
artículo, califique de «distorsión» el intento de
poder; normas que son impuestas y mantenidas, por
contraponer sociedad civil y sociedad política,
cuanto se usufructúa el monopolio del uso de la violencia
suponiendo que «la cultura cívica en el sentido ético [...]
física, que se utiliza para castigar las contravenciones de
anida en el reservorio [...] de la primera [...]».6 Esta
aquellas. El Estado sería el conjunto de instituciones
interpretación «tapa y hace olvidar procesos que son de
(poder legislativo, ejecutivo, tribunales, policía, cárceles,
todos conocidos. Encubre el largo y costoso trabajo de
etc.) que establecen esas normas y las imponen.
abrirse la vida pública a la racionalidad y al discurso
Pero el poder no se ejerce nunca solamente sobre la
que activamente la pone en escena y la hace contagiosa
base de la represión. Necesita que sus instituciones de
para el que habla». Es una distorsión que intenta
coerción detenten el monopolio del uso de la violencia,
presentarnos a la sociedad civil «como si esta fuese un
y que la pretensión de ese monopolio sea aceptada por
espacio homogéneo, preservado, bien definido,
la sociedad. Precisa legitimarla, como precisa legitimarse
progresista. Y no más bien, como desde el principio [...]
a sí mismo; lograr que su existencia —y la de ese
un cúmulo de escenarios en conflicto».7
monopolio de la coerción física— sea admitida por todos
La necesidad de tener una visión orgánica de la
como algo necesario, fijado por designio divino, o por
dominación que ejerce una clase o grupo social sobre el
necesidad natural. Le es imprescindible, por
conjunto de la sociedad —dicho en una terminología
consiguiente, controlar también la producción, difusión
contemporánea: de trascender la dicotomía Estado-
y aceptación de normas de valoración y
sociedad civil— ha animado una línea de pensamiento
comportamiento. El poder se apoya, esencialmente, en
que hunde sus raíces en los estudios de Marx sobre la
su control de las instituciones dadoras de sentido,
enajenación y la producción de necesidades, continúa
aquellas que establecen y justifican las significaciones
en los trabajos de Sigmund Freud sobre el carácter
imaginarias y las representaciones admitidas. Las que
represivo de la cultura, y ha desembocado en los últimos
socializan al individuo, le enseñan a pensar de una manera
decenios en la obra de filósofos, historiadores,
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89

Jorge Luis Acanda González
Una clase o grupo social puede ejercer su dominio sobre el
conjunto social porque es capaz no solo de imponer, sino de
hacer aceptar como legítimo ese dominio por los demás grupos
sociales. El componente esencial de esa hegemonía es
precisamente la sociedad civil, entendida como el espacio donde
se producen y difunden las representaciones ideológicas.
psicoanalistas, lingüistas y antropólogos como Foucault,
a ciertas determinaciones del concepto de Estado, que
Lacan, Levi-Strauss, Barthes y Althusser. Estos autores
generalmente se entiende como sociedad política (o
destacaron que gracias a los «micropoderes», a las
dictadura, o aparato coactivo [...] ) y no como un equilibrio
de la sociedad política con la sociedad civil (o hegemonía
estructuras lingüísticas, ideológicas y antropológicas, no
de un grupo social sobre la entera sociedad nacional,
hay espacio social alguno que sea realmente exterior al
ejercida a través de las organizaciones que suelen
Estado.
considerarse privadas, como la iglesia, los sindicatos, las
Fue el fundador de la filosofía política marxista,
escuelas, etc.).9
Antonio Gramsci, el primero que desarrolló todo un
sistema conceptual para aprehender en forma unitaria
El Estado no es solo el aparato de gobierno, el
la compleja fenomenología del poder. Sus reflexiones
conjunto de instituciones públicas encargadas de dictar
—esparcidas a lo largo de 4 000 páginas de apuntes de
las leyes y hacerlas cumplir. Está integrado también por
sus Cuadernos de la cárcel— tenían como fundamento
el conjunto de instituciones vulgarmente llamadas
los procesos que se venían dando en Europa desde el
«privadas», que son agrupadas por el autor de los
último cuarto del siglo XIX, y que habían eclosionado
Cuadernos... en el concepto de sociedad civil. El
con fuerza dramática tras la I Guerra Mundial. El tránsito
desarrollo de la modernidad capitalista condujo a que
del modo de producción capitalista de su etapa de libre
los límites de lo «público» y de lo «privado», de lo
concurrencia a la monopólica, implicó un nuevo patrón
«político» y lo «civil», no constituyan ya líneas
de acumulación que acentuó aún más el papel del Estado
infranqueables de demarcación, sino zonas de
como regulador económico. El desarrollo de las fuerzas
intersección entre el Estado y la vida cotidiana de los
productivas trajo aparejada la emergencia de nuevos
individuos. Familia, iglesias, escuelas, sindicatos,
agentes sociales en el campo de las luchas políticas. Los
partidos, medios masivos de comunicación, hasta el
obreros, las mujeres, y otros sectores, adoptaron nuevas
sentido común compartido por todos y que marca lo
formas de organización para luchar por sus demandas.
que se acepta como normal, natural y evidente, son
Surgen así sindicatos, movimientos sufragistas, ligas
elementos de un espacio cuya nominación como
feministas, escuelas nocturnas no estatales, cooperativas
«sociedad civil» no indica su ajenidad respecto a las
de consumo, etc. Esto significó la crisis de la concepción
luchas políticas por el poder, sino un campo específico
liberal del Estado —que entendía a este solo como
de estructuración de la hegemonía de una clase. Pero, a
gendarme, como guardián del orden público. Ante estos
la vez, la conceptualización de la sociedad como un
desafíos múltiples, la burguesía procedió a reorganizar
sistema hegemónico no implicaba, para Gramsci,
su hegemonía. Surgieron las formas modernas de
postular a esta como un modelo totalmente integrado
dominación, basadas en una expansión «molecular» del
de aquella. La sociedad civil no es monovalente, algo
Estado, en un redimensionamiento de su morfología,
homogéneo y uniforme en su relación con el poder del
de su base histórica. El Estado capitalista se reestructuró
grupo dominante. Las instituciones que la conforman
a través de un proceso que asimiló el desarrollo complejo
son el escenario de la lucha política de clases, el campo
de la sociedad civil a la estructura general de la
en el que tanto los dominados como los dominadores
dominación.
desarrollan sus pugnas ideológicas.
El eje teórico de las reflexiones de Gramsci lo
La politización de la sociedad civil —el
constituye el concepto de hegemonía.8 Una clase o grupo
desplazamiento de la política a espacios antes
social puede ejercer su dominio sobre el conjunto social
considerados como privados—, que caracteriza a los
porque es capaz no solo de imponer, sino de hacer
procesos clásicos de modernización, no fue considerada
aceptar como legítimo ese dominio por los demás grupos
por Gramsci como un fenómeno totalmente nuevo, sino
sociales. Su poder se basa en su capacidad de englobar
como una variación en las proporciones relativas de la
toda la producción espiritual en el cauce de sus intereses.
coerción y el consenso. Aunque las instituciones
El componente esencial de esa hegemonía es
represivas siguen siendo instrumento imprescindible de
precisamente la sociedad civil, entendida como el espacio
la clase dominante, la coerción absoluta no ha sido
donde se producen y difunden las representaciones
nunca una opción viable. Mucho menos cuando el
ideológicas. De ahí que Gramsci destacara que sus
desarrollo distorsionado —pero incesante— de las
reflexiones lo habían llevado
fuerzas productivas y las necesidades sociales que genera
90

Sociedad civil y hegemonía
el capitalismo, trae aparejado un desarrollo paralelo de
preteridos —las clases trabajadoras, las mujeres, los
la subjetividad humana. La clase dominante se ve
jóvenes, los discriminados por raza y religión— por
obligada a buscar y organizar activamente el
crearse estructuras y reductos desde los que puedan
consentimiento —aunque sea pasivo— de los dominados.
remontar aquellos elementos que funcionan como
Esto lo logra mediante su capacidad de diseminar normas
obstáculos a su proceso de constituirse como sujetos
políticas, culturales y sociales por medio de las
sociales, con todo lo que de autonomía y poder de
instituciones «privadas» de la sociedad civil. El consenso
decisión ese estatus implica. Cada parte integrante de
así logrado es la construcción de la hegemonía, que no
esa estructura múltiple y difusa llamada sociedad civil
solo legitima, sino que de hecho constituye la
—sindicatos, partidos, grupos feministas y ecologistas,
dominación. El «Estado» en las sociedades de clase es la
etcétera— cada una de las facultades que la hacen ser —la
combinación, en proporciones variables y cambiantes,
capacidad de organizarse, el derecho al voto, la libertad
de momentos de consenso y momentos de fuerza. De
de disentir— ha sido arrancada a la aristocracia del dinero
ahí que Gramsci acotara: «pudiera decirse [...] que Estado
en largas y cruentas luchas. Pero ella es también el
= sociedad política + sociedad civil, o sea, hegemonía
resultado del intento sostenido —y en muchos casos
acorazada con coacción».10 El Estado es entendido no
exitoso— de esa misma aristocracia para distorsionar
como institución jurídica, sino como resultado de las
esos espacios de expresión a fin de impedir la
relaciones orgánicas entre sociedad política y sociedad
constitución de los sujetos sociales que harían peligrar
civil.
sus privilegios, su capacidad de hegemonizar esos
El sentido peculiar y determinante de la estructura y
intentos en su provecho, de ocluir las vías de expansión
funciones de la sociedad civil consiste en estar atravesada
de las subjetividades antagónicas a aquella que constituye
por el nervio de lo político. Dos momentos importantes
su razón de ser. La burguesía es un sujeto social
en la teoría gramsciana sobre la hegemonía, deben
excluyente, egocéntrico, que solo puede existir mientras
destacarse para evitar malentendidos. En primer lugar,
mantenga a todos los demás grupos sociales en el papel
la distinción entre sociedad política y sociedad civil no
de meros soportes de su modo de apropiación —material
es orgánica, sino tan solo metódica. No es posible
y espiritual— de la realidad. La sociedad civil forma parte
establecer una diferenciación rígida y abstracta de los
del aparato de dominación, pero también es su
elementos que conforman a una y otra. Una misma
antagonista.
institución puede pertenecer a la vez a ambas, o estar en
un momento concreto en una, y después en otra. Un
partido político forma parte de la sociedad política, pero
La sociedad civil socialista
si logra insertarse en el proceso de producción y/o
distribución de normas de valoración y
La sociedad civil no es un regalo ni un accidente. No
comportamiento, se inscribirá a la vez en la sociedad
es algo cuya existencia podamos aceptar o impedir. En
civil.11 En la época en que unía el poder temporal y la
su desarrollo, es un resultado —legítimo, por demás—
conducción moral, la Iglesia Católica era tanto una como
de la lucha de clases fundadora de la modernidad.
la otra. Hoy, en la mayoría de los países, se define solo
Podemos rechazar el modo en que se ha constituido por
en la sociedad civil. Para Gramsci, la relación entre ambas
el capitalismo, como rechazamos el modelo capitalista
sociedades se concibe bajo la idea de «unidad-distinción».
de modernidad. Pero tenemos que asumirla en la riqueza
En segundo lugar, como fuente en la que se estructuran
de su contradictoriedad, tal como Marx asumió la
las relaciones de poder, la sociedad civil no puede ser
promesa de desarrollo humanamente gratificante que se
percibida tan solo como lugar de enraizamiento del
encierra en la contradictoriedad de lo moderno.
sistema hegemonial de la dominación, sino también
A diferencia de las formaciones hegemónicas
como el espacio desde donde se le desafía. La mayor
anteriores, la revolución comunista aspira a liberar las
penetración de la sociedad política en la sociedad civil
capacidades creadoras contenidas en los grupos sociales
no solo sirvió para fortalecer la hegemonía de la
hasta ahora mantenidos en la explotación y a los que se
burguesía, sino que abrió nuevas posibilidades para un
les negaba la posibilidad de constituirse como sujetos.
proyecto contestatario y emancipador. En la sociedad
La desaparición de los elementos enajenantes de la vieja
civil se expresa el conflicto social. Si algunos de sus
sociedad, y la construcción ininterrumpida de un sistema
componentes portan el mensaje de la aceptación tácita a
de relaciones emancipatorias, implica —para la clase que
la supeditación, otros son generadores de códigos de
anima este proceso— la construcción de una hegemonía
disenso y transgresión, y —lo que es más peligroso aún
de tipo inédito, sin precedentes en la historia: la asunción
para la burguesía— de proyectos de desmontaje de la
de la necesidad de abrir cauces que permitan a estos
hegemonía opresiva.
grupos construirse su propia subjetividad desalienante,
La expansión sin precedentes de la sociedad civil en
para que esta hegemonía pueda afianzarse. La nueva
los últimos 150 años, no ha sido —como se nos quiere
hegemonía liberadora tiene como objetivo potenciar una
hacer creer— el efecto espontáneo de la expansión del
sociedad civil que sea escenario de la acción creadora de
capitalismo, sino el resultado de la interacción de dos
los sujetos que la componen. Sujetos de la revolución,
procesos contradictorios. Por un lado, del intento
sujetos que son congruentes entre sí, y que son capaces
continuado de múltiples agentes sociales, explotados y
de rebasar sus imprescindibles conflictualidades porque
90
91

Jorge Luis Acanda González
Para poder enfrentarnos a la amenaza de opresión total, que la
creciente globalización del capital hace cada día más cierta, es
preciso lograr la movilización de sujetos totales. Ese ha de ser
el objetivo a lograr en la necesaria tarea de profundizar en la
caracterización del contenido socialista de nuestra sociedad
civil.
son, todos ellos, no meros portadores, sino coautores
de fijarse sus propias metas y de desplegar en forma
de un proyecto liberador al que no pueden renunciar,
libre y creadora sus potencialidades y capacidades, su
porque encuentran, en las perspectivas que este inaugura,
identidad propia.
el condicionamiento ontológico de su existir; proyecto
Los años 60 fueron testigos de un crecimiento
que someten a constantes reestructuraciones, en la
explosivo de la sociedad civil cubana. Y ello no tan
medida en que las circunstancias internas y externas se
solo —ni siquiera principalmente— por la aparición
transforman.
de nuevas organizaciones de masas (CDR, FMC) o por
La Revolución cubana construyó su sociedad civil.
el nuevo rol social que pasaron a desempeñar algunas
Su poder de convocatoria se cifraba, precisamente, en
de las ya existentes (sindicatos y organizaciones
su promesa de desarrollar los cauces para que los grupos
estudiantiles), sino sobre todo por el
sociales preteridos pudieran desarrollar su subjetividad.
redimensionamiento de todo el sistema de instituciones
Por lo tanto, ni la revolución destruyó la sociedad civil
encargadas de producir y difundir las nuevas formas
cubana, como dicen sus enemigos, ni puede pretender
ideológicas que cimentaban el nuevo bloque histórico
obviarla o sustituirla por otra cosa, como afirman —sin
—desarrollo del sistema educacional, conversión de los
verdadero conocimiento de causa— algunos de sus
medios de difusión masiva en instrumentos de interés
intérpretes de izquierda. Desde Gramsci, la clave de una
público, etcétera—, y por la inserción activa, en esa
posición marxista en torno al tema de la sociedad civil
sociedad civil, de amplios sectores sociales que antes
reside en entender el papel fundamental de esta en la
tenían un papel pasivo o que, por su posición marginal,
transición hacia el comunismo.
ni siquiera podían considerarse incluidos en ella. Fue
La lucha contra la dictadura y las lacras de la
a través de esta nueva sociedad civil como la
República neocolonial, el desafío nacionalista a la
Revolución logró la obtención de su hegemonía.12
dependencia, y el despliegue de medidas de justicia social,
Si el tema de la sociedad civil ha ocupado la
lograron eslabonar, en la primera mitad de los años 60,
atención de los círculos intelectuales cubanos —y en
en torno al ideal de la Revolución y a su dirigencia, un
ellos incluyo a los políticos— en los últimos años, ello
bloque histórico cuya cohesión y fortaleza permitió
no se debe tan solo a la preeminencia que ha alcanzado
enfrentar las consecuencias de la agresión imperialista y
este concepto en las ciencias sociales contemporáneas,
de nuestros propios errores. Pero ello no se alcanzó
o a su utilización por el imperialismo para diseñar
uniformando a la sociedad, ni convirtiéndola en un
estrategias desestabilizadoras de nuestro sistema
bloque monolítico y monocorde (cosa por demás
político, sino sobre todo a la propia activación de
imposible), sino sentando, en aquellos años, los
nuestra sociedad civil, provocada tanto por los efectos
fundamentos de una sociedad civil más plural,
económicos, políticos e ideológicos de la desaparición
precisamente por ser más inclusiva que la precedente.
del campo socialista, como por la propia maduración
El nuevo Estado aplicó todo su poder de coerción para
que las clases y grupos sociales envueltos en la
eliminar la existencia de aquellas clases y grupos que,
Revolución han alcanzado en estos más de 30 años de
por estar orgánicamente vinculados con un orden social
haber emprendido el camino, plagado de conflictos,
que condenaba al país a la subordinación y el atraso,
contradicciones y dificultades, hacia su
impedían el desarrollo de nuestra nación —sacarocracia,
autoconstitución como sujetos históricos.
burguesía importadora, lumpen, instituciones
Esta activación de nuestra sociedad civil se ha
armadas—, mientras que, por primera vez en nuestra
manifestado en la apropiación —parcial o completa—
historia, creaba las condiciones para que los obreros,
de espacios y procesos antes exclusivos del Estado-
los campesinos, las mujeres, los estudiantes, los artistas,
sociedad política, y por la importancia que han cobrado
dejaran de ser meras comparsas y se incorporaran a la
los canales y esferas de realización del debate ideológico,
vida social, en un proceso activo de participación que
que se ha tornado cada vez más socializado y
debía permitirles su autoconstitución como sujetos
sistematizado, como reconoce Abel Prieto en una
sociales; es decir, no como simples actores, sino como
reciente entrevista.13 En ella, Prieto afirmaba que la
entes colectivos que —mediante la utilización del
Revolución ha intentado combinar una cultura
universo de formas de praxis política que la revolución
afirmativa con una cultura de la crítica, de la reflexión,
les abría— serían capaces de forjarse su autoconciencia,
de la duda, de la inquietud.14 El grado de realización de
92

Sociedad civil y hegemonía
este propósito es y será función de la conformación de
9. Véase Antonio Gramsci, Antología, La Habana, Editorial de Ciencias
una sociedad civil que logre desempeñar, en forma cada
Sociales, 1973: 272.
vez más plena y compleja, ese papel crítico y afirmativo
10. Ibíd.: 291.
a la vez, con respecto a la sociedad política.
Para poder enfrentarnos a la amenaza de opresión
11. Gramsci logró esbozar los principios de una teoría del partido
total, que la creciente globalización del capital hace cada
comunista, sin precedentes en la tradición marxista, precisamente porque
día más cierta, es preciso lograr la movilización de sujetos
lo analizó no solo como integrante de la sociedad política, sino también
y simultáneamente como constituyente de la sociedad civil.
totales. Ese ha de ser el objetivo a lograr en la necesaria
tarea de profundizar en la caracterización del contenido
12. Los experimentos socialistas al este del Elba fracasaron precisamente
socialista de nuestra sociedad civil.
por no haber querido entender el papel crucial de la sociedad civil en la
transición al comunismo. Allí primó una interpretación economicista
y estatista del socialismo, que condujo a ignorar la existencia de esta
región de lo social, con las consecuencias que son de todos conocidas.
Notas
«En la práctica de estos países socialistas, el partido se desprestigió
socialmente, perdió su condición de vanguardia al resquebrajarse su
1. Véase Rafael Hernández, «La sociedad civil y sus alrededores», La
autoridad por no tener un desarrollo democrático sobre la base del
Gaceta de Cuba, La Habana, (1), enero-febrero, 1994; Helio Gallardo,
funcionamiento de las organizaciones sociales y culturales de la sociedad
«Notas sobre la sociedad civil», Pasos, San José, Costa Rica, (57), enero-
civil socialista». (Armando Hart, «Sociedad civil y organizaciones no
febrero, 1995.
gubernamentales» (I), Granma, 23 de agosto de 1996: 3.) En la política
socialista es necesario prestarle a la sociedad civil la misma atención que
2. Para una breve presentación de estas y otras concepciones, ver Jeffrey
en la arquitectura se le da a la ley de la gravedad. Como afirmó Gramsci,
C. Alexander, «Las paradojas de la sociedad civil», Revista Internacional
«en política, el error sucede por una torpe comprensión de lo que es el
de Filosofía Política, Madrid, (4), noviembre, 1994.
Estado en su significado integral: dictadura más hegemonía». La sociedad
civil socialista no se reduce al sistema de organizaciones de masas, o al
3. Nicolás López Calera, Yo, el Estado, Madrid: Editorial Trotta, 1992.
conjunto de organizaciones no gubernamentales. La anécdota de
Bismarck apuntada al principio nos recuerda que el más importante
4. Véase Hugo Azcuy, «Estado y sociedad civil en Cuba», Temas, La
elemento integrante de nuestra sociedad civil —por ser pieza clave en la
Habana, (4), octubre-diciembre, 1995: 105-10.
obtención y consolidación cualitativamente renovada de la hegemonía—
es una institución gubernamental: el Ministerio de Educación.
5. Cornelius Castoriadis, «La democracia como procedimiento y como
régimen», Leviatán, Madrid, (62), invierno, 1995: 68.
13. Elizabeth Díaz y Amado del Pino, «¿Oficialismo o herejía? Entrevista
a Abel Prieto», Revolución y Cultura, La Habana, (1), enero-febrero,
6. José Miguel Marinas: «Cultura cívica y memoria», Leviatán, Madrid,
1996: 9.
(62), invierno, 1995: 53.
14. Ibíd.: 4.
7. Idem.
8. La concepción gramsciana sobre la hegemonía y la sociedad civil se
apoya en un sistema teórico conformado por otras categorías, tales
como bloque histórico, guerra de posiciones, ideología, intelectual
orgánico, que este autor interpreta en una forma muy específica, y para
el tratamiento de las cuales no dispongo aquí de espacio.
©
, 1996.
92
93

Oscar Loyola Vega
no. 6: 94-100, abril-junio, 1996.
Reflexiones
sobre la escritura
de la historia
en la Cuba actual
Oscar Loyola Vega
Profesor. Universidad de La Habana.
Ante todo, considero necesario hacer esta profesión
En esto no nos diferenciamos demasiado de otros
de fe inicial:
pueblos latinoamericanos. Sin embargo, debe tenerse
presente que el elevado índice de alfabetización
1. No me concibo —o, como está tan de moda decir, no
existente en nuestro país, a escala continental, no solo
me pienso— a mí mismo fuera de los quehaceres del
en las décadas anteriores a 1959 sino también bajo el
historiar, después de veinticinco años de vida
colonialismo español, ha ampliado el universo de los
profesional.
lectores de historia, estimulados por la calidad de la
2. Las reflexiones que a continuación propongo no
producción insular y el precio aceptable de libros,
tienen, de manera previa, a ningún colega in mente;
folletos y revistas. El incuestionable movimiento
no me interesan las individualidades ni aludo a casos
educativo y cultural que desató la Revolución del
específicos. Mi intención se centra en la escritura,
Primero de Enero, y la necesidad de esta de asumir y
no en los escritores.
utilizar el pasado histórico nacional, con sus mitos y
sus tradiciones, sus éxitos y sus fracasos, provocó una
La historia tiene una muy larga tradición en Cuba:
eclosión afortunada de los estudios históricos, que se
más de doscientos años de haber dado sus primeros
escaparon del marco habitual republicano —estrechez
vagidos, al decir de los estudiosos. Pocas disciplinas del
económica, casi ningún apoyo gubernamental, poca
saber disfrutan en nuestro medio de tal ancianidad.
estimación y reconocimiento sociales del papel del
Desde la segunda mitad del siglo XVIII, hombres cultos
historiador— y permearon todos los estratos de la
y sapientes han probado sus armas en trabajos históricos,
sociedad cubana, volcada así a una lógica
de los cuales no pocos constituyen obras de recia
reinterpretación de su pasado —cada generación
envergadura. El decursar histórico ha estado siempre
reescribe la/su historia— en función de un cambio
presente en la problemática intelectual del país. Con
social radical, imprescindible para reafirmar la
toda justeza puede decirse que el gusto por la historia
actuación cotidiana y, siguiendo pautas habituales en
(mejor expresado, por leer sobre historia) es un
la utilización estatal de la historia, justificar y proyectar
componente capital de la psicología del cubano.1
el porvenir.
94

Reflexiones sobre la escritura de la historia en la Cuba actual
La absolutización del llamado «dato», y su abstracción y
sobrevaloración, se reflejan en la densidad de la escritura
histórica, lastrada comúnmente por una excesiva referencia a
las fuentes utilizadas. Han sido publicados no pocos libros, cuyo
determinante y casi único valor estriba en la enorme
información que vuelcan sobre el lector.
A estas alturas de la exposición seguramente ha
históricos persisten fuertemente en la manera de
quedado puesto de manifiesto que el análisis se centra
historiar en Cuba, sin que esto implique negar el
en la historia escrita desde Cuba, por autores que
relevante lugar que ambos autores se ganaron entre los
producen en Cuba, ya sea sobre problemas relacionados
principales impulsores de los métodos del trabajo
con la historia nacional, o con aspectos concernientes
histórico. La absolutización del llamado «dato», y su
al decursar histórico universal o continental. Resulta
abstracción y sobrevaloración, se reflejan en la densidad
necesario aclarar, además, que una reflexión sobre la
de la escritura histórica, lastrada comúnmente por una
escritura de la historia en el siglo XIX cubano implicaría
excesiva referencia a las fuentes utilizadas. Han sido
sumergirse en no pocas disquisiciones sobre el desarrollo
publicados no pocos libros, cuyo determinante y casi
de las llamadas ciencias sociales, y su constitución en la
único valor estriba en la enorme información que
pasada centuria, en áreas del conocimiento
vuelcan sobre el lector. Lo preocupante del caso es que
independientes, en particular la sociología; lo que
sus autores suelen ser alabados, y aun felicitados, por
desbordaría (y transformaría) los objetivos de este
esconder sus opiniones —si es que las tienen—; vale decir,
trabajo. De ahí que el análisis se enmarque en la escritura
por negar su subjetividad profesional, característica de
de la historia en la contemporaneidad insular. Dicho
la expresión histórica, ampliamente conocida ya por
de otra manera, no se pretende hacer la historia de la
los más connotados teóricos del positivismo europeo
escritura decimonónica de la historia; ni muchísimo
del siglo anterior. Entiéndaseme: no inicio una cruzada
menos la historia de las obras sobre historia en la propia
contra el hecho o el dato; abogo simplemente por
etapa; se pretenderá pensar sobre la escritura de la
retirarlos, lo máximo posible, de la escritura.3
historia en la actualidad nacional.
Diversificar la geografía
¿Dato vs. interpretación?
Sería conveniente pensar con detenimiento en la
Estoy seguro de que para muchos colegas un trabajo
distribución, por áreas geográficas, de la producción
de tal naturaleza es un trabajo «raro». No pocos de los
histórica nacional. No representaría una sorpresa
miembros del gremio preferirían verme laborar
constatar que las obras sobre la historia de Cuba
—investigar— en función de precisar, de manera
constituyen enorme mayoría, lo cual es lógico. Los
inobjetable, cuántos clavos remacharon el casco de la
trabajos dedicados a la historia de América Latina siguen
«Santa María», o el exacto número de libertos que
a estos, a mucha distancia. Algo —muy poco— se escribe
murieron a las órdenes de Donato Mármol —si lo logro
sobre los Estados Unidos. Europa, Asia y Africa están
desglosar en etnias, edad y propietarios, mi puesto en
casi por completo ausentes de la escritura histórica.
el Panteón sería indiscutido. Esto hace que mi primera
Varias de las razones que explican lo expuesto puedo
reflexión gire en torno a la fetichización del dato en
comprenderlas, y aun compartirlas: falta de
nuestra asunción del conocimiento histórico.2 No
información, escasa salida editorial, no acceso a archivos
desconozco que en el ambiente histórico nacional han
(¡ah, los socorridos archivos!), poca tradición, etc. Pero
existido grandes enfrentamientos entre supuestos
todo no puede justificarse tan sencillamente. Ha habido
cultores del dato en sí y para sí, y connotados escritores
—hay— un abandono real y efectivo del quehacer
de historia apasionados por una interpretación en gran
histórico relacionado con lo «de afuera»; es inconcebible
medida desvinculada de los hechos históricos. Todo esto
que España o Norteamérica no estén presentes de
ha sucedido no en el pasado siglo, sino en fecha muy
manera habitual en la producción nacional, por su
reciente, lo que ha dejado graves secuelas en las
ligazón directa con el acaecer histórico cubano. Las
generaciones siguientes. Yo me preguntaría: ¿por qué
ausencias señaladas también hay que buscarlas en la
tenemos que seguir reeditando tales enfrentamientos?
concepción que sobre la historia —la disciplina
Con independencia de las simpatías de cada cual —y
historia— se sostenga. Buena parte de los profesionales
simpatías aquí equivale a concepción de y sobre la
dedicados a la exposición oral o al trabajo de asesoría
historia— es innegable que las excelentes influencias de
vinculado a estas regiones, están altamente capacitados
Langlois y Seignobos en el desarrollo de los estudios
en su esfera; pero el temor a no ser considerados
94
95

Oscar Loyola Vega
investigadores («historiadores») frena la plasmación por
práctico de la disciplina. A su regreso, los sustanciosos
escrito de sus criterios. ¿Cómo competir con acuciosos
«datos», localizados con encomiable esfuerzo, serán
colegas, que dedican miles de horas de su vida laboral a
vertidos en una escritura tradicional, obsoleta en los
sumergirse en amarillos manuscritos que dormitan en
derroteros de la narración histórica del texto
ignotos y centenarios fondos? Romper con esto no es
contemporáneo.
fácil: demasiadas décadas lo han condicionado. Sin
embargo, hay que hacerlo, o al menos, intentarlo. La
producción histórica desde Cuba, de cara al siglo XXI,
De la teoría
tiene que diversificar su base geográfica.
De lo visto se deriva una característica notable de
nuestra producción histórica: la falta de obras teóricas
La historia como interdisciplina
sobre el género. Si se revisan con cuidado los trabajos
históricos, en un lapso abarcador, sorprende el poco
Lo anteriormente expuesto se da la mano con un
interés mostrado por los historiadores cubanos en
elemento trascendental: por razones ampliamente
analizar los marcos teórico-investigativos y los
conocidas, los que escriben en Cuba tienen un altísimo
presupuestos —o supuestos— metodológicos de la
grado de desvinculación —involuntaria— con la
disciplina. En esto no se ha hecho más que seguir los
producción histórica de avanzada de Europa y los
derroteros de la historia a escala universal: es notorio
Estados Unidos. Se desconocen las obras fundamentales,
que la rama de las «ciencias» sociales menos dada a la
los principales autores, las corrientes en boga. Hemos
teorización introspectiva, a estudiarse a sí misma, ha
seguido escribiendo como si la disciplina se hubiese
sido la historia. Sin embargo, tal situación ha comenzado
detenido en el tiempo, muchos años atrás. Los
a revertirse en las últimas décadas; impulsados por otros
portentosos avances de la sociología, la etnohistoria o
especialistas, los escritores de historia, en las naciones
la antropología, por solo utilizar tres ejemplos, no han
más avanzadas dentro de la profesión, han aumentado
existido entre nosotros.4 En gran parte por
considerablemente los estudios relativos a las
desconocimiento y, en no pequeña medida, por
concepciones, los métodos y técnicas a emplear, los
subestimación, la complejidad del trabajo
referentes históricos, la asunción del texto en tanto
interdisciplinario en la contemporaneidad, las múltiples
artefacto, la relación hecho-sujeto, et al.5
relaciones actuales entre la historia y otras ramas del
A escala nacional, el vuelco apenas ha empezado.
saber, son fenómenos que no existen para los
Las investigaciones histórico-concretas predominan de
historiadores del patio. En momentos en que todas las
manera abrumadora. Siguiendo la tradición establecida
disciplinas que se ocupan del hombre se traspasan —en
desde el siglo XIX, es muy difícil, en nuestro caso, que
ósmosis vivificadora— sus resultados, da la impresión
un colega analice los métodos y los supuestos a través
de que, en Cuba, los profesionales nos complacemos
de los cuales ha llegado a resultados concretos, y mucho
en aislarnos de los científicos sociales vecinos,
menos que se plantee los problemas globales de la
negándolos, y renunciando a aprovechar sus logros.
investigación histórica, las realidades conceptuales, o
¿Qué técnicas se emplean hoy en día en el trabajo
la vinculación de su disciplina con otras afines. No se
histórico? ¿Cuáles son los límites y posibilidades de la
trata aquí de desarrollar mejor los estudios
oralidad? ¿Tienen fronteras precisas la historia y la
historiográficos, en su sentido habitual; obras de este
literatura? ¿Puede aplicarse una encuesta a
corte, si bien poco abundantes, existen; se trata de
personalidades fallecidas hace doscientos años? Los
interiorizar, de una vez por todas, que una materia que
ejemplos anteriores ponen sobre el tapete la imperiosa
no elabora su corpus teórico se estanca, antes de
necesidad, para los historiadores cubanos, de actualizarse
comenzar a retroceder. Es imprescindible, para toda
a la mayor brevedad, sobre todo en lo referente a
rama del saber, la reelaboración constante de sus
técnicas. Creo que son utilísimos, no tengo nada
presupuestos y de sus métodos; no solo para las llamadas
personal contra ellos, pero, ¿hasta cuándo el fichaje, el
ciencias exactas, o para las otras «ciencias sociales». La
clasificador, la guía temática, los rubricadores, etc.,
escritura de la historia en Cuba necesita con urgencia la
constituirán el centro —en algunos, el único— del arsenal
ampliación de los trabajos teóricos.
de métodos y técnicas? Otras disciplinas pueden ayudar
mucho a transformar tal concepción, que determina —
¡qué duda cabe!— la escritura de la historia.
Recuperar el ensayo histórico
La diferencia entre el trabajo histórico en los finales
de este siglo y el de mediados de la propia centuria, es
Casi todas las investigaciones hechas en la Isla se
abismal. No se puede negar —peor aún, despreciar—
plasman en forma de libros, folletos, artículos diversos,
los avances obtenidos. Y se constata con sorpresa y dolor
a no dudar, muy sólidos. Se echa de menos, sin embargo,
que no pocos de los historiadores que viajan al
un género trascendental en los estudios sobre la
extranjero se desesperan por realizar amplísimos
sociedad: el ensayo. Este, en su correcta acepción, casi
trabajos de archivo, con absoluto desinterés por dedicar
brilla por su ausencia. Escoger un problema «histórico»,
parte de su estancia a estudiar el desarrollo teórico-
desconstruirlo, analizarlo en sus posibles connotaciones,
96

Reflexiones sobre la escritura de la historia en la Cuba actual
Se desconocen las obras fundamentales, los principales autores,
las corrientes en boga. Hemos seguido escribiendo como si la
disciplina se hubiese detenido en el tiempo, muchos años atrás.
Los portentosos avances de la sociología, la etnohistoria o la
antropología, por solo utilizar tres ejemplos, no han existido
entre nosotros.
relacionarlo con otros similares y llegar a conclusiones
grandemente relacionada con la falta de obras de
personales, es un fenómeno semidesconocido en la
proyección teórica, y debe ser enmarcada en dos
producción histórica nacional contemporánea, con
direcciones:
honrosas excepciones.
Primera: el caos existente en la aplicación de
La tradición cubana, en lo referente al ensayo, fue
conceptos o, si se prefiere, la pobreza y confusión que
excelente desde los albores del XIX hasta hace
reinan en la utilización del vocabulario histórico. Toda
relativamente poco. La calidad de los ensayistas insulares
disciplina se asienta, se consolida y avanza cuando es
era altamente reconocida dentro de las letras
capaz de presentar un corpus conceptual que la
hispanoamericanas. Varela, Saco, Luz, Martí, Varona y
singulariza entre las materias afines. En el caso de la
Emilio Roig —por solo recordar algunos—, queriéndolo
historia, es notable que las investigaciones concretas han
o no, conscientes de ello o no, escribieron trabajos
desplazado, de manera abrumadora, la preocupación de
históricos que marcaron pautas en la ensayística nacional.
La materia prima (información abundante) jamás faltó
sus cultores por establecer y desarrollar un vocabulario
en ninguno; por el contrario, de su plenitud dependió
propio, instrumento de trabajo imprescindible; el léxico
su condición de prosistas. No se olvide, sin embargo,
histórico se ha formado, en mucha medida, con la
que si a muchos años de haber sido escritas, sus obras se
utilización renovada de palabras de arraigo popular, que
leen hoy por hoy con admiración y provecho, esto se
pueden asumir diferentes significados en función de las
debe al análisis realizado y al compromiso personal
«necesidades expresivas» de la escritura histórica. En
establecido a través de sus juicios; vale decir, al yo del
Cuba, la confusión terminológica, el caos conceptual,
escritor devenido ensayista.
llega a ser, en algunos profesionales, francamente
Actualmente el ensayo es poco cultivado. Las
lamentable. Muy lejos estoy de pretender resucitar el
investigaciones «concretas», con su fárrago de datos y
antidialéctico sistema de categorías foráneas, adaptable
hechos —¡los nunca bien alabados hechos!—, lo han
a todas las materias que estudian al Hombre (según sus
sepultado. Mientras más citas, más «objetividad», menos
defensores), y que se quiso aplicar en nuestro país; pero
sujeto, menos yo. Trabajos hay que no contienen un
no se puede dudar de que toda disciplina exige un
solo juicio personal: son transcripciones de documentos
vocabulario específico. La historia lo tiene, aunque sea
de archivo, sin que siquiera el ordenamiento cronológico
arcaico y poco flexible; empero, nuestros profesionales
intente reflejar una problematización interpretativa. Esto
lo utilizan —a veces, lo destrozan— sin el rigor necesario.
es válido en ciertas investigaciones, cuyo objetivo
Y lo peor del caso es que, detrás de esa utilización
fundamental puede ser establecer información o
caprichosa, no hay una fundamentación conceptual
«demostrar» algo nuevo, sobre la base de fuentes no
dinámica del porqué; solo una lamentable confusión
utilizadas. Pero la crónica, la descripción como objetivo
anima, regularmente, la acepción empleada. Tampoco
final, o el presentar los sucesos «como realmente
quiero que se uniformen todos los estilos —en algunos
sucedieron», según la famosísima frase de Leopold von
casos no vendría mal, sería una garantía de
Ranke, no es escribir historia.6 Por otra parte, la pobreza
legibilidad—; creo, sin embargo, que hay que avanzar
del ensayo histórico-social en la actualidad —actualidad
en la dirección de que los contenidos respondan a un
que ya se extiende demasiado— ha llevado, en no pocos
premios creados para estimular los estudios sociales, a
aparato categorial autóctono, común y preciso.
laurear como pertenecientes al género a simples
Segunda: la escritura de la historia en Cuba está a
investigaciones cronicoides, nada sospechosas de aspirar
una distancia infinita —sé que soy muy tajante; pido
a una connotación ensayística. Tarea primordial para la
perdón— de aprovechar el vocabulario que ofrecen otras
escritura de la historia en Cuba es la de rehabilitar el
ramas similares. No se trata de copiar los conceptos
ensayo, y reasumir el yo histórico del narrador.
ajenos; pero bien que pudiéramos interesarnos por ellos
y aplicar, cuando fuere necesario, sus ventajas. El gran
avance experimentado por las materias sociales ha traído
Autóctono, común y preciso
como consecuencia una eficaz aplicación de sus léxicos,
a menudo intercambiables. Rol, estructura, imaginario,
La manera en que se escribe la historia en nuestros
mentalidades, icono, desconstruir, metarrelato, larga
predios entraña una notable deficiencia, que está
duración, referente, diacronía, tropo histórico o pre-
96
97

Oscar Loyola Vega
texto, son conceptos muy actuales —aunque, por
española, los historiadores cubanos destrozan el idioma,
supuesto, pueden ser discutibles— que se emplean de
con la agravante de aniquilar así la exposición del propio
manera constante por colegas de excepcional formación
objeto de estudio. Una revisión, hecha muy por encima,
científica, en regiones de avanzada. ¿Cuántos en Cuba
de los escritos históricos contemporáneos revela un gran
los utilizamos, o al menos, nos hemos interesado por
desconocimiento de la concordancia entre sujeto y
ellos?7 Puedo recordar una investigación muy sólida,
verbo; un —a veces, feliz— olvido del lugar adecuado
aparecida hace poco, en la que el concepto «imaginario
para el adjetivo —¡que vivan los adjetivos!— en la
popular» no era empleado, a pesar de ser punto menos
oración; una inconcebible despreocupación por el uso
que el objeto de trabajo del autor, con cuya utilización
del diccionario, que lleva a emplear palabras «que suenen
este se hubiese ahorrado no pocos rodeos lexicales que,
bien» en detrimento de las correctas; una pasión
por falta del vocabulario idóneo, se vio obligado a
desmedida por el uso de calificativos, que se escapan
emplear. El terror que sentimos los historiadores por
del escritor a manos llenas, y, de la misma manera, una
la asunción de nuevos conceptos, se da de bruces con la
eclosión de demostrativos que alcanzó —en cierta
relación historia-ciencias sociales preconizada con ardor
cuartilla cuyo autor no quiero recordar— la cifra de
por tantos colegas en la contemporaneidad. Será cada
diecisiete; una ignorancia supina en relación con la
día más difícil mantenernos aislados (puros) en un
función del adverbio, cuya utilización aplasta al lector;
mundo en el que los problemas del hombre y de la
una inconsecuencia total en el empleo de los tiempos
sociedad, se tornan complejos de manera acelerada. La
verbales propios de la escritura histórica, los que, lejos
reactualización del vocabulario histórico, el estudio
de ser utilizados para enfatizar —en particular el
exhaustivo de otras disciplinas, y su aparato conceptual,
presente—, acentúan la impresión errática de la
solo pueden redundar en beneficio de la escritura de la
redacción. ¿Para qué continuar ejemplificando?
historia desde Cuba. Sin lanzarnos a utilizar
Afortunadamente, el caos no es aún absoluto. No hemos
indiscriminadamente cuanta palabrita —o palabreja—
descubierto las interjecciones.
salga al mercado, los conceptos que han demostrado su
Se hace evidente que los errores señalados en la
validez en otras ramas deben ser incorporados al arsenal
utilización adecuada del idioma español van
del historiador cubano, en la medida en que sean
acompañados del empleo arbitrario de los signos de
convenientes para el trabajo de investigación. Con esto
puntuación. Ha sido un recurso socorrido culpar a las
no introduciríamos una innovación peligrosa, cuyos
mecanógrafas de las faltas de ortografía o, en su
alcances no hayan valorado, aceptado y superado, los
momento, achacarlas a erratas de edición. Con el
colegas extranjeros. De no hacerlo corremos el riesgo
desarrollo de la tecnología es harto probable que se
de hablar, a las puertas del siglo XXI, una «lengua
pretenda endilgar a las computadoras las carencias que
histórica» pre-renancentista. Con la agravante de ser los
solo pertenecen al autor. En todos los casos, sin
únicos historiadores del planeta en emplearla.
embargo, siempre ha sido más difícil la autoexoneración
en relación con los signos de puntuación. Escritos hay
en que coma, punto y coma y punto y seguido se
Historia y lenguaje
intercambian festinadamente; en otros, por el contrario,
el «creador» solo conoce el punto y aparte, asociando,
Es conveniente reflexionar sobre un aspecto
en deliciosa simbiosis, redacción histórica con
valorado como secundario por los historiadores
telegramas. La conjunción de una puntuación muy
contemporáneos en Cuba. Me refiero a la calidad de la
deficiente con graves errores gramaticales lleva, si se trata
prosa utilizada, que es, francamente, deficiente. Cuando
del lector, al delirium tremens; si del analista, a constatar
se revisa la producción histórica del siglo pasado y
un nuevo problema.
mucha de la del actual, llama poderosamente la atención
Esto tiene que ver con la oscuridad de la redacción,
el elevado grado de perfección alcanzado por los
o lo que viene a ser lo mismo, con la incomprensión
historiadores en un instrumento de trabajo fundamental
generada por —y en— el texto histórico. Errores de la
como es el lenguaje. No pocas de las páginas escritas en
magnitud de los señalados, aunque a no pocos puedan
libros y ensayos de historia clasifican entre las mejores
parecer intrascendentes, tienen la misma importancia
y más enjundiosas cuartillas de nuestra literatura.
que se le daría a un objeto material mal elaborado, no
Prosistas como los mencionados en un párrafo
acabado; vale decir, chapucero y, por tanto, limitado
precedente elevaron al más alto rango la escritura
en sus funciones. Un texto histórico mal puntuado,
histórica; sus continuadores, en la actual centuria,
gramaticalmente deficiente, trasluce un escrito poco
hicieron honor a esta tradición: de Fernando Ortiz a
comprensible, con un mensaje que se hace más oscuro
Julio Le Riverend la disciplina ha tenido excelentes
en la medida justa en que aumenten sus errores; su
escritores.
asunción se dificulta, se empaña. La incomprensión del
Muy diferente resulta el panorama en los últimos
contenido, que genera un acabado incompleto, está
años. Preocupados enormemente por los datos, por la
presente en buena parte de la escritura de la historia
veracidad informativa, o por la posible interpretación;
desde Cuba, agravado por el hecho de que muchos
con una formación escolar muy deficiente sobre las
autores superponen expresiones, confunden oraciones
reglas y preceptos constituyentes de la gramática
principales con subordinadas, alteran el orden lógico
98

Reflexiones sobre la escritura de la historia en la Cuba actual
Sorprende el poco interés mostrado por los historiadores
cubanos en analizar los marcos teórico-investigativos y los
presupuestos —o supuestos— metodológicos de la disciplina.
[...] Las investigaciones histórico-concretas predominan de
manera abrumadora.
gramatical en la estructura interna de la frase, y hacen,
siempre han estado muy al tanto de cuándo y cómo la
en suma, el mayor esfuerzo —conscientes o no— por
escritura se les «escapa», tratando de convertirse en
enrevesar el sentido de la exposición. Existe una
autónoma, y de imponerse y sojuzgar al autor. ¿Quién
incuestionable reticencia —tanto entre los escritores de
puede, definitivamente, negar los elementos y el poder
obra reconocida como entre los jóvenes aspirantes a
literario de la historia? En gran medida, esta se expresa
historiadores— a considerar el estudio de la gramática
a través de un texto —de un artefacto, como algunos
como un instrumento imprescindible del trabajo
teóricos actuales prefieren llamarlo, sin que se desmienta
cotidiano, al mismo nivel que la «técnica» del fichaje.8
así el carácter investigativo, «científico», de las
Y así la escritura de la historia sigue presentando
conclusiones históricas alcanzadas.
notables imprecisiones que limitan grandemente su
Hay que aprender a explotar tales posibilidades. Hay
alcance definitivo.
que entender de una vez por todas que la emotividad,
el ardor creativo, la utilización de símiles y metáforas,
no están reñidos con la redacción histórica; antes bien,
El valor del texto
pueden constituirse en valiosos recursos comunicativos.
Muy buenas investigaciones, correctamente redactadas,
El recorrido efectuado a través de algunas de las
dejan la impresión en el lector de que su autor equivocó
características que presenta la escritura de la historia en
el tono narrativo. No se trata de organizar la exposición
la actualidad nacional quedaría muy incompleto si no
histórica como si se estuviese en presencia de una novela,
se hiciese hincapié, finalmente, en un hecho relevante
un cuento, o un poema; pero no puede ignorarse que
dentro de las discusiones teóricas sobre la disciplina,
muchos escritos históricos ganarían en eficacia, elevarían
desarrolladas en los últimos años: el texto en sí mismo.
su poder trasmisor, tendrían una mayor capacidad de
La importancia del tema nunca será suficientemente
convencimiento —no solo dentro del gremio, sino en
destacada; no hace falta ser un gran analista de la historia
el lector común—, de aprovechar adecuadamente los
para entender la trascendencia de la exposición. Todo
recursos propios de la literatura; entiéndase, no para
escritor histórico —si se respeta— ha experimentado el
hacer literatura, sino para hacer —escribir— mejor
peso que sobre sí tiene el valor de la redacción, es decir,
historia.
el acto de iniciar la comunicación de ideas a los otros,
Podrá objetarse que el texto va surgiendo en la
que incluso pueden, inicialmente, no compartirlas. El
medida en que se redacta, lo que no es por completo
binomio redacción-texto en los avatares históricos, era
desacertado. Pero piénsese también que el escritor
ya conocido desde la Antigüedad, y está en la génesis
histórico, en diferentes etapas de su trabajo, diseña la
misma de la rama del saber a la que se aplica el nombre
investigación, la lleva a vías de hecho, la discute con
de historia. Las enormes posibilidades del texto, sus
múltiples colegas —no en todos los casos, por
funciones y connotaciones —léase, su carácter literario—
supuesto—, organiza su redacción y, ya inmerso en esta,
amplifican o minimizan los resultados de la
distribuye información-interpretación en capítulos,
investigación histórica.
acápites, párrafos y oraciones. ¿Por qué entonces no
Personalmente, siempre he creído en el valor del
dedicar el tiempo conveniente a la estructura literaria
texto. Obsérvese que aquí no se habla de su corrección
—quiero decir, a la escritura— que asumirá el resultado
gramatical, lo que ya ha sido analizado, sino de sus
final? A poco que se piense, puede uno darse cuenta de
potencialidades intrínsecas como transmisor —¿el único,
que el paso señalado sería determinante. Cada
quizás?— del decursar pasado-presente. Una cosa es la
acontecimiento o proceso histórico puede expresarse,
discusión sobre si es preferible la exposición lineal de
narrarse, de varias maneras. No exige la misma escritura
datos y hechos, por un lado, o la utilización de estos en
—para ejemplificar de manera sencilla— el análisis de la
aras de una constante interpretación histórica, por otro;
crisis de la plantación esclavista que la muerte de Carlos
y otra cosa bien distinta es que ambas opciones pueden
Manuel de Céspedes. El texto actúa como un elemento
aprovechar mucho mejor la forma expositiva. Los
comunicador de tanta importancia como el contenido
historiadores cubanos estamos muy lejos de comprender
y el mensaje históricos. Los historiadores y los literatos
esta realidad, nada nueva, si bien hacía mucho tiempo
del patio tenemos un texto paradigmático en la historia
que no emergía con suficiente intensidad en los trabajos
y la literatura nacionales: Nuestra América, de José Martí.
teóricos.9 Los creadores literarios, por razones evidentes,
¿Puede alguien imaginar el contenido histórico concreto
98
99

Oscar Loyola Vega
de este maravilloso ensayo en otro continente? ¿Surtiría
Notas
el mismo efecto su lectura si el autor hubiese
seleccionado como forma expositiva un texto que
1. Son ampliamente conocidas las confusiones terminológicas que el
vocablo
describiese linealmente las razones y argumentos que
historia presenta. Lo utilizo no en su sentido de «hechos
transcurridos en el pasado», sino en el de rama del saber que estudia
allí se leen? No, seguramente. En este caso la escritura
tales hechos y los procesos concatenados por ellos o sus rupturas.
histórica, el texto, multiplicó los efectos del mensaje,
haciéndolo imperecedero.
2. Los conceptos dato y hecho van a repetirse, mucho más de lo que yo
quisiera, en este trabajo, prueba fehaciente del altísimo grado con que
No abogo porque la forma desplace al contenido en
han marcado el quehacer del historiador.
la escritura de la historia; argumento en favor de que
ambos recuperen, como en tiempos no tan lejanos
3. Casi estoy convencido (aunque espante a mis colegas) de que terminaré
tuvieron, su complementariedad. No oponerlos,
mi vida profesional sin saber con certeza qué es un hecho histórico.
hacerlos fraternizar. Entender la autonomía del texto
4. El desglose y la subdivisión de las llamadas ciencias sociales es, hoy
en ciertas circunstancias no significa someterse a él
en día, fascinante. De continuar, hará falta una rama especializada, de
indiscriminadamente, sino aprovecharlo en función del
entre ellas, que se ocupe de seguirle los pasos a tal atomización.
mensaje histórico. En este, como en otros aspectos ya
analizados, los historiadores cubanos no podemos seguir
5. Lo expuesto se refleja en el espacio, cada vez mayor, alcanzado por la
discusión teórica en los congresos internacionales de historia, a juzgar
ignorando las discusiones y los aportes de los centros
por las diferentes memorias editadas.
capitales de elaboración de la teoría histórica
contemporánea. Saber qué se discute en torno a la
6. La expresión de Ranke «wie is eigentlich gewesen», en tanto concepción
especialidad propia es un requisito imprescindible para
sobre la historia, tenía plena validez ciento cincuenta años atrás; hoy es
francamente inconcebible. Sin embargo, aunque lo nieguen, para no
validar a un estudioso; conocer el debate sobre la
pocos autores mantiene plena vigencia.
existencia en sí, los métodos y técnicas, el objeto de
trabajo, de la rama a que se dedica cada cual es
7. No solo apenas se utilizan, sino que despierta suspicacias, por «falta
determinante para los resultados que se obtengan. La
de seriedad histórica», el trabajo donde aparezcan. Mientras más arcaico
el vocabulario técnico, mejor, más «histórico». Tal parece ser la tónica
disciplina historia —agobiada por el peso de los siglos,
imperante.
renegada por algunos, con ese fardo encima de sus
cultores, halada por otras ramas que también estudian
8. Es común hablar de dicha técnica; no creo haber conocido a dos
al Hombre—, lenta, inexorablemente, avanza, cambia
historiadores que fichen igual, lo que me hace sustentar el criterio de
que la técnica del fichaje consiste precisamente en la ausencia de técnica.
sus métodos, se dinamiza, para esperar con nuevas
energías el siglo XXI.10 La «forma espiritual en que una
9. De Michel de Certeau a Hayden White, sin olvidar a Paul Veyne, el
cultura se rinde cuentas de su pasado», para llamarla de
problema del texto como narración es bastante analizado por los
la manera poética en que Johann Huizinga lo hizo hace
especialistas contemporáneos; haciendo justicia, ya se había aproximado
a él R.G. Collingwood. Y si se sigue retrocediendo, Jules Michelet lo
ya bastante tiempo, transforma su escritura. Desde
conocía, aun cuando no considerase necesario —o no pudiese—
Cuba, ayudémosla.
planteárselo teóricamente. Y debieron trabajarlo muchísimo Homero,
Herodoto y Tucídides, cuyos lectores —o sea, cuyo auditorio— conocían
perfectamente bien el argumento histórico. El acercamiento a la historia
Profesión de fe al acabar
se producía entonces a través de la literatura, del texto; no del contenido.
10. Por ahora, y para decepción de Francis Fukuyama, todos sabemos
Lo haremos. Tengo absoluta confianza en que lo
que la historia no termina.
haremos. Con mayor o menor éxito, pero lo haremos.
La escritura de la historia es nuestra. ¡Adelante,
Herodotos!
©
, 1996.
100

La alternativa socialista: reforma y estrategia de orden
no. 6: 101-112, abril-junio, 1996.
La alternativa socialista:
reforma y estrategia
de orden
Giberto Valdés Gutiérrez
Investigador. Instituto de Filosofía.
Pensar los retos que afronta la alternativa socialista en la complejidad de estos procesos a un ángulo
las condiciones del capitalismo transnacional de fines
puramente tecnocrático. Ha sucedido lo contrario: una
de siglo presupone un colosal esfuerzo en el ámbito de la
amplia confrontación de ideas antecede la toma de
teoría emancipatoria. Las consideraciones que siguen tan
decisiones puntuales. Los debates en el Parlamento,
solo adelantan algunas «pistas» a tener en cuenta en esta
en los sindicatos y en diversos escenarios sociales,
dirección.1 El contexto desde el que son presentadas no
académicos y políticos muestran la tendencia a la
podía ser otro que el marcado por las transformaciones
construcción de consensos en torno a las medidas
que tienen lugar en la sociedad cubana durante la presente
estratégicas que inciden en el rumbo económico del
década. Reforma y opción socialista son, en este caso,
país.
dos términos subsumidos en la misma voluntad que ha
El cambio de modelo funcional de la economía
caracterizado a la Revolución cubana en todo su itinerario.
implica una reinserción y un rediseño interno que abre
La reforma es un hecho que genera estimaciones
cauce a las constreñidas fuerzas productivas; impulsa
contrapuestas sobre los ritmos, orden y sentido de las
la descentralización empresarial y local; facilita la
transformaciones particulares, pero que muy pocos
entrada de capital foráneo en marcos de creciente
objetan como salida, ante la crisis de la economía cubana
apertura y sujeto a distintos tipos de asociación; avanza
de los últimos años.2 Se trata de un consenso que jerarquiza
hacia la flexibilización de criterios en torno a la
un asunto de interés prioritario para la sociedad. Mas,
propiedad; sustituye el asistencialismo paternalista del
como proceso no sujeto a una solución unívoca y
Estado, procurando afectar en el menor grado posible
preestablecida de todos los temas involucrados, su
la protección social, crea condiciones aceleradas para
aceptación no es ajena a la producción de alternativas que
la superación del igualitarismo improductivo3 en favor
puedan ser, a cada paso, confrontadas con los resultados
de principios factibles de igualdad y, en general,
concretos y su ejecución. Inhibir esa producción de
reestructura el marco jurídico-institucional del Estado
alternativas —tanto de aquellas que emanan de
para normar las transformaciones económico-
valoraciones y conocimientos ordinarios, como las
financieras y contribuir al desarrollo de nociones más
provenientes del saber sistematizado— significaría reducir
avanzadas de responsabilidad ciudadana.
100
101

Gilberto Valdés Gutiérrez
Cuba se internó en condiciones críticas excepcionales que la
situaban ante el reto de descubrir y crear sus nuevas
oportunidades históricas. La comprensión audaz de esas
oportunidades en los años 90 ha tenido que vencer el lastre de
actitudes inerciales, prejuicios ideológicos, rechazos apriorísticos
y temores ante los desafíos inéditos que se configuraban.
El término reforma se hizo cada vez más presente
Cuba se internó en condiciones críticas excepcionales
entre los economistas cubanos desde fines de 1993 y ya
que la situaban ante el reto de descubrir y crear sus nuevas
hoy es rutinario en el discurso estatal. Paradójicamente,
oportunidades históricas. La comprensión audaz de esas
las primeras medidas en esta dirección avanzan en medio
oportunidades en los años 90, ha tenido que vencer el
de una demonización de la palabra, asociada al mapa
lastre de actitudes inerciales, prejuicios ideológicos,
ideológico que precedió a la autoextinción del socialismo
rechazos apriorísticos y temores ante los desafíos inéditos
europeo. Así, los nuevos datos de la realidad van a ser
que se configuraban. Se produce la paradoja de que ciertos
procesados por una conciencia teórica retorizada que,
resultados teóricos, instrumentalizados previamente para
como primera reacción, se protege frente a los signos de
legitimar acciones político-económicas en otras
los cambios.4
coyunturas, no pueden dar cuenta intelectiva de los nuevos
El hecho de que Cuba se mantuviera como alternativa
rumbos.
de convivencia humana devino prueba de
Una vez más, las formulaciones políticas aventajaron
deslegitimación, aparentemente contrafáctica, de la
a la producción teórica. Ello no es, por supuesto, un
nueva cultura de la desesperanza, avalada por el
contrasentido, dada la naturaleza de la política. Sería una
derrumbe, la fiebre neoliberal y la mitología del fin de
vana pretensión cientifista dictar pautas rígidas de acción
la historia. En ese contexto, la firmeza política de la
desde un saber que necesariamente opera en niveles de
Revolución cubana y la cultura de radicalidad y
abstracción, donde no pueden ser registradas las dinámicas
resistencia que le es inherente tenían que ser
de las coyunturas y la visión ponderada, temporal, del
redimensionadas, so pena de desaparecer ante los bruscos
conjunto de intereses existentes en un momento
cambios verificados en el mapa político mundial luego
determinado.
de 1989.
La aplicación de la reforma se lleva a cabo con una fuerte
Una consecuencia no deseada de las prioridades
carga de pragmatismo indispensable —apunta Víctor
ideológicas de esos años fue que algunas líneas de
Figueroa Albelo. La agudeza de la crisis, la ausencia de
teorización sobre las alternativas de continuidad
paradigmas de referencia, más la falta de un sistema teórico-
estuvieron marcadas por el reduccionismo táctico y el
científico que la adelante y apoye, obligan a tantear los
cumplimiento de prioridades de la coyuntura.5 Luego
nuevos caminos que se van abriendo. Hay una carga de
urgencia, de audacia creativa y de riesgos inevitables que el
de la desaparición del socialismo real, en la comunidad
país deberá correr para encontrar las respuestas prácticas.
científica se produce una quiebra de viejos patrones
Urge la elaboración teórica que explique el proceso, lo
valorativos, que pone a prueba su capacidad de
sintetice e identifique las contradicciones y conflictos actuales
renovación en aras de recomponer sus potencialidades
y futuros, así como los modos de enfrentarlos.6
propositivas en las nuevas condiciones de la sociedad
Es previsible que en estos procesos de cambios se
cubana.
generen tensiones entre cultura y saber instrumentalizado,
Desde el ángulo puramente económico, la dinámica
cuando este deviene fórmulas sacralizadas, inviables en
de las transformaciones ocurridas de 1990 a 1993, como
las nuevas condiciones. Ello muestra la conveniencia de
resultado de la desconexión con la desaparecida URSS y
estimular al máximo la producción de conocimientos
la crisis sostenida de la economía nacional, pudiera ser
científico-sociales, pronósticos y opciones anticipadas para
catalogada como propia de una estrategia defensiva. Es
ensanchar el espectro de las alternativas políticas. Como
comprensible que la cautela política impusiera un ritmo
señala Rafael Hernández,
especial a la dialéctica defensa-renovación del sistema
socioeconómico instituido. Sin embargo, la relativa
la política puede aprovechar inteligentemente el enorme
lentitud en esta esfera contrasta con la celeridad con que
caudal de la cultura, sin instrumentalizarla, para operar
la sociedad cubana se desprende de nexos ideológicos y
mecanismos que faciliten la consecución de metas comunes.
culturales impostados, modos rutinarios de pensamiento
Pero sobre todo puede interactuar con la cultura y aprender
de esta, de su poder social insustituible.7
y estereotipos cosmovisivos que, entre otros efectos,
formalizaron una articulación mecánica del marxismo
La impronta del maniqueísmo heredado de las
y la tradición nacional.
formalizaciones del marxismo posterior a Lenin, en torno
102

La alternativa socialista: reforma y estrategia de orden
a los conceptos reforma y revolución, presentados como
latinoamericana. Jaime Osorio describe uno de los
antípodas del desarrollo social, lastró el proceso de
resultados de este tipo de reacción antirreduccionista:
reordenamiento de nuestras coordenadas mentales y
limitó la búsqueda de nuevas claves interpretativas para
Y si la antigua sociología pecó por su reduccionismo
dar cuenta de los estrenados retos. Asumir el debate de la
económico, la actual peca por su reduccionismo político
crisis del marxismo, en esas circunstancias, no fue una
[...] Los estudios sobre las transiciones democráticas y sobre
los movimientos sociales se han multiplicado teniendo por
postura retórica ni una concesión desmovilizadora:
lo general ese denominador común. Actores sociales de los
permitió el deslinde entre la herencia del marxismo clásico
que nunca aparecen los referentes en los cuales actúan;
y sus desarrollos posteriores durante el presente siglo, y
proyectos de democratización sin alusión a los marcos
la teología evolucionista y positivista que usurpó sus
materiales que los harían posibles; individuos para quienes
su simple condición de votantes ya los convierte en
créditos y desnaturalizó un pensamiento fundacional que
ciudadanos, sin diferenciar entre la condición de subsistencia,
rechazaba para sí el carácter de «pasaporte universal de
y las especificidades políticas y culturales de un indio de la
una teoría histórico-filosófica general cuya suprema virtud
sierra peruana o ecuatoriana con un citadino de São Paulo o
consiste en ser suprahistórica».8
Buenos Aires.9
No resulta ocioso tener en cuenta que, más allá de sus
nexos con el socialismo en general o con determinado
La necesidad de crear espacios plurales de reflexión
modelo de su construcción, el fundamento básico del
equivale a desplazar la centralidad de las respuestas
marxismo radica en el propio desarrollo histórico. Pueden
acostumbradas, portadoras de certezas estériles, hacia las
producirse los desprendimientos paradigmáticos y las
preguntas. Debemos convenir en que si no siempre
síntesis más inimaginables en el futuro próximo, mas no
hemos acertado con las primeras, quedan en pie todas
existe ningún argumento serio que legitime su anunciado
las segundas. Formular los nuevos problemas que afronta
estado terminal, lo que significaría otorgarle a destiempo
la alternativa socialista frente a la culminación a escala
la condición de determinación cualitativa plenamente
mundial del proceso de expansión capitalista, de
desarrollada. A las puertas del nuevo milenio, en plena
internacionalización del ciclo completo del capital, exige,
mundialización del capital y creciente distancia económica
en principio, un enorme esfuerzo explicativo y
entre países del centro y la periferia, ante tendencias
pronóstico de los nuevos marcos de la acción colectiva
homogeneizadoras que apuntan a la creación de formas
y, en consecuencia, el abandono de la imagen teleológica
transnacionales de gobierno, de sofisticadas maneras de
sobre la «sociedad de llegada».10
regulación y dominación de pueblos y personas, la
En este sentido, la nostalgia formalista del pasado
reciente se manifiesta mediante la ilusión según la cual
legitimidad del marxismo como crítica radical de todo lo
la salida hipotética del Período Especial implica la vuelta
existente rebasa con creces todo prurito académico:
al estado de cosas anterior, lo que relegitimaría el enfoque
deviene condición racional de una ética afirmativa, sin la
doctrinario, hoy desacreditado. La superación de ciertas
cual el género humano difícilmente podrá acceder a su
concepciones habituales sobre el socialismo es la única
humanización planetaria.
manera de visualizar las formas emergentes de socialidad
El reconocimiento de esa crisis teórica colocó a los
resultantes de los cambios; no para subsumirlas en una
cientistas sociales cubanos en mejores condiciones para
lógica regresiva o acomodaticia, sino para afirmar la
insertarse creativamente en el esfuerzo regional y universal
voluntad presente, sin ataduras conceptuales que le creen
de reconstrucción del «mapa cognitivo» del mundo
incongruencias a la práctica, e intentar desbloquear el
globalizado y transnacionalizado del presente, en el que
futuro de la opción socialista en las condiciones
la perspectiva marxista pugna por superar los límites
venideras.
epistemológicos que la relegaron, y la soberbia que
Por ciertas concepciones habituales sobre el
impidió el diálogo de saberes y la confrontación
socialismo entendemos, en este caso, aquellas que
pluriparadigmática de los estudios sociales. El ajuste de
tuvieron como presupuesto considerar lo alternativo
cuentas con la escolástica entronizada en la trayectoria
como lo ya realizado y la posibilidad real como realidad
posterior a Lenin —así como con la búsqueda de la
desplegada, a despecho del tiempo, modo y lugar, que
supuesta esencia incontaminada, prístina del pensamiento
impedía distinguir la aspiración de la realidad. También
original de Marx, a la luz de la cual se harían inteligibles
es necesario, sin embargo, protegerse de la tendencia
las realidades de hoy—, ha sido y aún es condición para
contraria: la máxima pretensión de lo socialista
reanimar las investigaciones marxistas en la actualidad.
convertida en hipóstasis conceptual inalcanzable, desde
Se comprende que la reanimación aludida no implica
cuya idealidad se menosprecian las evoluciones factibles
el recambio de la rigidez determinista por el culto a la
en dicha dirección, inherentes al segmento discreto del
indeterminación. Una de las evidencias más palpables de
desarrollo en que nos encontramos. El no
la crisis teórica radica precisamente en la no captación a
comprometimiento del socialismo con un paquete de
tiempo, por el pensamiento emancipatorio, de la profunda
rasgos fijos e inamovibles es, precisamente, la manera
reconstrucción transnacional del capitalismo y sus efectos
más productiva de conservar lo alcanzado, descubrir las
particulares en la sociedad contemporánea. No se trata,
salidas multivariadas que ofrece la crisis de la época y
pues, de asumir idéntica lógica a la verificada durante la
abrirnos hacia nuevos grados de socialidad
crítica al economicismo por parte de la nueva sociología
desenajenada.
102
103

Gilberto Valdés Gutiérrez
Más que elaborar una modelística abstracta sobre el socialismo,
se impone adoptar una postura teórica ajena a lo que Gramsci
criticaba como «proyectos mastodónticos» de socialismo. Resulta
imposible, en consecuencia, prefigurar algo más que «líneas
gruesas» del devenir social, abiertas a las correcciones que impone
cada alternativa histórica y política concreta.
Existen, al menos, tres propuestas de reflexión en
colocamos el orden posmercantil como concepto límite
torno a cómo enfocar la factibilidad del socialismo en
positivo, el problema reviste mayor complejidad: el
las presentes condiciones. Las de teorización formal
desafío es aplicar y descubrir algo que no está aún en la
más acabada, en el contexto eurooccidental, se definen
realidad, al menos en la conocida. La superación de esta
como modelos de socialismo de mercado (John
contradicción sería un resultado valioso, en el sentido
Roemer, Fred Block, entre otros), y modelos
teórico, como premisa de una nueva contractualidad
autogestionarios o de socialismo asociativo (Diane
desconocida hasta ahora. La mera extensión de las leyes
Elson, Tony Andreani, Marx Feray, para citar algunos
del mercado al socialismo —sin una determinación clara
de sus representantes).11 Una línea más modesta que
del mecanismo de acción de las mismas— muestra, hasta
las dos anteriores prefiere no otorgar —«aquí y ahora»—
el momento, los límites teóricos y prácticos que aún
los rasgos de un proceso interformacional, aún no
marcan el proceso de emancipación humana.
desplegado en su integridad, sin una adecuada
Para Luis Martínez de Velasco,
categorización y estudio, al socialismo como tal, cuya
plenitud supone el predominio de una efectiva
tiene sentido preguntar qué significado podría adquirir una
socialización de la producción y de la política.
expresión como “socialismo y mercado”, o más exactamente
“socialización del mercado” (dando por sentado, en
En nuestro criterio, más que elaborar una modelística
principio, su deseabilidad social). Existen, en este sentido,
abstracta sobre el socialismo, se impone adoptar una
dos posibilidades fundamentales de reorientación social del
postura teórica ajena a lo que Gramsci criticaba como
mercado: una reorientación “exterior” basada en criterios
inevitablemente estatales, y una reorientación “interior”
«proyectos mastodónticos» de socialismo. Resulta
apuntalada sobre la base de una democratización interna de
imposible, en consecuencia, prefigurar algo más que
las empresas como centros de decisión económica.12
«líneas gruesas» del devenir social, abiertas a las
correcciones que impone cada alternativa histórica y
Este autor se cuestiona, en relación con la primera
política concreta.
posibilidad, hasta qué punto es factible la «moralización
exterior» del mercado, destacando la irreductibilidad de
ambas lógicas: la del beneficio privado y la de la
Remake necesario: socialismo y mercado
deseabilidad social. Finalmente, se inclina por la
posibilidad que considera más congruente: el
En las condiciones históricas interformacionales donde
«establecimiento de una suerte de control democrático
se circunscribieron las revoluciones protosocialistas no
en el corazón mismo de las estructuras de producción y,
existieron las bases reales para una apropiación y
en consecuencia, de decisión en términos de política
distribución directa de productos. Muchos manifiestan
económica».13 Dentro de esta tendencia, valora las
hoy que dicha situación exigía entender la necesidad de
propuestas de Olf Himmeslstrand (capitalismo colectivo)
aplicar los mecanismos e instituciones del mercado, dar
y de Offe (capitalismo comunista) como tentativas con
curso efectivo a las relaciones monetario-mercantiles, no
capacidad «de romper la dependencia funcional de una
solo en el ámbito de los artículos y los servicios, sino en
producción socializada en favor de beneficios privados».14
el de la gestión de sus participantes, sobre la base de una
Lo que no queda claro es cómo «establecer un sistema de
línea de desarrollo que no podía reproducir simplemente
producción y distribución de riqueza conforme a criterios
la típica anterior.
de racionalidad moral absolutamente innegociables»15 en
El tema es polémico. Suponiendo que el socialismo
una sociedad donde el capital conserva su cetro como
hubiera triunfado en los países capitalistas desarrollados,
dueño de las condiciones del trabajo.
no resulta probable que la producción mercantil se
Los argumentos apuntados para desechar la
eliminara con el acto de la expropiación de la propiedad
reorientación exterior del mercado desde la variable estatal
privada. Cabría esperar (hipotéticamente) que la solución
se sustentan, a nuestro juicio, en el error de reducir la
a dicha contradicción surgiera espontáneamente en la
gama de alternativas contempladas por el socialismo
práctica, como sucedió con la transformación de la renta
marxista a aquella que se impuso en la experiencia del
al aparecer la propiedad moderna de la tierra, hecho que
socialismo real. El plan o centralidad y el mercado o
tan solo capta Marx, a diferencia de Smith y Ricardo. Si
contractualidad interindividual tienen, para el proyecto
104

La alternativa socialista: reforma y estrategia de orden
socialista, una connotación muy diferente a la que se les
planos estructurales y funcionales, para dar cabida a
ha dado. La idea de plan más abarcadora nunca fue, para
categorías mercantiles dentro de una socialidad
dicha teoría, su reducción al «plan del Estado y por el
democrática nueva. El mercado en el socialismo necesita
Estado» ni, en rigor, al Estado mismo (entendido como
una centralidad, mientras no se descubran los modos de
unidad aglutinante), sino una racionalidad diferente a la
autorregulación de la sociedad, para evitar la regresión a
anarquía mercantil, que debía concretarse en los marcos
su forma capitalista. Pero si esta centralidad se enajena de
de un tipo de Estado al que explícitamente Marx y Engels
la nueva sociedad civil, del pueblo, solo se encubre el
definen como «no Estado»; esto es, una concreción y
totalitarismo-dominación que presupone la planificación
autoconfirmación del productor libre asociado, de su
que existía. En otras palabras: sin un micropoder real de
autoconciencia y capacidad para reclasificar la política más
la comunidad laboral, en primer lugar; sin una
allá de intereses corporativos, mediante distintas fases de
participación popular activa y resuelta en todos los
desarrollo.
espacios que le corresponden y un completamiento de la
Admitiendo que el mercado —contenido viejo que
representación estatal en todas sus instancias, la reinserción
actúa en este caso como forma— puede y tiene que ser
mercantil puede conducir al totalitarismo empresarial que
utilizado en la nueva «esencia» socialista (aún informal en
transite hacia una nueva división de clases.
tal sentido); su talón de Aquiles radica en hacer caso omiso
Inscribir la salida al mercado solo como un acto
de las condiciones fundamentales donde este debe actuar.
volitivo de salvaguarda de intereses sectoriales, pudiera
¿Cuáles serán sus nuevas leyes, papel y lugar en el sistema
soslayar del análisis la impronta de políticas realistas —y
socioeconómico? ¿Qué contenido tendrá el mercado, que
de rectificaciones teóricas de la ilusión posmercantil—
lo haga adecuado al proyecto social y a la economía
orientadas a impedir la desintegración social y el
socialistas?
aislamiento localista estéril (el «comunismo local» a que
Capitalismo no es sinónimo de mercado en general.
hacían referencia Marx y Engels), a partir de una búsqueda
Pero el mercado en el capitalismo es, ante todo, mercado
válida de un modelo de inserción no sometido, en el
de capitales en competencia que tratan de valorizarse. Su
sistema-mundo transnacionalizado del presente.
perspectiva no es simplemente la circulación general de
Que la revalidación del mercado —además de cumplir
mercancías. El monopolio, ya se sabe, quiebra esa
su cometido económico— venga a satisfacer expectativas
competencia, y la actual fase de transnacionalización
teóricas, ideológicas y psicológicas, que recibieron
apunta hacia la globalidad regulada, que conserva y
ingenuas y contraproducentes respuestas durante décadas
acentúa la dominación. ¿Qué espacio queda, pues, a la
por la preceptiva poslenin, es algo que no se discute hoy.
reproducción en las condiciones del socialismo?
De lo que se trata es de no esgrimir la falacia que Luis
La mercancía y el mercado expresan una forma de
Martínez de Velasco denomina «tesis del enemigo
contractualidad objetivada, fetichizada. Pero por encima
incorporado», consistente en la separación entre mercado
de ella se alza, determinándola, la que brinda el capital,
(al que se le confiere una estricta capacidad
como contractualidad social, orgánica. ¿Cómo acceder a
autorreguladora) y capitalismo (con su cadena de
una contractualidad social íntegra, que estimule el
desequilibrios, monopolizaciones, burocratizaciones).
desarrollo económico, sin el capital como relación de
Desde esa premisa,
producción? Nos alejaríamos del planteamiento correcto
del problema si nos limitáramos a las relaciones
todos los fracasos del modo de producción capitalista son
monetario-mercantiles en el socialismo. Reconocerlas es
sistemáticamente cargados a la cuenta del capitalismo como
una victoria pírrica. La gran interrogante sigue siendo:
«enemigo incorporado», lo que hace que el mercado reciba
una constante confirmación contrafáctica nucleada en torno
¿cómo superar al capital en su condición de relación de
a la [imposible] experiencia de una ausencia total de
producción, proceso, medio y modo de producción?
mediaciones «extrañas» al mismo.16
Lo anterior se vincula al hecho de que el mercado que
necesitaría el socialismo tendría que brotar de forma
Algunas interrogantes siguen siendo formuladas:
adecuada a las modificaciones estructurales de este sistema,
¿podrá satisfacer un mercado «no libre» las finalidades
en particular las de la propiedad, ya que esta nació de
sociales, sin que esto choque, a su vez, con la «libertad»
manera imperfecta, inacabada, representada y, hasta cierto
que demanda el propio mercado? ¿Cómo establecer la
punto —en el sentido histórico— «fetichizada». Al no
vinculación mutua entre mercado y plan para responder
resolver esas contradicciones, las relaciones económicas
a la finalidad social? ¿No se establece con esto un círculo
surgidas en el antiguo socialismo real, condicionadas por
vicioso, donde para controlar el mercado hace falta la
la modalidad de socialización (jurídico-administrativa)
democracia y para ampliar la democracia es necesario
impuesta en el curso de su desarrollo, se vieron
soltarle riendas al mercado, en el sentido de que es la
contaminadas con relaciones de viejas formas que facilitan
sociedad en su conjunto la que determina estas
la consolidación del poder-función burocrático, no
relaciones? ¿Qué mecanismos o formas de control se
controlado por las bases, en la superestructura
emplearán, las del mercado libre que conocemos, las de
sociopolítica y administrativa.
la planificación totalitaria que se critica, o serán las de
Ello ocurre al no concertarse un proceso alternativo
un modelo de articulación más racional y razonable que
de socialización y cooperación real que repercuta en sus
aún no se ha logrado?
104
105

Gilberto Valdés Gutiérrez
Lo primero que habría que cuestionarse es la noción
Es una paradoja —apunta Jaime Osorio— que el
neoliberal, ampliamente aceptada como «realidad», del
pensamiento progresista, en este fin de siglo, tenga que
recuperar las nociones de democracia, individuo y
«mercado libre». Esta falacia intenta pasar por alto el
ciudadanía, disputándolos y debiéndolos arrebatar a los
hecho de que, como recuerda Adam Schaff,
proyectos políticos del capital, que los ganaron y los
convirtieron en temas nodales de su ofensiva ideológica
dejando de lado los pequeños enclaves del comercio al
y política.20
detalle y de la artesanía, no hay, en ninguno de los países
económicamente desarrollados, nada que se parezca al
Estas banderas, si no se inscriben en una perspectiva
mercado libre [...] Se dice «mercado» (fenómeno que
de enfrentamiento a las políticas clasistas del capital,
siempre existió allí donde el hombre intercambiaba o
terminan por convertirse en una nueva retórica carente
vendía productos y, por supuesto, también existió en los
países socialistas) y se piensa (o se añade explícitamente)
de significación social positiva. Lo mismo sucede con
«mercado libre» con el funcionamiento de la supuesta
los proyectos alternativos que reformulan el modelo
«mano invisible» que lo regula todo y a la que no hay que
productivista-consumista-disipatorio, con la ilusión del
molestar.17
añadido «externo» de la equidad y el imperativo
ecológico. No se trata tampoco de sustituir ambas
La apología del «mercado libre», como supuesta
desviaciones con radicalismos verbales. La nueva
única manera en que tendría que ser retomado el
socialidad superadora del capitalismo es cada vez más
mercado por la alternativa socialista, decidida a superar
necesaria y deseable, mas no es un estado que se
el tipo de planificación burocrática existente en el
«implanta», sino un proceso que avanza pese a las falacias
socialismo real, escamotea intencionadamente que
apologéticas del sistema.
el capitalismo contemporáneo, a diferencia de aquel que
No habrá sociedad autogestionaria —señala Carlos
analizó Marx y a diferencia también de los absurdos
Mendoza— si no cambia cualitativamente el carácter del
«inventos» que el neoliberalismo trata de vender a los
poder en la sociedad en su conjunto, pero dialécticamente,
«pobres», no equivale al caos del mercado. Se basa en una
esto solo sucederá si se desarrollan células autogestionarias
planificación muy fina realizada por los grandes
dentro del propio capitalismo, que eduquen y entrenen a
consorcios y no solamente a escala nacional, sino también
los «productores directos» en la autogestión de la sociedad
internacional.18
y les permita ganar espacios de poder dentro del sistema,
al tiempo que la organización y coordinación política
La planificación e intervención central del grupo de
conscientes a nivel nacional e internacional son también
indispensables para darle contenido revolucionario a dicho
países capitalistas altamente desarrollados y de las
aspecto de la lucha de clases y a los tan importantes y tan
empresas multinacionales, ponen de manifiesto la
vinculados como lo son las luchas democráticas y
presencia activa de la política en los procesos
antimonopolistas entre tantas otras.21
económicos. Se trata de una política orientada hacia la
búsqueda de ganancias y beneficios para una minoría, a
La presentación dicotómica de las categorías «capitalismo»
partir del genocidio humano y ecológico consustancial
y «socialismo», «socialismo» y «mercado», «plan» y «mercado»,
al capitalismo depredador de nuestros días. ¿Con qué
empobrece el espectro teórico y práctico de alternativas
derecho, pues, se condena como absurda y caótica la
intermedias, formas transicionales ajustadas a una u otra época
idea de otro tipo de intervención, otro tipo de
o coyuntura, cuya riqueza es del todo imposible de fijar de
planificación, otro tipo de política que ponga fin,
antemano. «En ninguna parte del mundo —expresó Lenin—
globalmente, a la actual situación?
existe capitalismo puro que se transforma en socialismo puro».22
Es cierto que el pensamiento socialista ha llegado a
«No sabemos ni podemos saber —insiste— cuántas etapas de
una «fórmula de compromiso». Adam Schaff la sintetiza
transición habrá que atravesar aún antes de llegar al
del modo siguiente:
socialismo».23
No se puede obviar, por otra parte, la pluralidad y
evidentemente, el mercado existirá, porque el producto
singularidad que manifiestan esas combinaciones —desde la
social tiene que circular y porque la economía socialista
NEP hasta las actuales variantes asiáticas de economía socialista
será mixta (comprenderá empresas estatales y sociedades
de mercado, y la particularidad cubana—, las que no siempre
de accionistas). Pero no será un ficticio «mercado libre»,
sino un mercado social en el que el Estado y otras
han dependido ni dependen del proyecto voluntario de los
instituciones sociales desempeñarán un importante papel
ejecutores, sino que están dictadas, aunque no fatalmente, por
como controladores, planificadores y, en cierta medida
los procesos hegemónicos de internacionalización, así como
también, centros de dirección. Las formas concretas que
por elementos estructurales propios y otros que van desde
saldrán de esta fórmula general son muy difíciles de prever
aspectos geopolíticos hasta sociopsicológicos.
y tendrán que ser determinadas hic et nunc en cada país,
tomándose en consideración sus condiciones concretas.19
La aparente circularidad que sugieren estas
Teoría general y recomposición socialista de la
interrogantes parte de una premisa que ha sido colocada
política
de manera errónea, puesto que es cada vez más evidente
que capitalismo y democracia son conceptos no
La especulación posmercantil, al menos en el futuro
intercambiables.
previsible, es una espada de Damocles para la viabilidad de la
106

La alternativa socialista: reforma y estrategia de orden
La demonización doctrinaria del mercado en general, y la
estadolatría «negativa» que la complementa, son hoy un
contrasentido para la teoría socialista.
alternativa socialista. Revolución por el socialismo con mercado
fundamentales de las ciencias. En el mejor de los casos, se
es una realidad a asumir en el terreno práctico, de manera diáfana
muestran preferencias por las llamadas teorías de «alcance
y no vergonzante; pero en modo alguno acrítica. El debate
medio», menos afectadas, según tales criterios, por la
teórico y axiológico, lejos de estar dirimido, recién comienza
«especulación».
en este punto.
Criticar los usos especulativos de la razón teórica, no
La demonización doctrinaria del mercado en general,
equivale a subvalorar la permanente necesidad de avanzar
y la estadolatría «negativa» que la complementa, son hoy
en la construcción de la teoría en todas las esferas
un contrasentido para la teoría socialista. Todo parece
cognoscitivas. Un alerta en tal sentido formula Sergio
indicar, dice Carlos Vilas, que
Bagú, al destacar franjas olvidadas del conocimiento ante
la voraz asimilación de las nuevas tecnologías, impulsada
no conduce muy lejos una discusión de las alternativas al
por los procesos de modernización en Latinoamérica:
presente esquema de desarrollo, que tome como punto de
partida y de referencia el mercado o el Estado. Estado y
La ciencia básica es la búsqueda de algo cuya aplicación
mercado son ingredientes al mismo tiempo que espacios de
práctica se ignora, pero que se supone corresponde a ese
desenvolvimiento de cualquier estrategia de desarrollo.24
tipo de conocimientos que se transforma en el punto de
partida de todos los otros tipos de conocimiento, así como
El fracaso, en el socialismo real, de la acción
de la aplicación práctica del saber. Las ciencias sociales
racionalmente orientada en términos de programa
inquieren sobre la naturaleza de las sociedades humanas y
político, de modelo de estatalidad, se convierte en una
de sus dinámicas. Ni las ciencias básicas, ni las ciencias
sociales, pueden, en un primer estadio de su desarrollo,
presunta prueba «fáctica» de la utopía neoliberal, para la
aportar nuevos productos comercializables, pero no existe
cual, según Eduardo Piazza,
tecnología de la producción en las sociedades modernas que
pueda responder a necesidades nuevas si no se apoya en la
la única política posible [...] es una «negativa»; i.e., una acción
ciencia básica y se inserta en el vasto contexto relacional
que se oponga a toda voluntad de acción. La voluntad debe
que estudian las ciencias sociales. El abandono de la ciencia
abstenerse de intervenir en cualquier dirección, para permitir
básica en favor de la tecnología y la desaparición de las
el juego natural de las regularidades automáticas del mercado.
ciencias sociales en favor de la mercadotecnia son dos fases
Se define también —por oposición— al enemigo político:
de un mismo suicidio cultural.26
será todo aquel que sostenga la viabilidad y/o necesidad de
una política «positiva», i.e., la pertinencia de la intervención
El boom académico en torno a la sociedad civil ha
de la voluntad humana en y sobre tales regularidades
dejado a la zaga la investigación de las alternativas estatales
naturales. Esta clase de política, así como sus eventuales
—existentes y proyectadas— que intentan enfrentar (sin
sostenedores, serán calificados de utópicos; y el único
resultado posible de la intervención anti-natural será la
aislacionismos estériles) los efectos de la división
producción del caos (concepto límite negativo).25
internacional del trabajo generada por la globalización
de la economía mundial y la «tribalización» de la política
El redimensionamiento teórico de la política, más allá
que la acompaña. Dichas alternativas no pueden fundarse,
de los marcos operacionales fijados por la moderna teoría
sin embargo, en una «metafísica del orden», aunque como
de la gobernabilidad, deviene tarea medular del
Estado sufran el impacto de las tendencias económicas y
pensamiento socialista de nuestros días. Dilucidar los
políticas de la contemporaneidad. La legitimidad de ese
caminos que conduzcan hacia una «política socializada»
orden, planteado como duración imposible de acotar, no
y una «economía politizada» constituye el reto de mayor
debe ser conceptuado como fin en sí mismo, sino como
trascendencia para dicho pensamiento. Esto es, una
desarrollo institucional pleno, abierto a una progresiva
generalización política no abstracta ni enajenada de la
socialización del poder y a una apropiación por las masas
sociedad, y una intervención política en la economía no
de la política.
externa, formal ni burocratizada.
Democracia política y socialismo no son antípodas ni
El conocimiento de las modernas técnicas de mercado
sucesivos, y mucho menos excluyentes. Por el contrario,
y organización empresarial y productiva es parte de la
la democracia adquiere un contenido verdaderamente
búsqueda de un saber que dé respuesta a las dinámicas
social con la redefinición de la política planteada por el
propias de la reinserción económica con el mundo
avance hacia el socialismo; se anula la separación entre
capitalista y las modificaciones en el mecanismo funcional
instituciones y masas, y la organización del Estado
del sistema económico interno. El auge del «mercadeo»,
privilegia las asambleas por encima de las burocracias y
no obstante, genera en algunas personas la ilusión de poder
las tecnocracias. De otra manera: al menos teóricamente,
prescindir de la teoría general, y de las investigaciones
el formalismo de la democracia política capitalista
106
107

Gilberto Valdés Gutiérrez
(asumiendo el democratismo político liberal como
ideal de la democracia directa y la necesidad de descubrir,
conquista histórica de los pueblos, impuesta al elitismo
en la práctica, las formas políticas concretas que den vida
originario del liberalismo27) se llena de contenido real.
efectiva a las instituciones y los procedimientos de la
La tradición democrática progresista no es,
política socialista, asumidos sin falsas ilusiones de
precisamente, la que está subsumida en la
«transitoriedad» o «provisionalidad».
institucionalidad hoy hegemónica.
En esto reside, en gran medida, la fuerza relativa del
liberalismo político, el cual ha podido sostener —no solo
Que hoy se hable de la hegemonía global del liberalismo o
mediante la coerción, sino por la reproducción de un
del liberalismo como gran «vencedor histórico» no traduce
consenso que involucra a los propios sujetos excluidos
otra cosa que la instalación de los modelos duros de la
hegemonía capitalista al resultar disonantes e incosteables
de la democracia— una forma política que satisface
las expectativas sociales históricas alentadas
representativamente el poder de los núcleos clasistas
jusnaturalmente por el liberalismo racionalista antes y
dominantes. No ha sucedido lo mismo con la
después de la Segunda Guerra Mundial. De acuerdo con la
representación y el ejercicio del poder de las clases
lógica liberal general, ello no impone romper abiertamente
con las nociones de los derechos humanos, los derechos
subalternas en las experiencias socialistas del Este. Parece
sociales o la misma democracia sobrecargada de
que todavía, como en tiempos de Marx, «tendrán que pasar
expectativas; al contrario, todos ellos se uncen, corrigen e
por largas luchas, por toda una serie de procesos históricos,
instrumentan, bajo las nuevas condiciones de mercado, a
que transformarán completamente las circunstancias y los
un liberalismo preparado para manipularlos y depurarlos
mediante las vías «posmodernas», «posestatales»,
hombres».29
«posnacionales» y «posdemocráticas».28
En el caso particular de la reforma cubana se hace
doblemente necesario el mantenimiento de una «estrategia
De lo que se trata, para esa otra democracia, es de
de orden», una voluntad estatal; tanto por las razones antes
una superación histórica real, no declarativa, del
apuntadas, como por la necesidad de salvaguardar los
liberalismo; no de un «rodeo» sociopolítico que a la
intereses populares representados en el Estado-nación, en
postre no satisfaga las expectativas democráticas
un contexto de antagonismo externo que aún amenaza la
superadoras. La historia reciente muestra cómo
soberanía del país y distorsiona el curso espontáneo de su
terminaron esos ensayos (por muy legítimos que
desarrollo.
resultaran en sus inicios): con la vuelta al más ramplón
El avance de la reestructuración económica está
consumo «simbólico» liberal.
estrechamente vinculado con la redefinición de las
No conduce muy lejos una lectura de la
funciones del Estado. Este deberá seguir configurando una
recomposición socialista de la política que oponga la
estructura institucional que presuponga la solidaridad y
representación y la participación como formas
la justicia y velando porque no se produzca una
excluyentes. La representación y la delegación son
segmentación social excluyente. Pero su función ya no
necesarias ante la no factibilidad de que todos ejerzan
podrá identificarse con la de un megaestado paternal-
directamente el poder. Construir formas de
protector. Para lograrlo redistribuirá recursos, garantizará
representación controladas desde las bases y ampliar la
compensaciones y condiciones suficientes para un ejercicio
dimensión participatoria no constituye un modelo de
más pleno de la ciudadanía.
imposibilidad histórica. La crisis de la democracia
representativa no implica necesariamente preterir el
El sistema político cubano —escribe Haroldo Dilla— debe
concepto de representación.
asumir al mercado como un componente imprescindible
La aspiración a que el Estado sea reabsorbido por la
de su construcción democrática. Pero al mismo tiempo tiene
que evitar que el mercado devenga principio organizacional
sociedad —concepto límite positivo de toda alternativa
de la sociedad y la política, y que sus efectos polarizadores
socialista desde la Comuna de París, y fundamento básico
destruyan ese otro componente básico de la democracia
de la construcción teórica de la lucha emancipatoria—,
cubana que ha sido la evitación del flagelo de la pobreza y
no puede sustituir el hecho cierto de que el Estado
de las grandes desigualdades y privilegios sociales. Se trataría
de un modelo económico con un funcionamiento regulado
alternativo aparece como organización general de la
del mercado, no solo por un Estado responsable y capaz,
propia sociedad, como mediación política necesaria. Al
sino también por la acción solidaria de los grupos sociales.30
criticar la restauración estalinista de la forma de Estado
adoptada en el socialismo real, hay que tomar en
La necesidad de abrir nuevos espacios al mercado,
consideración que las ideas originales de la democracia
como premisa de la reestructuración de la economía
directa, y del no Estado, se enfrentaron a la
cubana, no implica preterir la búsqueda e implementación
complejización de las sociedades contemporáneas. La
de nuevas formas de regulación por parte del Estado. Se
estadolatría negativa, el «gobierno de los funcionarios»
abren también otros desafíos: hallar fórmulas nuevas de
reflejó también las necesidades insatisfechas de una
socialización de la producción y la política, modos incluso
mediación política no hallada, cuyo espacio de poder
aún no experimentados de autogestión, cooperación,
fue detentado por la deformación estamentaria conocida
democracia económica y control popular y ciudadano
de dicho sistema político.
en la nueva fase de «otredad» mercantil.
Precisamente, el déficit principal de la teoría política
Los nuevos conceptos de competitividad,
socialista se ha evidenciado mediante la tensión entre el
flexibilización y productividad, inherentes a la
108

La alternativa socialista: reforma y estrategia de orden
Los nuevos conceptos de competitividad, flexibilización y
productividad, inherentes a la modernización de la economía
cubana, tendrán que estar acompañados de una constante acción
moral e intelectual de la sociedad. Todas las necesidades que
plantea la reinserción mercantil no tienen que ser apologetizadas
como virtudes en sí mismas. Tampoco rechazadas a nombre de
una eticidad abstracta, sino, para decirlo de alguna manera,
«domesticadas», reguladas por el Estado y la sociedad en su
conjunto.
modernización de la economía cubana, tendrán que estar
único horizonte posible y la expresión más acabada del
acompañados de una constante acción moral e intelectual
sentido común».33 Una cadena de eufemismos
de la sociedad. Todas las necesidades que plantea la
posmodernos se esfuerza por diluir la dureza creciente de
reinserción mercantil no tienen que ser apologetizadas
las desigualdades. Así,
como virtudes en sí mismas. Tampoco rechazadas a
nombre de una eticidad abstracta,31 sino, para decirlo de
es más atractivo hablar de la diversidad que del mercado,
alguna manera, «domesticadas», reguladas por el Estado
del poliformismo cultural que de la competencia individual,
del deseo que de la maximización de ganancias, del juego
y la sociedad en su conjunto. La lógica del mercado
que del conflicto, de la creatividad personal que del uso
presenta no pocos obstáculos a la teoría emancipatoria:
privado del excedente económico, de la comunicación e
asumirla presupone encontrar los modos idóneos de
interacción universales que de las estrategias de las empresas
encauzar la voluntad humana, social, que delimite su
transnacionales para promover sus productos y sus
servicios.34
entorno, para que la equidad posible, la justicia y la
convivencia humana no se devalúen como supuestas
Urge, en consecuencia, desmitificar la ideología de
«expectativas irracionales». Como la experiencia confirma,
la mundialización-modernización que encubre los
hasta el presente esos modos existen más como estructura
dictados de la división internacional del trabajo. Mas
propositiva, como deseabilidad, que como realidad
no desde una mística de lo alternativo como
latente.
desconexión y accidente del proceso social. La búsqueda
En consecuencia, la reforma económica comporta una
de presuntos «islotes» desprendidos del continente de
significativa dimensión ideológica (no una ideologización
la propiedad privada, solo muestra la incapacidad para
impostada, externa, que marche a contrapelo de la vida),
enfrentar el verdadero problema de cómo, con qué y
la cual tiene que ser estimada y consensuada de manera
mediante cuáles vías y formas podrá ser superado
diáfana a escala de toda la sociedad, por cuanto atañe a
realmente el tipo de proceso civilizatorio que rectorea
sus intereses más cardinales. La pluralidad de intereses y
el capital. Ya Marx, al criticar el utopismo comunista,
aspiraciones genera actitudes y valoraciones diversas en
objetaba la búsqueda febril de
este proceso. Ello manifiesta la necesidad de avanzar en la
creación de sucesivos consensos, lo que no excluye la
una prueba histórica —una prueba en el reino de lo
presencia puntual de la coerción estatal, allí donde peligren
existente— entre fenómenos históricos dispersos opuestos
los intereses generales de la sociedad representados en el
a la propiedad privada, desglosando fases aisladas del
Estado.
proceso histórico y concentrando la atención en ellos
como prueba de su linaje histórico.35
La redefinición ideológica a que aludimos difiere de
la que se parapeta tras la teoría económica técnica, en las
Samir Amin coloca el problema en los siguientes
reformas del neoliberalismo. Adam Przeworski y Michael
términos:
Vallerstein anotan que, desde los años 70, la ofensiva
conservadora se encubre con la presunta infalibilidad de
Si bien el mundo no puede ser administrado como un
las teorías técnicas:
«mercado mundial», el hecho que la mundialización
representa tampoco puede ser rechazado o negado. Nunca
El «monetarismo», «la nouvelle économie», y las
es posible «remontar hacia atrás» el curso de la historia.
«expectativas racionales» son propuestos como razones
Volver a los modelos de expansión de la posguerra
científicas de por qué todos estarían mejor si el Estado se
implicaría insostenibles regresiones económicas y de otro
retira de la economía y si deja que los capitalistas acumulen
tipo. Por eso las ideologías de retorno al pasado que niegan
sin consideraciones de distribución.32
el carácter irreversible de la evolución recorrida, están
llamadas necesariamente a funcionar como fascismos, es
decir a someterse de hecho a las exigencias de las nuevas
Se ha creado la «utopía del realismo», que presenta
condiciones impuestas por la mundialización al tiempo
dicha variante de mundialización del mercado como «el
que pretenden liberarse de ellas. Están fundadas sobre el
108
109

Gilberto Valdés Gutiérrez
Repensar la estrategia de orden cubana en función del despliegue
ininterrumpido de su capacidad democrática, alternativa tanto
a los esquemas de la democracia liberal, como al tipo de
estatalidad conformada en el socialismo histórico [...] impone
no solo el perfeccionamiento de la representación y la
participación, sino la búsqueda de nuevas formas de representar
e interesar como vía para la renovación progresiva del consenso,
en correspondencia con la pluralidad del sujeto que sustenta la
opción patriótica y socialista.
engaño y la mentira, y por eso solamente pueden
nuevas oportunidades históricas. Dos hechos,
funcionar mediante la negación de la democracia.36
entrelazados, lo confirman: la viabilidad de la nueva
opción económica diseñada y ejecutada en los 90 y la
Señalamos a inicios de este trabajo la inconveniencia
voluntad manifiesta de una reconstrucción socialista de
de reflexionar a posteriori sobre los cambios económicos
la política, la cual supone, en primer lugar, el
acaecidos en Cuba. El déficit teórico sobre las
fortalecimiento de las instituciones surgidas de la propia
alternativas reales a elegir crea condiciones para que, en
experiencia revolucionaria, ajustadas a las sustantivas
el mejor de los casos, la práctica coyuntural sea
modificaciones que corresponden a una complejización
interpretada por algunos como nueva teoría general.
de la sociedad que las generó.37 La efectiva socialización
Es preciso entender que no se producirá una «hora cero»
del poder deviene así el marco más sólido y permanente
que marque la vuelta a formas organizacionales de
desde el cual puedan ser fijados los límites sociales y
conducción de la economía y la sociedad que, más allá
ecológicos del mercado en el futuro inmediato.
de la impronta de la coyuntura epocal, han mostrado
Esta experiencia transita en medio de
su inoperancia como principios superadores del
«distorsionadores» externos que limitan y entorpecen su
capitalismo.
despliegue a ritmos más acelerados; no solo aquellos que
La misma lógica puede extenderse al curso de lo que
están asociados a la globalización económica y que frenan
denominamos estrategia de orden cubana, entendida como
la dinámica de los procesos anticapitalistas locales, sino
modalidad y dinámica político-institucional de la
sociedad, abocada hoy a la creación de un nuevo consenso,
—en primer lugar— la política agresiva y el bloqueo de
como imperativo de las transformaciones económicas
los Estados Unidos al país. Frente a estos dictados
ocurridas. En este tema, la parálisis del pensamiento
hegemónicos y manipuladores no existe mejor antídoto
creativo no es, sin embargo, fruto exclusivo de una
que continuar abriendo cauce a la sociedad civil popular,
propensión dogmático-idealizadora, sino de la aceptación
a su protagonismo efectivo. Ello supone no dar por
tácita, por parte de los ideólogos liberales, de que no
inamovible el sistema instituido de valores políticos que
existen alternativas democráticas que puedan trascender
regulan la socialidad existente, salvo aquellos contenidos
el formalismo representativo del Estado capitalista. A esta
que definen las conquistas históricas nacional-populares,
hipótesis se unen los supuestos dictados de la geopolítica
y que se enfrentan a las estrategias de orden regresivas.
y el dogmatismo de nuevo cuño, que considera a la
El reto mayor, en una perspectiva de avance hacia el
democracia liberal único paradigma «técnico» de
socialismo, es la activación del libre movimiento de la
democratización.
sociedad, la sostenida devolución al organismo social de
Una de las formas más eficaces de enfrentar ese
todas las fuerzas absorbidas históricamente por el Estado.
reduccionismo radica en el constante esfuerzo por
Mas este no es un acto contractual, ni comporta un
repensar la estrategia de orden cubana en función del
antiestatismo pedestre: es un proceso derivado de la
despliegue ininterrumpido de su capacidad democrática,
constante socialización de la actividad humana en todas
alternativa tanto a los esquemas de la democracia liberal,
las esferas, de la cotidianidad de la política. El Estado-
como al tipo de estatalidad conformada en el socialismo
nación continuará, durante un tiempo histórico imposible
histórico. En lo sucesivo se impone no solo el
de predecir, cumpliendo funciones intransferibles,
perfeccionamiento de la representación y la participación,
mientras impere la mundialización hegemonizada por el
sino la búsqueda de nuevas formas de representar e
capital y no accedamos a un nuevo internacionalismo de
interesar, como vía para la renovación progresiva del
los pueblos.
consenso, en correspondencia con la pluralidad del sujeto
Plantearse ese proceso desde las potencialidades de una
que sustenta la opción patriótica y socialista.
alternativa anti-sistema como la de Cuba, obliga a resolver
La sociedad cubana asume retos aún no valorados en
simultáneamente contradicciones que les son impuestas
toda su dimensión. La crisis ha puesto en evidencia sus
al Estado y al pueblo cubanos desde el exterior y, en
110

La alternativa socialista: reforma y estrategia de orden
primer orden, aquellas que amenazan directamente la
del individualismo competitivo. Sin embargo, la propaganda se encarga
seguridad nacional. Una vez que la política antediluviana
cínicamente de presentar este estado de cosas como efecto «transitorio»
de los Estados Unidos sea derrotada, los desafíos de la
de la modernización y el ajuste.
Revolución cubana se harán más transparentes en relación
4. A fines de 1993 dos investigadores de las transformaciones
con las tendencias transnacionales dispuestas a absorber
institucionales asociadas a la apertura económica cubana apuntaban que
las resistencias locales a sus dictados. La magnitud de la
«resulta contrastante la creatividad e imaginación desplegadas en el
crisis mundial y la naturaleza del nuevo capitalismo
terreno práctico por los formuladores y ejecutores de la política
económica actual, con la ausencia de trabajos teóricos sobre el tema
muestran con toda fuerza que las soluciones serán cada
por parte de académicos e investigadores del país» (Pedro Monreal y
vez más globales, pero mediante la articulación de todos
Manuel Rúa del Llano, «Apertura y reforma de la economía cubana: las
los sujetos interesados en afirmar un nuevo modelo de
transformaciones institucionales (1990-1993)», Cuadernos de Nuestra
bienestar, en cuyo centro no esté el consumo impositivo
América, La Habana, 11(21), enero-junio, 1994: 160.) Numerosos
trabajos de economistas cubanos llenan en parte este vacío en los últimos
y depredador, sino la convivencia desenajenada del
años. No discutido lo suficiente, dado su impacto en medios académicos
hombre con el hombre y del hombre con la naturaleza.
y públicos, ha sido el libro Cuba, la restructuración de la economía. Una
Un solo paradigma de modernización avanza sobre
propuesta para el debate (La Habana: Editorial de Ciencias Sociales, 1995).
América Latina. Sus fundamentos se distancian de la
Sus autores (Julio Carranza Valdés, Luis Gutiérrez Urdaneta y Pedro
modernidad liberadora: asumen la servidumbre
Monreal González) tienen el mérito, más allá de cualesquiera sean las
consideraciones críticas especializadas que requieren estos temas, de
«posmoderna». Emerge, con desnudez, el modelo real que
haber adelantado un conjunto de estudios y reflexiones sobre el curso
pretende ser «exportado»: sometimiento a las normas de
de la reforma económica en la Isla, en momentos en que los cambios
las instituciones económicas transnacionales, que buscan
producidos apenas permiten colocar en el terreno teórico el vertiginoso
a toda costa elevar la tasa de beneficio para superar la fase
movimiento de la realidad.
recesiva en curso del capitalismo, privatización de la
5. Las relaciones entre realidad y teoría estarán siempre marcadas por la
política, sacralización del dinero, desintegración social,
conflictividad. La acción política sobre esa realidad y la reflexión teórica
democracia elitista, ciudadanía de baja intensidad, apatía
poseen sus propias formas y objetivos, aunque converjan en función de
y clientelismo de subsistencia en los eventos eleccionarios.
intereses comunes. En ocasiones, las tensiones que se dieron entre ambas
pusieron de moda la estéril contraposición entre «oficialismo» y «no
¿Acaso no son estas, razones suficientes para que los
oficialismo», cuando de lo que se trata es de asumir de manera no
cubanos se empecinen en la búsqueda de una otredad
vergonzante dos momentos: el compromiso ético que supone la
dignificadora del ser humano?
asunción de los intereses nacionales y la indagación seria, profunda y
audaz de las contradicciones reales. Ninguna coyuntura puede ser
Noviembre de 1995-marzo de 1996.
esgrimida para inhibir ese segundo momento de creación «conflictiva».
Ninguna pasión intelectual es tal si le es ajena la eticidad en su ejercicio
estimativo. No existen ciencias sociales al margen de los intereses
humanos. La politización vulgar de los debates ideológicos y la
Notas
pretendida neutralidad axiológica en los estudios sociales son, a su turno,
dos actitudes improductivas en las discusiones de esta naturaleza.
1. Este ensayo contextualiza una investigación teórica general
culminada recientemente: «La alternativa inconclusa: el socialismo en
6. Ramón Sánchez Noda, Nelson Labrada Fernández y Víctor Figueroa
las redes de la modernidad. [Fondo Instituto de Filosofía.]
Albelo, ob. cit.: 26.
2. «Los cambios estructurales y funcionales que vienen ocurriendo en
7. Rafael Hernández, «La otra muerte del dogma», La Gaceta de Cuba,
Cuba desde 1990, pero más concretamente hacia finales de 1993
La Habana, (5), septiembre-octubre, 1994: 17.
—aunque algunos se iniciaron prácticamente en 1988— en distintos
campos de la economía nacional son consustanciales a una reforma
8. Carlos Marx, «Carta al director de El Memorial de la Patria», en:
económica. No importa ahora si ha sido formulado o no un programa
Carlos Marx y Federico Engels. Correspondencia, La Habana: Editora
integral de los cambios o que muchos de ellos hayan emergido como
Política, 1988: 392.
respuestas pragmáticas frente a la profundización de la crisis económica
y a la necesidad de contramedidas tendientes a enfrentarla.» (Ramón
9. Jaime Osorio, Las dos caras del espejo. Ruptura y continuidad en la
Sánchez Noda, Nelson Labrada Fernández y Víctor Figueroa Albelo,
sociología latinoamericana, México: Triana Editores, 1995: 22.
El sector mixto en la reforma económica cubana, La Habana: Editorial
Félix Varela, 1995: 21.)
10. Utilizamos el término para designar aquella actitud que confunde la
teorización sobre el socialismo con su formalización empobrecida.
3. La crítica al igualitarismo puede hacerse desde distintas ópticas. En
Durante buena parte de su desarrollo, en el marxismo posterior a Lenin
ocasiones esconde intereses que en modo alguno pueden conformar
domina una preceptiva que incluye definiciones «congeladas» de
un consenso para su superación. En la experiencia del socialismo real
socialismo, construidas sobre la base de la yuxtaposición de algunos
tras esta crítica se camuflaba la creación de feudos, cuyos poseedores
rasgos empíricos de experiencias particulares. Parafraseando a Marx, lo
explotaban —en su connotación más general—, por delegación, los
concreto-sensible fue elevado directamente al plano de lo concreto-
derechos del Estado, el excedente y los servicios o parte de ellos. Si
pensado sin depurar lo específico. Lenin, como se sabe, se opuso a esa
bien no existía jurídicamente ni capitalización ni herencia, y era
propensión apriorística cuando lo conminaron a dar una definición
restringido hasta cierto punto el atesoramiento, no ocurría lo mismo
lapidaria del socialismo: «no podemos dar una definición del socialismo;
con el disfrute. Este disfrute es lo que coloca Marx en primer lugar en
cómo será el socialismo cuando alcance sus formas definitivas, no lo
las sociedades satrápicas, el cual conduce más tarde o más temprano a
sabemos, no podemos decirlo. Decir que la era de la revolución social
sociedades de clase de una forma muy original.
ha comenzado, que hemos hecho tal y cual cosa y nos proponemos
La crítica neoliberal del igualitarismo, por otra parte, pretende una
hacer tal otra [...] Pero en cuanto a cómo será el socialismo en su forma
justificación «natural» de la pobreza. Resurgen las teorías genéticas
definitiva, eso ahora no lo sabemos». (Obras completas, Moscú: Editorial
sobre la desigualdad, como polarización «necesaria y conveniente»,
Progreso, 1986: 69-70.)
110
111

Gilberto Valdés Gutiérrez
11. Véase Nuevos modelos de socialismo, Buenos Aires: Kohen & Asociados
pueblo. Cuando más adelante lo hizo, esto empezó a limitar la libertad
Internacional, 1995.
de mercado. Mientras mayor se hacía la libertad política, se tornaba menor
la libertad económica. Como quiera que sea, la correlación histórica no
12. Luis Martínez de Velasco, «Socialismo y mercado», Papeles de la FIM,
demuestra que el capitalismo constituya una condición indispensable para
1, 1993: 125.
la libertad política.» (C.B. Macpherson, «Elegant Tombstones: Note on
Friedman’s Freedom», en Democratic Theory. Essays in Retrieval, Oxford:
13. Ibíd.: 126.
1973: 148.
14. Idem.
28. José Luis Orozco, Sobre el orden liberal del mundo, México: Centro
Coordinador y Difusor de Estudios Latinoamericanos, 1995: 10.
15. Idem.
29. Carlos Marx, «La guerra civil en Francia», en Obras completas, Moscú:
16. Luis Martínez de Velasco, ob. cit.: 123.
Editorial Progreso, 1973, t. 2: 237.
17. Adam Schaff, ¿Qué ha muerto y qué sigue vivo en el marxismo?, Buenos
30. Haroldo Dilla, «Cuba: ¿cuál es la democracia deseable?», en La
Aires: Tesis 11 Grupo Editor, 1995: 70-1.
democracia en Cuba y el diferendo con los Estados Unidos, La Habana:
Ediciones CEA, 1995: 185.
18. Ibíd.: 73.
31. Véase José Ramón Fabelo Corso, «Valores y juventud en la Cuba de
19. Ibíd.: 72-3.
los noventa», Intervención en la Audiencia Pública sobre Formación de
valores en las nuevas generaciones, de la Comisión de Educación, Cultura,
20. Jaime Osorio, «Neoliberalismo y globalización: notas para una
Ciencia y Tecnología de la Asamblea Nacional del Poder Popular, La
demarcación de fronteras», [ponencia], Taller «Alternativas de izquierda
Habana, 24 de abril de 1995.
al neoliberalismo». La Habana, 12-14 de febrero de 1996:19.
32. Adam Przeworsky y Michael Vallerstein, «Qué está en juego en las
21. Carlos Mendoza, Los límites teóricos del capitalismo y la sociedad
actuales controversias en macroeconomía», en Los nuevos procesos sociales
autogestionaria, Buenos Aires: Cuadernos de Tesis 11 Grupo Editor, 1994:
y la teoría política contemporánea, México: Siglo XXI Editores, 1986: 41.
35-6.
33. Eduardo Piazza, ob. cit.: 6.
22. V.I. Lenin, «Discurso acerca de la actitud hacia el Gobierno
Provisional», en Obras escogidas, Moscú: Editorial Progreso, 1975, t. 2:
34. Citado por José Rivero H., Educación de adultos en América Latina.
169.
Desafíos de la equidad y la modernización, Lima: Tareas, 1993: 112.
23. V.I. Lenin, «VII Congreso extraordinario del PC(b) de Rusia», Obras
35. Carlos Marx, Manuscritos económicos y filosóficos de 1844, La Habana:
escogidas, ed. cit.; t. 2: 634.
Editorial Pueblo y Educación, 1977: 107-8.
24. Carlos M. Vilas, «Estado y mercado después de la crisis», Nueva
36. Samir Amin, «El desafío de la mundialización», Actual Marx,
Sociedad, Caracas, 133, septiembre-octubre, 1994: 134.
Montevideo, Ediciones de la Casa Bertold Brecht, 1995: 16.
25. Eduardo Piazza, «Razón, voluntad, Dios. Sobre ciertos dilemas de la
37. Véase Miguel Limia David, «Modo de participación y reestructuración
ilustración» [ponencia], V Simposio sobre Pensamiento Filosófico
en Cuba», noviembre de 1995. [Fondo Instituto de Filosofía].
Latinoamericano, Universidad Central de Las Villas, enero, 1996: 7-8.
26. Sergio Bagú, «América Latina: esbozo de defensa de lo sustancial»,
Dialéctica, México, (22), primavera de 1992: 27-8.
27. «El Estado liberal, que a mediados del siglo XIX estableció en Inglaterra
las libertades políticas indispensables para el desarrollo del capitalismo,
no era democrático: no hacía extensible la libertad política a la masa del
©
, 1996.
112

Abel E. Prieto
no. 6: 114-121, abril-junio, 1996.
Lo cubano en la poesía:
relectura en los 90
Abel E. Prieto
Escritor. Unión de Escritores y Artistas de Cuba (UNEAC).
«Este mismo Curso alcanzará su mayor fecundidad
exterior. Quiero llamar la atención, además, sobre las
cuando pueda ser visto desde una perspectiva que ahora
formas peculiares de rechazo que acompañan a esta
nos resulta inimaginable, y en la cual su testimonio tendrá
percepción, centradas en el
un valor desconocido para nosotros.»
esencialismo y la teleología
insular.
Cintio Vitier,
Orígenes emprende, a partir de nuevos presupuestos,
diciembre de 1957
una tarea presente siempre, y siempre inconclusa entre
nosotros: la definición de lo cubano. En muchas
Se ha hablado muchas veces, y con sobradas razones, aproximaciones origenistas al conocimiento de la
del papel que en la gestación del grupo Orígenes tuvo
cubanidad, aparece como trasfondo, de un modo u otro,
el asfixiante clima político, moral y cultural de la
de manera más o menos consciente, la visión de una
república frustrada. Se ha mencionado específicamente
república ficticia, de una neocolonia apenas enmascarada
el impacto de la fracasada revolución antimachadista, y
con himno, bandera, Capitolio y políticos propios. Y
también, aunque con menos frecuencia, el auge de la
esta visión, con todas sus consecuencias, marca las
penetración cultural norteamericana en la Isla y la
indagaciones del grupo sobre lo cubano, e influye en
consiguiente erosión en los hábitos, costumbres, valores,
algunos de los principios básicos de la estética de Lezama
y en los principios mismos de la nación, y la «resistencia»
y de sus seguidores.
que opuso Orígenes a estos procesos.
No voy a detenerme en la diversidad de enfoques y
Me gustaría subrayar en este trabajo dos componentes
personalidades creadoras que confluyeron en Orígenes,
en la percepción origenista de la condición neocolonial
y que implica, necesariamente, matices, y hasta
de Cuba: la superficialidad, propia de la teatralización
divergencias, en la aprehensión de la cubanidad y en los
de la independencia en un país que ha seguido siendo
modos de expresarla. Por encima de las diferencias
colonia, y la carencia de finalidad, como expresión de la
individuales, se advierte en el grupo una innegable
subordinación y frustración nacionales y del culto a lo
coherencia en sus empeños por captar nuestro ser
nacional. Si alguna investigación futura logra separar dos
Texto presentado en el Coloquio Internacional por el 50 Aniversario
de Orígenes (1994).
«líneas» en esta búsqueda, y —como es de presumir—
114

Lo cubano en la poesía: relectura en los 90.
Lo cubano en la poesía condena la búsqueda de la cubanidad
«externa», y promueve, realza y dignifica, programáticamente,
todo empeño por alcanzar la cubanidad «esencial».
coloca a Lezama y a Piñera al frente de las mismas,
veinte años».1 Y Lo cubano en la poesía, sin desatender
digamos desde ahora que me refiero aquí a la «línea»
sus propósitos estratégicos —que analizaremos después
central, a la del origenismo «ortodoxo», que va desde
en detalle—, va dando respuesta a los disímiles detractores
las preguntas sobre la personalidad insular del Coloquio
de Lezama y del Orígenes «depurado» de 1957. Como
con Juan Ramón Jiménez hasta el esfuerzo más abarcador
veremos, las intuiciones principales que se envían en este
de Orígenes por caracterizar la cubanidad: las
libro, con plena conciencia, hacia el futuro, alcanzan
conferencias que ofreció Cintio Vitier en el Lyceum de
hoy una vigencia particular.
La Habana, entre octubre y diciembre de 1957,
Naturalmente, Lo cubano en la poesía se atrajo, desde
publicadas bajo el título de Lo cubano en la poesía.
su publicación, los odios de aquella «franja de enemigos»,
que se enriqueció con nuevos y entusiastas adeptos a
partir de 1959. Como ha pasado entre nosotros con
Dos
Lezama y con todo Orígenes, su recepción ha sido
perturbada tanto por pasiones extraliterarias como por
Durante muchos años sostuve una relación
aquellas propiamente literarias que está llamado a
ambivalente con Lo cubano en la poesía. Lo leí ávidamente
concitar un libro como este: un libro que no es un
cuando estudiaba en la universidad, y marqué sus páginas
manual aguado y conciliador; que es frontal, directo,
con interés y pasión, y hasta con cierto afán polémico.
injusto a veces, y que asume sin ambigüedades el punto
Algunas categorías propuestas por Cintio Vitier sirvieron
de vista de un grupo de poetas para entender el transcurso
de blanco a la ingenua ironía que mi generación ensayaba
de la cultura cubana, y de la propia nación, desde el
por aquellos tiempos, e hice chistes sobre «lo frío» y «lo
pasado y hacia el porvenir.
otro», mientras trataba, en la intimidad, de ajustar las
Lo cubano en la poesía no puede leerse ni juzgarse
proposiciones de aquel libro extraño, ambicioso,
como una historia de la poesía cubana, ni como crítica
desbordante, a la imagen de lo cubano que había ido
literaria, a la que siempre se reclama «objetividad» y
haciéndome para uso personal.
«equilibrio». Debe leerse —siguiendo la sugerencia de
Luego vinieron, inevitablemente, otras objeciones:
su autor— como un poema; pero también como un
Lo cubano en la poesía no era solo una mirada desde
programa, como un extenso y dramático manifiesto, que
Orígenes a nuestro patrimonio poético; también era una
va mucho más allá que los sintéticos «editoriales» de la
mirada hacia Orígenes. Se trataba de un enfoque
revista Orígenes.
francamente tendencioso, impúdicamente tendencioso,
En esta mi relectura de hoy, han perdido interés las
y eso resultaba irritante, casi escandaloso, en el
viejas objeciones. Ya no tendría sentido discutir si es o
eufemístico mundo literario al que debía integrarme.
no un libro tendencioso; porque un manifiesto o un
En el libro, además, era fácil topar con la sombra de
programa son tendenciosos por definición. Lo cubano en
varias polémicas, solo aproximadamente literarias: la
la poesía se escribe «en un rapto» (p. 9) cuando la revista
discusión con la crítica de orientación marxista, en
Orígenes acaba de extinguirse, después de doce años de
defensa de Orígenes, y de antecesores de «la batalla en
siembra y fundación. Batista,
otro terreno», como Casal, frente a las acusaciones
el hombre fuerte de los
concernientes al «escapismo», la «evasión», etcétera;
yanquis, se dedica a reprimir con «el grosero manotazo
también con Mañach, como continuación indirecta de
de la tiranía» a «la juventud exasperada» (p. 578), que en
la polémica Mañach-Lezama de 1949, en una tajante
las montañas y ciudades del país parece destinada a un
reafirmación de la superioridad de
nuevo ciclo de sacrificio sin futuro. La nación recibe
Orígenes sobre Revista
de Avance; con Virgilio Piñera y el grupo secesionista,
por todos sus poros «la más sutilmente corruptora
con los que, al separarse del origenismo «ortodoxo»,
influencia que haya sufrido jamás el mundo occidental»
perdieron la orientación utópica y se quedaron con la
(p. 584): es «la desintegración invasora» (p. 343) que nos
«nada», el «vacío» y el «absurdo existencialista». Y esta
viene del Norte, que pretende rematar culturalmente la
última se desliza, en más de un momento, hasta las
dependencia económica y política de su neocolonia. El
contradicciones entre Juan Ramón Jiménez y algunos
«imposible» se alza, con más fuerza que nunca, entre los
de los principales poetas de la generación del ’27.
cubanos y los ideales de Martí. Tales son las
En el capítulo dedicado a Lezama, se nos advierte
circunstancias en que Cintio Vitier elabora este
que el gran poeta y fundador ha creado en torno suyo
manifiesto, que más que prólogo de un movimiento
«una misteriosa familia de amigos, con su inevitable
—como la mayoría de los manifiestos— lleva en sí el
franja de enemigos sucesivos y relevados, que lo han
dramatismo y la urgencia de un epílogo que se resiste a
hecho el centro de la vida poética cubana en los últimos
su condición.
114
115

Abel E. Prieto
El valiosísimo aporte de este libro en defensa de la
Los «hechos», por otra parte, o aparecen articulados
cultura cubana, y de la nación, sale a flote con una
en una conexión primaria («causalismo»), o se presentan
relectura —al margen de las polémicas más o menos
en una imagen donde «todo» se ve «esencialmente
pequeñas— que centre su atención en la polémica
desunido, inconexo» (p. 530). Su «facticidad» solo puede
decisiva: la que enfrenta a Cuba con su enemigo histórico
engendrar el «prosaísmo» —también de «hechos», de
y con el status neocolonial.
superficies—, la «retórica» —lo vacío, artificioso y falso—
y los «tópicos» consiguientes. Esa realidad factual, de
fórmulas huecas, tópicos y retóricas, de puros «hechos»
Tres
y prosaísmo, se corresponde con el «vacío decorado»
que componen los símbolos patrios. Tanto la
Lo cubano en la poesía incluye un crudo panorama de
«facticidad» como el vaciado de los símbolos, dos caras
la República dependiente. Sus signos son la frustración,
de la misma moneda, dejan espacio libre al «hedonismo»,
la «nada», la «ausencia de finalidad»; esa «intemperie»
a la «intrascendencia»; a la entrega de la nación por falta
donde no hay valores ni ideales colectivos, y el individuo
de «sentido», de «finalidad», de auténtica «conexión» o
está solo, sin fe, sin protección alguna. En esa República
articulación entre las cosas. Véanse además las
desmedrada, Cintio Vitier contempla la decadencia de
transformaciones que indican el paso de la época heroica
los símbolos y de los sentimientos independentistas:
a los tiempos republicanos: de «la Revolución» (imán,
centro, destino) a «los Partidos» (fragmentos,
Al lograrse la independencia, tan mediatizada por la tutela
desconexión, intrascendencia); de «la diana pura y
política y sobre todo económica de los Estados Unidos; al
vibrante» a «la charanga bullanguera». Hablará también
iniciarse la rutina de los cambiazos y los alzamientos; al
del «caos de la política superficial» (p. 583), en oposición
comenzar la corrupción administrativa y el descreimiento
a una política «profunda» que permanece innominada.
civil, el fondo intrascendente, incrédulo y burlón del
cubano, aflora a la superficie. Ya no hay un ideal histórico
Cintio Vitier descubre esta contradicción entre lo
definido que lo imante; ya no hay un Martí que lo domine
exterior y lo esencial y real, a escala de la psicología del
y encienda. [...] La patria, la bandera y el himno
cubano: «Nuestro sol brilla implacable, el cubano es
rápidamente degeneran en vacío decorado. A la Revolución
ruidoso y alegre, pero un fondo de indiferencia, de
suceden los Partidos; a la diana pura y vibrante en el
amanecer del campamento, la charanga bullanguera
intrascendencia, de nada vital, se va apoderando de su
despertando los instintos inferiores. (p. 341)
vida» (p. 309). Ese mundo «exterior» es caracterizado,
sobre todo, con rasgos sensoriales muy marcados
Verifica además, en «las cosas» descritas por cierta
(sonidos y colores vivos), mientras que en el mundo
poesía social, «una existencia fáctica, periodística», sin
«interior» se destacan rasgos éticos y teleológicos. La
«misterio», y es que «la realidad misma parece estar en
teatralización de la independencia, con su exaltación de
ese plano, y nada más»:
las superficies, pretende ocultar la subordinación
neocolonial y la carencia de finalidad.
Los ideales que engendra esa realidad, de puro limitados y
La colonia primero, y la condición neocolonial
consabidos, se vuelven tópicos. La poesía tiene que ser
después, han creado una relación muy singular entre el
prosaica o retórica. La facticidad de la República está
revelando ya su terrible fondo de hedonismo e
cubano y su identidad nacional, sometida en su plenitud
intrascendencia. (p. 355)
a dolorosas y sucesivas postergaciones. El cubano padece
así un doble destierro: el teológico de la especie, y el de
Con los ideales martianos, la República perdió
la «criatura [...] que se proyecta a sí misma como lejanía,
también toda noción de futuridad: Casal, precursor de
quizás como interminable aplazamiento de su propio
los «frustrados» republicanos, «nos produce el efecto de
ser» (pp. 222-3). La cubanidad «nos da la imagen de una
que ya sabe que pertenece a un pueblo sin destino»
existencia que no puede alcanzar su propio centro, que
(p. 310). La condición neocolonial significa también, para
está separada de sí misma por una sutil distancia
Cuba, «la volatilización del destino»: es decir, «pavorosa
insalvable» (p. 576).
nada», «causalismo, facticidad, banalidad, absurdo»
(p. 462). Este aspecto de la condición neocolonial fue
observado y sufrido de manera muy particular por los
Cuatro
más lúcidos creadores de Orígenes, y ocupa un lugar
La cubanidad «externa», temática, superficial, que
principalísimo en las reflexiones que animan Lo cubano
tiene sus expresiones más evidentes en el siboneísmo y
en la poesía.
en la poesía negrista, se distingue en este libro de la
Se trata de una realidad «fáctica», que comprende solo
cubanidad «esencial», «secreta», «oculta», que es tocada
la superficie de los «hechos» y no va más allá. Es descrita
una y otra vez por nuestros mejores poetas. Lo cubano
también como «una realidad desustanciada» (p. 481),
en la poesía condena la búsqueda de la cubanidad
evaluación que debe relacionarse con la influencia
«externa», y promueve, realza y dignifica,
norteamericana, que equivale a «desustanciación» y
programáticamente, todo empeño por alcanzar la
«desintegración»: «lo propio del ingenuo american way
cubanidad «esencial».
of life es desustanciar desde la raíz los valores y esencias
La cubanidad «externa» se vincula indirectamente con
de todo lo que toca» (p. 584).
el «decorado» republicano de la neocolonia, y en sus
116

Lo cubano en la poesía: relectura en los 90.
extremos, de manera directa, con un «autoexotismo» en
No hay una esencia inmóvil y preestablecida, nombrada
el que se asume la mirada del colonizador y el disfraz
lo cubano, que podamos definir con independencia de sus
manifestaciones sucesivas y generalmente problemáticas,
que esa mirada exige. En las corrientes indigenistas o
para después decir: aquí está, aquí no está. Nuestra aventura
nativistas, está presente la caricatura europea del
consiste en ir al descubrimiento de algo que sospechamos,
«hombre natural». Cierta «mulatez» o «afrocubanía» de
pero cuya identidad desconocemos. Algo, además, que no
Ballagas «nos resulta tan exótica (el ojo europeo superpuesto
tiene una entidad fija, sino que ha sufrido un desarrollo y
al insular) como algunas evocaciones del siboneísmo»
que es inseparable de sus diversas manifestaciones históricas
(p. 18).
(p. 418). En La isla en peso, de Virgilio Piñera, descubre «la
vieja mirada del autoexotismo, regresiva siempre en nuestra
El propósito del libro, no es, pues, «sacar
poesía» (p. 480). Siboneísmo y negrismo fueron modas
conclusiones absolutas», ni decir «lo cubano es esto y
condenadas a vida efímera por su misma concepción
aquello». Lo más que puede lograrse con respecto a ese
epidérmica.
«algo», que tiene «la calidad evasiva de un imponderable»,
La cubanidad «externa» aparece relacionada con lo
es «que seamos capaces de sentirlo o presentirlo»; que
«fáctico» en Francisco Pobeda (p. 138), en tanto resulta
cobremos «conciencia de su magia, de su azar y su deseo»,
«puramente nominal y temática» en «los débiles romances
y también —«tal vez»— de «su destino» (p. 20).
de Del Monte» (p. 149). La presencia del tema no significa
La propia «isla», incluso, participa en cierto modo
nada al juzgar la captación de lo cubano: por el contrario,
de esa «furtividad del ser que es un reintegrarse oculto a
más bien estorba el acercamiento a la cubanidad «esencial».
la orilla más lejana» (p. 522). «Tampoco la isla cuaja ni
Cualquier concesión al tipicismo tiene para Cintio
se asienta en una sustancia» (p. 523): «sus esencias escapan
Vitier consecuencias negativas: en el Cucalambé «asaltantes
a todo amurallamiento, a toda forma cerrada, a todo
y pintorescos cunden los símiles implacablemente
centro posesor» (p. 579).
nativistas» (p. 172); en el propio Feijóo «los juegos
Lo cubano, y hasta la «isla», se convierten en parientes
campesinos» vienen con «su inevitable sombra de tipicismo
cercanos de aquella «sustancia poética» perseguida sin
acechante» (p. 538). El «tropicalismo convencional y
tregua por Lezama («Ah, que tú escapes...»): una
lánguido» (p. 392), «empequeñecedor», es condenado en
«sustancia» que «no está en las voces del mundo
todas sus versiones: carece de «verdadera fragancia» y
aparencial [...] ni tampoco en sus configuraciones
«necesidad íntima» (p. 320); tiene una retórica «sin jugo»,
intelectuales»; sino «en ese discurso que no se estanca
«falsa», «hueca», donde lo cubano es «mero espectáculo»
como linfa de la forma sino que se restituye incesante al
(p. 322).
misterio» (p. 446). Y así, del mismo modo que el cubano
El problema del tipicismo había sido planteado desde
contempla su identidad plena desde «la otra orilla», como
el Cucalambé, «que es el de todo lo demasiado explícito,
un desterrado de su propio ser nacional, el poeta
exterior y pintoresco en poesía»: «O bien deriva hacia la
intercambia miradas con la «sustancia poética», a través
falsedad, o bien permanece en la superficie» (p. 177). Es
de «la distancia mágica, intraspasable [...] dolorosa», que
decir: por un lado, el artificio de «la patria, la bandera y el
los separa (p. 443).
himno», a los que se unen los indios de papier maché, las
No solo en Lezama, también en los demás origenistas,
lánguidas hamacas y los motivos frutales, para completar
y en sus antecesores, hay un anhelo de «esencias»
el «vacío decorado» de una cubanidad y una independencia
inatrapables, donde se nos escurre la «sustancia poética»,
que son pura ficción; por otro, la maldición de lo «fáctico»,
y con ella la cubanidad que vale, la «esencial»: «No es
la incapacidad para buscar en lo hondo, los «hechos» y
esto, no es esto —parecen decir algunos de nuestros
nunca lo esencial. No es, por supuesto, una verdadera
poetas— es aquello que late detrás, o más allá [...]»
bifurcación: entre lo «fáctico» y lo falso, entre conformarse
(p. 312).
con la superficie de las realidades y aceptar como legítimo
Cuando evalúa la tradición romántica cubana, Cintio
el «vacío decorado», no hay más que un paso mínimo, que
Vitier resalta las «visiones hondas de una cubanidad
se da muy a menudo; del mismo modo que es fácil deslizarse
concentrada, entrañable», el «tuétano» de lo cubano
del tipicismo al autoexotismo.
(pp. 126-7), «el proceso de interiorización del tono», las
«esencias criollas y cubanas», la «lírica purísima del alma,
de la intimidad» (p. 183), las «fibras ocultas» (p. 127), «el
Cinco
otro plano más oculto» (p. 197), «la mayor hondura,
irradiación y pureza» en la captación de la cubanidad
Es a la luz de los peligros estéticos, cognoscitivos, y
(p. 207), los «adentros de la sensibilidad, la magia y el
también políticos, de buscar la cubanidad externa; de los
aire» (p. 130); frente a lo temático y «resonante», «el tono
enormes riesgos culturales que entraña conformarse con
de lo convencional y pintoresco» y «los elementos
esa instancia epidérmica —e inevitablemente falsa— de la
visibles de la isla» (p. 207).
cubanidad, como debe entenderse la defensa radical de los
El adjetivo «secreto» es quizás el más empleado en el
métodos y hallazgos «esencialistas» en Lo cubano en la poesía,
libro —con lo «oculto» y «escondido»— y siempre como
y —¿por qué no?— en todo Orígenes.
una especie de sello de distinción frente a lo externo,
Los esfuerzos orientados hacia la cubanidad exterior o
retórico y evidente.
temática, ignoran, de entrada, un obstáculo básico: la
Heredia muestra, «por debajo del consabido tono
condición misma del objeto que pretenden captar.
altisonante, un acento más personal y secreto» (p. 80).
116
117

Abel E. Prieto
En las descripciones de «el alba y la tarde» de José Jacinto
bullanguera» debe acompañar al vivir-en-el-presente de
Milanés, prefiere las elaboradas «con desnuda magia de
la República.
luz y aire, inconfundiblemente cubanas [...], centradas
Tengamos en cuenta, además, que el advenimiento
en nuestra pupila para fina gloria y goce secreto»
de la «lírica purísima» de Zenea y Luisa Pérez está
(p. 110). Frente a la «cubanización explícita», apunta «la
indisolublemente acompañado de un «proceso de
otra línea más secreta y silenciosa de cubanización
interiorización del tono», del hallazgo de «esencias
implícita de la mirada y el sentimiento» (p. 183). Así, en
criollas y cubanas» y del abandono de las trampas
los Versos sencillos, de José Martí, encuentra «otros rasgos
exterioristas. El camino de la cubanidad externa lleva a
de cubanidad más secreta» (p. 258); en los pocos
«mezclas» que empobrecen los resultados poéticos y
momentos «recordables» de René López, «genuina y
cognoscitivos, y limitan —por supuesto— la auténtica
secreta sensibilidad insular» (p. 327); en Eliseo Diego,
captación de lo cubano. Una de las razones del fracaso
«el secreto de lo cubano y de la infancia» (p. 512); en
del movimiento siboneísta fue «la naturaleza híbrida de
Mariano Brull, «las claves de su cubanía o criolledad
una visión que quería ser a la vez poética y política»
secreta» (p. 388).
(p. 161). La Revista de Avance no logra combatir
«El arco invisible de Viñales», de Lezama, desdeña
eficazmente «la ausencia de finalidad en que se hundían
cualquier «reacción inmediata, descriptiva o subjetiva
el país y las letras» (p. 371), «porque su raíz no era poética,
ante el paisaje», «liberándose de la inercia de la primera
creadora, sino [...] sociológica y política» (p. 372). Las
realidad para entrar en otra danza de enmascarados»
fórmulas «híbridas» y exterioristas —a diferencia de las
(pp. 450-1). La imaginación de Lezama explora «las
«puras» y «esencialistas»— están incapacitadas para
posibilidades escondidas», y desecha las «configuraciones
acceder a zonas ocultas de lo cubano y a toda posibilidad
sensibles y fácticas» del paisaje (p. 452).
teleológica.
Lo «oculto» y «secreto» son, pues, respuestas a lo
En su recorrido por la obra de Nicolás Guillén,
«fáctico», un rasgo clave de la cubanidad exterior y uno
confiesa su prisa por llegar a El son entero para detenerse
de los pilares en la definición de la República.
en «textos más puros y absolutos» (p. 426) y saludar
El sistema de Lezama, por otra parte, con la imagen
finalmente al «son más puro que ha escrito Guillén, la
como centro, resulta la única alternativa perdurable que
joya de su poesía», con «categoría de tono popular,
tienen los hechos históricos, culturales, y la realidad, y
desnudo, eterno», «el son espiritual más cubano y
la propia vida: si no encarnan en imagen, se disuelven,
universal de Guillén» (pp. 428-9). Y presenta, «completo
tan pronto se agote «su escasísimo tiempo de vigencia
y desprendido, el delicado mecanismo del son», como
causalista y factual» (p. 463). La imagen y la teleología
fin de un proceso en que ha ido «independizándose» de
lezamianas, y todo un sistema que salva a la cultura de
todo tipo de «empleo ancilar»: «son ingrávido», obra
«sus fríos encadenamientos aparentes, de su cerrazón de
personal y «del pueblo eterno, sin razas» (pp. 429-30).
hecho consumado» (p. 463), hacen frente a la maldición
Con respecto al propio Curso que da lugar a Lo
republicana de lo «fáctico» o «factual», y a la falsa
cubano en la poesía, Cintio Vitier explicita su apego a un
«continuidad» o el falso destino que significa el
«punto de vista estrictamente poético», que no sea
«causalismo».
contaminado por «la psicología» o «la sociología», que
considera los «dos principales enemigos» (p. 570): «su
intromisión en las perspectivas de mi trabajo, hubiera
Seis
producido un resultado híbrido, confuso y de escasísima
legalidad» (p. 571). Y añade:
Cuando Cintio Vitier opone, como vimos, «la diana
pura y vibrante en el amanecer del campamento», a «la
Postulado así el conocimiento rigurosamente poético de
charanga bullanguera» que despierta «los instintos
lo cubano a que aspiro, no quisiera, por otra parte, que se
inferiores», carga de sentido y eticidad al sonido de la
interpretara mi trabajo en función de prédica nacionalista.
Nada más alejado de mi intención ni de mis convicciones.
diana revolucionaria, para diferenciarla del ruido sensual,
Para mí la poesía no tendrá nunca otra justificación que
primitivo, intrascendente, sin destino, de la República.
ella misma, ni otras leyes que las que provengan de su
La diana es «pura», por supuesto, porque se vincula a
absoluta o relativa libertad. (p. 571)
un ideal y no a turbios intereses; porque es «limpia» en
el sentido ético del término, sin «mezclas» espurias en
Inmediatamente después de esta lapidaria declaración
su orientación.
«purista», afirma que la búsqueda, en Orígenes, de
A escala de la poesía, Cintio Vitier verifica la
«nuestras esencias insulares» es «necesidad profunda de
decadencia ya anotada con respecto al país: «Durante
conocer nuestra alma, cuando parece que sus mejores
un siglo [el XIX] la poesía cubana, espejo de lo mejor de
esencias se prostituyen y evaporan» (p. 572); del mismo
su pueblo, vivió idealmente disparada al futuro» (p. 341);
modo que Lo cubano en la poesía quiere contribuir «al
luego, en la República, aparece un «veneno», que
rescate de nuestra dignidad» (p. 13). Ante la sensación
«empieza a corroer el alma de nuestros poetas»: «la
republicana de «vacío», de «estupor ontológico»,
ausencia de finalidad, el descaecimiento de las fuerzas
«volvemos los ojos al testimonio poético, donde ese
teleológicas de la nación» (p. 340). La «diana pura» es la
mismo vacío puede adquirir sentido como síntoma del
música propia de aquella futuridad, así como la «charanga
ser o del destino» (p. 573). Todos estos propósitos
118

Lo cubano en la poesía: relectura en los 90.
«híbridos» y la propia teleología insular, bastarían para
Hay al mismo tiempo, en la raíz del libro, una
echar por tierra aquel «purismo».
indisimulable angustia a causa de la falta de sentido
Cuando evalúa el sistema poético de Lezama, Cintio
histórico y de finalidad, y del vivir-en-el-presente, y un
Vitier topa con el oxímoron que significa un «purismo»
punzante anhelo de «otra» historia para Cuba y para
teleológico, y trata de encontrar la solución en una
los cubanos.
«finalidad» poética omnicomprensiva, que vendría a ser
Lo cubano en la poesía tiene un lugar de importancia
el colmo de lo «híbrido»: «La poesía tiene, sí, una
en el empeño origenista de encontrar «continuidad» a
finalidad en sí misma, pero esa finalidad lo abarca todo.
través de la creación poética. Con los métodos
La sustancia devoradora [la sustancia poética] es,
«esencialistas», la «pureza» en su fecunda versión
necesariamente, teleológica» (p. 467).
híbrida, y los hallazgos de cubanidad «secreta», son
El Martí del Diario de Cabo Haitiano a Dos Ríos «es
también valorados muy altamente, en los poetas
la semilla más dura de nuestra realidad, el tesoro mayor
estudiados, los esfuerzos en pos de la «continuidad»,
que tenemos» (p. 282). En este Diario se da «el primer
del «sentido histórico» y la «futuridad».
contacto del espíritu, en el trance supremo del sacrificio,
Cintio Vitier no revisa nuestro patrimonio poético
con nuestra naturaleza y nuestros hombres» (p. 274).
como un arqueólogo, sino como un buscador de
Es en sus últimos días cuando «la vocación de entrega»
«futuridad»: «También en el pasado hay que poner
de Martí alcanza su mayor plenitud, y es que «su ser no
nuestra esperanza y buscar nuestro futuro». «Así el
es consistencia sino dación» (p. 229). ¿Cómo podrá entre
pasado se vivifica y cobramos conciencia de lo que
nosotros la poesía, la palabra, rehuir los «empleos
somos, de lo que podemos ser» (p. 17).
ancilares» ante ese modelo superior que Cintio Vitier
Martí se convierte, en este libro, en el ingrediente
vuelve a alzar para el presente y el futuro?
teleológico por excelencia, en el factor requerido por la
Lo cubano en la poesía es, de principio a fin, una
cubanidad para adensarse, crecer y orientarse hacia el
refutación del «purismo» y de la llamada «poesía pura»:
futuro. En el poema «El café», de Regino Boti, se
la intención misma de caracterizar lo cubano en la obra
encuentra «lo cubano», pero «sin Martí: desprovisto ya
de nuestros poetas, como contribución «al rescate de
de trascendencia, de finalidad, de esperanza. Lo cubano
nuestra dignidad», la búsqueda de respuestas a la
en su desolación lúcida, en su puro instante vacío, que
«desintegración» y a la «ausencia de finalidad», el
va a ser una de las vivencias más hondas de nuestra
propósito de utilizar la creación poética como método
sensibilidad en la República» (p. 335).
cognoscitivo por excelencia, parten de unas relaciones
Martí aportó, «a nuestra poesía y al ahondamiento
abiertamente «híbridas» con la poesía y de colocar las
de nuestro ser», «el sentido trascendente de la vida»
«justificaciones» extrapoéticas en los fundamentos del
(p. 276); él mismo fue una «resistencia configuradora,
acto creativo y de la lectura.
esencialmente fundada y fundacional» y, cuando muere,
Si desechamos las dos o tres protestas de fe «purista»,
«parece como si nos desganáramos de nuestras propias
marcadas por algunas de las polémicas de la época, habría
ilusiones» (p. 577). Martí es dueño de su destino: lo
que entender el anhelo de «pureza» en este libro como
diseña y realiza, desafiando al azar y al «imposible». Se
un rechazo a una poesía ruidosa, «bullanguera»,
convierte así en un modelo de «otra» cubanidad, de
acomodada a las superficies, a los tópicos, a los
«otra» historia y también de «otra» cultura. Ante el
facilismos, a la propaganda política o seudofolklórica,
pueblo sin destino, sin gravitación, sin futuro; ante el
y como una exaltación de la poesía que va a encontrarse
pueblo separado de su identidad, acogido al «vacío
con las esencias de la patria, que hace política «profunda»
decorado» de símbolos y colorines, viviendo en un
(mucho más nacional y fecundante que la mera «prédica
mundo inconexo y frustrante, se alza el destino, el
nacionalista») y contribuye a la «resistencia» de la nación
«centro», la «otra» historia de Martí.
y a la forja sutil, invisible, de un destino para la Isla.
La teleología insular de Lezama y de Orígenes es
presentada en este libro como el único empeño fundador
que tiene éxito en medio del marasmo republicano.
Siete
Luego del fracaso de Poveda y Boti, y de la Revista de
Avance, Orígenes hace suya la «semilla» martiana y
Cintio Vitier, en su prólogo a la edición de 1970,
propone «esa especie de fundación de la ciudad desde la
afirma, con respecto al último capítulo del libro, que
palabra» (p. 343), dando sentido a la cultura y al propio
«muchas de sus consideraciones estaban determinadas
transcurrir de la Isla.
por un enfrentamiento de la historia y la poesía, y por
En una realidad marcada por la «facticidad» y el
una toma de partido a favor de esta» (p. 9). Negar a
«causalismo», la poesía ofrece la «futuridad desconocida»
nuestro proceso histórico toda «continuidad profunda»
(p. 440) que aporta Lezama. Y Lo cubano en la poesía
(que solo encontraremos en la poesía y la tradición ética
nos propone, incluso, a partir de esta carga teleológica
cubanas) y ver en él una «situación recurrente, cíclica»,
y del «contacto con las fuerzas positivas que laten detrás
de «tiranía-sacrificio, sacrificio-tiranía» (p. 578), son
de nuestros vicios y flaquezas» (p. 582) la entrada de
posiciones brotadas de aquella «grave desconfianza»
Cuba y de los cubanos en una «continuidad» histórica
hacia la historia (p. 10) señalada por el propio autor.
y cultural diferente: «entonces empezaría nuestra
118
119

Abel E. Prieto
Lo cubano en la poesía tiene un lugar de importancia en el
empeño origenista de encontrar «continuidad» a través de la
creación poética. Con los métodos «esencialistas», la «pureza»
en su fecunda versión híbrida, y los hallazgos de cubanidad
«secreta», son también valorados muy altamente, entre los
poetas estudiados, los esfuerzos en pos de la «continuidad», del
«sentido histórico» y la «futuridad».
Historia, de la que solo conocemos ahora la increíble
niveles (ético, teleológico, histórico), esta superficialidad
profecía martiana» (p. 583).
encuentra complemento idóneo en los «instintos
Del mismo modo que se nos presenta la cubanidad
inferiores», el sensualismo burdo, el vivir-en-el-presente,
esencial y secreta, opuesta a la cubanidad externa,
la «frustración», la carencia de «finalidad», de «fe», de
podemos descubrir también la oposición entre una
«destino», de «futuridad». Carencia de finalidad es
historia «otra», de fundación y creación, profetizada por
también «desintegración» (palabra muy usada por
Martí, y una seudohistoria que solo articula los «hechos»
Lezama para describir la vida republicana): es falta de
a través del «causalismo» y no por «sentido» y «destino»,
«centro», de «imán» y de «conexión», «fragmentos»,
una seudohistoria donde se repiten los sacrificados y
«desarticulación».
frustrados, en un ciclo sin salida visible.
Podría hacerse un extenso inventario de conceptos
Esta seudohistoria «fáctica», esta «agitación política
en torno al eje neocolonial que forman la superficialidad
sin sentido histórico profundo» (p. 462), es la que nos
y la carencia de finalidad: «nada», «vacío», «hueco»,
corresponde por nuestra condición neocolonial: al
«absurdo», «intemperie», «tópicos», «descreimiento
perder, con la verdadera independencia, el «destino», el
civil», «corrupción», «hedonismo», «intrascendencia»,
país se ha quedado —a manera de historia— con una
«banalidad», «indiferencia», «causalismo», «configuraciones
sucesión de hechos, tan vacíos de sentido como los
sensibles y fácticas», «fríos encadenamientos aparentes»,
símbolos patrios, como la misma realidad desustanciada,
etcétera. Esta serie se enriquece con los aportes de la
como la cubanidad de exteriores.
poesía «nativista», «exótica», de falso «arcadismo»,
Con respecto al «siniestro curso central de la
«tipicista», «tropicalista», o de «negrismo exterior», o
Historia», el que protagonizan las metrópolis, estamos
bien de «prosaísmo factual», o «retórica», o «híbrida», o
colocados «venturosamente al margen» (p. 582), y esta
«propagandística», o atada a una cubanidad «temática»,
situación marginal nos va a abrir una nueva posibilidad
«explícita», «convencional», «descriptiva»; poesía de lo
cultural e histórica.
«inmediato» y «visible», «sin necesidad íntima», poesía
Las claves de esa «otra» Historia, tan ajena a la
sin verdadero «destino poético».
seudohistoria «fáctica» y «causalista» de la neocolonia
Los poetas que se conforman con frutos fáciles, o los
como al «siniestro curso central» que transitan las
de poco talento, o aquellos que por temperamento o
potencias, están en Martí, en la «teleología insular» de
debilidad no son capaces de traspasar el cerco de lo
Lezama, en la futuridad que hay en los mejores poetas
evidente, colaboran de manera inconsciente con la farsa
cubanos, y en nuestra capacidad para ver lo esencial y
de la neocolonia: la poesía retórica o convencional ofrece
creador de la cubanidad, incluso de aquellas zonas que
una legitimación «poética» a los «ideales-tópicos» de una
rechazamos. Solo podremos vencer el «imposible» y
independencia mediatizada; el prosaísmo epidérmico no
alcanzar la plenitud de la nación, si combinamos la
va más allá del testimonio de la «facticidad»; la poesía
energía teleológica de nuestros más poderosos creadores
de lo cubano exterior, suma su voz a las ficciones que
con una aproximación «esencialista» al ser nacional
pretenden encubrir la mutilación de nuestra identidad,
cubano, y con la apropiación desprejuiciada, libre de
y puede llegar, incluso, al extremo revelador del
autoexotismos y de visiones coloniales, de nuestra
«autoexotismo», donde el buscador ligero de los signos
identidad.
nacionales cae en una trampa sin regreso.
Frente a la neocolonia y a su cubanidad falseada,
frente a la poesía que de muy diversos modos se hace
Ocho
cómplice de la farsa, Cintio Vitier propone, como vimos,
una salida utópica, fundada en esa cubanidad «esencial»
A la realidad neocolonial corresponden, en un nivel,
de la que nos han desterrado, a la que podremos
el «vacío decorado» de los símbolos patrios, la cubanidad
acercarnos gracias a la poesía y a los métodos
exterior, la maldición de lo «fáctico», de lo puramente
«esencialistas», y a la teleología insular lezamiana.
«físico», el «sol implacable», la «charanga bullanguera»,
El eje de la utopía origenista, definido en sus polos
la gritería del cubano, y todo cuanto aluda a la superficie,
por el esencialismo y la teleología, en oposición al eje
a las apariencias sin sustancia, sin «jugos». En otros
neocolonial superficialidad-carencia de finalidad, también
120

Lo cubano en la poesía: relectura en los 90.
ofrece un nutrido glosario presidido por la cubanidad
tiene, que viene a ser, como en el famoso parlamento de
«esencial», «secreta», «oculta», «concentrada»,
Macbeth «el cuento narrado por un idiota [...] significando
«entrañable», «misteriosa», «genuina», «silenciosa»,
nada»; y Martí, en cuanto vocero fiel de ese pueblo,
acrecienta su culpa; y la Revolución, en cuanto se empeña
«otra»: la «fundación», lo «fundacional», el «ideal
en cumplir el mandato del pueblo de Martí, es desde luego
histórico definido», la «pureza», la «imantación», lo
la máxima culpable.2
«profundo», la «hondura», lo «desconocido», el «decisivo
reverso oscuro», las «posibilidades escondidas», «magia»,
Se trata de un ejemplo extremo, y atroz, y por tanto
«aire», «tuétano», «fibras ocultas», «adentros de la
muy didáctico, de la pretensión neoanexionista de vaciar
sensibilidad», lo «que late detrás» o «más allá», la
el proceso histórico cubano de «sentido», de
«sugestión inapresable», lo «íntimo», lo «imponderable»,
«significación» y «dirección»; de devolvernos a la
lo «indefinible», «el alba y la tarde» (en oposición al «sol
«intemperie», a la «facticidad». Por supuesto, si los afanes,
implacable»), lo «desnudo» (similar a lo «puro» y en
privaciones y luchas de tantas generaciones de cubanos
oposición a lo retórico, artificioso e «híbrido»); el
se articularon sobre un delirio, entonces —diría Iván
«centro», la «imagen» creadora y perdurable (frente a la
Karamázov— todo está permitido, no hay resistencia ética
«facticidad» y la efímera «vigencia causalista»),
ni patriótica: no habría obstáculos para que la manzana
«futuridad», «eticidad», «introspección», «continuidad»,
de John Quincy Adams completara su destino, su
«sentido», «destino», etcétera.
teleología anexionista.
Entre estos dos bloques conceptuales que se
Si de nuestra historia solo nos dejan el cuento
enfrentan, hay sin embargo una intercomunicación
fragmentario y difuso, desprovisto de significación, del
dialéctica: no puede entenderse, por ejemplo, la
idiota de Macbeth, el cubano de hoy queda otra vez a la
cubanidad «externa» como una cubanidad «mala» frente
intemperie, ante una vida cotidiana plagada de carencias
a una cubanidad «esencial» y «buena». Rasgos atribuidos
y dificultades enormes, ya sin explicación ni salida. Es
a nuestro ser nacional, que tradicionalmente han sido
en esa dimensión, entre la superficialidad y la carencia de
vistos como negativos, son mostrados en sus revelaciones
finalidad, donde el pueblo de Cuba estaría indefenso ante
más evidentes por los creadores de la cubanidad
la presencia renovada del «imposible». De ahí que el
«externa»; pero solo podrían alcanzar un sentido
empuje teleológico de Lo cubano en la poesía, su valiente
positivo, emancipador, verdaderamente nacional, cuando
desafío al fatalismo y a la desintegración, su acercamiento
salen a flote en el conjunto de la cubanidad «esencial»
apasionado a lo nuestro, su búsqueda del hilo de
que nos iluminan los métodos «esencialistas».
continuidad histórica y cultural y de modelos creadores,
su resistencia frente al influjo yanqui, «desustanciador»
y funesto, tengan tanta vigencia.
Nueve
Releído en los 90, Lo cubano en la poesía rompe sus
amarras circunstanciales, y crece como un manifiesto
Esencialismo y teleología, de un lado, y superficialidad
que rebasa a Orígenes, y a grupos y tendencias, y se
y carencia de finalidad, de otro, tienen, a la luz de las
expande, y es ya un manifiesto y un programa de la
discusiones ideológicas de hoy, una notable actualidad.
cubanía, frente a sus viejos y nuevos enemigos.
Una relectura, desde Cuba y en los 90, de este
poderoso manifiesto origenista, equivale a tropezar a
La Habana, mayo-junio de 1994.
cada paso, de modo inevitable, con las preguntas, dudas
y desafíos de la contemporaneidad.
Hay un aspecto de importancia en el llamado
Notas
posmodernismo que se orienta a promover, en aras de
lo «fáctico» y de privilegiar las «superficies», una tajante
1. Cintio Vitier, Lo cubano en la poesía, La Habana: Instituto del Libro,
Colección Letras Cubanas, 1970: 44. Todas las citas están tomadas de
desconfianza hacia las «manipulaciones» y las
esta edición. En lo adelante la paginación se acota en el texto, entre
«teleologías». Esta dirección del pensamiento
paréntesis.
posmoderno, que forma parte de una derechista
manipulación teleológica a gran escala, ha ido permeando
2. Cintio Vitier: Algunas reflexiones en torno a José Martí, intervención
el debate acerca de la Revolución cubana. Se percibe
en la Conferencia «José Martí, hombre universal» [folleto], La Habana:
Palacio de las Convenciones, 1992. En la cita alude al texto de Enrico
una tendencia a reevaluar nuestro proceso histórico, y
Mario Santí, «José Martí y la revolución cubana», Vuelta, México,
su mismo «sentido», que alcanza muy a menudo, por
diciembre de 1986.
razones obvias, a la figura de Martí.
El discurso del neoanexionismo, instalado ya en la
posmodernidad, acusa a Martí de haber elaborado una
delirante lectura teleológica de la historia de Cuba, en
un ataque que abarca a la Revolución y al propio cubano.
Así,
todo un pueblo, a través de sus gestas y sufrimientos, ha
sido culpable de buscarle sentido a una historia que no lo
©
, 1996.
120
121

Víctor Fowler
no. 6: 122-132, abril-junio, 1996.
Miradas a la identidad
en la literatura
de la diáspora
Víctor Fowler
Escritor e investigador. Escuela Internacional de Cine.
Quizás lo primero que corresponde señalar es lo comunicación cotidiana— y es, por así decirlo, una
ajeno que me resulta el uso del término «exilio»
entidad «viva».
para referirme a la literatura cubana hecha fuera del
Centraré el análisis en la obra de varios autores
país. Si ello fue cierto en la época de las primeras
pertenecientes a eso que se conoce como los «cuban-
migraciones, la realidad que impone la cantidad y la
americans», por ser en los Estados Unidos donde el
indudable calidad de la literatura hecha por cubanos
choque de las lenguas ha conducido la necesidad de
que abandonaron el país cuando eran niños —muchos
elección a su punto crítico; en esa región de «crisis» de
la identidad, atravesaremos visiones que van desde su
de ellos con apenas memoria del lugar, como
negación hasta su recuperación, o la dialéctica de
veremos— y los problemas que implica definir
aceptación/rechazo de las culturas en conflicto.
culturalmente a los nacidos en otro sitio (o de
Hay común acuerdo en que el primer autor cubano
«segunda generación»), desborda las condicionantes
contemporáneo —analizable dentro de la categoría
esencialmente políticas que envuelven la palabra. Es
«exilio»— en plantearse la problemática del regreso a
por ello que he preferido el uso del término
Cuba, fue Lourdes Casal. Nacida en 1938, Casal
«diáspora», más propio del actual análisis sociológico,
abandonó Cuba cuando era una mujer de poco más de
para acercarme a los problemas que iremos
veinte años, y ya sus valores culturales habían sido
abordando. Me interesa ver de qué modo ha sido, y
formados en la tierra misma de sus antepasados; pese a
está siendo, manejada la cuestión de la identidad
esto, es también ella la primera escritora cubana de la
cuando esta se encuentra en un conflicto de elección
emigración en plantearse el conflicto de una identidad
entre los valores de dos culturas, la mayoría de las
escindida entre la cultura de origen y aquella recibida
veces opuestas: aquella de los padres, cuya
en el nuevo país (en este caso los Estados Unidos). Los
transmisión se produce casi siempre a través de la
términos en los que semejante conflicto era abordado
memoria familiar donde el pasado ha sido sacralizado;
los vemos con claridad en un texto clásico del tema: su
y la del lugar de residencia, cuya influencia llega desde
poema «Para Ana Velford», de su libro Palabras juntan
todas partes —escuela, medios de difusión masiva,
R e v o l u c i ó n .
122

Miradas a la identidad en la literatura de la diáspora.
Permanezco tan extranjera detrás del cristal protector
«escena primordial», un instante en el cual aún no ha
como en aquel invierno
habido intervención externa en el orden de vida del
—fin de semana inesperado—
cuando enfrenté por primera vez la nieve de Vermont
sujeto, algo que huyó y debe ser recuperado. El texto
y sin embargo, New York es mi casa.
que abre la selección nos trae una profunda amargura
Soy ferozmente leal a esta adquirida patria chica.
debajo de su ironía:
Por Nueva York soy extranjera ya en cualquier parte1
Mami y Papi me enseñaron que hay que estar agradecidos
Lo que la autora llama aquí «adquirida patria chica»
nosotros que somos refugiados de la revolución
es un espacio contradictorio, puesto que más adelante
que abolió los sandwiches llamados media noche.6
nos recuerda que su pertenencia a ese territorio/
identidad se debe a un acontecimiento innatural: «Pero
La amargura de la que hablamos es aquella que brota
Nueva York no fue la ciudad de mi infancia».2 Sin
de la profunda hendidura que se aprecia aquí entre el
embargo, la importancia que la ciudad —y el modo de
mundo de los padres y aquel de los hijos, ya que —en
vida que ella encarna— cobra para la autora es tal que
última instancia— la ironía de la autora traspasa el
alcanza a imponerse sobre la posibilidad de una
establishment al hundir su punta en lo que los padres le
recuperación total del territorio/identidad que es el país
dijeron que debiera pensar. El poema se titula «Gracias
de origen: «ya para siempre permaneceré extranjera,/
a este país» y juega a someter a una cruel desmitificación
aun cuando regrese a la ciudad de mi infancia».3 Y luego
la realidad (o des-realidad) que los padres le han entregado
de ello termina con cuatro versos en los que son varias
a la hija como sustituta del sitio de la «escena
las intersecciones: «demasiado habanera para ser
primordial». En este orden, en que el sujeto del texto
neoyorkina,/ demasiado neoyorkina para ser,/ —aún
recibe toda noción de verdad, esta es falseada por la
volver a ser—/ cualquier otra cosa».4
dominación que ejerce (sobre la verdad) el Dios/dinero:
La primera de las intersecciones sería la de la
imposibilidad de elección entre dos culturas a las que el
Mami y Papi, cómo les digo
que le doy gracias a este país, gracias,
sujeto se siente igualmente ligado; la segunda, la que se
gracias, una vez y un millón de veces por enseñarme
establece entre la lengua en la cual está escrito el poema
la lección más importante de nuestro siglo:
y la del texto-madre; la tercera, la que de modo sutil
La historia pertenece a los que pueden pagar
pone en juego la idea de temporalidad.
los cinco dólares que cuestan los pulóveres de Che
La postura de Casal nos servirá como pórtico para
/Guevara.7
adentrarnos en algunas lecturas de los conflictos
alrededor de la identidad que se observan en autores
La estrofa final nos avisa en qué grado la opción de
cubano-americanos de los últimos años; en cierto
la autora es un camino doloroso: «Pero yo no aprendo,
sentido, lo que ellos enfocan constituye una superación
no oigo», dice, y promete regresar «con estas palabras/
de lo abordado por Casal, pues más que de un equilibrio
tanto tiempo sin atreverme a decirlas/ tanto tiempo».
entre modelos culturales pariguales, se trata de tensiones
Es lícito imaginar la densidad del silencio aludido y
específicamente centradas en el ansia de recuperar una
suponer allí el crecimiento de la pregunta sobre la
zona de identidad que consideran perdida por la escasa
definición del ser en su identidad: el regreso a Cuba
memoria que conservan del territorio original. Este
equivale a una liberación del ser y el viaje hacia el
trabajo será para mí un modo de agradecer la delicadeza
conocimiento de lo otro será una averiguación de la
de tanta gente cubana que conocí o reencontré en mis
condición del sí mismo.
dos viajes a los Estados Unidos en 1994, y quizás también
Importa precisar ahora desde qué punto se realizan
pueda, de algún modo, abrir un nuevo espacio para
las preguntas. En el poema «Oración a Lourdes»
dialogar.
(dedicado a Lourdes Casal) tenemos una posible
El libro de Ruth Behar Poemas que vuelven a Cuba5
respuesta: «perdí mucho tiempo/ preocupándome si era
continúa y ahonda la línea iniciada a fines de los años 70
lo suficientemente cubana/ para aceptar la pérdida de ese
con los poemas de Lourdes Casal: la lucha de los cubano-
país como mi pérdida».8 El énfasis mío quiere destacar
americanos por definir su grado de pertenencia a la
el núcleo de la cuestión, la torturante pregunta de hasta
nación cubana, por completar una identidad que es
qué punto el sujeto —al regresar— reclama algo que le
percibida como fragmentaria y fragmentada.
pertenece cuando su presencia se apropia del sitio de la
Comenzaré refiriéndome a la cubierta del volumen,
«escena primordial». La ausencia de allí es interpretada
por la importancia que cobra en relación con el
por la autora como un extravío, un «salir de sí» que
contenido (para ser justos, ella misma es parte de este)
dicotomiza de modo no superable la historia personal;
y, más aún, por haber sido diseñada en acuerdo con la
otra cosa no implican los versos inmediatamente
propia autora; se trata de una niña (de 3 años) que sonríe
anteriores: «ese país/ donde dejamos nuestra niñez/ para
cerca de una ventana, con un lacónico pie de foto: «Yo
que creciera sin nosotros, muda y ciega.»9 Al dolor de
en el apartamento del Vedado (1958)». La sonrisa y la
lo dejado atrás, corresponde (en igual magnitud) aquel
fecha, además de lo vivencial que hay en todo esto,
que se gana al querer recuperarlo, de ello nos avisa el
establecen un agudo contrapunto si recordamos que se
poema titulado «Nena» (también sobre una cubano-
trata del año previo al cisma: estamos entonces ante una
americana):
122
123

Víctor Fowler
con la sustancia de la construcción de la nación, es decir,
...me sentí triste
con la cultura nacional.
porque tú habías regresado tantas veces
Creo posible enlazar tal mirada con algo dicho en
a la isla bordada de alambres
un artículo por la poeta y ensayista cubana Lourdes Gil,
y tenías curitas en todos los dedos...10
en el que propone una estrategia de imbricación entre
ambas literaturas a partir de pertenencias a lo que hoy
Podemos leer el dolor de la autora en el espejo de la
conocemos como «nuevas subjetividades» cuando afirma
experiencia ajena que nos dibuja, pues si la isla del texto
que
esta rodeada de alambres,11 y aquella llamada Nena, que
ha regresado en varias ocasiones, tiene las manos heridas,
no podemos ya, irreversiblemente, hablar de un discurso
también quien escribe el texto va por igual camino
hegemónico cubano; que no hay ya verdad absoluta que
—está ya— como nos es revelado en los versos finales:
radique en una sola vertiente. Nuestra existencia
pluralizada sobrepasa el debate entre la autoridad y la
¿Por qué no te conocí antes?
subordinación, reemplazando los conceptos de ese mal
Nena, me hubieras dado valor.
cortado traje que no se ajusta a ninguna fisonomía.16
Todavía lo necesito, Nena, todavía.12
En el reverso de lo que se puede llamar «zona trágica»
Podemos asumir que las manos del texto cumplen
de la visión de Behar, es posible colocar la distancia
una función claramente simbólica: en lugar de retener
irónica con la que Gustavo Pérez-Firmat —quien, además
aquello que desean re-poseer, sufren sucesivas heridas. En
de ensayista, tiene una valiosa obra como poeta— asume
cierto sentido, el viaje que constituye el poemario, tiene
la cuestión de la identidad. Acaso sea una buena entrada
su punto crítico en el texto titulado «Al partir», cuyos
en materia referirme, antes que a la poesía, a la ensayística
versos finales introducen una agria duda:
de Pérez-Firmat, cimentada en dos sólidos libros: The
Cuban Condition y Live on the Hyphen.17 La obra de este
Voy, vengo, voy
autor está hecha desde una posición diferente a la de
y todavía no sé nada.
Behar, aun cuando compartan varias de las mismas
No sé si vi, oí, entendí.
¿Fui a la isla? ¿A qué isla?
condicionantes: también él salió de Cuba durante la
Despierto y ya no estoy.13
primera infancia, también él padece por eso «otro» que
la figura de la Isla simboliza. Mas en lugar de los dolores
Lo trágico, y a la vez gracioso, de esta «crisis» a que
de la búsqueda, el acento del autor es colocado en la
nos aboca el texto es que nace de un equívoco: alguien
habitación de una identidad doble. El texto de Pérez-
(en este caso, yo mismo) ha citado un refrán popular
Firmat por el que comenzaré es el volumen de ensayos
como si fuera una línea de canción, y esta suerte de
Live on the Hyphen: the Cuban-american Way, ya que es
estrategia comunicativa —que por demás se encuentra
aquí donde mayor densidad teórica alcanza en él el tema
en la raíz del modo cubano de gozar el lenguaje, piénsese
de la cultura guionizada. Para ello se vale de una categoría
si no en la pirotecnia verbal de Cabrera Infante o
de análisis acuñada por el sociólogo cubano Rubén
Sarduy— ha revelado un punto ciego en el intercambio,
Rumbaut: «the “1.5” or «one-and-a-half» generation».18
ya que el sujeto del texto no conoce (y se tortura por
Según Rumbaut, esta categoría engloba a: «Children who
ello, sin saber que no la podría conocer) esa canción que
were born abroad but are being educated and come on
no existe: «esa canción tampoco la conozco./ Tanto que
age in the United States...» [«Niños que nacieron afuera,
no conozco de la isla».14
pero han sido educados y alcanzaron la edad adulta en
Ahora bien, el equívoco tendría un valor esencial si
los Estados Unidos...»]. Lo que para Rumbaut significa
lo considerásemos como síntoma del espacio vacío que
una tragedia —ya que «the members of the “1.5”
nunca podrá llenar el sujeto deseante del texto, pues «lo
generation form a distinctive cohort in that in many
cubano» que busca es —justamente— el juego con la
ways they are marginal to both the old and the new
equivocación: lo que conformaba el centro del mensaje
worlds, and are fully part of neither of them» [«los
no era su significado, sino el obligarlo a desviarse hacia
miembros de la generación ‘1.5’ forman una cohorte
algo que se imagina más delicado, una canción. Al
distintiva en el sentido de que, en muchos aspectos, son
penetrar en ese reino de cuestionamientos, Ruth Behar
marginales, tanto en el mundo viejo como en el nuevo
tensa la pregunta sobre la identidad (y con ella, el sentido
y no son parte integral de ninguno de ellos»]— es re-
del regreso) hasta un grado próximo al silencio. Sin
interpretado por Pérez-Firmat como la posesión de una
embargo, en uno de los poemas de la autora, no incluido
distinción que hace de estos sujetos figuras capaces de
en el libro, encontramos un modo de penetrar en la
«circulate within and through both the old and the new
nación que no depende de ninguno de los elementos
hasta ahora vistos; me refiero al titulado «La cosa»,15 en
cultures» [«circular dentro y a través de ambas culturas,
el que es hecha una divertida lectura del imaginario de
la vieja y la nueva».] La lógica de este cambio de
la sexualidad que las madres cubanas transmiten a sus
perspectiva conlleva a postular una nueva categoría para
hijas. La comunidad de esa experiencia con la de casi
interpretar a los sujetos que habitarían ese borde, tal
toda mujer cubana, donde quiera que esté, implica la
categoría es la de «bi-culturalismo». Es interesante revisar
realidad de una vía otra para establecer las conexiones
lo que ello quiere decir en la poética de Pérez-Firmat:
124

Miradas a la identidad en la literatura de la diáspora.
La cuestión de la identidad está en un conflicto de elección entre
los valores de dos culturas, la mayoría de las veces opuestas:
aquella de los padres, cuya transmisión se produce casi siempre
a través de la memoria familiar, donde el pasado ha sido
sacralizado; y la del lugar de residencia, cuya influencia llega
desde todas partes —escuela, medios de difusión masiva,
comunicación cotidiana— y es, por así decirlo, una entidad
«viva».
Quiero decir que, a pesar de que una de las intenciones
In my usage, biculturation designates not only contact of
básicas del autor es evitar las presiones que derivarían
cultures; in addition it describes a situation where the two
de la fuerza de los discursos ideológicos —fuerza que en
cultures achieve a balance that makes it difficult to
determine which is the dominant and which is the
este caso equivale a un «afuera» del análisis—, de un modo
subordinate culture. Unlike acculturation or
sutil la argumentación es aprisionada por el
transculturation, biculturation implies an equilibrium,
condicionamiento «histórico» de lo que ocurre en una
however tense or precarious, between the two contributing
nación dividida por motivos políticos. Si tal cosa es
cultures. Cuban-American culture is a balancing act.19
cierta, —a fin de cuentas, la única que podemos utilizar
[Para mí, el biculturalismo no designa solo el contacto de
como explicación de por qué no es reversible el menú
culturas; describe además una situación donde dos culturas
de La Esquina de Tejas—, perdemos la oportunidad de
logran un equilibrio tal que hace difícil determinar cuál es
pensar el asunto de las culturas «hyphenadas»
la dominante y cuál la subordinada. A diferencia de la
aculturación y de la transculturación, el biculturalismo
—guionizadas— en un más allá de la política que nos lo
implica un equilibrio, si bien tenso y precario, entre las
imbrique en un marco universal, como síntoma que se
dos culturas confluyentes. La cultura cubano-americana es
repite en la época contemporánea, y que supera la
en acto de equilibrio.]
estrecha —pese a todo lo dolorosa que se quiera—
dimensión del «problema cubano». Uno de los mejores
Quiero llamar la atención sobre un detalle
momentos del texto para entender la «hyphenización»
determinante a la hora de juzgar el agonismo que subyace
es aquel en el que el autor analiza una fotografía
en esta lectura de la identidad. Ello es la obligatoriedad
manipulada del pintor cubano Arturo Cuenca: encima
de elegir entre las culturas que el sujeto posee, ejecuta,
del restaurant La Esquina de Tejas, de Miami, se tiende
juega. Pese a fundamentar la tesis en la idea de «equilibrio
un letrero en transparencia: «This is not Havana». El
entre culturas», el texto crea una hendidura en su
mensaje funciona en un doble sentido, ya que si bien es
esfericidad, a partir del llamado que en él se hace a
cierto que el modelo no es la «escena primordial»,
razonar los hechos en términos de dominación
tampoco es posible (parodiando a Borges) aumentar el
(hegemonía) y subordinación. Creo ver tovavía, en el
mapa hasta hacerlo coincidir con el país que refiere: es
uso de esta pareja de opuestos, la huella de una angustia
entonces una tercera realidad, ni cubana ni
por el origen, que quizás podamos precisar aún más en
norteamericana: un guión. Ahora bien, me gustaría
la siguiente reflexión del autor sobre el mimetismo de
referirme a ello en términos de agon (combate), para
la cultura miamense respecto a cierta representación de
apreciar el sustrato trágico que en su interior lleva la
cierta Cuba:
ironía de Pérez-Firmat. Propongo que leamos su
The Miami version of a restaurant called El Carmelo does
brevísimo poema «Vocaciones»:
not have a whole lot in common with its Havana
homonym; it’s not the same place, and it’s not even the
Hoy guardé el Webster
same food, for the Miami menu by now includes such
y desempolvé el Sopena.
offerings as the Nicaraguan dessert tres leches.20
(De madre)
(De muerte).
[La versión miamense de un restaurante llamado El
Carmelo no tiene mucho que ver con su homónimo
O fundo o me fundo.
habanero; no es el mismo lugar, ni siquiera la misma
¡Me fundo!21
comida, pues el menú de Miami incluye ofertas como el
postre nicaragüense tres leches.]
Los términos de la oposición (fundar/fundir) denotan
Se me ocurre complicar lo anterior, pensar en algo
lo que he llamado antes una «angustia por el origen», ya
menos obvio: imaginar en La Habana de hoy un
que la posible posición festinada del sujeto entre los polos
restaurante en el que son ofertadas hambergues que imitan
lo es cuando —al modo de un observador exterior— el
a las McDonald o donde se brinda tres leches como postre.
movimiento es reflexionado desde un «afuera». Si en la
124
125

Víctor Fowler
última línea nos es ofrecida una mirada risueña, en la
de un dolor ante la pérdida, que no brota de la nostalgia
penúltima accedemos a la dimensión esencialmente
que habría concedido la experiencia, sino de lo que se
trágica con que son valorados los tránsitos del sujeto bi-
halla en la memoria de ese otro que es la familia; un
cultural: fundación o fundición.
dolor que nace de la memoria del lugar que nos
Quisiera hablar ahora de la fundación, es decir, del
transmiten las palabras. En el ejemplo anterior, la
motivo de la escritura de lo cubano, según Pérez-Firmat
«función» del poeta, como guardián de una determinada
nos avisa: otorgar espesor a lo que habita en una memoria
tradición es casi imposible de cumplir: la Historia
que es más familiar que propia. Nos servirán de punto
(aquella misma fecha crítica que veíamos en la portada
de referencia dos versos de uno de sus poemas: «En tu
del libro de Ruth Behar) y todo cuanto ello implica, ha
acento hay espesor y alarma,/ en el mío reminiscencia.»
producido una hendidura inmensa entre las palabras y
(«Matriz y margen»). Sin abundar en las complejidades
el sitio de la «escena primordial».
del texto, diré que hay aquí la oposición de un sujeto (el
La reciente aparición del volumen de Pérez-Firmat
también poeta cubano Roberto Valero, quien abandono
Next Year in Cuba (a Cubano’s Coming-of-Age in America),
el país ya adulto), cuyo lenguaje es poseedor de «matriz»,
da una sorpresiva vuelta de tuerca a la discusión acerca
y otro (el autor mismo), cuyo lenguaje es definido como
de la identidad en su obra y nos coloca ante nuevos
«margen». La oposición es resuelta en conciliación
desasosiegos; una declaración como: «For most
cuando, en la parte final del texto, la voz marginal afirma:
immigrants and exiles, there also comes a moment when
we must begin to define ourselves not by our place of
Yo también llevo el cocodrilo a cuestas.
birth, but by our destination...»24 [«Para la mayoría de
Y digo que sus aletazos verdes me baten
los inmigrantes y exiliados, llega un momento en que es
incesantemente.
necesario que nos definamos no por nuestro lugar de
Y digo que me otorgan la palabra
y el sentido.
nacimiento, sino por el de nuestro destino...»] no es
Y digo que sin ellos no sería lo que soy
menos que una herejía para una comunidad que ha hecho
y lo que no soy:
del mantenimiento de la identidad una ba(rrera)ndera
una brisa de ansiedad y recuerdo
político-ideológica, el núcleo a cuyo alrededor se
soplando hacia otra orilla.22
articulan los más disímiles discursos acerca de la
La relación entre identidad y escritura se nos abalanza
obligatoriedad del regreso, ya sea este militar,
en la proposición que afirma que el objeto de la memoria
pragmático-económico o simplemente sentimental. Tal
(cocodrilo = Isla) es quien otorga la palabra y el sentido;
declaración no es sino la conclusión de algo que nos
cabalgando a mitad de dos culturas, el que habla
venía adelantado en Live on the Hyphen acerca del
encuentra su raíz en el ser cubano.
delicado equilibrio que da lugar y espacio al desarrollo
Idéntica sustancia anima el bello poema de Carolina
de una identidad cubano-americana: en determinado
Hospital titulado «Dear Tia» (escrito en inglés), cuyos
punto, o luego de él, el equilibrio queda roto y la balanza
versos finales reproduzco:
se inclina a uno de los dos extremos, preferiblemente al
de la cultura que «recibe».
The pain comes not from nostalgia.
Incluso para nosotros, que vivimos en Cuba, hay
I do not miss your voice urging me in play,
algo molesto en ideas como la que ahora cito: «Every
your smiles,
time I’m in Miami and run into someone I knew in high
or your pride when others call you my mother.
school or college, I’m struck by how ‘Cuban’ they look,
I cannot close my eyes and feel your soft skin;
dress and sound. Take them out of Miami and they will
listen to your laughter;
smell the sweetness of your bath.
wither as fast as hibiscus in desert.»25 [«Cada vez que
I write because I cannot remember at all.23
estoy en Miami y me tropiezo con alguien que conocí
en la secundaria o en la Universidad, me impresiona ver
[El dolor no viene de la nostalgia./ No extraño tu voz
lo “cubano” que parece, se viste y habla. Sáquelo de
jugando conmigo,/ tus sonrisas,/ o tu orgullo cuando otros
Miami y verá que se seca tan pronto como una flor en el
te llamaban mi madre./ No puedo cerrar los ojos y sentir
desierto.»]
la suavidad de tu piel;/ escuchar tu risa;/ oler el aroma de
Porque hasta nosotros nos hemos acostumbrado a
tu baño./ Escribo porque no recuerdo en absoluto.]
percibir una imagen del Otro —en este caso, los que
viven «allá»— en la que preferimos privilegiar aquellos
Si la dualidad lingüística del título nos acerca al
rasgos identificatorios que nos permitan reconocer en
modelo de identidad de un Pérez-Firmat, lo rotundo
ellos «lo cubano»: nos complace imaginar que «lo
del último verso («Escribo porque no recuerdo en
cubano» es indestructible y que se prolonga de
absoluto») nos enfrenta a un nuevo modo de la identidad:
generación en generación en el tiempo. Pero lo que Pérez-
aquel en cuya memoria no hay el mínimo retazo del
Firmat nos dice es algo bien distinto, más allá del
país de los padres, la «escena primordial» solo puede ser
diferendo político-ideológico. No de otro modo es posible
re-construida partiendo del poder fabular que concede
interpretar la unificación que el texto propone entre el
la escritura. Préstese atención, sin embargo, al modo en
exiliado político y el inmigrante, figuras cuya
que ambos sentires se unifican en la relevancia que el
intersección básica es el tiempo y el lugar donde residen.
lenguaje adquiere para los sujetos. Piénsese en el hecho
La particular historia de la colonia cubana en Miami ha
126

Miradas a la identidad en la literatura de la diáspora.
propiciado el mantenimiento en el tiempo de un
la novela Crazy Love del también poeta, dramaturgo y
fortísimo núcleo de identidad nacional, pero lo cierto
ensayista Elías Miguel Muñoz. La historia, centrada en
es que son decenas de miles los cubanos que viven
los avatares del personaje Julián Toledo, principia por
dispersos en estados (o ciudades) mayoritariamente
los días de infancia y concluye en el momento en que ha
«anglos» y muchísimos de ellos son tan «distintos» que
logrado triunfar como músico. Ambos extremos
no nos es sencillo reconocer las marcas de identidad que
corresponden a dos universos de vida ferozmente
los harían «nuestros». Es una paradoja cultural, pero el
opuestos e inconciliables: Cuba y los Estados Unidos. De
estereotipado «cubanazo», con independencia de cuál sea
proseguir el modelo que he seguido hasta aquí, habría
su signo ideológico, nos es más cercano que el Otro que
que decir que en modo alguno la infancia cubana es,
no baila ni bebe, que no habla en voz alta ni expone sus
para el personaje, el espacio de algo que deba recuperar;
secretos, que no tiene hazañas sexuales que contar y no
podría —incluso— afirmar que se trata de lo contrario:
conoce las canciones de «ayer» o la vida en los viejos
Cuba es lo que debe ser olvidado, allí se desarrollaron
barrios de La Habana.
las dos peores experiencias (ambas sexuales) del
Tomo dos declaraciones más de Pérez-Firmat para
protagonista. En la primera de ellas es sometido a una
comentarlas. En la primera, que es una larga cita,
violación colectiva, poco menos que ritual, por parte de
propongo que prestemos atención a la diferencia entre
un grupo de amigos de juego; lo ritual lo encontramos
lo dado al sujeto y lo que es elegido por él:
en la relevancia que alcanza, en la memoria del
protagonista, la diferencia clasista entre los implicados:
if patria sends you back to the past, país plants you in the
«I had friends on the poor side of town. They always
present. For the exile, and particularly for the long- term
or chronic exile, patria and pais don’t coincide. Cuba is
gathered around me when I arrived, and looked at my
my patria, the United States is my pais. Cuba is where I
clothes, and caressed my hair»28 [«Tenía amigos en el
come from, the United States is where I have become who
barrio pobre del pueblo. Siempre me rodeaban cuando
I am. When I pledge allegiance, I have to do it two flags at
yo llegaba, y miraban mi ropa, y me tocaban el pelo»].
once. I love Cuba with the involuntary, unshakable love
that one feels for a parent. I love the United States with
No recibimos (acaso no exista) explicación alguna
the no-less intense but elective affection one feels toward
de los motivos de la violación, pero no es descabellado
a spouse.26
—según la manera en que el protagonista recuerda—
suponer aquí algo ligado a la pertenencia clasista (y de
[si patria lo remite a uno al pasado, país lo planta en el
presente. Para el exiliado, y particularmente para el exiliado
ahí entonces que hablemos de un ritual, en este caso
a largo plazo o crónico, el país y la patria no coinciden.
vengativo). El otro aspecto que transforma el suceso en
Cuba es mi patria, los Estados Unidos son mi país. Cuba
acontecimiento definidor para el futuro del personaje
es de donde vengo, los Estados Unidos es donde he llegado
es la música: en tanto la violación transcurre, en la
a ser lo que soy. Cuando declaro mi lealtad, tengo que
hacerlo con dos banderas a la vez. Quiero a Cuba con el
victrola corre la voz del baladista Paul Anka cantando
amor involuntario, inconmovible, con que se quiere a los
«Crazy Love». Es de todo punto significativo que sea
padres. Quiero a los Estados Unidos con el no menos
justo con una versión de este número que Julián alcanza
intenso afecto electivo que se siente hacia la pareja.]
el triunfo. Ello nos coloca ante una situación conflictiva
en cuanto a la identidad, ya que el triunfo de Julián
La cuestión clave aquí es que podemos identificar la
equivale a su huida definitiva de (parafraseando un título
patria con la escena primordial de orden de la que
de Pérez-Firmat) su condición cubana. En un diálogo
hablamos, en tanto que el país nos deja remembranzas
entre los integrantes de la banda (la novela entremezcla
de la ruptura con el mundo de los padres, con la «muerte
cartas, recuerdos, conversaciones teatralizadas,
del padre» de que habla el psicoanálisis, porque no es
entrevistas —reales o imaginarias— y letras de canciones)
casual que el elemento contrapuesto al padre sea la pareja:
que se produce cerca del final del libro, uno de ellos,
supero su Ley (espermática, genesíaca), no cumplo su
Lucho (quien además de los sueños del inicio, ha
mandato, sino que establezco el mío propio (generador
compartido con Julián como su amante) reprocha a este
yo también y espermático) al imponer mi propia Ley.
haber permitido que la nueva cantante, una joven
La segunda, y última declaración, la traigo para fijar
norteamericana llamada Erica (quien ahora es la amante
la angustia que subyace en la obra poético-ensayística
de Julián) haya cambiado la sonoridad de la banda:
de Pérez-Firmat y que nos ayudará a profundizar en el
contenido de aquello que se juega en la identidad cubano-
ROLI:
Erica helped us a lot, yes, but she’s also made
americana: «Rather than merging Cuba and America, I
changes...
oscillate ceasellessly, sometimes wildly, between the
LUCHO: Drastic changes.
two. My life is less a synthesis than a seesaw»27 [«Más
JOE:
So we have a new sound. What’s wrong with
que fundir Cuba y los Estados Unidos, oscilo sin cesar,
that?
LUCHO: We have money now, that’s all you care about.
a veces descontroladamente, entre los dos. Mi vida no
JOE:
I care about work too, you fucking faggot.
es tanto una síntesis como un cachumbambé.»]
LUCHO: You are a disgusting conguero. What do you
El más álgido punto en cuanto al conflicto de la
know about music?!
identidad sería aquel en el que se colocan los que han
JOE:
Julián won’t screw your ass anymore, eh? Isn’t
that it? Isn’t that why you’re so pissed off at
elegido, en un acto de voluntariedad, el olvido del lugar
Erica?
de origen; ello es representando con toda visibilidad en
LUCHO: Can’t you see that’s she’s using us, Joe?
126
127

Víctor Fowler
JOE:
Bah! She would’ve made it without us...
manifiesta en el texto mediante las más diversas formas
LUCHO: Why do you let her do your job, Julián?
de la hipocresía —sexual, religiosa o de simple trato
JULIAN: My job is to write and play music.
LUCHO: You don’t care that we don’t sound...Cuban
social— y remite siempre a modos de dominación antes
anymore?
que de diálogo. Así vista, la renuncia a «lo cubano» que
JULIAN: What’s that supossed to mean anyway,
practica Julián (y hay aquí un planteo muy agudo en
«Cuban»?
cuanto a la solución cultural y al futuro de la diáspora)
LUCHO:Having another of your patriotic crises,
Juliancito? ...However you define it, Erica
equivale a huir de los modos y valores predominantes
doesn’t fit the definition.
en una estructura familiar opresora. Ahora bien, la
JULIAN: Lucho, please, don’t go...29
«huida» que presenciamos se verifica a través de la
asunción acrítica de los valores culturales del Otro, hasta
[ROLI:
Erica nos ha ayudado mucho, sí, pero también
hacer irreconocible lo propio. En este punto, es
ha hecho cambios...
LUCHO: Cambios drásticos.
fundamental entender el juego especular que el texto
JOE:
Y tenemos un sonido nuevo. ¿Qué hay de malo
establece entre el relato de vida de Julián Toledo y las
en eso?
cartas que recibe de su hermana Geneia. De hecho, son
LUCHO: Ahora tenemos dinero, es todo lo que te
las cartas de Geneia las que —utilizo el tejido a modo de
importa.
JOE:
También me importa el trabajo, tú, maricón de
metáfora— cierran los puntos que unen los diversos
mierda.
niveles que conforman el relato. La particularidad de
LUCHO: Tú eres un conguero asqueroso. ¿Qué sabes tú
dichos textos radica en constituir, a su vez, un relato de
de música?
vida que —paralelo al del protagonista— hace subir a
JOE:
Julián ya no te coge el culo, ¿verdad? ¿No es
eso? No es por eso que estás encabronado con
escena un caso de absoluta absorción de la identidad
Erica?
que trae el inmigrante por la de su país de asentamiento.
LUCHO: ¿Tú no ves que ella nos está usando, Joe?
La «nueva cultura» ganada por Geneia hace que termine
JOE:
¡Bah! Ella podría haberlo conseguido todo sin
considerando como «ethnic» la música que ejecuta el
nosotros...
LUCHO: ¿Por qué la dejas que haga tu trabajo, Julián?
hermano y que al hablar del padre se refiera a la obsesión
JULIAN: Mi trabajo es componer y tocar música.
que este tiene con «the cuban stuff» [«la cosa cubana»].
LUCHO: ¿No te importa que ya no sonemos... cubanos?
Entre todos los textos analizados, Crazy Love resalta por
JULIAN: ¿Que significa al fin y al cabo eso de «cubano»?
llevar a escena el gesto extremo de la disolución de la
LUCHO: ¿Otra de tus crisis patrióticas, Juliancito? ...como
quiera que lo definas, Erica no cuadra en la
identidad; renuncia en uno y asimilación en la otra.
definición.
Acaso lo adecuado después de esto, sea acercarnos al
JULIAN: Lucho, por favor, no te vayas...]
lugar antagónico que representa el caso de la
recuperación de la identidad. Para este fin, tomo la
Lo debatido en el diálogo justifica la extensión de la
novela The Killing of the Saints, del narrador Alex
cita, puesto que se trata, nada menos, que de la renuncia
Abella.31 Es este un texto que corre en dos niveles
a la «cubanidad» de la música ejecutada por la banda y
simultáneos: de un lado es una historia policial
—si pensamos lo dicho, a modo de símbolo, de la cultura
estructurada a modo de un thriller judicial y escrita en
hecha por los cubanos criados o nacidos en los Estados
un estilo cinematográfico; del otro es un relato acerca
Unidos—, de la cuestión de la identidad. La diferencia
de la identidad cubano-americana. A partir de la masacre
cultural profunda entre ambas naciones nos es dada por
cometida por José y Ramón —dos «marielitos»—,
la aguda respuesta de Lucho al intento de escapar de
cuando asaltan una joyería de Los Angeles, es tejida una
Julián: «Como quiera que lo definas (ya hemos visto
compleja trama en la que la existencia del investigador
que se refiere a «lo cubano»), Erica no cuadra en la
del caso, Charlie Morell, sufrirá un vuelco total. Los
definición». Este núcleo —existente, aunque
hechos son obvios hasta la obscenidad: durante la acción,
inapresable— está unido en Julián al trauma de sexualidad
Ramón es poseído por Oggun (orisha guerrero de la
que vimos y a la dimensión represora de la familia.
religión yoruba) y asesina a las ocho personas tomadas
En la entrevista que le hacen luego del éxito del
como rehenes. La condena a muerte es dada por segura;
álbum, a la pregunta de si la canción «Crazy Love»
pero en el transcurso de las primeras indagaciones sobre
significa para él algo especial, lo vemos responder del
los criminales, el investigador debe visitar la casa del
siguiente modo: «But for me the song is also about the
santero cubano Juan Alfonso y allí comienza el desastre:
love of music...about relationships..., about family...»30
una mujer negra (a quien Morell no conoce) es poseída
[«Pero para mí la canción también es sobre el amor a la
por Changó (también orisha guerrero) y le habla:
música... las relaciones... la familia...»] Se trata entonces
de una huida doble ante el trauma sexual (de cuyo secreto
The woman smiled knowlingly.
—Then why are you so asmashed, Carlitos?
solo es partícipe la abuela) y ante el fracaso de la familia
—Asmashed of what? Oh, what’s the use, I refuse to argue
(acentuado en los Estados Unidos por el ingreso del padre
with a madwoman.»
de Julián en la clase obrera luego del triunfo de la
I took one step; then the words stop me. She pressed her
Revolución cubana). Esta debilidad de la estructura
face against mine.
—Tell them how you were born in Havana. Tell them
familiar (tópico reiterado por la literatura cubana de la
how asmashed you are of being Cuban. Tell them how
diáspora y que merecería por sí solo una sesión), se
you killed your father. 32
128

Miradas a la identidad en la literatura de la diáspora.
«formar parte») que el protagonista toma como guía,
[La mujer sonrió familiarmente.
hay un elemento clave: el debate sobre la capacidad se
—¿Y por qué estás tan molesto, Carlitos?
—¿Molesto de qué? Ah, no vale la pena, para qué discutir
establece a partir del no cuestionamiento del estándar
con una loca.
fijado. La dificultad de integración de los padres es
Caminé un paso; entonces sus palabras me detuvieron. Pegó
percibida por los hijos como un fracaso vergonzante
su cara a la mía.
—algo similar al argumento de la clásica obra de Arthur
—Diles que naciste en La Habana. Diles todo lo molesto
que estás por ser cubano. Diles cómo fue que mataste a tu
Miller La muerte de un viajante—, con el agregado de
padre.]
que aquí la lengua se transforma en una barrera poco
menos que infranqueable para los padres y en un arma
El sorpresivo de-velamiento de esta «condición
de ataque para el hijo: «we spoke in two languages,
cubana» es el artilugio de que se vale el narrador para
two worlds, neither of us admitting the existence of
desatar la corriente de memoria y permitirnos así un
the other although understanding its every element.
acceso al pasado del protagonista. Según las reglas del
Words as barriers, words as weapons.»35 [«hablábamos
relato policial, estamos asistiendo a una rarificación de
dos lenguas, dos mundos, sin que ninguno admitiera
los hechos casi insoportable, pues el investigador
la existencia del otro, aunque entendiéramos cada uno
comparte con los criminales un origen étnico que niega.
de sus elementos. Las palabras como barreras, las
Según sabemos entonces, hay una diferencia insalvable
palabras como armas.»] El uso de la lengua como
entre padre e hijo desde que llegaron a los Estados
instrumento de poder para humillar al Otro, implica
Unidos, hecho sucedido cuando el niño tenía 10 años; y
un desprecio profundo por cuanto, apenas una página
las raíces del distanciamiento parecen tener su fuente
antes, nos ha sido dibujado el padre «speaking Spanish
justo en la asimilación del hijo a los patrones de la cultura
in a land where being a spic was only a shade better
norteamericana:
than being a nigger, no matter how white your skin
or blue your eyes».36 [«hablar español en una tierra
Bobby Darin, Sandra Dee, the Beatles, John F. Kennedy,
donde ser latino era solo levemente mejor que ser
long hair, all were abominations to someone who longer
negro, no importa cuán blanca sea tu piel o azules tus
day and night for his triumphant return to the land of
ojos».] En este esquema, la derrota del padre es triple,
dominoes, cigars and guarachas. I was not the son he’d
puesto que fracasa como líder de la familia en su
expected, the fearless freedom figther who with youthful
integración al nuevo territorio y —en tanto pertenece
vigor would carry aloft the banner of democracy and bring
al bando de los perdedores— por el sentido político
liberty to the tyrannized land. He was not the father I
de su salida del país natal. Resulta así que «lo cubano»
wanted, a calm provider who would take us to Little
es cargado por el protagonista como un peso ajeno,
League games, teach us to swin and drive and give me
como la obligatoriedad de cumplimentar un destino
pointers on how to pick up girls.33
con el que no se identifica.
Las tensiones que hasta aquí he descrito laceran al
[Bobby Darin, Sandra Dee, los Beatles, John F. Kennedy,
protagonista bajo la forma de horribles pesadillas que
el pelo largo, todos eran abominaciones para alguien que
lo persiguen después de la muerte del padre; ya
soñaba día y noche con su regreso victorioso a la tierra del
aparezca este con el cuerpo envuelto en llamas o
dominó, el tabaco y la guaracha. Yo no era el hijo que él
repleto de heridas y sangrando, en ellas siempre lo ve
esperaba, el temerario luchador por la libertad que, con
sufrir y tratar de decir una palabra. Lo sucedido en la
ímpetu juvenil, portaría el estandarte de la democracia y
vida «real» ha sido que la enfermedad paraliza al padre,
llevaría la libertad a la isla oprimida. El no era el padre
pasa años en absoluto mutismo, y durante la agonía
que yo quería, el apacible proveedor que nos llevara a los
alcanza a pronunciar, tras de un inmenso esfuerzo, y
juegos de las Ligas Pequeñas, nos enseñara a nadar, a
en español, una sola palabra: «muerte». La cualidad
manejar, y nos diera indicaciones de cómo ligar
muchachas.]
simbólica que ello adquiere es transparente si la
pensamos como figura de la negación absoluta, como
Préstese atención al modo irónico —puesto que luego
Nada, y en el reverso de ello colocamos el carácter
lo veremos como dato relevante— en que ha sido
igualmente simbólico (ahora como culpa) de las
utilizado el idioma español del padre. Igual podríamos
pesadillas del hijo. Es ello lo que explica que —contra
decir de la contraposición de ideales de vida (resuena
todo pronóstico— el protagonista se empeñe en
aquí el «cuban stuff» de que hablaba Geneia en Crazy
legitimar el acto de los acusados, en justificar la
Love al burlarse de su padre).
comisión de un crimen durante un momento de
Me interesa ahora ver la mirada que el protagonista
posesión religiosa. Pero el atormentado modo con que
lanza sobre el hecho de la escasa integración de los padres:
Morell re-conecta con lo cubano, su pago de la deuda
«their own incapacity to measure up the demanding
por el origen, es —dentro del contexto del relato—
standards of life».34 [«su propia incapacidad de responder
una opción moral pobre, y la voz antifonal que
a los exigentes estándares de vida».] En esta una tan típica
conforma su monólogo interior durante el juicio, voz
idea norteamericana (la de que existe un estándar que
que cuestiona la validez de su defensa, nos enseña que,
los individuos están obligados a alcanzar para poder
mejor que nosotros, él lo sabe.
128
129

Víctor Fowler
La particular historia de la colonia cubana en Miami ha
propiciado el mantenimiento en el tiempo de un fortísimo núcleo
de identidad nacional, pero lo cierto es que son decenas de miles
los cubanos que viven dispersos en estados (o ciudades)
mayoritariamente «anglos» y muchísimos de ellos son tan
«distintos» que no nos es sencillo reconocer las marcas de
identidad que los harían «nuestros».
Prefiero no abundar en las peripecias de la acción
por di-versión en biculturalismo, por una ética de
y concretarme a lo que considero una «recuperación»
circulación dentro y fuera de las etnicidades. El sujeto «di-
de la identidad. Corresponde mi acercamiento al
vertido» puede verse como un sujeto-posición excéntrico,
capítulo final del texto, al momento en el que Ramón
en el sentido de Heidegger: un sujeto lanzado fuera de sí
—ya sin que medie posesión alguna y solo por
mismo, al menos en dos direcciones culturales y lingüísticas
motivaciones criminales— trata de asesinar también a
diferentes.]
Morell. En uno de esos «reversals of fortune» típicos
de la novela de aventuras, es Morell quien hace justicia
La posibilidad de asumir —es decir, posibilidad de
matando al delincuente. Entonces aparece la imagen del
equilibrar y habitar en pacífica convivencia— el par de
padre por última ocasión —no solo en la novela, sino
identidades que comparten los sujetos bi-culturales, es,
también en la vida del protagonista— para decirle —en
como hemos visto hasta ahora, el núcleo articulador de
español nuevamente—: «Bien hecho, mi hijo».37 Espero
los planteos sobre lo que sería la condición cubano-
que se comprenda la reconciliación de las identidades
americana; tal problemática está fuertemente enlazada,
en conflicto que se produce aquí: el padre aparece
como también hemos visto, a la posibilidad del regreso
durante la vigilia para agradecer al hijo el haber cumplido
al país de origen.
el destino heroico al que lo tenía destinado, y la
En el año 1994, la revista Michigan Quarterly Review
comunicación se ha producido a través del español; al
dedicó un número doble a reunir autores cubanos de la
propio tiempo, el destino heroico puede ser cumplido
Isla y residentes en los Estados Unidos en un proyecto
en cualquier sitio. Puesto que ya no hay necesidad de
titulado «Puentes a Cuba».40 Es de allí que tomaré algunas
ocultar el origen, puede decirse que hemos presenciado
visiones que nos permitirán un regreso más claro a lo
un caso de recuperación de la identidad.
que encuentro de novedoso en la propuesta de Vera-
Es aquí cuando corresponde introducir la que
León quien, a diferencia de los que comenzamos a
considero una nueva posición acerca del dilema: aquella
analizar, nunca más ha vuelto a Cuba.
sustentada por el narrador y ensayista cubano Antonio
Vera-León en su artículo «A garden of forking tongues:
Every time I return across time and space, between cultures
bicultural subjects and an ethic of circulation in and out
and economic systems, I am more convinced that I do not
of ethnicities.»38 [«Un jardín de lenguas que se bifurcan:
want or need to accept the either/or definition of my
temas biculturales y una ética de circulación dentro y
identity wich demands that you choose sides. My identity
fuera de las etnicidades.»] La propuesta de Vera-León
is far more complex than this. I was born in Havana. I was
desvía e integra en un nivel superior —o quizás solo más
raised in Texas. I was radicalized with chicanos. I returned
atractiva para mí— la problemática de la identidad de
to Cuba and thus I was ostracized from my community.
los sujetos. En palabras del autor:
Now I live in Chicago, but I also live in Havana,
emotionally and professionally. I am always returning.41
I would like to present a more festive alternative to the
either/or dilemma and its discourses of schizophrenia and
[Cada vez que vuelvo a través del tiempo y el espacio, entre
discontent: what I call a «sujeto di-vertido», or a subject
culturas y sistemas económicos, estoy más convencida de
who lives by di-version in biculturalism, by an ethics of
que no quiero o necesito aceptar la definición ni/o de mi
circulating in and out of ethnicities. The «di-vertido»
identidad, que reclama la elección de un partido. Mi
subject may be seen as an «eccentric» subject-position, in
identidad es mucho más compleja que eso. Nací en La
the Heideggerian sense of the term: a subject thrown out
Habana. Crecí en Texas. Me radicalicé con los chicanos.
of him/herself in, at least, two different cultural and
Regresé a Cuba y luego mi comunidad me repudió. Ahora
linguistic directions.39
vivo en Chicago, pero también vivo en La Habana,
emocional y profesionalmente. Estoy siempre volviendo.]
[Me gustaría presentar una alternativa más festiva al dilema
ni/o, y sus discursos de esquizofrenia y descontento: lo
Esta declaración de la profesora María de los Angeles
que yo llamo un «sujeto di-vertido» o un sujeto que vive
Torres es ilustrativa de los cortes que se producen en el
130

Miradas a la identidad en la literatura de la diáspora.
interior de la identidad del sujeto bi-cultural a un nivel
decisiones codificadas sobre cómo presentarnos a nosotros
de complejidad todavía mayor que aquel a que nos
mismos, qué parte de nuestras identidades ostentar con
enfrentaba Pérez-Firmat, para quien la zona de conflicto
orgullo o mantener en secreto.]
quedaría reducida al choque de «lo cubano» con «lo
norteamericano». El sujeto que nos refiere Torres posee
La pregunta que Risech nos plantea es de severas
una identidad cuando menos triple, por haber sufrido
consecuencias para el despliegue de la identidad, pues si
el corte original (la salida de Cuba), otro durante la
bien esta puede ser experimentada en la totalidad de sus
integración a la sociedad norteamericana y un tercero
polaridades por el sujeto bi-cultural, no puede ser
cuando se produce su radicalización política dentro de
aceptada y menos compartida por los espacios en los
la comunidad hispana en los Estados Unidos. Tal suma
que ese despliegue debiera suceder. La condición de bi-
de fracturas implica la imposibilidad de reducir este
culturalidad quedaría entonces obligada a la simulación
sujeto a una sola identidad, puesto que ello falsearía su
y jamás el ser podría mostrársenos como lo que en verdad
historia. Puede preguntarse entonces si acaso lo que en
es, con lo que de hecho nos quedaría negado el acceso al
Pérez-Firmat hemos visto, está brotando de alguna
ser de ese que es nuestro otro.
especie de falsedad; pero no es allí donde se encuentra la
Es, en oposición a ello, que deseo regresar a la
diferencia, sino en la distinta acción de la voluntad con
propuesta formulada por Vera-León y definir lo que
que ambos enfrentan su dilema. Préstese atención a lo
hacia ella me conduce: el hecho de que su posición es
que nos apunta la frase citada en cuanto a que la
tanto posibilidad de resistencia como de goce, ya que
aceptación de la identidad monolítica está condicionada
—en semejante teorización— «lo cubano» es a un tiempo
al querer y al necesitar. Para la autora el desafío consiste
aquello que se desea y también aquello de lo que es
en no aceptar categorías que dividan lo que ella es y, en
obligatorio escapar. La idea de Vera-León nos lleva hacia
lugar de ello, quedar entonces obligada a «construir
una concepción dialógica de la cultura presidida por la
nuevas categorías, nuevos espacios políticos y
imagen del auto-control de los individuos sobre un
emocionales en los cuales mis múltiples identidades
puedan ser reunidas» [«Instead I must construct new
constructo que se me ocurre llamar «los universales
categories, new political and emotional spaces in which
culturales». Cerca del final del artículo, el autor abre
my multiple identities can be joined.»].42
puertas a una dimensión filosófica de la identidad que
En el contexto de la alocución el uso del imperativo
perfora las relaciones de obediencia del individuo para
(«must») nos deja entrever las tensiones de un ethos que
con el Estado: «Inhabiting two languages and two
el sujeto se impone a sí mismo como destino de su
cultures may be used to break —at least partially— with
identidad. Que los peligros a que este sujeto bi-cultural
the notions of origins and belonging, with the identities
se enfrenta pueden conducirlo a una alienación, lo
and values that “monolingual”/“monocultures” settings
apreciamos cuando leemos al sociólogo Flavio Risech
prepare for their subjects.» [«Habitar dos lenguajes y
en su artículo «Political and cultural cross-dressing:
dos culturas puede usarse para romper —al menos
negotiating a second generation cuban-american
parcialmente— con las nociones de origen y pertenencia,
identity»:43
con las identidades y valores que escenarios
“monolingües”/“monoculturales” preparan para sus
As we continualy cross and re-cross the boundaries between
sujetos.»] Lo atractivo de esta posición es su coincidencia
these communities, we find we cannot wear all our
con la actual crisis de los discursos tradicionales sobre
«identity wardrobe» simultaneously, since it can make us
la nación; la simplicidad con la que su fondo conecta
«too hot»; there are strict taboos or high costs associated
con los desafíos y estilos de las sociedades informatizadas
with presenting oneself in certains kind of «garb». For
—o cuando menos, atravesadas por crecientes y disímiles
example, how can a politically progressive gay or lesbian
redes de comunicación supra-nacionales— que hoy
Cuban-American display leftism in Cuban Miami or
vivimos, el modo en que crea un espacio donde es
queerness in Havana? Each time we cross these boundaries,
imaginable el cobijo de las más diversas diferencias por
then, we must in an important sense «cross-dress», making
motivos de raza, género o sexualidad, entre otras
coded decisions as to how to present ourselves, about what
posibles.
part of our identities to wear proudly or keep closeted.44
La di-versión de los sujetos no sería más que el borde
o exacerbación del punto crítico en el que todo sujeto
[Mientras cruzábamos y volvemos a cruzar los límites entre
que avanza hacia su libertad se coloca frente a las
estas comunidades, comprobamos que no podemos usar
instituciones de cualquier aparato estatal de que se trate
todo el «guardarropa de nuestra identidad»
en tanto este —cualquiera sea la sociedad de que se trate—
simultáneamente, pues nos puede dar «mucho calor». Hay
esté cargado de momentos de enunciación monolingüe
tabúes estrictos o altos costos asociados a presentarse con
y alineadora: he aquí la unidad de lo di-vertido. Ello se
ciertos tipos de «indumentaria». Por ejemplo, ¿cómo
hace más claro en el ensayo titulado «Escrituras bilingües
pueden un cubano-americano gay o una lesbiana
y sujetos biculturales: Samuel Beckett en La Habana»,45
progresistas exhibir izquierdismo en Miami o travestismo
presentado por el autor como ponencia en el encuentro
en la Habana? Cada vez que atravesamos estos límites,
Cuba, la isla posible, celebrado en Barcelona:
debemos en buena medida «disfrazarnos», tomando
130
131

Víctor Fowler
En esta zona el sujeto ‘di-vertido’ desafía y cuestiona, critica
19. Ibíd.: 6.
y adapta las posiciones de sujeto que le son propuestas por
las esferas culturales que lo constituyen. Esa posición no
20. Ibíd.: 7-8.
es exclusivamente de resistencia, sino también de
transformación y de circulación, ya que, situado en la
21. León de la Hoz, La poesía de las dos orillas. Cuba (1959-1993),
frontera, el «sujeto di-vertido» entra y sale, toma y deja
Barcelona: Libertarias/Prodhufi, 1994: 334.
elementos de las culturas que lo constituyen. 46
22. Gustavo Pérez-Firmat, Equivocaciones, Madrid, Ed. Betania, 1989:
Es en este sentido que Vera-León desborda «lo
30.
cubano» para buscar raíces en «lo universal», que su
23. Carolina Hospital, Cuban-american Writers. Los atrevidos, NJ:
propuesta salta por encima de los condicionamientos
Linden Lane, 1988: 69.
inmediatos que la ideología impone para entregarnos
una alegoría de la lucha del Ser hacia su libertad. «Cuban
24. Gustavo Pérez-Firmat, Next Year in Cuba (a Cubano’s coming-of-Age
have always been hyphenated Americans» [los cubanos
in America, Nueva York: Doubleday, 1995: 9.
siempre han sido medio americanos], dice Pérez-Firmat
25. Ibíd.: 270.
en Live on the Hyphen47 y me gustaría —gracias a un juego
dialéctico— leer ello haciendo de la cultura cubana
26. Ibíd.: 271.
realizada en la Isla y la de los cubano-americanos la pareja
de donde salga un nuevo guión sobre el cual dialogar.
27. Ibíd.: 274.
28. Elías Miguel Muñoz, Crazy Love, Houston: Arte Público Press,
1989: 19.
Notas
29. Ibíd.: 123-4.
1. Lourdes Casal, Palabras juntan Revolución, La Habana: Casa de las
30. Ibíd.: 154.
Américas, 1981: 60. Había obtenido el Premio Casa de las Américas de
Poesía en 1978.
31. Alex Abella, The Killing of the Saints, Nueva York: Penguin Books,
1991.
2. Ibíd.: 61.
32. Ibíd.: 76.
3. Idem.
33. Ibíd.: 79-80.
4. Idem. Un posible texto madre para lo que aquí se expresa es la canción
Street fighter (Peleador callejero), de los Rolling Stones, cuyos finales y
34. Ibíd.: 80.
míticos versos son «Too young to die/ Too old to rock» [«Demasiado
joven para morir/ Demasiado viejo para rocanrolear.»]
35. Ibíd.: 81.
5. Ruth Behar, Poemas que vuelven a Cuba, Matanzas: Ediciones Vigía,
36. Ibíd.: 80.
1995.
37. Ibíd.: 308.
6. Ibíd.: 9.
38. Antonio Vera-León, «The garden of forking tongues: bicultural
7. Ibíd.: 11.
subjects and an ethic of circulation between the ethnicities», Apuntes
post-modernos, Miami, 3(2), primavera, 1993: 15.
8. Ibíd.: 23.
39. Idem.
9. Idem.
40. Bridges to Cuba, Ann Arbor: University of Michigan Press, 1995.
10. Ruth Behar, ob. cit.: 27.
41. María de los Angeles Torres, «Beyond the rupture», en Bridges to
11. En el empleo del verbo bordar como equivalente de surround, parece
Cuba, ob. cit.: 36.
haber un error de los editores o de la traducción.
42. Idem.
12. Ruth Behar, ob. cit.: 27.
43. Flavio Risech, «Political and cultural cross-dressing: negotiating a
13. Ibíd.: 51.
second generation cuban-american identity», en Bridges to Cuba, ob.
cit.: 57-8.
14. Idem.
44. Ibíd.: 50.
15. Ruth Behar, «La cosa», Michigan Quaterly Review, 33(1): 1994: 217-
8.
45. Antonio Vera-León, «Escrituras bilingües y sujetos biculturales:
16. Apareció en un número monográfico que dedicó a literatura cubana
Samuel Beckett en La Habana», en Cuba, la isla posible, Barcelona:
la revista
Ediciones Destino, 1995: 66-77.
Brújula (Nueva York, primavera de 1994: 34), una publicación
del Instituto de Escritores Latinoamericanos.
46. Ibíd.: 77.
17. Gustavo Pérez-Firmat, The Cuban Condition, 1989; Live on the
Hyphen: the Cuban-american Way, Austin: University of Texas Press,
47. Gustavo Pérez-Firmat, Live on the Hyphen: the Cuban-american Way,
1994.
ob. cit.: 16.
18. Gustavo Pérez-Firmat, Live in the Hyphen: the Cuban-american Way,
ob. cit.: 4.
©
, 1996.
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